Capitulo seis: Recuerdo… Recordemos… (2° parte)
Capitulo anterior:
Sonrió amargamente – tenias razón… no hay mejor lugar que allí para ver los atardeceres…
No sintió cuando la puerta fue abierta, solo supo que había otra persona en el cuarto cuando esta le hablo…
- cariño, paso algo?
************************
Draco se dio vuelta secándose sus lágrimas para ver a la persona que estaba recargada en la puerta, mirándolo con un infinito amor y pena por verlo así y no poder hacer nada por él. Draco le sonrió tristemente…
- lo vi…
Flash Back
Su café se resbalo por sus manos, sus ojos casi se salen de sus órbitas y su boca estaba abierta completamente...
- Harry... - susurro inaudible
Draco se paro sin importar lo que dejaba atrás, si había roto alguna tasa o si había votado el mantel de la mesa junto con todas las cosas sobre ella, sin importar dejar a sus amigos sin saber que le pasa, sin importar como le gritaban y lo llamaban, solo tenía algo fijo en mente y era encontrarse con aquella persona…
Draco iba completamente exaltado cruzaba desesperado la calle, un auto freno el preciso momento antes de atropellar aquel rubio, el conductor le grito e insulto, pero el rubio ni le prestó atención, él seguía corriendo hacia la tienda de helado…
Draco iba tan ensimismado en su mundo que no se dio cuenta que había una señora en su camino, sin querer al empujo provocando que su helado se le callera. La señora disgustada por tal acción le grito y zarandeo junto con las amigas de estas. Esos vejestorios le gritaron y zarandearon sin él poder seguir con su camino, al fin y al cabo tuvo que pagarles el helado para ellas y sus amigas y unas veinte más.
Por fin había llegado a la tienda de helado, busco entre la gente pero no lo encontró, miro y miro desesperado buscándolo, pregunto a algunas personas que se encontraban ahí, algunos de los compradores les dijo que sí, que se había ido con una cajita con helado y había salido hacia la derecha donde se encontraba una tienda de ropa. Draco les agradeció y salió corriendo, llego hasta la tienda de ropa y vio un callejón, si no se equivocaba ahí debía a verse adentrado para desaparecer.
Cuando sus amigos por fin lo alcanzaron le preguntaron que había pasado, él solo les miro con tristeza, sin poder hablar claramente y se desapareció para llegar a su mansión…
Fin Flash Back-
lo vi… lo vi y no pude…
No podía verlo así, sufriendo tanto tiempo, por la misma persona, desviviéndose para buscarlo, aceptando que nunca lo volvería a ver, pe aun así con esa ilusión en los ojos de poder volverlo a ver y arreglar las cosas, esos dos eran el uno para el otro…
Draco lloraba como ya le era costumbre en esos cálidos brazos tratando de arrancar su corazón, ya no le importaba la apariencia derrotada que ahora podía demostrar, las apariencias, ser Malfoy no valía nada…
Se despertó en mitad de la noche, la cortina estaba corrida, la luna menguante se podía apreciar en el cielo solitaria en esa oscuridad total, Draco respiraba agitadamente, todo había sido verdad, Harry se había ido, solo algunas horas a tras habían estado juntos y ahora él no estaba…
No pudo dormir en toda la noche, esos ojos verdes lo perseguían torturándolo, haciendo sentir aun mas peor de lo que estaba. Era la hora de desayunar pero no quiso levantarse, no quería moverse, se quedo ahí como un autómata mirando el techo como si fuera a solucionar todos sus problemas, siguió así por un largo rato, sin poder volver a dormir nuevamente, sin ser consciente del todo sintió como la puerta de su dormitorio se abría lentamente, dejado pasar a tres personas, sus tres mejores amigos, Pansy, Theo y Blaise.
- como te sientes – dijo la única chica mientras se sentaba en la cama al lado del rubio
- bien…
- vamos Draco tú no eres así, tienes que ser fuerte – dijo enérgicamente Blaise
- Draco… - dijo Theo
- lo siento… pero… - dijo nervioso, colocando su brazo en sus ojos, tratando así de eliminar esa humedad que empezaba a sentir en sus ojos
- Draco, llora… te hará bien, saca todo ese dolor – dijo calmadamente mientras le acariciaba el pelo
- gracias Theo…- dijo sacándose el brazo de su rostro, mostrando sus ojos bañados en lagrimas – gracias chicos – mirando hacia sus amigos
Ellos solo le sonrieron tristemente y se unieron en un cálido y reconfortante abrazo…
***********
Un rubio chico se encontraba en una solitaria y apartada aula, en donde mejores tiempo fue el refugio de dos personas que “jugaban” a amar, que “creían” amar… Draco Malfoy con un aire de tristeza y completa soledad, miraba ensimismado por la ventana que se encontraba en la vieja y desusada torre de astronomía, mirando como el sol se escondía detrás de los altos y antiguos arboles del bosque prohibido. Sus ojos solo reflejaban angustia, tristeza, impotencia, rabia y dolor, un inmenso dolor. Habían pasado dos días desde que él se había ido y no sabía nada de aquella mirada verde, dos días en las cuales el creyó que habían sido más que una eternidad, suspiro audiblemente, su pecho le dolía, le oprimía el corazón, el alma…
Para el ya todo estaba perdido, no había nada de lo que pudiera hacer, estaba desorientado, atormentado y perdido, completamente perdido…
Todo le recordaba a él, cuando pasaban por los pasillos, cuando iba al gran comedor, su dormitorio, su sala común, el campo de Quidditch, el árbol donde se recostaban en las tardes cerca del lago y aquí, en este lugar donde compartieron más que palabras, más que caricias, aquí fue donde más lo conoció, mas le atraía…
No podía creer lo ciego y estúpido que había sido, como no se había dado cuenta los sentimientos que sentía por él, es que todo era tan confuso, tenía tanta rabia del que el vejestorio del director le obligara a estar con Harry, que no tenía otro sentimientos que rabia hacia aquel que no tenia culpa de nada, estar con la soga al cuello, inventar sentimientos, estar mintiendo cada momento, no lo dejaban pensar, analizar sus verdaderos sentimientos, con el tiempo no se había dado cuenta que lo que le decía al moreno eran la pura y santa verdad, las mentiras se habían vuelto verdad en algún momento y el no se había enterado y ahora pagaba el precio, el precio de haber tenido el amor eterno de la persona que amaba y lo había perdido todo, absolutamente todo…
***********
Más por obligación que por gusto Draco bajo hasta la sala común de su casa, encontrando con cierta persona que ni siquiera habían estado en sus pensamientos, en ese momento se acordó que tenía que acabar con eso, no podía estar con aquel, que en un principio si quiso de verdad, pero que ahora se daba cuenta que no era tan fuerte como lo que había sentido por Harry, debía terminar, porque aunque el ahora estaba solo, n o podía engañarle, no quería mas mentiras, no quería sufrir y hacer sufrir a otros por no decir la verdad…
- hola Draco – le dijo con una media sonrisa
- hola Kevin, debemos hablar – dijo seriamente sentándose en una sillón cerca de la chimenea, sin dirigirle la mirada
Kevin se extraño pero aun así se sentó junto al rubio, desde que se había ido Potter, Draco actuaba raro, no lo había podido ver en todo este tiempo y los amigos del rubio no lo habían dejado acercársele y la verdad es que el había pensado que todo se arreglaría con la partida de Potter, después de todo el era el causante de que no pudiera estar con su rubio…
- debemos terminar – fue directo al grano, sin rodeos ni explicaciones, ni siquiera le miraba
Kevin se quedo mudo unos minutos, para luego explotar – QUE! qué te pasa!? Quien te crees para venir y aparecerte de la nada y decirme que debemos terminar!?
- yo no te amo – le dijo mirando fijamente
El otro chico quedo asombrado, para luego cambiar su expresión a completa tristeza y resentimientos – que es ahora? Acaso el director te pidió que terminaras conmigo para ir a buscar al maldito de Potter – dijo el nombre con repulsión
- no le llames así! –le grito y se paro del asiento – escúchame… - tratando de calmar su voz – yo… me enamore de él, entiendes? Le amo y lo he perdido, lo he perdido por mi culpa – mirando hacia otro lado
- claro que no! Solo estas confundido, Draco mira ahora podemos estar solos, podemos ser tu y yo… - le dijo desesperado acercándose al rubio y aferrándose a su pecho
Draco lo abrazo y le beso en la frente…
*********
Draco se encontraba solo en su habitación mirando ensimismado el paisaje se divisaba por su ventana, mostrando otro día perdido… la puerta fue abierta sin consentimiento de su dueño, el rubio creyendo que eran sus amigos le recrimino…
- no iré al gran comedor no tengo hambre no insistan
- eso no está bien querido, debes de alimentarte
Draco se dio vuelta al escuchar esas palabras que en realidad ni presto atención, ya que lo único que le había llamado la atención había sido la voz, ese tono que solo podía ser de ella…
- madre – dándose vuelta, descubriendo que no era un sueño o una alucinación, corrió sin importarle sus modales y se le hecho a sus brazos, llorando como un niño, como hace tanto años atrás y el era un pequeño que necesitaba de su madre día y noche…
Draco no se dio cuenta cuando, pero cuando dejo de llorar a lágrima viva estaba apoyado en las piernas de su madre, mientras que ella le acariciaba sus rubios cabellos. Levanto su vista para enfrentar a su padre y recibir alguna recriminación por comportarse tan poco digno de su apellido, pero lo que encontró al enfrentar los ojos grises de su padre como los de el mismo, se encontró con que no había nada de molestia o enojo, más bien tristeza, alegría, compresión y muchas otras emociones, pero nada negativo, eso fue más de lo que esperaba, se sentó lentamente en el sofá al medio de sus dos padres, su progenitor le abrazo de los hombros reconfortándolo, entregando ese calor y protección que solo un padre te puede dar.
Después de unos minutos de agradable y reconfortante silencio Draco interrumpió la atmosfera familiar…
- ¿Por qué están aquí? – ahora que ya estaba más calmado esa duda se había instalado, era acaso que el viejo director hubiera sacado a sus padres de la cárcel?
- pues… mi pequeño dragón… – dijo su hermosa madre con una cálida sonrisa
Draco sonrió nostálgico al recordar como su madre solía decirle cuando era más pequeño
- … fue el joven Potter quien nos saco – termino de decir su madre
Draco abrió los ojos ante sus sorpresa, ¿Cómo era posible que Harry hiciera eso? ¿Él le había negando, le había roto el corazón como era posible que sacara a sus padres de la cárcel? ¿Es que acaso no le odiaba?
- pero… el… yo… - dijo el Malfoy hijo algo nervioso, ansioso, perdido…
- ni nosotros nos explicamos porque lo hiso, aunque… - Lucius miro serio y fijamente a su hijo, mientras que este se ponía algo nervioso mirando hacia otro lado
- el joven Potter llego dos horas antes de la audición y el nos defendió delante de todo el jurado, nos defendió como si fuéramos parte importante de su vida, como… - se quedo callada mirando fijamente a su hijo, este volvió a moverse incomodo en su lugar sin mirar a su madre.
- que hiciste por Potter? – pregunto seriamente ocultando su curiosidad el patriarca de la familia Malfoy
- qué? – dijo algo asombrado – de donde sacan eso… yo… - no sabía si debía decirles a sus padres todo lo que había pasado…
- recuerdo perfectamente lo que nos dijo…
>>>> Le sonrió tristemente – esto es lo mínimo que podía hacer por ustedes, ya que su hijo ha hecho mucho más de lo que ustedes pueden imaginar para que ustedes estén libres… él ha hecho muyo por mi y estoy agradecido – dijo con una tristeza tan grande que se le reflejo en sus hermosos ojos
Ambos se miraron asombrados y curiosos por saber lo que su hijo había hecho, para ganarse el favor del chico dorado…
- bueno yo me tengo que ir… - les dijo en forma de despedida
- adiós Potter y gracias – le dijo caballerosamente el señor Malfoy haciendo una pequeña reverencia al menor, este asintió quedamente
- muchas gracias pequeño – le dijo la señora Malfoy, abrazándolo tiernamente, Harry se asombro pero le correspondió el abrazo – cuídate y espero que no te reten por haber salió de Hogwarts
Al nombrar el colegio Harry se tenso pero igualmente le devolvió la sonrisa, se dio media vuelta cuando había dado un paso se detuvo y los volvió a mirar – yo… Draco ha sufrido mucho por su encierro, los ama demasiado, espero que lo cuiden, se merece una familia que le demuestre el afecto que le hace falta, espero que con esta segunda oportunidad que tienen de estar con su hijo la aprovechen, porque ustedes y él se merecen ser felices y demostrar su cariño… y díganle que le deseo lo mejor y que le agradezco lo que hiso por mi… y espero que no me odie – lo ultimo lo dijo en un susurro casi inaudible, diciendo esto y sin esperar respuesta de unos confundidos Malfoy’s se encamino hacia la salida…>>
Draco aun estaba procesando la información que su madre le había relato, no podía creerlo, no podía entenderlo, como había sido tan estúpido, tan maldito para haber dejado ir a ese ser tan maravilloso, que aun después de saber la verdad le ayudaba, se preocupaba por él, como había podido ser tan miserable. Se odiaba, se odiaba así mismo, por no haber hecho algo, por no decir la verdad antes, por no darse cuenta de sus verdaderos sentimientos y lo que más le dolía, lo que más le afectaba era saber lo último que había dicho…
- …y espero que no me odie
Como, como podía decir eso, si el que tenía toda la culpa, que merecía todo el odio y repudio era hacia él, como podía pensar el azabache que le odiaba? En que pensaba? Si él era el mal nacido, el desgraciado que había arruinado su vida…
- que no lo odie, que no lo odie… - dijo despacio, en un susurro que apedas sus padres que estaban sentados junto a él pudieron escuchar. Su vista estaba fijada en la nada, hasta que cerró los ojos y se levanto del asiento y comenzó a caminar furiosamente por alrededor de la sala – que no lo odie!? Tú me tienes que odiar maldito Gryffindor! – grito con dolor el Slytherin
No pudo soportarlo y lloro nuevamente, ante la atenta mirada de sus padres, no le importo llorar como una “nena” y caer arrodillado al suelo, ya nada le importaba, quería sacarse el dolor que llevaba dentro, quería liberar esa opresión que se formaba angustiosamente en su pecho y no le dejaba respirar con normalidad, haciéndole difícil y doloroso respirar, su magia se descontrol rompiendo algunas cosas a su alrededor, preocupando a sus padres por la acción de su hijo, ellos sospechaban que entre su hijo y Potter había pasado algo y que había acabado para mal, pero no creían o no se podían llegar a imaginar la real magnitud de los eventos pasados…
Draco no aguanto y no quiso seguir consciente de su dolor, de la angustia de pensar en que Harry puede estar muerto en algún lugar, no, no podía soportar esa idea, no quería pensar, no quería seguir. Y sin previo aviso se sucumbió en la totalidad de la oscuridad, cayendo inconsciente en el duro y frio suelo de la sala común de su casa…
- calma cariño, debes agradecer que está vivo – dijo aun acariciando los suaves cabellos rubios
- tú crees que lo puedo volver a ver, yo… - dijo dudoso agarrando fuertemente la túnica de la persona que le consolaba
- claro que si, si está de vuelta debe ser por el funeral de Dumbledore, es tu momento de actuar
- pero si… yo no sé qué decirle… estoy seguro que ni siquiera querrá verme, y el… yo… - dijo apartándose de esos cálidos brazos sentándose bien el sillón para poder mirar directamente a los ojos de su confidente
- que dices Draco? No puedes rendirte antes de dar la pelea, tienes que ser fuerte tienes que luchar por él, no es lo que tanto deseabas? No es lo que siempre soñaste?
- si – dijo con determinación – no desperdiciare esta oportunidad que me da la vida, no lo dejare irse de mi lado, aunque me lleve la eternidad, lo amo y haré lo imposible para que me perdone
- así se dice hijo – le dijo con orgullo y esperanza de verlo volver a sonreír y ver nuevamente la felicidad en esos ojos grises que ahora se encontraban opacados por la tristeza
- gracias madre…
Continuara…