Un recuerdo de París.
Capitulo 1.
Sus pasos eran pausados y sin prisa alguna mientras miraba al hombre que le esperaba en la entrada del aeropuerto internacional de Tokyo, acababa de regresar de su larga estadía en París, Francia, se sentía un poco feliz, aunque fuese solo un poco, ya extrañaba el ambiente japones, tan diferente a aquel país extranjero, aunque tambien se sentía un poco deprimido, ya que su pareja de tres-años, Sasori, tenía que quedarse por mas tiempo en París, aun le era dificil asimilar la popularidad y el sin fin de compromisos del pelirrojo, despues de todo, cuando le conocio era un don nadie con ambiciones artisticas, eso fue lo que le enamoró, eso y su madurez y seriedad.
-Buenas tardes, Kamiruzu-sama, bienvenido a Japón.- Habló el amable hombre mientras le abría la puerta trasera del lujoso auto.
-Hola Tanaka-san, Cuanto tiempo.- Le dedicó una sonrisa y subió al auto.
El rubio miró por la ventana como el hombre subía su descomunal equipaje en la cajuela y luego rodeaba el auto para subir a este.
-¿Algún lugar en especial que desee que lo lleve?.- Preguntó mientras se colocaba el cinturón de seguridad.
-Solo llevame a casa.- Dijo mientras cruzaba la pierna izquierda.
- Umm...¿La casa de Sasori-san?.- Preguntó mirandolo por el espejo retrovisor.
-Sasori-.sama.- Le corrigió.- Y si.
-Entendido.- Diciendo esto encendio el auto y lo hecho a andar.
Durante el trayecto el joven ojiazul estuvo bastante inmerso en sus pensamientos, el hecho de volver a Japón significaba muchas cosas, una de ellas era volver a encontrarse con Itachi Uchiha, el horrible y nefasto recordatorio de que le había sido infiel a Sasori, si, sabía perfectamente bien que ya había pasado cerca de un año desde aquella vez y que él fue el que tecnicamente sedujó al moreno pero, todo había cambiado tanto desde esa vez, incluso llego a dudar de su amor por el artista.
Entró al lujoso departamento, el cual se encontraba en absoluto silencio, el hombre simplemente se limitó a dejar el equipaje del joven para posteriormente retirarse, en cuanto el sujeto se fue, Deidara se tumbó en uno de los sofás, estaba agotado.
También para ser honesto consigo mismo, Uchiha le había hecho el amor de una manera en la que el pelirrojo nunca lo haría, ni siquiera en aquellos momentos en los que Sasori SI lo deseaba, sabía que Sasori ya no lo miraba como antes y quizás ya no lo amaba como antes. En algunos momentos llegó a pensar en si estaría tan mal el hecho de que al llegar a Japón buscar a Itachi, ¿Sería mala idea? Solamente sería una prueba, estar con él solo una vez mas y seguir con su vida como si nada pero, sería injusto para su amado Sasori, ¿No?
Además seguramente el arrogante del Uchiha debía pensar que Deidara moría por él, por su perfecto cuerpo, su bien trabajado abdomen, su para nada pequeño... ¿Que demonios estaba pensando? Otra vez su mente le jugaba la misma broma, no ese sujeto nunca le gustarí y nunca le parecería atractivo. Se incorporó con desgana, quizás un baño le caería bastante bien, mas tarde iria a comer algo, detestaba cocinar, no era uno de sus mayores talentos, si eso haría.
*************************En otro lugar********************
-Y esos son todos los pendientes por ahora.- Hablaba la chica castaña mientras dirigia su mirada hacía su joven jefe.
-Menos mal.- Suspiro, tendría el fin de semana libre.
-Hey.- Decía un joven hombre de piel azul y afilados dientes entrando a la oficina del moreno.
-Kisame, ¿Que haces aquí?.- Pregunto curioso.
-Nada, quería ver si vamos a comer algo.- Dijo animado.
-Si, ¿Porque no?.- Dijo con una sonrisa mientras se ponía de pie.
-Entonces, me retiro por ahora.- Dijo la chica.
-Esta bien, nos vemos el lunes, Tenten.
-Si, hasta el lunes, con su permiso.- Dijo para posteriormente salir de la oficina del azabache.
- ¿A dondé te gustaría ir a comer?.- Pregunto Kisame
-No lo se, dondé sea esta bien.- Le resto importancía.
- Yo quiero algo de carne.- Agregó mientras ambos salían de la oficina del Uchiha.
-Se oye bien, vamos.
-Si!!- Festejó.
***********************En París***********************************************
"Danna..... acabo de llegar a Japón, hace una hora exactamente, trate de llamarte unas 20 veces pero, me arrojaba al buzón, ¿Debes estar ocupado?.
Todo luce tan diferente, me quedare en tu departamento, asi quizña no te extrañe tanto.
Cuando tengas tiempo, Llamame, ¿Si?
Te amo mucho, mucho, no lo olvides.
Bye, bye <3"
El albino terminaba de leer el mensaje como por tercera vez, en su estomago le llegó aquella odiosa sensación que no se debía tener permitido sentir, chasqueó la lengua y con un "hmp" dejó el celular de Akasuna sobre la mesita frente a él, siendo visto unicamente por Orochimaru.
- Quelque chose se passe jeune kimimaro? ( Ocurre algo joven Kimimaro).- Preguntó cruzado de brazos analizando la reciente conducta de su pupiló.
-Pas (No).- Suspiró
-assurance? (Seguro?).- Lo miró para nada convencido.
-En fait, vous le connaissez? (En realidad, lo conoces?) Preguntó haciendo un andemán hacía el celular.
-à qui? á Deidara? ( A quien, a Deidara?).- Dijo con curiosidad.
-Oui...
-Je le connais, il a 19 ans, c'est un artiste spécialisé dans la sculpture, il est contre-ténor comme toi, seule sa voix est plus tranchante que la tienne, il est l'héritier de la fortune Kamiruzu, puisque son grand-père est mort il y a deux ans, depuis que Sasori le connaissait, il a commencé à travailler très fort pour lui donner ce à quoi il était habitué, bref il est un petit prince gâté né dans un berceau d'or, il est différent de vous. vous qui étiez orphelin, éduqué par votre serviteur et la seule chose que vous avez est votre beauté et votre talent (ciertamente, lo conozco, tiene 19 años, es un artista especialista en la escultura, es contratenor igual que tu, solo que su voz es mas aguda que la tuya , es heredero de la fortuna Kamiruzu, ya que su abuelo murio hace dos años, desde que Sasori lo conocío acomenzó a trabajar muy duro para darle koque estaba acostumbrado, en fin es un pequeño principe mimado que nació en una cuna de oro, es diferente a ti. tu que fuiste un huerfano, educado por tun servidor y lo unico que posees es tu belleza y tu talento)
-mais apparemment sa beauté est supérieure à la mienne (pero al parecer su belleza es superior a la mia ).- Dijo agachando el rostro
-Je ne le considérerais pas comme ça après que Sasori ait décidé de rester plus longtemps avec toi qu'avec son "petit ami parfait"(yo no lo consideraria asi despues de todo Sasori decidio quedarse mas tiempo contigo que con su "perfecto" novio)
-Hmp..- Estaba por abrir la boca cuando su compañera y amiga entró acompañada del artista pelirrojo.
-Bonjour!.- Exclamó con felicidad la joven.
***********************En Japón************************
- ¿Puedo tomar su orden?.- Decía el joven mesero vestido completamente de negro y con una pequeña libreta en manos.
-Claro.- Dijo el rubio con una sonrisa.- Pedire una orden de alitas en salsa teriyaki, un ramen con un poco de cerdo y naruto, también quiero unas gambas fritas.
-Excelente.- Decía mientras anotaba la orden.- ¿Algo de beber?
- Un té de jazmín, por favor.
-Enseguida le traere su orden.- Dijo mientras retiraba la carta y daba la vuelta.
- Perfecto, muero de hambre.- Susurró mientras jugaba con sus cubiertos.
*****************************************************
-Creí que habías dicho que querías comer carne.- Decía el joven moreno mientras entraban a ese lugar de comida japonesa tradicional.
-Un ramen con cerdo se oye delicioso.- Admitió.- Además es carne.- Rió.
-Buenas tardes, bienvenidos a BBQ.- Decía una hermosa chica haciendo una breve reverencía.- ¿Mesa para dos?
-Si, por favor.- Habló el de piel azul, algo ansioso.
-Por aquí, por favor.- Dijo dandó la vuelta y guiandolos dentró del restaurant.
No habían caminado mas de dos metros cuando Kisame se detuvo.
-¿Pasa algo, Kisame?.- Dijo curioso el moreno.
-Deidara.- Dijo con una sonrisa.
El moreno busco con rapidez al mencionado, estaba ahí sentado mientras bebía de su vasito de té.
-Kisame.- Sonrió el ojiazul.
Rapidamente tomó asiento frente a Deidara, a Itachi no le quedó de otra mas que sentarse al lado de el rubio.
-Esta bien aquí, señorita.- Dijo Kisame mirando a la chica.
-Muy bien, enseguida les traere unas cartas.
-Gracias.- Dijo el moreno algo...¿Cohibido? Y es que nadie se lo negaba, en el instante que vio al ojiazul una serie de imagenes atacarón su mente, todo relacionado a aquella noche, aquel recuerdo de París.
-¿Cuando volviste a Japón?.- Inició conversación Kisame.
-Hace un par de horas.- Dijo jugando con sus palillos en el ramen y tratando de ignorar al moreno enseguida de él.
- Sasori....Regresó contigo?.- Pregunto el Uchiha como no queriendo.
-No...-Susurró levemente nervioso.- Él se quedo en París por trabajo.- Aclaró.- Demonios.-Pensó.
-Vaya, ese Sasori tan ocupado como siempre.- Dijo el piel azul con una sonrisa.
-Si....Jeje.- Rió nervioso.
-Esto es demasiado incomodo.- Pensó el Uchiha mirando hacía otro lado.
******---Fin primer Capitulo----************
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