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Nocturno por elenaa

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Notas del fanfic:

Pequeño Oneshot sasunaru que participa en el #RetoTerrorifico del grupo "Shhh... SasuNaru NaruSasu".

Para celebrar Halloween y Día de Muertos.

El sol que brillaba imponente en el firmamento como siempre, simplemente empezó a perder luminosidad. Sin embargo, este hecho paso desapercibido para los alegres, bellos e ingenuos elfos.

Quienes desde su creación habían gozado de la gracia del Dios Lux, quien los dotaba de todo aquello que necesitaran.

No obstante, el sol radiante, poco a poco comenzó a cambiar, perdiendo lentamente luminosidad, hasta que por momentos se teñía de un blancuzco gris, que acompañaba el firmamento bañado de un extraño negro.

Este inusual evento, llamo un poco su atención, aunque no lo suficiente para que se preocuparan de ello.

Hasta que descubrieron a la orilla de uno de sus lagos sagrado un Unicornio muerto; los Unicornios eran como sus hermanos, vieron la luz del sol casi al mismo tiempo, y el dañar uno era peor que un sacrilegio.

 

*****

 

Con la vista fija en el sol que había perdido su característico color, Naruto el elfo más intrépido de todos no podía dejar de mirar la ahora casi blanca bola emitir apenas un poco de luz que iluminaba los cielos.

No hace mucho tiempo atrás todas las cosas en su mundo empezaron a cambiar iniciando justamente con el cambio del sol y aunque los elfos más longevos no le prestaron atención a ello él sí que lo hizo, porque le era casi imposible no sentirse atraído por aquella a veces azulada luz.

Y aunque se le había prohibido salir en los momentos en los que la oscuridad casi reinaba, desde que se empezaron a encontrar unicornios sin vida. Eso no le impidió desobedecer las reglas.

Confiaba en que el podía dar con la causa de la muerte de los unicornios.

Así que durante un tiempo vago solo en la oscuridad recorriendo los principales lagos sagrados. Sin embargo, no tuvo éxito alguno. Los unicornios seguían apareciendo sin vida y el tiempo en que el sol cambiaba y la oscuridad teñía el firmamento se seguía haciendo cada vez más largo.

 

*****

 

—Debemos hacer algo, no podemos seguir quedándonos encerrados sin hacer nada—soltó, en una reunión clandestina que organizo para convencer a sus amigos, de apoyarlo a dar con la causa de la muerte de los Unicornios.

—Pero… ¿qué podemos hacer nosotros? Los mayores ya se están haciendo cargo—comento Sakura, mirando a todos los presentes.

—Si así fuera, no seguirían apareciendo unicornios muertos. Ahora inclusive están apareciendo cuerpos en el bosque—explico preocupado.

—Naruto tiene un punto Sakura—dijo Shikamaru, analizando todo lo dicho.

—¡Exacto! —exclamo.

—Aunque, Sakura también tiene algo de razón. No podemos meternos en este asunto, así como si nada. Si los mayores han decidido mantenernos al margen debe ser por algo—menciono Shikamaru.

—¿Entonces debemos quedarnos sin hacer nada? —cuestiono Kiba, quien al igual que Naruto creía que tendrían que tomar acción.

—Por el momento sí. Antes de inmiscuirnos en esto debemos tener un plan. Porque no se ustedes, pero yo he visto algunos de los cuerpos que se han encontrado y la forma en que han muerto parece antinatural.

—¿Como que antinatural? —pregunto asustada Hinata.

—Sus cuerpos fueron drenados. No había ni una gota de sangre en ellos—respondió Shikamaru.

—Eso no puede ser posible… ¿Qué animal sería capaz de poder hacer eso? —dijo Ino incrédula.

—Un monstruo—soltó Shino.

 

*****

 

Un tiempo después de haber intentado razonar con sus amigos un nuevo suceso sacudió su ya no tan pacifica vida, cuando la tierra inesperadamente de la nada comenzó a sacudirse y retumbar; sacando de sus profundidades una monumental construcción de una forma que nunca antes se había visto.

La imponente cosa parecida a muchas pequeñas montañas superpuestas entre si, trajo consigo una lúgubre sensación, que ni los más longevos elfos pudieron ignorar.

Empezando por llamar noche al tiempo cuando el sol se desteñía de color y día cuando lucia radiante. Lo que los llevo a ser aún más estrictos con su prohibición de salir de noche; hasta que no se investigara la extraña construcción, que nada tenía que ver con sus cómodas casas de madera.

Su segundo actuar fue hacer una expedición; expedición en la que no se le permitió participar. conformada por algunos de los elfos más experimentados, para descifrar el misterio tras la ominosa construcción. No obstante, no contaron con que los elfos enviados no volverían.

Tres expediciones más con el mismo alarmante resultado tuvieron que pasar, hasta que por fin se le permitiera participar.

Así que con mucha determinación y en compañía de algunos de sus amigos, emprendió camino hacia su objetivo.

Su misión era de mero reconocimiento, pero planeaba convertirla en infiltración y encontrar a los demás elfos perdidos.

En realidad, no tenía la certeza de en qué punto los otros elfos habían desaparecido, ni si lograron llegar a la extraña construcción o si se encontraban aún con vida, pero a medida en que más se acercaba a su objetivo, más creía que sus compañeros desaparecidos, se encontraban en alguna parte de aquel extraño lugar.

 

*****

 

Una vez que llego a su objetivo; acompañado aun por la luz del sol, que estaba próxima a desaparecer.

Decidió junto con sus amigos dividirse en grupos de 2; él iría con Kiba, Shikamaru con Chōji y Kotetsu con Izumo.

Aprovecho que estaba con Kiba que era casi igual de intrépido que él y lo convenció de infiltrarse al misterioso lugar que era de los más curioso; puesto que tenía una amplia puerta como entrada, que le daba una inusual apariencia de ser un hogar, para lo que fuera que se encontrara dentro.

Entro exitosamente junto con Kiba y contrario a lo que pensó el lugar no se encontraba en completa oscuridad, estaba tenuemente iluminado y repleto de curiosas cosas. Que inclusive a Kiba lo intrigaron, tanto que cuando se dio cuenta, ya se habían separado y se encontraba solo por su cuenta dentro de aquel enorme lugar.

Camino sin rumbo fijo un poco perdido entre las muchas escaleras, pasillos y cuartos inspeccionando todo lo que veía alerta por si se encontraba con Kiba o alguno de los elfos desaparecidos, pero por más que avanzo no logro encontrarse con nadie. Hasta que una sutil melodía lo puso en alerta.

Se encontraba en el quinto piso y a lo lejos en una de las habitaciones más alejadas, una triste melodía se filtraba e inundaba suavemente el desolado corredor.

Sigilosamente se dirigió rumbo en esa dirección, listo para lanzar un hechizo de ser necesario, sin embargo, lo que encontró en aquella habitación no lo espero.

No espero encontrarse con alguien de su aparente edad tocando un raro instrumento musical.

El joven de apuesto semblante y pálida tez tenía un atractivo diferente a la grácil belleza de los elfos.

Y aunque su complexión y orejas eran similares, del cuerpo de este emanaba una tenebrosa aura oscura que combinaba muy bien con la música que tocaba.

Se quedó quieto aun inspeccionando todo a su alrededor cuando un desgarrador grito lo alerto, pero, aunque intento moverse no lo logro, su cuerpo se quedó fijo en el mismo sitio, como si sus pies se encontraran pegados al suelo; y cuando un segundo grito proveniente de otra dirección se hizo escuchar se dio cuenta que el joven había dejado de tocar y lo miraba fijamente.

Intento volverse a mover, pero como el resultado fue el mismo no pudo evitar soltar un grito de frustración.

 

—Es inútil no podrás moverte y tus compañeros no lograran escapar— le dijo el misterioso joven.

—¡¿Tu, tu eres el que ha estado asesinando a los Unicornios?!

—Si.

—¿Por qué, acaso no sabes lo sagrados que son los Unicornios?

—Lo sé, fue justamente por eso que me alimente de ellos. Su sangre es deliciosa, aunque ahora encuentro más placentera la sangre de elfo.

—Has asesinado a todos los que han venido… ¿Qué tipo de monstruosidad eres?

—Soy un vampiro. Y no soy tan despiadado como te imaginas, le he dado nuevas vidas a algunos de tus compañeros elfos. Acaso no escuchas como se están divirtiendo.

—Te hare pedazos.

—¿Cómo? La única razón por la que lograste llegar hasta aquí fue porque te lo permití. De otro modo ni siquiera hubieras podido entrar a mi castillo.

—Aaargh— soltó con enojo y frustración al ver como el vampiro se acercaba hacia él.

—¡Aléjate de mí monstruo!

—Preferirá que me llamaras Sasuke, tu no lo sabes, pero somos viejos conocidos.

—¡Nunca en mi vida te he visto!

—Pero yo a ti si, nos hemos encontrado varias noches en el lago y en el bosque. Prácticamente tu eres el culpable de que me interesara en la sangre de los elfos. Lucias tan apetitoso rondando indefenso en la oscuridad que no pude evitar la tentación de probarte.

—Yo no…

—Claro que si atrás de tu nuca, me estuve alimentando de ti casi todos los días, que saliste a deambular, hasta que dejaste de hacerlo. Así que me quede aquí esperando paciente a que vinieras a mí.

—No…. ¿Cómo es que no me di cuenta? Y….. por qué aún—dijo negando efusivamente con la cabeza, sin atreverse a formular del todo su siguiente pregunta.

—¿Por qué aun estas con vida?... eso es porque no te quiero matar. ¿Por qué no te diste cuanta?... porque no quería que lo supieras, es así de sencillo.

—¿¡Qué quieres de mí?!

—Aún no lo sé. No me decido, si quiero alimentarme de ti, hacerte mío o ambas.

—¿Qué prefieres?

—Mátame.

—Veo que no sabes elegir sabiamente, así que me temo que seré un poco caprichoso.

—¡Mátame la muerte es mil veces mejor!

—¿Seguro? —pregunto el vampiro a la par que tomaba su rostro y lo obligaba a ver sus ojos que de un intenso negro cambiaron a un rojo sangre.

En cuanto su mirada entro en contacto con los rojos ojos su mente se nublo por completo, olvidando toda la ira que sentía. Dejando las extrañas ganas de hacer todo lo que el joven frente a él quería.

Así que no se resistió cuando el vampiro lo comenzó a besar y abrazar muy apasionadamente. Beso sus labios y cuello vigorosamente antes de hacer un camino de besos por todo su brazo hasta llegar a su mano; donde repartió aún más besos antes de clavar sus dientes en su muñeca y probar un poco de su sangre. Para después volver a tomarlo del rostro y preguntar:

—¿Seguro que quieres morir?

—No, quiero quedarme aquí contigo— respondió y el vampiro sonrió seductoramente antes de volverlo a besar con más pasión.

Y cuando el beso termino, Sasuke se alejó hizo un leve movimiento con su mano izquierda y dejo que la habitación fuera iluminada por el blancuzco sol. Antes de extenderle la mano e invitarlo a bailar.

Sin poderse resistir tomo la mano del vampiro y se dejó levitar por este, mientras bailaban flotando por toda la habitación. A la par que pensaba que se quedaría atrapado con Sasuke por toda la eternidad.

 

Fin

Notas finales:

Los elfos llevan muchos años habitando su mundo, pero aún están en una etapa temprana de su evolución como raza mágica.

Porque es la segunda vez que Lux los crea, ya los había creado una vez, pero los termino destruyendo. Hasta que se arrepintió y los volvió a crear.

Y Sasuke es uno de esos primeros elfos que escapo de la destrucción, entregando su alma a otro dios, quien lo mantuvo dormido, hasta que este despertó.


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