¨Mi corazón encantado¨
Hades
Miraba con absoluta fascinación a esa criatura que se hallaba en mi regazo, acaricié sus verdes y sedosos cabellos, y mi ángel encorvó sus labios en una mueca de felicidad y tranquilidad. Yo también me sentía tranquilo al saber que mi niño estaba conmigo, entonces recordé…
Agradecía todos los días, desde que mi niño decidió venir conmigo, aceptar mi propuesta olvidar todo y estar a mi par. No iba a permitir que nadie me lo alejase de mi lado, ni Atena, ni su hermano, ni muchos menos ese estúpido caballero.
Tu sonrisa tan resplandeciente
A mi corazón deja encantado
Ven toma mi mano para huir de esta terrible obscuridad.
Estaba molesto, tenía que ir a una dichosa fiestecita organizada por mi hermano Zeus, para su hijita preferida, todo porque era su cumpleaños. A mí que carajos me importaba el cumpleaños de Atena, si yo la odiaba a muerte, suspire de nuevo mientras me preparaba para subir al Olimpo, lugar en donde se celebraría esa estupidez.
En el instante en que te volví a encontrar
Mi mente trajo a mí aquel hermoso lugar
Que cuando era niño fue tan valioso para mí.
Quiero saber si acaso tú conmigo quieres bailar
Si me das tu mano te llevaré
Por un camino cubierto de luz y oscuridad.
Volver a verlo en esa fiesta en nombre de Atenea, fue realmente una salvación para mi calvario, yo estaba de los más aburrido y fue ahí en donde recorrí el salón con la mirada para saber quiénes estaban, mas ver esa mirada de nuevo, ese hermosa mirada de color verde, me trajo tantos recuerdos, recordé la primera vez que lo vi en los campos de elíseos, vestido con su armadura. No dude cuando escuche, esa melodía y de inmediato me incorporé y fui en su búsqueda, sonreí cuando acepto mi proposición, recorrimos toda la pista, él vestido con una túnica blanca y una faja verde, le hacía sobresalir aún más, haciendo notar lo hermoso que era, yo lo guiaba con mi mano en su cintura y el me seguía con la suya en mi hombro, dibujamos con nuestros pies por todo el lugar.
Tal vez sigues pensando en él
No puedo yo saberlo pero sé y entiendo
Que amor necesitas tú
Y el valor para pelear en mi lo hallarás.
Cuando me entere todo lo que debió pasar mi niño, no dude en volverme su fiel y mejor amigo, odiaba con todas mis fuerzas a ese caballero, ese que poseía el color rubio en su cabello y el celeste en sus ojos, mas por más que tenía el mismo color de mis ojos, lo de ese parecían estar ciegos, ya que no saber apreciar el amor que esa ángel de verdes cabellos al igual que sus ojos y esa sonrisa tan perfecta, cualquiera caería a su hechizo. Mas yo me había prometido esperarlo, curar las heridas de su corazón y lograr que me amase poco a poco.
Mi corazón encantado vibra
Por el polvo de esperanza y magia
Del universo que ambicionan todos poseer.
Voy amarte para toda la vida
No me importa si aún no te intereso
Ven toma mi mano para huir de esta infinita obscuridad.
La verdad es que lo amaba más allá de todo. Y no lo dejaría ir, ese ángel era suyo. Agradecía a ese caballero el no corresponder sus sentimientos, pues ahora que su niño, ya lo había olvidado, no dudo en demostrarle su amor.
Sin importar que pase yo te amare
Y quiero que por siempre a mi lado estés.
No vale la pena seguir pensando en el ayer.
No importaba nada, si él estaba a su lado, toda la oscuridad que alguna vez habito su corazón había desaparecido con su llegada, y más aún al saber de su estadía y de su compañía, no dudo en atesorar cada momento que podía estar con ese pequeño.
Quiero saber si acaso sigues tu soñando con el
En un mar de dudas me perderé
Y ya no encuentro el camino que me lleve hasta ti.
Alguna vez intento preguntar por él, la desconfianza y la incertidumbre hacían mella consigo pero nunca obtenía respuesta, su niño nunca quería hablar de ese sujeto, por momentos agradecía eso, pero después las preguntas para saber que le había dicho o hecho ese que decía llamarse caballero volvieran con más fuerza a su cabeza, pues sabía que sea lo que habría pasado había lastimado a su niño.
Cuando al fin me logre decidir
A confesar las cosas que siento por ti
No sé qué me lo impidió
Pero hoy voy a pelar con todo mi amor.
Una vez, completamente decidido se acercó a su pequeño, dispuesto a decirle todo lo que su corazón sentía, pero se arrepintió al ver esos ojos verdes como las esmeraldas, que ahora estaban humedecidas, muestra clara de que había estado llorando, no dudo y se lo llevo con él al inframundo, él se encargaría de cuidar, querer y proteger a su niño.
Mi corazón encantado vibra
Por el polvo de esperanza y magia
Te voy a demostrar
Que el amor que siento es real
Voy amarte para toda la vida
Qué más da ven, ya no tengas miedo
Ven toma mi mano y busquemos juntos la felicidad.
Sonreí y susurre su nombre y noté como el pequeño se revolvía en mis piernas y se incorporaba a medias, ya que yo no permití que se terminase de levantar, porque lo abrace y sin dudas pronuncie.-te amo.- espero a su tímida respuesta que llego afirmativa ya que el pequeño primero abrió los ojos sorprendido y de inmediato respondió al abrazo al tiempo que susurraba solo para mis oídos.-yo también, te amo.- sin dudar tome posesión de esos labios, mientras mi mano se dirigía a ese rostro para acariciar esas pálidas mejillas, tomo sus manos entre las mías, y le inste a incorporarse y hacer que me siguiese, llegamos hacia una gran laguna y murmure.-si esta felicidad que siento ahora es correspondida, guíame entonces a un futuro, porque de tu mano iré hasta el fin del mundo.-apenas termine de decir eso, sentí sus labios posarse sobre los míos en un cálido y suave beso…