Era una mañana mas que hermosa, el cielo azul estaba ligeramente nublado, el día era luminoso y calido pero no en exceso, y dos personas caminaban lentamente por un sendero desierto, Itachi y Kisame, el primero pensando en cierto rubio y su misión, la verdad era que mientras mas lo veía menos quería cumplir, de solo pensar que esos ojos perdiesen su luz el alma se le iba a los pies, Naruto se había convertido en algo muy especial para él y lo que menos deseaba era lastimarlo, por desgracia no era correspondido, o eso creía.
Ese día Naruto se levantó y fue lentamente a bañarse, tal vez un baño relajante le ayudaría a olvidar, pero no fue así, en su mente el mayor de los Uchihas se negaba a irse, como desde hacía buen tiempo había soñado con él, lo hacía a diario, pero lo que le extrañaba era que en sus sueños no eran rivales, eran pareja, algunos sueños eran dulces pero otros tenían mucho, ejem... lemon y aun despierto solo pensaba en él, ¿cómo era posible? ¿cuándo se había enamorado tan perdidamente de él, que quería matarlo? porque Itachi Uchiha solo lo buscaba para matarlo ¿o no?, aún así, hasta se había olvidado de Sasuke por él, por un imposible, si Sasuke le había parecido bello en su momento, admitía que el mayor lo era mas, se parecían pero su "nueva obsesión" era mejor en todo, perfecto en todo sentido, y hasta había llegado a pensar que si con dejarse capturar pudiese cumplir sus sueños de tenerlo no estaría tan mal, luego de alejar sus pensamientos y terminar su desayuno fue con su equipo, hoy tenían misión fuera.
Ya en camino Naruto se veía muy emocionado y feliz solo él sabía que en realidad había una gran mancha gris en su corazón, una por la que se culpaba, amar al enemigo, y peor, pensar en morir por verlo, por sentirlo cerca, por poder abrazarlo y besarlo, aunque sin que supiera, eso no haría falta y el destino (o la autora) se lo cumpliría pronto, mas de lo que creía.
Mientras Itachi caminaba sin prestarle atención a nada, de pronto notó a lo lejos algo conocido, la energía inconfundible de su amado kitsune, que se acercaba, tuvo un ataque de pánico al no saber como reaccionar y se quedo inmóvil sintiendo como se acercaba, sin ser capaz de moverse, ante la sorpresa de su compañero que jamás lo había visto así.
Cuando ambos equipos se vieron la tensión se podía sentir en el aire, el rubio quedo pasmado viendo al "objeto" de su adoración, quería salir corriendo a abrazarlo, decirle lo que sentía, pero temía ser rechazado, que le dijera que solo era su presa y nada mas, sus miradas fijas entre sí se negaban a separase, ambos deseaban que eso fuera eterno, verse por siempre, mientras sus otros compañeros peleaban entre sí, finalmente Itachi reaccionó y decidió aprovechar el estado de su koi para llevárselo, cosa que efectivamente no le costó trabajo, Naruto no se la podía creer, estaba en los brazos que tanto soñó.
Llegaron a una casa abandonada que Itachi usaba de refugio personal y que ni Kisame conocía, colocó a su pequeño tesoro en la cama con gran cuidado y se aclaró la garganta, decidido a hacer su confesión, no esperaba nada solo que sentía que si no lo hacía iba a estallar, y lo hizo, las palabras por fin salieron de su boca (aunque parecía que no lo harían jamás), y el temor lo inundo por completo, miró fijo a Naruto que parecía en estado de shock., cuando por fin reaccionó se le lanzó encima y lo llenó de besos, cosa que el orgulloso Akatsuki no se esperaba, al separarse, el rubio exclamó feliz -que bueno, pensé que mi sueño no se cumpliría, que te vería siempre de lejos, que no me corresponderías jamás, porque tú eres tan perfecto y yo, comparado contigo no soy nada -no digas eso mi bello kitsune, eres hermoso, un ángel de luz como yo jamás había visto y te juro que... te amo aunque me cueste decirlo, y te lo demostraré cuantas veces quieras, como quieras -y así con un dulce beso, se selló el pacto y se pudo cumplir un amor muy especial.
(Bueno, cuando los otros notaron su ausencia, se preocuparon, a Naruto y a Itachi les costó trabajo convencer a todos de su amor, pero con la perseverancia de Naruto y el apoyo que le brindó su koi superaron todo obstáculo, con dificultad pero lo hicieron, ah y Sasuke sigue convencido de que su aniki le robó al novio, aunque yo no sé de que se queja, no eran novios y él lo dejó, hasta trató de matarlo).