El poseedor del Jagan se aproxima al campo de lucha, observa detenidamente la posición de cada uno de los antiguos compañeros de su mejor amigo. Y la esfera de energía flotante en la que se encuentra Akabane que parece encontrarse inconciente. Cinco rivales frente al Raitei y hasta el momento lejos de levantar polvo, piedras, de destrozar algunas partes del inmueble y de las gotas de sudor en cada uno de los ex volts y el cansancio que se rebela en ellos, fuera de allí El emperador Relámpago, el dios de la fortaleza ilimitada se encuentra como si se encontrara en un día de campo.
El castaño de aproxima a al maestro de las bestias y lo toma por el hombro.
-Anda Chico mono. Haznos un favor a Ginji y a mi, ve a cuidarlo y déjame a mi que enfrente a este tipo.
- Serpiente tarada! Cuando dejaras de decir tonterías! En primera no eres suficiente rival para El.Segundo si a ti te pasa algo el sacrificio de Ginji habrá sido en vano. No tienes el suficiente cerebro para entender algo así?
El rostro de Mido se muestra mas serio que de costumbre y lanza una mirada a Shido con una mezcla de preocupación, ira y temor.
- No es la primera vez que” su dios” y yo nos enfrentamos. Y no me puedo quedar esperando ver como termina matando a Ginji y yo no haga nada. Así que te lo repito ve y cuida a Ginji.
-Eres un idiota, no tienes ni idea a quien te vas a enfrentar.
Y sin decir más el maestro de las bestias le deja el lugar al compañero de su antiguo líder. En parte por que sabe que El no es de gran utilidad y en segunda, realmente esta preocupado por el rubio. El sabe que a pesar de ser un ser que disfruta de la soledad en compañía de sus animales, y melancólico esta preocupado genuinamente por Ginji. Y además desea con todo su corazón salir y ver la sonrisa de Madoka. Que es lo único que le hace tener sentido en su vida. Así que le dejara su lugar a Ban Mido.
- Emperador Relámpago o Ginji por que nombre me responderás? Fue la pregunta que el poseedor del Jagan le lanzo con esa mirada helada e intimidante propia de Ban Mido y que era parte de su éxito en batalla.
-Ban Mido. No puedo creer que tú seas la persona mas importante para Ginji Amano. Menciono mientras esbozaba una mueca que semejaba una sonrisa y se pasaba la lengua por la parte inferior de sus labios, en forma sarcástica haciéndole entender que lo deseaba.
Este gesto despertó aun mas la ira de Mido. Sabia que el Raitei conocía los sentimientos de su mejor amigo y le produjo nauseas el que los tomara tan a la ligera.
- En verdad no puedo entender como alguien tan patético como Ginji puede tener a alguien así de compañero, En verdad Ginji es demasiado blando, inocente y sentimental. Siempre ha sido en un estorbo en mi vida.
- Es mas creo que Ginji debería morir, no crees Mido.?
Al momento que expresaba este deseo con su mano derecha hizo un ademán de que jalaba algo, y termino cerrando el puño. Ocasionando que el rubio sintiera un dolor tan exquisito obligándolo a gritar.
El ojiazul al escuchar el grito de su compañero, le distrajo pero no lo suficiente para desviar su mirada por más de unos segundos de aquel ser que en apariencia era como su fiel compañero, pero carecía por completo de corazón.
El castaño se encontraba en verdad furioso y estrello el puño izquierdo contra la pared más cercana.
- Hilandero tu y tus amigos, retírense, esta lucha será entre nosotros dos.
- Estas loco Ban!, Solo no vas a poder…….Si nosotros no hemos logrado hacerle ninguna mella, tu solo menos. Fue la suplica de Kazuki.
- Es verdad Mido, no es momento para hacerse el interesante, haz caso a Kazuki. Comento Emishi.
- Ya dije que esta lucha solo será entre ambos. Así que gracias por su ayuda.
-En verdad Ban creo que estas cometiendo un error, pero respetaremos tu decisión, si decides cambiar de opinión, estaremos donde Ginji. Fue el comentario de Kazuki mientras abandonaba el área de lucha.
-Ahora si Emperador relámpago solo tu y yo….. Pero solo te pido que liberes a Ginji.
- Mejor te lo pondré en esta forma si logras ganarme salvaras tu vida y muy probablemente dependiendo de tu habilidad salves la de tu amigo .En cambio si yo gano que es lo mas seguro ten por seguro que tu morirás, y bueno tu amigo también.
- Te sientes muy seguro, pero recuerda que una ocasión ya perdiste…Y segundo al menos yo tengo un gran motivo a diferencia tuyo.
Y sin decir mas el castaño se lanzo en fracción de segundos sobre el Emperador relámpago antes que este pudiera reaccionar golpeándolo, haciéndole rodar y terminar estrellándolo contra la pared contraria. Mientras el poseedor del jagan recuperaba su posición anterior y se acomodaba despreocupadamente las gafas.
- Por que abandonaron a Ban? Pregunto el rubio con un tono que reflejaba ansiedad en su voz.
- Se que todo es culpa mía, Y se han arriesgado su vida. Necesito finalizar esto. Nadie tiene por que salir lastimado por mi causa.
- Ginji, cualquiera puede cometer un error, ademas estamos seguros que deseabas lo mejor para cada uno, tu eres incapaz de herir a alguien. Le respondió Shido.
- Shido tengo algo que pedirte, eres el único al que se lo puedo pedir.
-Que es Ginji?
- Creo que la única forma de detener esto es….. Si tú acabas con mi vida. …Tú sabes que yo no soportaría que le llegara a pasar algo a Ban….
-Perdón Ginji, pero no lo haré, no lo podría hacer, ni yo ni ninguno de nosotros.
- Entonces ayúdame, llévame con El, necesito hablar, tengo que detener esto por favor.
El Raitei se encontraba enfurecido y se levanto dispuesto a finalizar con su adversario.
Empezó a cubrirse de energía para formar un escudo y empezó a formar otra esfera de energía. Como en la que aun conservaba a Akabane.
-Que pretende hacer? Me pensara encerrar como lo hizo con el pervertido del Dr. Jackal? Tendré que moverme mas rápido.
Pero para sorpresa de Ban y de cada uno de los ex volts, en la esfera atrapo a su compañero.
- Demo…. Me esta acorralando, y el lo sabe, no puedo arriesgar a Ginji.
La tierra empieza a temblar, y empieza a caer el techo en grandes bloques, todo empieza a ser destruido por los bloques sobre el equipo computarizado de Makubex , se empezaron a romper las tuberías, levantando aun mas el suelo, haciendo que el Raitei, pierda el equilibrio y se desconcentre del campo de batalla.
Después de unos minutos todo a desaparecido esta sumergido en una espesa oscuridad no hay ya fuentes para satisfacer su energía. Aun Ginji desapareció en el caos que se presento.
Solo se alcanza a escuchar el crujir de la tierra y la temperatura es muy baja solo se siente un terrible frió, que hace que hasta respirar duela.
Siente un golpe seco que le hace que vaya perdiendo la conciencia, pero no hay fuentes para poder regenerar…. Y sabe que es el fin.
- Solo un minuto, espero que hayas tenido un buen sueño….Y que sigas soñando. Menciona el castaño mientras sostiene entre sus brazos a su socio y compañero.
- Se puede revertir el proceso? Pregunta ansioso a Makubex.
- Si hay que meterlos a cada uno a sus respectivas capsulas.
Ban acomoda a su mejor amigo que se encuentra inconsciente.
- Esta helado, estará bien verdad? Le pregunta a Juubei.
- Si no te preocupes, se recuperara lo bueno es que alcanzaste a atraparlo cuando por efecto del jagan el emperador perdió el estado de alerta.
El proceso tardo otros diez minutos. Pero fue un éxito.
Una vez finalizado el proceso, el castaño tomo a su compañero aun sin esperar que volviera en si y decidió llevárselo.
Parte dos Ban X Ginji
El rubio abrió los ojos y se pudo percatar que había oscurecido. Se dio cuenta que ya no reencontraba en la fortaleza ilimitada sino en la habitación que Paul les había prestado hacia poco. Que había pasado? Lo ignoraba, y sintió una opresión solo de pensar que sus temores se hubieran hecho realidad.
De pronto iluminada por la luz de la luna pudo apreciar la silueta de su compañero haciendo que sus temores se desvanecieran. Fue cuando se percato que había estado probablemente dormido y estaba en la cama, se intento incorporar aunque aun se sentía terriblemente adolorido.
- Ban…..Estas bien…No sabes cuanto me alegro…
Aquella silueta que le hacia tan feliz se aproximo a El y termino sentándose a un lado de El. Los ojos del joven empezaban a humedecerse se sentía tan feliz. Deseaba tanto lanzarse hacia El. Y mostrarle cuanto le importaba.
- Ban necesito decirte algo. Le expreso con un tono que denotaba lo mal que se sentía por lo que había pasado.
El castaño lanzo una bocanada de humo. Y permaneció mudo por unos segundos que al rubio le pareció una eternidad.
- Ginji también es necesario que yo te comente algo. El tono de voz le pareció a Ginji que era importante lo que le tenia que decir y le ocasiono temor, y si ya no deseaba ser su compañero? Si estaba tan molesto que ya no deseaba ser su amigo?.
- Ginji., hoy ha sido uno de los peores días de mi vida…
- En verdad lo siento Ban
-Deja que termine o no podré hacerlo. Le respondió el castaño mientras miraba al rostro de su amigo bañado por la luz de la luna.
-Como te decia hoy fue uno de los peores días de mi vida, yo soy alguien que da la impresión de ser frió y fuerte, como si nada pudiera afectarme, pero no es así….Yo en mi vida he perdido a personas muy importantes para mi…Y el día de hoy creí que te perdía a ti.
-Y tuve temor. Sin embargo tenia que pelear, tenía que rescatarte y protegerte, y a la vez no me quería alejar de ti. El ver como te lastimaba, me dolía, como no tienes idea. Ginji necesito decirte…..
- Que te amo, es probable que después ya no quieras ser mi amigo. Pero necesito decírtelo, siempre me he preocupado por ti, por ti puedo ser mas fuerte, solo por mantener tu sonrisa. Le has dado sentido a mi miserable vida. Y no perderte……Aunque si esta confesión te molesta y no deseas seguir a mi lado lo entenderé.
De los ojos color miel rodaban lágrimas de felicidad. El deseaba expresar su amor a su mejor amigo y nunca espero escuchar una confesión como esta.
-Ban….
El rubio se intento incorporar una vez mas, tenia tanta necesidad de abrazar a su compañero.Deseaba no solo eso….en realidad deseaba mas que eso.
El castaño le detuvo.- Te duele aun? Mientras lo llevo una vez más a recostarlo sobre la cama. Después con mucho cuidado paso su mano sobre el tórax de su amigo.
- Aun te duele?
- Si, pero es como el dolor que queda, nada mas.
- Puedo….Refiriéndose a recorrer con su mano el área que sabia se encontraba el dolor.
- Si, claro que puedes.
El castaño le sonrió y se aproximo a El dándole un tierno beso. Y después le retiro la remera para poder examinarle mejor. Con esto el rubio sintió que su corazón se aceleraba al igual que su respiración.
El poseedor del jagan prendió la luz de la lámpara que estaba cerca. Y empezó a pasar su mano sobre los pectorales y acariciarlos deteniéndose sobre los pezones.
La mirada del castaño cada vez que le preguntaba a su compañero era dulce y a la vez llena de deseo. Esto cada vez despertaba más en el rubio el deseo no solo de que no parara de acariciarlo, sino el deseo de que lo besara, de que siguiera despertando en El aun más sensaciones. La mano de Mido sobre El era mas que mágica. Nunca había imaginado ni en sus más profundos sueños de su corazón llegar a experimentar algo como esto.
-Te gusta Ginji, puedo continuar?
- Ahh si…..Por favor.
El castaño observo los labios entre abiertos con un tono aun por encima del rosado, las mejillas ruborizadas y esos bellos ojos color miel humedecidos que capturaban la luz y les hacían brillar como si se hubieran posado en ellos las estrellas. El cabello rubio alborotado y aquel hermoso cuerpo tan bien trabajado Que hacia que su deseo no solo menguara, sino que se elevara aun mas.
El castaño se retiro la camisa y la camiseta y tomo la mano derecha de su amado compañero y la puso sobre su propios tórax deseaba también ser acariciado, y experimentar el calor de las manos de Ginji sobre El.
La pasión cada vez era más fuerte. De las caricias pasaron a los besos apasionados y a los besos sobre el tórax de uno y otros. Y la ropa paso a ser un estorbo. Y terminaron sacándosela y lanzándola lejos, como si tuvieran el temor que las prendas cobrarían vida y regresarían a sus respectivos dueños.
Llego un momento en el que se olvidaron por completo de que pudiera existir dolor por la experiencia vivida. Ahora solo importaba descubrir que caricia era más excitante en el que la recibía o en el que la ofrecía. El cuerpo de ambos estaba empapado de sudor y las luz de la lámpara los hacia brillar.
- Ban hazme tuyo, por favor. Le susurro el rubio al oído mientras lo abrazaba y recargaba su cara en los fuertes hombros de su deseado compañero.
El castaño aparto un momento de si a su mejor amigo y le miro directamente a los ojos.- Estas seguro de esto Ginji?
- Si estoy seguro.
- Después de esto, muchas cosas cambiaran, tienes que estar conciente, aun así quieres continuar?
- Si. Lo se, pero no quiero parar, te necesito y ademas te deseo….te deseo mucho.
- Esta bien aunque lo haré con cuidado en un principio, aun así te dolerá. Aun así quieres continuar?
- Si
Para ambos era su primera vez, primera vez en la que el amor era el detonador de su pasión, y primera vez en que su relación era con su mismo sexo. Sin embargo Ban tomo el liderazgo del momento. Y fue llevando a su rubio con toda la amabilidad y delicadeza que requería para que fuera inolvidable. Lo sedujo lo suficiente para que dócilmente se dejara llevar hasta el momento en que lo poseería.
Y cuando esto sucedió y estaba conciente de que el dolor que sentía su chico era terrible, aun así tuvo la paciencia para hacerle sentir su amor y que se recuperara por unos minutos y por fin poder utilizar toda la energía que había contenido.
Y sus esfuerzos valieron la pena, logro hacer que ambos volaran hasta la luna , estaban tan conectados que sus corazones estaban a punto de estallar , el aire era insuficiente para satisfacer sus pulmones, sus cuerpos, ardían y a la vez chorreaban gruesas gotas de sudor.
Y al alcanzar el clímax la habitación se estremeció con el grito de ambos.
- Te amo Ginji, le comento al oído su compañero mientras continuaba abrazándolo, te doy mi palabra que siempre te protegeré no dejare que nada te pase.
Después le aparto unos momentos de su cuerpo para ver una vez mas la mirada llena de emoción de su pareja.
- Te prometo Ginji siempre estaré para ti, siempre te cuidare porque si algo te llega a pasar, yo moriré contigo.
- Ban…
La mañana llego el sol hirió los ojos del rubio. Esto era un sueño? O era verdad? Su rostro estaba acomodado sobre los fuertes pectorales de su compañero que le abrazaba mientras había dormido. La realidad era mucho mejor que la escena que había soñado. Allí estaba Ban durmiendo a su lado. Lo podía sentir, ver, aspirar su aroma era verdad. Algunas veces en la vida de alguien los sueños tienden a hacerse realidad, pero no solo eso llega a ser mucho mejor de lo esperado.
Fin.