Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un Lago de Recuerdos por ScarlletParaise

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, aca les traigo un capitulin más de este fanfic, espero que les guste...

Sentía el enorme dolor en su pecho, jamás espero sostener una discusión con su hermano pequeño acerca de aquella persona que le hace sufrir. Detiene su andar agacha su mirada, unas cuantas lagrimas salieron de sus ojos ya que recordar aquel día donde Degel y él celebraban el cumpleaños de Milo.


 


“Duele recordarlo…”


 


Era la mejor idea que tuviste, adorabas los cumpleaños, tanto el mío como el de mi hermano menor. Tu sonrisa y tu predisposición haciendo de ese ocho de noviembre el mejor cumpleaños que tuvo Milo.


Sus amigos llegaron a la fiesta, Saga y Kanon, nuestros amigos de la infancia, que puedo decir de ellos, ayudaron a mi hermano con el tratar de olvidar aquel joven que provoco un manantial de agua helada haciendo que él se ahogara.


Suspiro, duele mucho, demasiado. Pero estar allí sentado en el sofá viéndote a ti y a ese par de gemelos endemoniados, Jaja, es gracioso cuando lo recuerdo, pero tu voz me saca de esta meditación.


- Kardia ¿Me puedes alcanzar las guirnaldas? – ¿Era encerio? Jaja, tu siempre alegre y lleno de amor, estoy contento de ser tu novio y que tú seas parte de mi vida. Me levanto y noto que Aioros te las había alcanzado, gracias amigo, él es una persona de confiar, tantos secretos y fantasías que tuve contigo, se las tuve que contar a él – Gracias Aioros – Me acerco a la escalera para así sostenértela evitando que te calleras en unos instantes. Te agarre cuando me acerque, todos los que fueron invitados veían la escena, y yo admirando aquellos ojos violetas que tanto adoraba ver.


- Evita lastimarte – Te advierto, detestaría verte sangrar, no quiero que te conviertas en un vampiro como yo, nunca lo haría, me lo prometí, me enamore de ti tal y como eres, un humano.


- No me voy a lastimar y deja de usar tus poderes de vampiro conmigo ¿Comprendes? – Eso sí que lo detesto, detesto que te enfades conmigo por cosas que son evitables para mí. Te beso, para hacerte callar, todos nos miran, si vean la belleza que eres, amo besar tus suaves y rosados labios, si Degel eres perfecto, tan perfecto que hasta el mismo diablo te envidiaría.


Nos separamos un poco para así yo decirte algo - Déjate de tonteras y enojos, porque no falta que mi hermano regrese a casa – Te asombras tanto por lo que reporto, pero sentirte sudar es algo que jamás lo espere, estas nervioso, tan nervioso cuando escaneas toda la sala de estar para ver que todos los adornos y la comida este en su lugar.


- ¡Ya llegue! – Ahora sí que llego, Jaja, verte temblar entre mis brazos fue la mejor imagen que vi, tiembla, tiembla mucho, porque mi hermano pequeño es la persona más ermitaña que puede existir en este mundo.


Todos se esconden, incluyéndonos a ambos. Los gemelos se escondes atrás de las cortinas, Aioros con Dhoko atrás de los sofás, tú y yo en la cocina, ya que Manigoldo con Aioria y Deathmask ingresaban en compañía del cumpleañero.


- ¡Feliz cumpleaños! – Gritaron ellos, los escuche tan claro, mientras yo te ayudaba con el pastel, los dos fuimos al salón topándonos con la mirada de enojo y asco de mi hermano Milo. Sí, era el resultado que yo me esperaba, pero tú te acercaste a él para saludarlo y darle la mejor lección del día.


- Feliz cumpleaños Milo, sopla las velitas – Mi hermano te mira como un bicho raro, no me gusto ese comportamiento tan rancio de su parte, voy hasta donde están los dos para cuidarte de él. Abro mis ojos, para notar que mi hermano menor soplo las velitas – Eres un excelente chico - ¿Excelente? Eso sí que nadie se lo espero y menos yo, ibas hasta la mesita de café para dejar aquella tarta de cumpleaños y cortarla en trozos grandes.


La fiesta continua, veo como platicas y te unes más a mi hermano pequeño, donde le enseñabas que significaría un cumpleaños, tanto para él o para otras personas. Yo hablo con Aioria y con Deathmask, sobre el repentino regreso de mi hermano a la casa, pero la respuesta que obtuve fue algo que jamás me lo espere.


- Milo deseaba ver la cara de Degel cuando él llegara a la casa y ver que tu novio hiciera una fiesta sin haberla acabado – Me volteé para mirar con enojo para observar a mi hermano pequeño que por su parte, estaba por hacer de las suyas contigo.


- Es mejor hacer un brindis – Hablo haciendo que todos los que estaban invitados se callaran, me miras con esos ojos que pedían una explicación, yo me acerco a mi pequeño hermano para así extenderle una copa de vino, él lo toma con mucha intriga de lo que pudiera yo hacer – Brindo por la pronta recuperación de mi hermano menor, ya que hace más de un siglo que no se repone por su perdida e incluso pido que pronto conozcas otra persona que haga de ti la mejor persona que eres ahora – Todos alzamos nuestras copas y decimos “Salud”, bebemos de nuestras copas y yo recibo un abrazo de mi hermano que hace mucho tiempo no me daba.


Correspondo el abrazo y te vuelvo a mirar, tú sonríes y yo sonrió, sabiendo que estabas orgulloso de mí. Siento como mi hermano llora, hacía mucho que no lloraba, me alarmo por escucharlo llorar a viva voz, no debí mencionarlo, a él le dolía y mucho, es mi hermano y yo tengo la misión de protegerlo hasta que él no vuelva a sufrir más.


 


Sacude su cabeza para después ir hasta la sala con el fin de despejar su mente. No deseaba recordar lo que continuaba, ya para él significaría estar sumergido en el pasado y no vivir el presente.


Kardia se detiene para después ver como su hermano salía de su cuarto para después abrazarlo, el mismo calor y el mismo ímpetu que le dio hace dos años atrás. Corresponde el abrazo y acariciar sus cabellos rubios haciendo que este se desahogaraa viva voz.


- Ya Milo, ya paso todo – Le decía en un tono reconfortante, lo aferra más a su pecho para después escucharlo decir algo.


 


- Espero que Degel me obsequie algo – Al escuchar aquello, Kardia lo toma de su rostro y dedicarle una sonrisa.


 


- Él jamás se olvida de tu cumpleaños o él mío, si lo hiciera ya estaría en esta casa preparándote una fiesta de cumpleaños – Milo sonríe para después limpiarse las lágrimas e irse de la casa ya tranquilo.

Notas finales:

Nos leemos en el próximo capitulo, besos.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).