Feliz San Valentín dobe
Miró el calendario.
- Catorce de febrero.—para él un día como cualquier otro, nunca lo había celebrado, pero eso no lo entristecía—Ya me voy.—le dijo a su madre luego de besarle la mejilla.
Aunque nunca hubiera tenido novia, solían llegarle cartas de amor, si bien él las rechazaba.
- Vaya, tienes muchas, a mi también me llegaron bastantes. Por cierto, espero que te gusten los bombones que te regalé este año ^^
Si, eran bastantes, pero sin contar los obsequios que había recibido de Itachi y de Sai…los demás eran de sus amigas. Sonrió aliviado. Ese año no tendría que lastimar a nadie con un rechazo.
- ¿Y a ti Sakura-san? ¿Este año tuviste suerte? ^^
- ¿Pero que dem…? ¡Sai! ¡Recuerda que soy una chica, idiota!
Prefirió irse del sitio, antes de que su amigo abriera la boca nuevamente y se viera envuelto en la ira del "mounstruo rosa de Konoha" o como él solía llamarla: Su mejor amiga.
Fue así que unos pasos más adelante vio como una chica le daba a Sasuke el regalo personalmente. Segundos después ella salía corriendo con su cara bañada en lágrimas.
- Obviamente que iba a ser rechazada.—rodó sus ojos claros en cuanto el otro abrió su cubículo y cayeron miles de regalos.
No entendía como era posible que aquel teme fuera el chico más popular del colegio. Tan misterioso y serio, y por sobretodo sumamente frío. ¿Qué de atractivo podían ver las chicas en alguien tan capullo como Uchiha Sasuke? Luego recordó al mayor y a su gran popularidad en la universidad.
- Será de familia, supongo.
…
La mañana pasó rápido. Ya estaba en el horario del almuerzo comiendo junto a sus amigos. Todos estaban allí, salvo Sasuke, quien momentos atrás se había alejado para rechazar a otra chica más. La sexta hasta el momento.
“Y aun queda medio día más dattebayo.”
…
- Oye, no te hagas el sordo y termina de barrer usuratonkachi.
- ¿Qué? ¡Ah, yo, gomen!
Se había quedado absorto, pensando con detenimiento. Lo último que recordaba era haberse puesto a cumplir el turno de limpieza junto a Sasuke.
- ¿Uh, un mensaje?
Tomó su celular y miró el sms. Era de Itachi, buscaba a Sasuke.
- Es que apagué mi celular, me estaba fastidiando con mensajes que decían chorradas como que me estaría esperando desnudo sobre mi cama ¬¬
- Eh, bueno…jejeje, puedes quedarte en mi casa hasta que tus padres vuelvan del trabajo ttebayo.
- Lo sé, eso es exactamente lo que planeaba hacer.
- Oye, que es mi casa dattebayo.
- Y tú mi mejor amigo, así que…a callar dobe.
Suspiró para tranquilizarse. Si, su mejor amigo, eso era Uchiha Sasuke, desde que él tenía memoria.
…
- ¡Ya regresé ttebayo!
- Parece que no hay nadi…
Naruto sonrió divertido, mientras que el Uchiha se sonrojaba maldiciendo a su estúpido estomago.
- ¿Tienes hambre? Bueno, entonces…
- Nada de ramen.
- Estás en mi casa, comerás lo que yo quiera comer.
Luego de intercambiar miradas ceñudas, el pelinegro bufó para luego comenzar a subir la escalera.
El rubio sonrió con soberbia dirigiendo sus pasos hacía la cocina, sin preocuparse de la irrupción que seguramente el ojinegro ya estaría haciendo en su cuarto. Este era prácticamente su hermano; siendo su padre muy amigo de la madre del Uchiha y tan sólo siendo este casi 3 meses mayor, se conocían de toda la vida, se habían criado juntos.
(- ¡Y nada de miso-ramen, sabes que me cae mal!)
- ¡Como la reina mande será!
Exactamente como hermanos. Se peleaban, discutían y mandaban como si de familia de sangre se tratasen.
- ¿Sasuke?
Dejó la bandeja con los bols humeantes sobre el escritorio sin dejar de mirar hacía su cama, donde el Uchiha se encontraba sentado en completa desnudez.
- ¿Qué? Mi hermano tiene la culpa. Él me dio la idea.
- ¿Pero tú ya tenías algo planeado para este día, verdad?
- Tal vez.—alzando una de sus cejas—No te creas que eres tan importante para mí usuratonkachi.
- Pero aun así soy lo suficiente como para que me des este tipo de regalos.—acercándose al lecho—Sabrás que estoy más que complacido. No todos pueden fanfarronear de tener un espécimen masculino de tu clase sobre su cama. Ya quisieran tus admiradoras tenerte así como yo te tengo.—rió imperioso mientras le acarició el rostro con ternura—Mi Sasuke.
Mejores amigos. Hermanos del alma. Amantes carnales. Fuera cual fuera la denominación que usarán los demás para con su relación no les importaba. Aquel sentimiento era mutuo y sólo eso necesitaban saber.
- Feliz San Valentín dobe.
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