Había pasado tiempo desde que si reinado inició y sin embargo para él sólo había transcurrido un simple suspiro. Hacía 17 años que había dado fin a sus contrincantes en el lejano valle de Goddric Gryffindor. Lily y James Potter ya no serían más un problema, acabar con ellos apenas y le significó un pequeño obstáculo en su larga carrera de conquistas, un movimiento de varita y todo acabo, hasta le causo decepción el ver que fue tan fácil .
Su hijo fue otra cosa pues pese a ser un niño había algo en él que le intrigo, algo en esos ojos verdes que le hizo tomarlo de su cuna y llevárselo con él. Una locura, diría Bellatrix, su más fiel mortifaga, y él no la corregiría, no fue hasta que el tiempo paso que este mismo le dio la respuesta de su extraño proceder.
Resultaba que en las batallas y con sus fieles mortífagos matando años muggles y mestizos (No que le importará mucho la verdad) se topo con la contrariedad de que no había suficientes magos de sangre pura como para volver a repoblar todo Gran Bretaña. Ese era un gran problema pues si no contaba con suficientes magos y brujas a los idiotas de Estados Unidos y Japón les daría por unir fuerzas y empezarían una guerra que sólo terminaría desperdiciando más y más sangre mágica.
Debía de encontrar una solución para aumentar el número de nacimientos mágicos.
Y ahí fue cuando el niño llorón de los Potter le dio una gran idea. Él niño en sí era un doncel, poco comunes en la sociedad mágica pero no por eso raros, un hombre con el don de engendrar vida y no cualquier hombre sino uno que era un mago.
Fue así que la idea llegó, ¿Qué pasaría si todo doncel nacido fuera llevado a una casa, una casa que sirviera solamente para mantenerlos ahí y todos los magos fértiles accedieran a esta casa con el único fin de procrear?
Así no solo tendría el control de los magos al quitarles a sus hijos, ya no sólo le tendrían miedo sino que les daría un medio para desahogarse mediante el sexo y una población a la que atontado mediante el sexo se vuelve sumisa.
Así las casas de placer o Red House fueron apareciendo, al principio hubo un poco de rechazo pero como no le costaba lisonjear y hacer cambiar de opinión a la gente con el paso de los años no sólo se abrieron una casa roja en cada barrio sino que hasta el mismo Ministerio de Magia reguló y estableció los parámetros que debían de seguir estas, incluso hasta los sagrados 28 iniciaron una curiosa ceremonia de iniciación a los jóvenes mortífagos (incluso en Hogwarts se habían eliminado las casas y ahora todos los que estudiaban ahí eran Slytherins y por ende futuros mortífagos). Esta ceremonia consistía en asistir a una casa roja para perder la virginidad, una vez hecho esto la marca tenebrosa era plasmada en sus brazos.
Y en cuanto al chico Potter, bueno sólo digamos que fue el primer doncel al servicio de las Red House. Y para poner el ejemplo el mismísimo Voldemort le tomó como su doncel personal.
Así con el paso de los años una nueva jerarquía surgió llamando a los donceles “receptáculos” un hombre pobre sólo se podía permitir tener una esposa pero uno rico (y la mayoría de los mortífagos eran ricos ahora) podía tener esposa y receptáculo. La esposa era la encargada de cuidar los hijos, ya sea que fueran suyos o del receptáculo. Pero sin excepción todo hombre fértil debía de asistir a las casas rojas.
Así los receptáculo eran criados bajo las enseñanzas de que su único objetivo en la vida era el tener niños, Si estos eran magos se iban con la familia del padre que los procreo o se iban a orfanatos especializados en su crianza. Pero si era doncel se quedaba en la casa roja donde creía y probablemente moriría.
Así Lord Voldemort se hizo con el poder de la sociedad mágica de Gran Bretaña y empezó a extender su poder por toda Europa llegando incluso hasta el Colegio Durmstranmg donde también se instauró el mismo orden. Así poco a poco y en una sociedad presa del miedo fue creando su imperio al cual no parecía haber persona alguna que pudiera detenerle.