La revisión de mi documento puedo decir con orgullo que no estuvo tan mal, solo una que otra cosilla por aquí y por allá, así que salgo de la oficina de mi asesor que me pide le mande la información corregida hoy mismo para que esta semana comencemos con todo el arduo proceso de papeleo por aquí, papeleo por allá.
Salgo de la facultad y veo alrededor hasta encontrarme con el edificio que jamás entré por tener un interés nulo pero que ahora ha entrado en mí la curiosidad.
- Isa- llaman mi atención
- Manu – le correspondo el saludo
- ¿Qué haciendo por acá? – me pregunta coqueto
- Papeleo- le respondo
- ¿Ya acabaste? – asiento –¿un cafecito? – lo veo dudando, ese coqueteo de hace rato no sé por donde va y si es por interés a mí… no estoy interesada- también viene Teresa, Ricardo y Sabrina
- Va ¿se pusieron de acuerdo? – que raro que se encuentren
- No, coincidencia como la de ahora, el destino predestinado- me le quedo viendo, creo que debí ir a visitar a Miranda
- Córtalo – lo veo aburrida
- Bueno, nos vimos en las oficinas y de ahí quedamos que terminando de hacer trámite pasábamos al café de siempre- asiento
- Entonces estará bien saludarlos- nos encaminamos hasta llegar y verlos ya con la carta en la mano- vaya, hasta se ven como adultos- bromeo y se paran a saludar
- La encontré en la entrada- Manu les explica
- Hoy es el día de encontrarnos – Tere dice con emoción- aunque a ti ¿Por qué no te vimos antes?
- Revisión de documentación- bufo y asienten
- Vaya, apenas estoy pensando en hacer la especialización- Sabrina dice con un deje de despreocupación
- Es caro, aquí la princesa porque tiene veterinaria propia-Ricardo me molesta
- Es de mi papá y ya lo conoces, “es suya y solo suya y por siempre suya”- lo imito y reímos
- Quien se case contigo ya tiene trabajo asegurado- Manu sale con el comentario fuera de lugar
- Eso si su padre le da trabajo- se ataca de la risa Tere al soltarlo tan mordaz y los demás la seguimos
- Pero su papá es muy agradable- Manu lo defiende
- Pero no tonto- Sabrina le hace ver- huele a los oportunistas- lo señala
- Eso y no debes de olvidar a la suegra psiquiatra- le recuerda- solo un idiota creería que puede sacar una buena tajada de ahí- Manu se les queda viendo
- Yo digo que los dos son muy buenas personas- los defiende
- Ninguno dijo lo contrario- le explico- solo hacen ver que si alguien anduviera conmigo por interés no saldría bien parado.
Después de eso nos molestamos unos a otros un poco más, todos tienen trabajos estables, a unos nos va mejor que a otros, pero nada fuera de lo normal.
- ¿Qué tal unos tragos un día en la noche? – propone Manu
- Puede ser- Sabrina ve el final de su café
- Si se arma bien y si no, también- se ríe Tere
- Por mí no hay problema- siento un mensaje en mi cel y lo reviso “¿has ido a revisar a mis niñas?” la Sra Susana me pregunta
- Si, no hay problema- les respondo a ellos y le contesto “hoy voy a verlas”
Como le prometí a la Sra Susana voy a verlas, no sin antes encerrarme a terminar los cambios de la revisión y enviárselos, creo que trabajo mejor bajo presión, porque de solo pensar que llegaré tarde a ver a Eli… yo escribí más rápido. Así que ya estoy aquí en la puerta de la casa de la Sra Diana en lo que Tere me hace una llamada
- Quedamos en la burbujita- me aclara el lugar
- Va, ¿el sábado verdad? – veo la hora, no es tarde
- Si, igual le avisamos a más gente para que no tengas a Manu encima- se burla de mí
- Si bueno, eso se los agradezco mucho- suspiro
- Y dijo Ricardo que si aún así quieres faltar por cuidar a tu consentida nada más avises ya que sabe que la nena pasa por un momento difícil- se ríe, ellos ya conocieron a Eliana y me dijeron que era una completa mamá
- Gracias- le digo con sinceridad
- Te dejo, tengo cosas importantes que hacer- y sin decir más, me cuelga
- Hola Isa- Miranda me saluda viéndome fijamente y eso hace que se me erice la piel
- Hola Miranda- espero no estar sonrojada ¿a qué hora abrió la puerta?
- Una pequeñita te está esperando- señala adentro y me da el pase
- Una encantadora princesita- digo al verla y al Eli escuchar mi voz corre a mi para abrazarme
- ¿Vas a jugar conmigo a las muñecas? – luego luego lanza la pregunta
- Claro, vamos- caminamos a su sala en donde tiene ya todo puesto
- Tú serás Luli y yo Yaya- toma su muñeca Yaya y me da a Luli- que bueno que vino a visitarme comadrita – comienza a decir con una voz aún más chillona
- Siempre es un gusto comadrita- le sigo el juego en lo que veo como Miranda escapa a la cocina dejándonos “solas”- el té que usted hace siempre le queda muy bueno…
Pasó el rato y ya que Eli y yo vimos que Miranda preparaba la cena se acerca más a mi Eli y en secreto me dice
- Isa, creo que debes de recordarle a mi tía cuando hacer las compras- me cuenta muy bajito sin perder de vista a Miranda, así que me giro a ver a Eli
- ¿Por qué? – le pregunto en el mismo tono
- El otro día tía Susy le regañó por dejarme sin mi cereal favorito- infla los cachetes- tampoco había muchas cosas- me aguanto la risa y acepto con la cabeza
- Me encargaré de recordarle, tú no te preocupes- le guiño el ojo
- Isa, ¿verdad que vendrás a hacer pijamada conmigo este sábado? – me pregunta ya toda emocionada
- Claro princesa, sin duda alguna- le vuelvo a guiñar el ojo y chocamos las palmas
Y así, estoy cancelando mis planes de salir, mis amigos no dejan de molestar y decirme que se nota a leguas quien es la número uno en mi corazón, que seré una excelente mamá (este comentario lo dijo Manu).
Así que llegado el sábado estoy aquí con mi mochila que trae mi pijama de osos (que hace juego con una que tiene Eliana y la Sra Diana) y cambio para mañana
- Isa, mi tía dijo que podemos dormir en la sala- Eli suelta con emoción al tomar mi mano y llevarme al lugar- mira, hay cobijas, cojines y almohadas que mi tía trajo para nosotros- su carita es tan hermosa cuando está tan contenta- solo falta Jess, pero me dijeron que otro día podemos hacerla las cuatro- suspira
- Me parece perfecto, mientras nosotras dos gozamos de esto- le señalo el lugar y dejo mi mochila
- ¿Nosotros dos? – se me queda viendo- mi tía también va a dormir con nosotros- me aclara y eso hace latir mi corazón
- Que bueno ¿verdad? – le sigo el juego y ella acepta- mientras podemos jugar en mi cuarto
- Eliana, antes ofrécele agua o algo- la voz de Miranda sale de su cuarto
- Yo quiero agua- Eli me dice y me lleva a la cocina para que le sirva agua y me sirva, eso me da mucha risa
Después de jugar a las muñecas, cenarnos una pizza, estamos ahora en el suelo recargadas en el sillón viendo una película (moana), con la niña en medio de las dos y comiendo palomitas
- Me quiero recostar- Eli se queja
- Ven- Miranda me gana a cargarla, la acomoda en ella y si no es porque sería muy obvio que les tomo foto lo hago
- Pero las palomitas- se vuelve a quejar y me da risa porque Miranda se acerca a mi para que las palomitas queden en medio de las dos
- Listo, deja ver la película de la niña del agua- Miranda la molesta, Eli hace el mohín de inflar los cachetes
- No es niña del agua- Miranda se ríe y me contagia
- Bueno, deja ver la película- aún un poco indignada Eli se termina de acomodar y toma unas palomitas para comer
Para el final de la película, Eliana ya está completamente dormida
- Esta niña solo nos deja viendo sus películas- dice quedito Miranda con “indignación” pero acomodando a la niña a dormir con una completa ternura
- Pero bien que te gustó- le digo, ella hace una sonrisa de medio lado
- Deberían sacar una película de plantas, esas estarían mejor- reímos y recogemos todo
- Mañana despertará temprano- le recuerdo al ver que saca un libro de investigación para leer
- Si, solo será un ratito- bosteza
- Mientras no te caiga el libro en la cara- se me queda viendo frunciendo el ceño- seguro duele algo de ese volumen- me río, baja el libro
- Seguro los tuyos son delgaditos- me responde
- Si y ligeros, casi vuelan de que no pesan- sonreímos y reímos sin hacer mucho ruido para no despertar a Eliana.
Cuando abrí los ojos en la mañana, tenía abrazada a Eliana y mi cara estaba demasiado cerca de Miranda, podía fácilmente percibir el olor, su olor
- Despierta mujer- mi hermana me pica la mejilla
- Estoy despierta- la veo feo y le quito el dedo de mi cachete- ¿Qué rayos estamos escuchando? – me le quedo viendo
- “Déjame intentar” – me responde simplemente
- Pero que cosa tan anticuada- me quejo
- Anticuada o no- sonríe maldosamente- te queda perfectamente- su sonrisa es ladina ahora
- No sé de que hablas- veo la puerta y veo entrar a mis papás entrar al comedor con comida
- Ya que una señorita nos canceló el otro día la comida- mi madre me ve acusatoriamente- hoy es la comida
- Ayer acompañé a Eli a que le quitaran el yeso- todos sonríen
- ¿Y como le fue a la pequeña princesita que conquisto a mi niña? – papá pregunta
- Ella estaba fascinada con todo, la que estaba sufriendo una crisis fue Miranda- me río y mi hermana me sigue, seguro se lo está imaginando- pensó que le iban a rebanar el brazo a Eli- todos reímos
- ¿Es buena mujer y tía? – papá pregunta al aire
- Es muy buena tía y mujer- respondo sin pensar, la mirada de mi madre la siento incrustada en mí
- Si, definitivamente, se preocupa y ocupa mucho por su sobrina y su hermana, aunque no quiere hacerlo ver- mi hermana comienza a explicar sirviéndose comida- es seria, agradable y ama las plantas, a eso se dedica- comenta lo último viendo a mamá
- Sin duda debe ser muy agradable- mamá sonríe aceptando el hecho
- Puede ayudarte con las que nunca se te dan- mi hermana le suelta cruel
- Muy graciosa, ya tengo muchas- mi madre tiene su santuario de plantas en un espacio especial solo para ellas- bien cuidadas y lejos de los animales de tu padre- reímos
- Amas a Jaeson- papá la apunta con el tenedor
- Es el cuidador más intimidador y salvaje del mundo- agrega mi hermana, en lo que vemos a Jaeson asomarse y tumbarse (Jaeson es un “perro de agua” pequeño y viejo, que no ladra, se deja acariciar por quien sea, es todo un bonachón)
- Creo que el cuidaría mejor mis plantas, lo malo es su orina que las mataría- mamá reniega, pero siempre es la primera en consentir al perro.
- Pasado mañana voy a cuidar a Eliana- les aviso para que no me hagan planes, todos se me quedan viendo- Miranda va a salir con sus amigas, así que tendré pijamada con ella
- ¿Con ella o con Miranda? – mamá pregunta burlona
- Obviamente con Eliana- me hago la ofendida y trato de desaparecer las imágenes en mi mente de hacer una pijamada con Miranda.
- Espero se diviertan mucho- mi hermana me guiña el ojo, sabe que se enterará de todo el chisme porque Eliana le va a contar todo.
- Regresando a lo importante- papá pone el tema en la mesa- su madre y yo queremos viajar, así que tu te ocupas de la veterinaria y tu hermana de los pacientes de su madre- declara
- Papá, yo soy psicóloga, no psiquiatra, no puedo tratar a los pacientes de mi madre- mi hermana le recuerda
- Ya hazte la especialidad para que seamos libres- papá dramatiza y mi madre se ríe
- Es una buena opción- mamá dice sin ver a mi hermana a los ojos- yo me río bajito y mi hermana quiere matarlos, pero se limita a un gruñido
- Son peligrosos- los señala con el tenedor- ya veré que hago yo conmigo, mamá mientras puede remitir a sus pacientes a un colega- refunfuña
He tenido días pesados en la veterinaria, ponerme al día de todo y que papá me está soltando todo sin reparos, hace que el cansancio esté al día, pero hoy no, hoy tengo toda la energía para estar con mi linda Eliana y hacer la pijamada con ella, así que me arreglo y llevo en mi mochila ropa cómoda para pasar le rato con mi princesita y emprendo el viaje.
Llego a casa de la señora Diana y justo cuando voy a tocar la puerta escucho:
- Si, tú eres la razón de porque tu tía está aquí sin seguir sus sueños- dicen con crueldad
- No es cierto- la voz toda quebrada de Eli suena y eso me hace enojar
- Claro que sí, no debería de cuidar a la hija de quien no le apoyó nunca, su familia nunca la quiso y no le hizo caso alguno- hace énfasis con fiereza
- ¡Cállate! – el fuerte grito de Miranda resuena
- No, tu estarías haciendo tu doctorado en el extranjero sino fuera pro ella ¿verdad? Ella es la que te retiene y tu ni siquiera deberías de estarla cuidando- ataca con fiereza y escucho los pasos venir a la puerta, no sé porque razón me escondo
- ¡Lárgate! – se abre la puerta- para que te lo sepas- la voz de Miranda está cargada de tanto enojo– me pude llevar a la niña conmigo y aun así yo no quise, mis problemas familiares son míos y en todo caso, ella no tiene la culpa de absolutamente nada, no te quiero volver a ver cerca de mi sobrina, ni se te ocurra acercarte o hablarle y no vuelvas a acercarte a mi porque no respondo- suelta con tanta irá, una que espero no recibir jamás, creo que se está controlando para no golpearla
- Pero- la mujer guarda silencio y sale, al cerrarse la puerta aparezco ya que ella ha dado algunos pasos
- ¿Te gusta ser cruel con pequeñas inocentes verdad? – me hierve la sangre, la mujer se me queda viendo y en verdad no vió venir la bofetada que le estampo- ella no te la dio, pero yo sí y te mereces más- se tambalea -tú te vuelves a acercar a Eliana, le hablas o lo que sea y no la vas a contar- mi ira crece cada momento más al recordar el llanto de mi Eli- lárgate antes de que te deje sin cabello y sin dientes- gruño, la tipa me ve asustada y sale rápidamente de ahí
Tomo aire, necesito tranquilizarme para no afectarlas más de lo que deben estar, necesito distraer a Eli y hacerla sonreír, tomo más aire y lo saco despacio según los métodos de relajación que mi hermana me ha enseñado, bien “trágate el enojo y entra a ese lugar con una gran sonrisa y haciendo como que no sabes nada”. Pinche vieja desgraciada, respiro nuevamente y ya más tranquila toco la puerta.
Cuando Miranda me abre la puerta veo su cara, puedo apostar a que esperaba a la otra vieja y ya se le iba a lanzar, pero al verme su semblante se relaja por completo, saludo a la niña y después de unos comentarios vamos a ver películas, propuse “101 dálmatas”
- Mira que bonitos perros- le digo a Eliana y está se ríe, su respiración aun no está del todo relajada y de vez en cuando suelta suspiros
- ¿has visto todos esos? – me pregunta sorprendida
- Claro ¿quieres que te lleve a mi veterinaria para que veas como ayudamos a todos los animalitos? – Eli sonríe encantada
- Si, cuando sea grande quiero ser como tu- y ahí, en ese momento mi mundo se realizó
- Claro, yo te ayudaré- mi corazón late encantado ante sus palabras, nunca pensé que algo tan sencillo provocara una felicidad tan grande como esa, pero de un momento a otro su carita entristece de nuevo y me dice bajito aprovechando que su tía fue al cuarto- ¿mi tía no es feliz conmigo? – me pregunta con miedo y en ese momento es que me doy cuenta de que me faltó estrellarle la cara en el cemento a la vieja esa
- Claro que es feliz contigo, yo siempre que la veo viéndote está sonriendo, está feliz, se nota que te ama tanto como a nadie más- al parecer mis palabras le dan paz y la abrazo
- Ojalá ustedes pudieran estar juntas y cerca de mi siempre- creo que no lo dijo con el fin de vernos como pareja, pero para mí…
- Siempre junto a ti- le respondo con un suspiro
Eli y Miranda fueron a sus respectivas escuelas, yo le llamé a mi hermana para irnos a desayunar
- ¿ya me vas a decir que te tiene así? – me pregunta irritada- se supone que estarás toda contenta por haberte quedado cuidando a tu consentida- bufo
- Pues fíjate que pasó un detalle- se me queda viendo y le cuento hasta el momento en donde Miranda la corre
- ¿Y luego? – está enojada
- Pues le planté un bofetón de esos que te voltean la cara- suelto con enojo- me faltó darle unos miles de más- empuño mis manos- vieja desgraciada, meterse con mi niña- me asombrada y luego sonríe
- Tu dando bofetones- se ríe- ¡como no estuve para verte! - se ríe más y me indigno
- Que grosera eres- me como mis wafles
- Ah vamos, tu no eres de golpear- me explica comiendo los suyos
- Fue una desgraciada con mi Eli- gruño, aunque la comida está bien buena- pero si le di lo que vi que Miranda tenía hartas ganas de darle- suspiro con alivio
- Y por lo que se ve lo repetirías- sonríe, sé que ella está de acuerdo
- Sin dudarlo ni un momento- sonrío ladina, nos quedamos viendo y reímos
- Supongo que de eso va a tratar hoy mi consulta, espero vayas para cuidar a Eli en lo que platico con Miranda- me señala con el tenedor que sube y naja
- Claro- sonrío de solo pensar en pasar tiempo con Eli
- Perfecto- mi hermana comenta satisfecha
Hoy Miranda sale tarde, así queme toca ir por la pequeña Eliana y Miranda me dijo que me llevara el auto, así que aquí estoy, conduciendo a casa de la Sra Susana con los niños
- Bienvenidos- nos saluda la Sra – que gusto que pudiste pasar por todos y que te los entregara- me dice desvergonzadamente, me le quedo viendo
- Si, que raro que me los dieran- reímos
- ¿Cómo les fue a mis hermosos niños? – la Sra Susana los abraza y besa por igual y estos se dejan con risas
- Bien, nos fue muy bien- Eliana le responde, toma de la mano a Jess y agrega- vamos a jugar- la jala mientras que Sam se les queda viendo y las sigue
- En un rato les llamo para comer- la Sra Susana les advierte
- ¿Y a ti? ¿Qué tal todo? - me pregunta yendo a la cocina y me hace seña de que la siga- supe que el otro día tuvieron problemas- me le quedo viendo ¿supo lo de la amiga de Miranda? No creo, siento que hubiera salido algo en los periódicos
- ¿Problemas? - cuestiono
- Si, Eli me dijo que una amiga fea de Miranda la vio, pero no me quiso contar más- me increpa
- Mmmm- se supone que yo no sé nada
- Habla o busco quien me dé respuestas- me advierte y bufo
- La que sabe todo lo sucedido es Miranda- me le quedo viendo y ella a mí- pero puedo decirte- se me escapa la sonrisa- que la vieja esa no se fue intacta- me veo la mano con la que le di el cachetadón aquel
- No esperaba menos de tí- sonríe- creo que me quedaré con esa información, sospecho que si sé más…- guarda silencio- quiero vivir una vida feliz con mi esposo y mis hijos- reímos
- Me imagino- la verdad es que tienen una familia bonita, el Sr Edmundo le da la tranquilidad a esta casa y la Sra Susana el dinamismo y locura necesaria- ¿Cómo sigue la Sra Diana? – le pregunto y bufa
- Ya te dijimos que nos digas por nuestro nombre, al rato vas a ser literalmente de la familia y tu aun nos dices señoras- bufa y me le quedo viendo
- ¿Cómo que literalmente? – sonríe nerviosa
- Bueno, todos aquí te tomamos como parte de la familia y eso lo sabes- asiento, yo también los veo así- pero Eli me dijo que le gustaría que ustedes fueran novias- se ríe traviesa y frunce los hombros
- Yo no creo que vaya por ahí- ¡no me ilusionen falsamente!
- Eso solo el tiempo lo dirá- mueve la mano para quitarle la importancia a lo dicho- ahora – sale de la cocina y grita- ¡a comer!
Después de comer con ellos y dejar que Eliana jugara un rato con Jess y Sam, por fin pude convencerla de ir a casa con su tía, así que entramos a la casa y aún no llega; Eli corre a su cuarto por sus peluches y me pone a jugar con ella, como sus juegos con más de comida, chismes o tés, no me es difícil, de hecho, estoy tentada a comprarle todos los peluches de animales que encuentre, pero luego pienso que no habrá suficiente espacio para todos y por eso no lo he hecho.
- ¡Toc toc! – escuchamos la voz y Eli sale disparada en lo que yo voy al baño- ¡hemos llegado! - alcanzo a escuchar y mientras no sea otra “amiga” pestilente, todo bien
- Hablando de Isa ¿en dónde está? – cuando salgo alcanzo a escuchar
- Aquí- no me sequé bien las manos – hola, mucho gusto, soy Isa- me presento y analizo a la mujer, lo que me incomoda es que… como que no conoce eso del espacio personal con Miranda, tal vez son pareja y por eso… lo que hace que no me sienta tan cómoda
- Lore, mucho gusto- se presenta- ¿Qué tal el día? – comienza a sacar comida de las bolsas
- Bastante bien, jugué mucho con Jess- Eli les platica- hicimos un dibujo para mamá- y conociéndola, va por el
- Tenía mucha ilusión con ese dibujo- les explico- todo el camino se la pasó hablando de ello- creo que debería de irme, ellas como que están muy conectadas y es mejor no estorbar
- ¿tienes algo que hacer? – Miranda me pregunta con el ceño fruncido
- Te trajimos alitas- Lore me enseña la comida- y yo no como demás, así que no nos puedes dejar desperdiciando estas delicias ¿verdad? – ¿me está coqueteando?
- Ah, sí, no quiero ser una molestia o interrumpir- se me sale, Lore se ríe y se le pega más marcando territorio
- ¿Cómo va a ser eso si eres la niñera estrella y amiga de la pequeña más preciosa del mundo? – arg, lo que está haciendo si es marcar territorio, odio cuando hacen eso
- Este lo hice para mamá ¿se lo podemos llevar luego? – Eli regresa diciéndole a Miranda
- Claro, seguro que eso la anima para que se recupere más rápido ahora que despierte- Miranda responde con toda la ternura de su ser y suspiro
- E hice otro para ti, somos tú y yo- veo como Miranda se derrite con eso
- Este lo pueden poner aquí en el refi- Lore propone y después de que Miranda abrace y bese a Eli comemos, debo decir que la comida está muy buena ¿en dónde la habrán comprado?
Jugamos un poco más con Eli, debo decir que Lore es muy amable con Eli y le sigue el juego, además de molestar a Miranda sin ser pesada y ella misma se ofrece a llevarme a mi casa, aunque le expliqué que me queda a unas cuadras no aceptó un no por respuesta.
- ¿Sabes Isa? – me dice estacionando el carro, seguro va a marcar territorio y eso me exaspera, pero tomo aire y me le quedo viendo – me caes muy bien- eso me saca de los esperado- creo que Eliana tiene unos angelotes que la cuidan y la protegen mucho llamados Miranda e Isabella- eso me hace sonrojarme
- Yo quiero mucho a Eliana- ella sonríe
- Miranda no sabe, no creo que alguna vez Lidia le diga y por mi no sabrá- se ríe, ¿Quién es Lidia? – pero- se vuelve a reír- ¿Cómo no grabaste el golpe que le diste? – se ataca de la risa- creo que en su vida le habían pegado, cuando llegué y la vi- sigue riendo- tenía la mejilla super roja, creo que mi yo del pasado, presente y futuro están feliz de que lo hayas hecho y te envidiamos- sigue riendo mientras yo me sonrojo
- Ella se pasó- giro mi cara de la vergüenza
- Claro que se pasó- me dice indignada, pero se vuelve a reír- ese día íbamos a salir las tres- me cuenta, cuando iba para el lugar me dijo que mejor fuera a su casa, claro que a Miranda le dije otra cosa- me advierte- y llegando a su casa la vi con una bolsa fría en la mejilla- se vuelve a reír- después me contó y cuando hablé hoy con Miranda até cabos, solo tu podrías haberlo hecho- el rubor en mis mejillas crece
- La verdad luego me arrepentí- le comento y se me queda viendo extrañada- debí darle varias más- se me sale la risita y a ella la carcajada
- Ya lo creo, pero ella no olvida el “lárgate antes de que te deje sin cabello y sin dientes” – jejeje, cierto, también le dije eso- eso y la cachetada la tiene bien incrustada en el ser, más que lo que Miranda le pudo decir o como se lo dijo- suspira negando con la cabeza- pero no te preocupes, sabe que no se puede meter con Eli porque salen sus dos guardianes y uno no se mide, aunque también se dio cuenta que Miranda puede ser de temer- me quedo pensando, ciertamente al escucharla hasta a mí me dio miedo
- Eso espero o no me hago responsable- me cruzo en brazos y sonríe
- No lo hará, solo quiero darte las gracias por ello- se me queda viendo con una sonrisa sincera
- No hay de que dar las gracias, a mi Eli nadie la toca- le hago ver, solo por si alguna vez se le vota la cuiria
- ¿Y a Miranda nadie la toca? – me pregunta juguetona, ¿acaso lo dirá por que ella es su novia?
- Miranda sabe que permite y que no, Eli es una niña- su sonrisa se agranda y saca una mirada juguetona que me da un poco de miedo
- Ciertamente, bueno, fue un gusto conocerte, espero me agregues por si se necesita algo- me entrega su tarjeta, agrego el número y le marco
- Lo mismo digo, un gusto Lore- nos despedimos y salgo de su carro
Al entrar en casa veo que arranca, que tipa más rara, creo que las amistades de Miranda también van a ser unas personalidades, supongo que es un mal de hermanas.