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Sirena por nayma17

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Notas del capitulo:

¡Actu doble! OMG

Kid se había quedado en el agua durante unos minutos antes de nadar hasta la orilla, una vez fuera del agua se sentó en la arena y fijó su vista al agua. Se sentía estúpido, ahora todo parecía bastante obvio. La manera en la que hablaba, el como no parecía entender del todo las cosas del alrededor. Si no hubiese sido tan ciego y estúpido lo habría notado, si no se hubiera perdido en aquellos ojos que parecían inocentes y hermosos, no habría sido engañado.

 

Se regañaba mentalmente mientras recordaba todo el tiempo que pasaron juntos, la manera en que se encontraron. Un humano normal no habría sobrevivido entre tantos tiburones y mucho menos a la tormenta por la que pasaron cuando se conocieron. Tenía que admitirlo.

 

 

—Me engañaste por completo… - Dijo en voz baja para si mismo antes de cubrir su rostro con ambas manos.  

 

 

Se quedó sentado en la arena hasta que el sol abandonó los cielos para ser remplazado por las estrellas, fue entonces que Kid se levantó y sacudió su pantalón. Se había secado de estar todo el tiempo en ese lugar, pero eso no podría importarle menos, ahora lo que era su prioridad era subir a su barco e irse de esa isla e intentar olvidar todo lo que había pasado en y antes de ella.

 

 

Law no se preocupó del rumbo que tomó, ni siquiera pensaba en orientarse para saber donde se encontraba, solo quería seguir así, nadando sin detenerse, a menos que fuese para cazar. Subió hasta la superficie para mirar alrededor, ya se encontraba en mar abierto, no se veían islas cercanas. Ahora si estaba solo. Bajó la mirada a su pecho, encontrándose con la camisa del pelirrojo que aún traía puerta, la sujetó con ambas manos y pensó en rasgarla para quitársela, pero no lo hizo. La soltó y se sumergió de nuevo en el agua.

 

 

 

 

Los meses pasaron hasta que las estaciones cambiaron, ahora el frio era lo que más se notaba por todo el lugar. Eso no era molesto o incómodo para Law, ya que al ser un tritón orca, estar en ambientes fríos le resultaba agradable. Hace tiempo que había perdido la camisa del humano que fracasó en cazar, de cualquier manera, su especie no era del tipo que guardaba cosas materiales para recordar algo y en su caso, no tenía razones para querer tener algo que recordar del pelirrojo.

 

Desde que su mente se había aclarado, volvió a su rutina de siempre; nadar por todos lados, cazar tanto a peces como a humanos y luchar contra algún tritón territorial como lo era el que le había hecho abrir los ojos de lo que estaba haciendo. Hacía poco había comido, por lo que ahora solo se dedicaba a nadar sin rumbo aparente, al menos así era hasta que notó como otro tritón se acercaba a él.

 

 

—Oye, eres el del otro día. ¿Y tú humano? – El moreno no respondió, al contrario, comenzó a alejarse sin prestarle atención. —Oye, no me ignores, podría matarte. – Dicho eso se acercó para abrazarle por la espalda rozando sin cuidado su cola con la del mayor.

 

 

—Tu veneno es muy pobre para usarlo en mí y si no te alejas, créeme que te tragaré.

 

 

—Que miedo. – Dijo con burla mientras le soltaba. —Solo tenía curiosidad, ya que lo protegiste en aquel barco de humanos.

 

 

—Aléjate de mí, es mi última advertencia.

 

 

—No tienes que ser tan aguafiestas, solo tengo una duda. ¿Quién mató a todos esos humanos? Para cuando estuve bien, Luffy me informó que ninguno estaba vivo en el barco. ¿Fuiste tú?

 

 

—No.

 

 

—Oh, entonces el humano.

 

 

—¿Por qué tanto interés en el humano?

 

 

—Jeje, nos vemos. – Fue todo lo que dijo antes de alejarse de un confundido Trafalgar, que solo se había quedado mirando en la dirección en que se había ido aquel molesto tritón.

 

 

Siguió su camino, solo nadando en total libertad, disfrutando de como las criaturas se alejaban al notar su presencia. No se podía negar que los tritones eran criaturas orgullosas, no eran como lo pensaban los humanos, que se creían superiores solo por tener molestas “emociones” y siempre clasificaban a los tritones y sirenas como animales con apariencia humanoide, pero que al final del día solo eran eso. Animales.

 

 

Él no negaría que fuese cierto, era una prueba de ello, se movía y vivía con el mero propósito de cazar para alimentarse y a veces por mera diversión. Se detuvo al sentir como sangre caía al agua, cerró los ojos para disfrutar de aquel liquido rojo que le llamaba a gritos que nadara hacia él. No se negaría a sus instintos, por lo que rápidamente comenzó a ir al lugar de donde provenía la sangre.

 

No salió a la superficie mientras veía un barco sobre él. Seguramente alguien se había hecho daño ahí arriba, pero no podía simplemente ir y subir al bote, primero tendría que ver si había más humanos en este y de ser así, que tan armados se encontrarían, lo sabía, pero la curiosidad y el instinto de sangre era más grande.

 

Nadó hasta la superficie para sacar del agua su cabeza hasta la altura de la nariz. No parecía haber nadie en el barco desde donde estaba. Se acercó hasta llegar al borde y miró alrededor en busca de humanos, pero no había nada. Ladeo la cabeza confundido y salió un poco más del agua para poder ver mejor, pero se detuvo cuando un punzante dolor llegó a su hombro, desvió la mirada hacía este, notando el arpón que estaba atravesándole.

 

 

—¡Agh! Maldito humano. – Masculló molesto mientras sujetaba el arpón con una de sus manos intentando sacarlo sin mucho éxito.

 

 

—¿Humano? No me digas que olvidaste mi nombre, Trafalgar.  

 

 

El moreno sintió como si toda su sangre se hubiese vuelto de hielo, sus latidos parecieron detenerse en algún momento y su respiración se volvió pesada. Reconocería aquella voz en cualquier lugar. Por primera vez, sentía que temería de lo que se encontraría al azar la mirada, pero lo hizo. Se encontró con la expresión molesta del pelirrojo, intentó alejarse, pero un tirón de parte del menor en el arpón le hizo regresar a su lugar a un lado del barco.

 

 

—Déjame ir.

 

 

—No lo creo. – Respondió y jaló de nuevo del arpón viendo como el moreno hacía un gesto de dolor y molestia. No esperó a que dijera nada más. No habría nada que pudiera decir que le detuviera de su venganza por burlarse de él por tanto tiempo.

 

 

La cadena unida al arpón estaba sujeta a una polea, por lo que se alejó del tritón para comenzar a girarla, haciendo que el este tirara del mayor. Law apretaba los dientes para no gritar mientras sentía como parte de su carne se desgarraba por el movimiento del pedazo de metal dentado que tenía incrustado, pero se negaba a gritar y darle el gusto al pelirrojo de que lo viera sufrir. Si venganza buscaba, no dejaría que la obtuviera tan fácilmente.

 

El movimiento del arpón se detuvo y él suspiró un poco aliviado de no sentir la tortura de eso dentro de su cuerpo, pero una mano sujetando su cabello le hizo gruñir. Le arrancaría la mano a ese humano, pero se sintió confundido cuando un pedazo de tela mojado fue pegado a su rostro, curioso olió aquello y se arrepintió de inmediato por el mareo que eso le provocó. Rasguñó el brazo de la mano que se sostenía ese pedazo de tela apestoso contra su nariz y boca, pero su cuerpo dejaba de responder lentamente, se sentía cansado y eventualmente todo se volvió negro.

 

 

Law abrió los ojos con pesadez y miró alrededor, encontrando esta vez al pelirrojo casi de inmediato mientras caminaba hacía él. Quiso moverse, pero notó como unas cadenas lo mantenían sujeto al mástil de aquel pequeño barco. Se regañó mentalmente por no haber recordado que ese le pertenecía a ese humano. Se removió hasta que el dolor en su hombro le recordó como es que había terminado atrapado en ese lugar.

 

 

—Buenos días. Es bueno ver que no morirás por algo como eso. – Dijo señalando su hombro mientras sonreía un poco.

 

 

—Felicidades, me encontraste, ¿Ahora que Eustass~ya? – Tras hablar recibió un golpe que le hizo girar su rostro hacía un lado. Más que doler, le había sorprendido aquello, no recordaba haber sido golpeado por el pelirrojo alguna vez cuando estuvieron juntos, al menos no de una manera tan fuerte.

 

 

—No hables. Los animales no hacen eso. – Tomó un pedazo de tela que había sobrado de la usada para sedarlo momentos antes y así amordazarle. De esa manera ya no hablaría y no podría engañarle de nuevo.

 

 

—He estudiado un poco sobre ustedes. Ahora entiendo porque sanabas tan rápido, así que esto no debería ser nada para ti, ¿Verdad? – Apoyó uno de sus pies sobre el pecho del moreno para tomar con sus manos el arpón y sacarlo de golpe, ignorando la manera en que el otro se retorcía y ahogaba un grito contra su mordaza.

 

 Kid no podría negar que se sentía un tanto culpable en la manera en la que le estaba tratando, pero la molestia por ser usado y humillado por él era mayor que cualquier momento de misericordia.

 

Había investigado lo más que pudo sobre esas criaturas, ahora sabía el cómo su especie en específico, harían casi cualquier cosa por obtener lo que buscan. Le molestaba el que le hubiese confundido tanto y todo porque seguramente buscaba comerle. Le había cuidado o al menos pensó que lo hacía, pero al final todo fue una farsa.

 

Se alejó después de haber echado agua salada sobre la herida del moreno, sabiendo lo rápido que podía recuperarse, no se preocuparía por él más de la cuenta. Izó la vela de su pequeño barco para comenzar su viaje, su venganza no iba de mantenerle secuestrado o torturarle, desde que supo que al parecer su especie no tenía sentimientos de ningún tipo, buscaría sacarle el mayor provecho y ese sería vendiéndole.

 

 

Unos días le llevó poder llegar a la isla en la que había creado un pequeño refugio, no porque quisiera quedarse a vivir en ese lugar, sino porque sabría que al encontrar al moreno lo llevaría ahí. Usó un bote para transportar a un muy cansado tritón hasta la orilla, sabía que su especie necesitaba estar comiendo grandes cantidades regularmente, aun si era verdad que podrían estar tiempo sin comer, para ello tendrían que haber tenido una muy grande comida antes y dudaba que el moreno la hubiese tenido por la manera en a penas y se movía.  

 

Cargarlo hasta el refugio habría sido lo mejor, pero habría sido mucho trabajo, por lo que el pelirrojo optó por simplemente arrastrarlo hasta el lugar. Había construido una pequeña choza cerca de un rio que desembocaba hasta el mar. No era mucho, pero si suficiente para una persona y ahora para un inquilino retenido a la fuerza. Lo llevó hasta una tina donde a penas y cabía el tritón con las cadenas.

 

 

—No tienes de que preocuparte, no te dejaré morir. Cuido muy bien de mi mercancía. – Notó como el moreno no se molestaba ni en mirarlo o intentar responder.

 

Se alejó para ir en busca de algo de comida, sabía que no necesitaba cocinarla para él, después de todo ya le había visto antes comer pescados crudos. Se sentó en el borde de la tina y le quitó la mordaza para luego acercarle un pescado. El mayor no tardó en morderlo y comenzar a comerlo con algo de desesperación, nunca había pasado tanto tiempo sin comer sin haberse llenado antes.

 

Tras el quinto pez el moreno comenzó a sentirse incómodo, al tener ya comida en su estómago, no estaba tan metido en solo sus instintos de alimentarse. Quería negarse a seguir siendo alimentado, pero tenía hambre y no quería sentirse tan débil. Solo por esta ocasión, su orgullo tendría que esperar. Una vez que terminó los peces, el pelirrojo fue a lavarse las manos y regresó con un cuaderno y un lápiz.

 

 

—Bueno, ya que te alimenté, necesitaré que respondas unas preguntas. – El mayor simplemente miró hacia otro lado negándose a responder la pregunta.

 

—Entiendo, entonces no te importará pasar todo un día y una noche sin agua ¿Verdad? – Con esas palabras fue suficiente para que el otro le mirara contrariado.

 

 

—Si no me hidratas moriré, así que perderías tu “mercancía”

 

 

—Así que necesitas hidratación. – Dijo mientras lo escribía en el cuaderno ignorando lo último que el moreno había dicho. —No importa si estás vivo o muerto, te comprarán igual.

 

 

—…

 

 

—Sigamos entonces, ¿Desde cuándo tu especie ha estado aquí? No ha pasado mucho desde que bueno, todo el mundo se hundió, pero ustedes parecieron aparecer de la nada, ¿No debieron pasar muchos años para que eso ocurriera?

 

 

—… ¿Por qué?

 

 

—Pues para que se diera esa evolución o mutación, imagino que ustedes son humanos que se adaptaron al nuevo mundo.

 

 

—No me hagas reír humano, todos ustedes son iguales. ¿Realmente crees que aparecimos de la nada? – El pelirrojo alzó los hombros restándole importancia —Estamos aquí desde antes que ustedes pudieran siquiera darse cuenta de su asquerosa existencia.

 

 

—“Asquerosa” pero aun así morías por comerme. – Continuó escribiendo en su cuaderno. —En fin, he recordado que en el barco donde… - Hizo una pausa, pues, aunque estuviese molesto y buscara dañarle, no podía simplemente mencionarle lo que le había pasado con los piratas. —…donde fuimos capturados, había otro como tú, pero lucía diferente. ¿Por qué?

 

 

—¿Eres idiota? – El pelirrojo frunció el ceño y el mayor desvió la mirada. —Hay de muchos tipos, es como las especies en el océano, no solo hay de un tipo.

 

 

—Entonces prácticamente son solo peces que pueden hablar. – Concluyó mientras cerraba el cuaderno tras escribirlo.

 

 

—No estamos en un nivel más bajo que ustedes los humanos, ustedes solo son comida para nosotros. – Kid debía admitirlo, ese comentario le había hecho sentir como su pecho se contraía dolorosamente por un segundo, por lo que prefirió comenzar a irse.  —¡Espera!

 

 

—¿Qué? – Preguntó sin mucho interés, o al menos intentando verse de esa manera, pues una parte de él realmente esperaba que esto fuese un mal sueño y pronto se despertara para ver a Trafalgar dormido a un lado suyo.

 

 

—Respondí las preguntas, así que dame agua.

 

 

—Quizás mañana. – Fue lo ultimó que dijo antes de salir de aquella pequeña habitación donde estaba solo esa tina de baño de madera que el había tallado.

 

Notas finales:

Gracias por leer~

Creo que algunas preguntas del cap pasado ya no valen nah xD

Igual aquí les haré otras cinco :v ¿Porque? Bueno, porque si. 

 

1.- ¿Kid se nos hizo malo? :0 

2.- ¿Cuanto creen que le den a Kid por Law? 

3.- ¿Que creen que le pregunte Kid más adelante a Law?

4.- ¿Law logrará escapar? 

5.- ¿Creyeron que todo iría mejorando despues del lemon? 

 

Nos leemos ♥


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