Mente de Loki.
No fue nada complicado hacer que el hombre verde se rindiera ante mí, para ser sincero, creí que iba a tener contratiempos con él, temía que el otro sujeto apareciera, iba preparado para ello, pero afortunadamente no sucedió tal cosa; así que sin muchos esfuerzos ahora soy el Mandamás de la empresa de Stark, ese es un buen comienzo para destruir al cinturón de seguridad de Midgard, acabando con ellos internamente me va a ser mucho más fácil conquistar este planeta inferior, darles un buen gobernante que vaya que les hace falta.
Después de terminar con Bruce, me llevó directamente con Stark, la entrada del pequeño palacio Midgardiano del que era dueño era decorosa, no podía pedirle nada a un palacio de los que Odín era propietario, y en los que muchas veces descansé después de una batalla en otro mundo con Thor; nada mal para ser de un Planeta inferior.
Al entrar al palacete, el olor fue lo primero que llamó mi atención, era desagradable, a suciedad e inmundicia, cambié un poco la formación interna de mis fosas nasales y evité percibir ese olor de nuevo; caminamos por largos pasillos y bajamos distintas escaleras, Bruce iba diciendo cosas que para mí eran de poca importancia, pero las piezas de arte que estaban en esa casa no significaban lo mismo, era arte complejo, pinturas muy realistas, y otras más… abstractas, pero igual de interesantes que las otras, nos detuvimos frente a una puerta de cristal, podía ver el interior de la habitación, parecía todo ordenado y calmado, pero cuando Bruce abrió la puerta, todo fue diferente, la verdadera vista. Mesas con comida podrida y llena de moscas, manchas marrones en todo el piso, piezas de metal por todos lados, marcas de incendio en más de un muro del lugar, y al final de toda esa mugre y podredumbre, casi formando parte del entorno de forma desapercibida, estaba él, aquel hombre que lancé por el ventanal de su propia torre, de la cual ahora soy dueño por cierto, el mismo hombre que conoció el espacio antes que ningún otro, el gran Tony Stark, lleno de manchas, con una barba que casi alcanzaba su pecho, su cabeza había perdido ese castaño que ahora daba lugar a un blanco grisáceo, su piel lucia más obscura de lo que la recordaba, su cara regordeta lucía igual de mal que el resto de su cuerpo, solo unos calzoncillos y una playera de tirantes cubrían lo necesario en su cuerpo. Por un momento pensé que mi plan estaba casi a mitad de su camino, deshacerme de él sería más fácil de lo que podía esperar, pero entonces, ese estúpido tenía que hablar.
- Te necesito… padre. –
Fue todo lo que dijo y comenzó a sollozar como si fuera una cría de animal, me hizo recordar y sentir tantas cosas que no pude simplemente ignorarlo, Bruce se disculpó por él, me dijo que hacia cosas como esa muy seguido, pero que no permitía que nadie le consolara, según él, porque se lo merecía por haber hecho todo lo que había hecho, que su sufrimiento era necesario por el bien de la Tierra, pero muy en el fondo lo comprendí, supe que lo hacía para irónicamente no sentir dolor, o no en la forma en la que realmente lo estaba pasando. El verlo de esa manera despertó en mí un sentimiento que aquí llaman empatía, hacia siglos que no sentía eso por nadie, ni siquiera por Thor que era mi hermano, Stark me causo eso sin siquiera esperarlo.
Fin Loki.
- Vamos Tom ¿no me digas que no estás preparado para tratar con algo como Tony? Llegaste muy elevado a la oficina. –
- Claro que estoy listo para tratar con algo como esto, eh visto cosas peores, en dos meses vas a notar una diferencia enorme. –
Tom se acercó poco a poco hasta Tony, su olor era desagradable, peor que el de la casa, su aspecto no ayudaba a no sentir asco, pero cuando Tom tocó con la punta de sus dedos un costado de Tony, este levantó la mirada, fue ahí cuando todo se rompió, Tom pudo ver en los ojos de Tony sus propios ojos, esa mirada llena de fracaso y poco autocontrol, llena de remordimientos e inseguridad, el peso del fracaso cargado sobre sus ojos.
Con un hechizo rápido Tony calló dormido; eso le daría tiempo para pensar en algo y recobrar su autocontrol. Su respiración se estaba desestabilizando un poco, pero supo controlarlo hábilmente, pero antes de que pudiera estar cien porciento controlado la voz de Bruce le llamó.
- Bueno Tom, aún sigo siendo tu jefe, lo voy a ser hasta que Tony este mejor, que por cierto es parte de tu trabajo ahora. Me va a tomar una semana dejar las cosas de la empresa listas y bajo tu nombre, así que, en esa semana te vas a hacer cargo de Tony y de esta casa, es ahora parte de tus responsabilidades, y han sido responsabilidades que siempre fueron del CEO, sino pregúntale a Pepper, ella debe saberlo mejor que tú y yo, pero bueno, no necesitas salir de la casa, llama por el teléfono que está en el despacho y te van a traer lo que necesites, tu ropa, comida, lo que sea, solo llama y lo tendrás aquí. –
- ¿No puedo simplemente ir yo por mis propias cosas? –
- No entiendes todavía lo que esta vida significa. –
- Entiendo más de lo que piensas. –
Bruce salió de la casa dejando a Tony y a Tom a solas dentro del laboratorio, Loki estaba confundido pero agradecido al mismo tiempo, ahora tenía a Tony vulnerable, completamente a su disposición, lo que hiciera, Tony no iba a poder defenderse, pero en lugar de eso, Loki sentía la necesidad de ayudarle, recordar lo que Thanos había hecho en él, lo que Odín había hecho con él desde su nacimiento, el rechazo que sintió cuando Thor subió al trono después de probar que no era digno. Todo eso se vio reflejado en Tony, esa necesidad de ayudarlo fue más que su determinación en acabar con el planeta, pero lo iba a disfrazar de alguna manera, Loki era mentiroso incluso con sus sentimientos, quería ocultarse a él mismo que estaba ayudando a Tony por compasión, queriendo disfrazarlo como una variante de su plan.
- Bien, señor Tony Stark, lo primero que vamos a hacer es cambiar un poco su aspecto físico, está desagradable, en la podredumbre y el rechazo, y parte de mi trabajo es ayudarle a salir de esto. –
Tony no respondió, solo levantó la mirada para ver a aquel delgado hombre frente a él, nadie después de Bruce había estado preocupado por él.
- Veo que no responde señor Stark, creo que va a ser necesario usar otros métodos. –
Tony iba a pronunciar una palabra, pero Loki lo golpeó fuertemente en el rostro, hizo que se desmayara casi al instante; por un momento pensó que iba a disfrutarlo, pero el placer fue muy poco. Al parecer esa parte de él que se sentía satisfecha cuando alguien sufría no estaba activa con Stark.
Mente de Loki.
Después de usar magia para llevar a Tony a la bañera, iba a usarla también para hacer que estuviera duchado y afeitado, pero algo no funcionaba, era ilusionista, podía crear imágenes para que las cosas se vieran diferentes, pero en el fondo todo era igual, y justo ahora, necesitaba que este hombre se viera diferente, pero que realmente estuviera diferente, así que, necesitaba hacerlo manual, podía sostenerlo con magia para afeitar su barba y recortar sus cabellos, eso debía hacerlo manualmente, no quería que las tijeras o la cuchilla de afeitar rasgaran su piel.
Lo desnudé, eso también lo hice con magia, pero me arrepentí de haberlo hecho, su cuerpo era desagradable, flácido y con muchas partes obscuras, tenía suciedad por todos lados, todo el vello de su cuerpo estaba desmedidamente largo, las uñas de sus pies tenían un color amarillento espeso, llenó de callosidades, y protuberancias en muchos lados, en su cuero cabelludo corrían animales pequeños, terminar con su vida fue muy satisfactorio, hacerlos explotar cada que veía uno recorrer alguna parte, simplemente con verlos podía hacer que explotaran.
Cuando ya estuvo desnudo tirado sobre el agua de la bañera, comenzó a despertar, dejé que recobrara un poco el sentido; quiso levantarse y tal vez salir huyendo, no lo sé, no pregunté, simplemente lo sostuve frente a mí y lo mire directamente a los ojos, usé mi mejor mirada compasiva, y funcionó, sus ojos comenzaron a cristalizarse y su cuerpo se destensó poco a poco. Asentí con la cabeza en señal de aceptación, ahora no tenía que usar magia, me descubriría, pero por lo menos el solo iba a poder sostenerse.
Comencé tirando un poco de shampoo sobre su cabeza, los animalillos explotaban sobre mis manos, mientras yo le masajeaba el cuero cabelludo, relajándolo poco a poco, así lo hacia mi madre; y aún con el shampoo sobre sus cabellos, comencé a cortarlos con unas tijeras, los mechones que caían los desaparecía mandándolos a otra dimensión, nunca lo notó, eso hizo más fácil mi trabajo. Lo recosté un poco en la bañera empujando su cabeza hacia abajo para sumergirla en el agua y enjuagar su cabello. Pasé a seguir con su barba, recorté una gran parte con las tijeras, ahora él tenía la cabeza recargada hacia atrás en la orilla de la bañera, me dejó hacer lo mismo que con los mechones de cabello, después, con una navaja de afeitar comencé a quitar todo el vello que quedaba en su rostro, esa parte de su cara era un poco más clara que lo demás, pensé en dejarla un poco marcada como la usaba la última vez que estuve aquí, pero el color blanco no le quedaba, después de aplicar una tintura permanente, podría considerarlo.
La ducha transcurrió clamada, hacía lo que le pedía, aún cuando había posiciones demasiado vergonzosas, pero era mi deber limpiar cada rincón de su cuerpo, con un hechizo sencillo iba aclarando uno o dos tonos su piel conformé iba tallándola. Ya cuando estuvimos en su habitación, todo era un desastre, la cama estaba desecha, las sabanas sucias y no había ropa limpia por ningún lado, todo estaba desordenado y sucio, lo único que pude hacer fue recostarlo sobre la cama y así, desnudo, taparlo con una sabana que no estaba tan manchada, iba a hechizarlo de nuevo, ero justo antes de que tocara su frente para que durmiera, me miró fijamente y me dijo:
-Gracias. –
Toqué su frente y cayó dormido.
Lo primero que hice fue cambiar mi forma, de regreso a ser Loki, el traje y las camisas ajustadas no eran lo mío, y así, cómodo, podía hacer más cosas. Bajé al primer piso, y usando magia, comencé con la limpieza, hice varias copias de mí, me multipliqué por lo menos unas 14 veces, cada uno iba a hacer algo, a encargarse de una habitación o de alguna tarea en específico, Tony no iba a despertar hasta que yo quisiera, y para eso faltaba bastante tiempo.
Después de alrededor de 10 horas de trabajo, no había muestra de suciedad en toda la casa, la cocina brillaba, los pisos también, toda la ropa estaba lavada, secada, planchada y doblada, ninguna cama estaba sin hacer, todos los baños olían bien, incluso la habitación de Tony estaba hecha, con el dormido completamente, no había ningún riesgo, las luces estaban encendidas, los jardines recortados, los cristales limpios y las fuentes encendidas, todo estaba limpio y funcionando, incluso su taller, todas las armaduras estaban en sus lugares, el piso sin manchas, las paredes limpias y todas las piezas organizadas por tamaños y materiales.
El amanecer estaba comenzando, uní a todas mis copias y me decidí a tomar una pequeña siesta en el sofá, había terminado todo.
Fin mente Loki.
Eran ya las 1 de la tarde, el estómago de Loki fue quién lo despertó, había pasado ya suficiente tiempo sin alimento, subió a uno de los baños y tomó una ducha rápida, cambió su forma a Tom y se dirigió a la habitación de Tony, este seguía durmiendo, con un movimiento leve de manos Loki lo despertó, poco a poco Tony fue incorporándose, sus ojos se hacían más y más grandes cada vez, se sorprendió de ver su casa limpia de nuevo hacía ya un tiempo que no la veía así, pero ahora todo estaba limpio y ordenado, incluso olía bien, de pronto en su campo de visión apareció Tom quien solo le dedicó una pequeña sonrisa y caminó hacia el closet de Tony, de ahí sacó una muda de ropa y se la llevó hasta la cama a Tony, quien hasta ese momento no se había percatado de su desnudes, rápidamente se vistió y se puso de pie frente a Tom.
- Gracias, no sé quién eres, no sé qué haces aquí, pero gracias por lo que hiciste por mí anoche. –
- No hay nada que agradecer señor Stark, mi nombre es, Tom, Thomas William, todos me llaman Tom, pero usted puede llamarme como mejor le parezca, soy el nuevo encargado de su empresa, entregué mi currículum, pasé por diferentes pruebas y se estipulo que soy el más capacitado para manejar su empresa, además de ser el encargado de cuidar de todo lo que a Stark se refiera, y eso lo incluye a usted. –
- ¿Bruce te dijo todo eso? –
- El señor Bruce me indicó todas mis responsabilidades, su bienestar es una de ellas, así que le voy a pedir que me acompañe abajo, para que podamos desayunar, o comer, sería esa la expresión correcta. –
- Por favor, deja de hablar como un robot, me recuerdas mucho a Jarvis. –
- Creo haber escuchado sobre esa inteligencia artificial, la más avanzada de todo el mundo, capaz de tomar un cuerpo físico, y también de armarse y desarmarse a voluntad, en verdad le digo que estoy sorprendido por ello. –
- Si, bueno… esta desactivada ahora, necesitaba estar solo y él no me iba a dejar estarlo, estaba programado para procurar siempre mi salud y todas esas cosas, pero ahora no es nada importante así que… - Tony hablaba nervioso sobre él, un dejo de dolor se podía sentir en el aire.
- Creo que sería más fácil para mí si activamos a Jarvis de nuevo, a mí no me puede desactivar señor, y así tendría un ayudante para cuidar de usted. –
- Voy a considerarlo Tom. –
- Puede hacerlo mientras vamos a la cocina, es hora de comer algo. –
- Creo que tengo suficientes reservas en mi estómago, no creo que pase nada si no como ahora, además, tengo que bajar al laboratorio, necesito terminar esos trajes. –
- Bruce me advirtió sobre algo parecido a esto, así que, en el momento en que usted ponga un pie fuera de la habitación va a poder ver que la casa no es nada de lo que era la noche anterior, y eso incluye el laboratorio, está sellado y atrancado con muebles, sin ayuda de Jarvis o de sus trajes que están ahí dentro, no va a poder abrir esa puerta, así que por favor vamos abajo a comer, me muero de hambre. –
- Incluso si todo lo que dices es verdad, no hay nada para comer en esta casa, así que vamos a tener que salir. –
- Me encargué de eso cuando desperté, Bruce me dio indicaciones de usar un teléfono para cualquier cosa que necesitara, en unos momentos van a estar tocando la puerta con nuestra comida lista. –
- Eres eficiente, solo espero que tú no me abandones. –
- Eso depende de usted señor Stark, yo nunca dejo a las personas, las personas me dejan a mí. –
- Te invitó un trago guapo. –
- Le invitó un desayuno, señor. –
Ambos rieron y bajaron por las escaleras hasta llegar a la cocina, conformé ambos bajaban, Tony se iba quedando más sorprendido, la casa nunca había estado tan limpia, ni tan ordenada, incluso los grandes ventanales estaban claros, todo limpio, nada fuera de su lugar ¿Cuántas personas habían estado haciendo la limpieza? Fue la pregunta que retumbaba en su cabeza.
- Vaya que no mentías Tom, dime ¿Cuántas personas se necesitaron para limpiar toda la mansión? –
- Una, y muchas ganas de trabajar. –
- No te la voy a poder comprar, esto es trabajo de más de 14 personas. –
- 15, para ser exactos. – contestó Loki, usando un poco de burla en su tono.
- Me estas ganando hombre. –
- Eso intento señor. –
Su corta y suspicaz conversación se interrumpió por el sonido del timbre, el repartidor estaba llamando a la puerta, Tom sacó su billetera y pagó la comida, dos bolsas se papel y unos vasos con lo que parecía té fue lo que recibió a cambio.
- Adelante señor vamos a desayunar. –