Es una madrugada común y corriente.
Ciel no consigue dormir, algo en su mente parecido a un presentimiento le da vueltas a su cabeza haciéndole imposible el cerrar los ojos.
Siente algo en el estómago ,piensa que son agruras; recuerda que el día siguiente o mejor dicho en unas horas tendrá que asistir a su nueva escuela ,eso es suficiente para dejarlo despierto lo que queda de la noche.
Ciel despierta sorprendido
¿ por qué ha despertado? no recuerda el quedarse dormido.
Vio el amanecer o acaso fue un sueño?.
..……………… ………………..
“No Quiero despedirme de ellos pero eso ahora no importa”
Mi madre toca mi cabello, yo la abrazo a ella ,ahora soy más alto; mi padre estrecha mi mano.
Ambos me dedican unas palabras a su manera ,luego se abrazan ,entonces yo sé que llega el taxi para irme ,subo a él y me encuentro pensando lo rápido que han pasado estos 16 años y apuesto lo que sea a que mi madre piensa lo mismo.
Es un viaje largo y aburrido, tengo demasiado sueño, debo dormir hoy.
“Cómo dormiré en ese lugar”
“¿Por qué he entrado aquí?”
“Oh sí! Para estar mejor preparado en la universidad”.
..……………… ………………..
A unos pocos kilómetros de Ciel se encuentra un joven rubio mirando por una ventana redonda en la biblioteca,
él piensa en cómo es su compañero de segundo año.
-Joven, baje de ahí.- un prefecto muy molesto le dice al chico.
Él lo mira con desdén y luego brinca para dedicarle una sonrisa.
A Grell no le gusta ese alumno, tiene una actitud muy llamativa y ahí sólo puede existir una diva y es él.
Por su parte el rubio va tarareando una canción y bailando en círculos como una mariposa en pradera.
Varios chicos le gritan insultos, se sienten amenazados con su orientación, a él no le gustan sólo tiene un amor, uno no correspondido.
Quiere encontrarse con él , que la ley la atracción sea verdadera. Pero no es así.
Decepcionado camina a la entrada, uno, dos pasos, uno, dos…
Algo le llama su atención, un taxi junto a la entrada principal justo a la hora que tiene que recoger a su compañero.
Debe ser él , o eso piensa. Visualiza a un chico un poco más bajo que él de cabello negro con destellos azules.
No se ve feliz , para nada.
-Hey, Phantomhive?- El otro levanta la mirada al irse el taxi.
-necesitas ayuda?- el rubio señala sus maletas.
-no, estoy bien, gracias-
ya era tarde ,el otro ya llevaba una de sus maletas.
-Soy Alois Trancy, hijo de un diplomático. – sonríe – estoy en 3 año, y cumplo con mi servicio social, cómo? Guiándote.-hizo una reverencia-Estaré encargado de ti el primer mes.
Creo que ya debes saber todas las reglas y tus derechos no?-
-si leí el folleto-
-okay-
todo el camino a los dormitorios fue incómodo. Por su parte Alois desea hablar pero la expresión de Ciel le quita todas sus ganas.
-Si me necesitas, estoy en el edificio de en frente, cuarto 308.
Toma un mapa del lugar, tu reglamento y horario. Tienes que estar en la oficina de alumnos mañana media hora antes para que te registres oficialmente. Y no llegues tarde y cumple con todo o me irá mal a mí. –
Dicho eso da la media vuelta para irse del edificio.
Ciel por su parte se instala en su habitación y piensa en que es una persona terca y obstinada, se pregunta cuanto tiempo pasará para que la gente lo odie debido a su orgullo.
Y por la noche, al estar quedando dormido siente que algo le observa ...
Pero no ve nada.