Y el piano emitía la tristeza y soledad que sus dedos impartían en cada tecla que tocaban, una melodía tan melancólica que oprimía el pecho de quien la escuchaba.
-Moyashi- salió apenas un susurro de sus labios, apretados contra sus dientes al punto de lastimarse- detente…- pidió con la voz temblorosa, mientras el pianista seguía interpretando aquella obra llena de dolor, ahora acompañado de una voz suave, varonil, gentil y levemente temblorosa debido a las lágrimas que inútilmente trataba de retener.
Soshite bouya wa nemurini tsuite
Ikizuku haino nakano hono o hitotsu, futatsuto
Ukabu fukurami itoshii yokogao
Daichi nitaruru ikusenno yume, yume
Ginno hitomi no yuragu yoruni umareochita kaga yaku omae
Ikuo kuno toshitsukiga
Ikutsu inoriwo tsuchihe kaeshitemo
Watashi wa inoritsuzuketeru
Mou kakonnokotoni ai wo
Tsunaidateni kiss wo
Y la tonada cesó dejando solo silencio y dolor en el aire, el cual fue roto por leves sollozos, que anunciaban el inicio de su llanto.
-No llores moyashi…
-Vete entonces, si mi llanto te molesta, tan solo vete y déjame solo.
Si, dejarlo solo parecía la mejor opción, irse lejos, abandonarlo ahí con su propio dolor como única compañía, huir… avanzar… sin mirara atrás, que fácil, que rápido, pero no, el no lo hizo, tan solo se acercó a el y posó su mano sobre su hombro ¿en señal de aprecio? ¿De compasión? Quizás, no, más bien era de entendimiento, si, eso era, porque el podía entender perfectamente el sentimiento que el albino frente a el sentía.
-No me des órdenes… moyashi.
-No era una orden… bakanda… era una suplica- contestó con voz quebrada por el llanto que comenzaba a intensificarse.
-Basta… - lo abrazó pegándolo completamente a su cuerpo- nada va a cambiar solo con llorar…- susurró en su oído- es imposible cambiar el pasado… pero por lo menos puedes tratar de arreglar el futuro.
-No sabía que pudieras hablar tanto- una tímida sonrisa adornó sus labios mientras las lagrimas de negaban a cesar.
-Cállate, y mejor vamos con los demás, aún tenemos que salir de aquí- le dio la espalada comenzando a alejarse.
-Si, vamos…
-Por cierto… si le dices a alguien lo que hice… te mataré.
-Me lo imaginaba, y no te preocupes, no se lo dirá a nadie, además… ¿Quién me creería?- y con una sonrisa se fue dejando solo al samurai, quien en su soledad, esbozó una imperceptible sonrisa.
-Baka… Allen.
Aquí la traducción ^-^
Y entonces el chico calló dormido
La llama dentro de las cenizas respirables. Uno, después dos
El bulto flotante, el querido perfil
Miles de sueños, sueños que fluyen dentro de la tierra
En la noche cuando los ojos plateados se balancearon, el brillante tú que había nacido
Millones de años
No importa cuantos millones de años, regresan los rezos a la tierra.
Yo continúo rezando
Amor para el final
Un beso para las manos unidas