TRECEAVA ILUSIÓN
Daniel estaba de un humor insoportable, todos sabían que últimamente había estado saliendo con su captor y siempre regresaba de un humor terrible, solo que ahora no ponía de pretexto a las mujeres.
- ¿Qué es lo que le pasara a Daniel?- pregunto Jack preocupado mientras Lula se aparecía a su lado como por arte de magia con una gran sonrisa en su rostro.
- es como si le hubieren abucheado un buen truco ¿no te parece?- contesto ella enseguida. Jack trato de no demostrar que Lula le había asustado más no le molestaba la chica, se podría decir que se la pasaba mejor con ella que con Merrit, no estaba tan mal tener a alguien de su misma edad entre tanto experto.
- es como si…- respondió Jack escuchando como la puerta de Daniel se serraba de un portazo estrepitoso y furioso.
- le hubieran dado una mala cogida ¿no vieron como llego la otra noche?- Merrit salía de la fina cocina en donde estaban viviendo comiendo alguna clase de fritura coreana, china, japonesa, (Jack o Lula no notaban la diferencia) – valla que es decepcionante dos años tratando de ligármelo y solo llega un psicópata millonario y ¡BUM! le entrega su hombría a la primera oportunidad, de haber sabido que le interesaba el dinero me hubiese hecho rico hace años. Imagínenselos a los dos en acción, definitivamente Daniel seria la pasiva en esa relación -
Lula comenzó a reír y a Jack le dieron escalofríos no podía sacarse la nueva imagen (cortesía de Merrit) de Daniel con el hijo de Tressler teniendo sexo. Qué asco ¿Cómo era posible que a alguien le gustara meter su pene por donde uno defeca? En esa pequeña entrada donde está toda esa mugre de desechos y ¡el dolor! esa idea le causaba náuseas y no pudo evitar tomarse del estómago, sintiendo como algo dentro se revolvía intensamente. Daniel y Mabry… el dolor se volvió más fuerte tan solo de seguir pensando en ellos dos y solo logro calmarse cuando sintió la mano de Lula en su hombro. Merrit le miraba extrañado.
- Yo pienso también que Atlas hace mejor pareja con Dylan –
Dijo Lula rompiendo el silencio refiriéndose a Jack quien al verla supo que hablaba enserio ¿Qué? ¿Atlas y Dylan?
- ¿En serio? No digas tonterías Lula- Contesto Merrit y Jack al fin sintió un alivio en su ser y movió la cabeza positivamente colaborando esa respuesta “Lula estaba diciendo tonterías” cuando el mentalista siguió hablando – Tonterías porque Atlas hace mejor pareja con Jack. Dylan es mío ¿Qué no vez que somos el uno para el otro? – ¡¿Qué, que?! El moreno se giró a ver al mentalista con un deje de extrañeza en todo el rostro y abrió la boca, Lula comenzó a reír fuertemente con esa respuesta y el gemelo no podía ser la excepción y termino preguntando con un clásico Guiñado con coquetería. - ¿No me digas que tú querías a Dylan?-
- ¡No! eso es ridículo – respondió el cuarto jinete
- ¡Por supuesto que es ridículo!- defendió la escapista levantando una ceja y parándose en seco frente al hombre mayor.
- gracias -
- ¡Jack es mío! –
- ¡Oye! Yo no soy de nadie –
- oh, cállate Jack que estoy defendiendo tu hombría –
Merrit respondió a Lula aparentando seriedad – el mismísimo Jack está de acuerdo conmigo, dos a favor y una en contra. Así que te descalificamos de las futuras parejas en los jinetes por ser mujer. No es nada personal pero nadie te mando a nacer con vagina –
- ¿Qué? ¡Eso es injusto!-
- Yo no dije eso – dijo Jack soltando un largo suspiro.
- ¿viste como si le gusta más Daniel que Dylan? No lo negó así que punto para mí -
- ¿Qué? ¡No! no me gusta ninguno -
- ahí lo tienes no le gusta Daniel ni Dylan –
- Aun queda el hijo de Tressler, también viste que no pudo apartar la mirada de este bombón cuando se le paro en frente -
- Bueno, si… pero eso no significa que ese loco, maniático se lo quiera tronar -
- Por el amor a dios, dejen de bromear con mi sexualidad – bufo Jack tapándose la cara. – no soy homosexual, prefiero mil veces a Lula por sobre los otros –
Merrit se quedó sorprendido y Lula soltó un grito de victoria y abrazo al moreno con entusiasmo.
- ¡Yo gane!-
- Nadie gano dejen de estar haciendo el tonto ahí parados ustedes tres y vamos por los materiales que faltan, el tiempo se nos acaba – Atlas había aparecido y solo dios sabia cuanto de esa discusión/debate había escuchado pero no se veía nada feliz.