Tres largos años de buena amistad tenían dos estudiantes universitarias, o al menos eso creía una de ellas, sin darse cuenta María se enamoro de su mejor amiga, no sabia como había llegado de querer a Sofía como amiga a amarla de la manera mas desesperada que puede haber.
-“siempre me gustaron hombres”- pensaba un día mientras caminada con su amiga del brazo- “es mi mejor amiga, es la persona que mas me ha ayudado en mis problemas y yo me termino enamorando de ella. No puedo decírselo si se lo digo arruinare la amistad de las dos, eso jamás me lo perdonaría”.
-María, ¿te sucede algo?- dijo Sofía sacando a su amiga de su pensamiento y causándole un gran sonrojo en sus mejillas- mmm..... creo que estas enamorada, anda dime quien es.
-¿yo?, ¿enamorada?- dijo con los ojos extremadamente grandes y totalmente roja como tomate- “si enamorada de ti”- pensó- pues claro que no estoy enamorada, como se te ocurre, no tengo tiempo de pensar en eso Sofía no seas loca.
-bueno no importa- dijo con la mirada triste.
-¿Por qué esa cara de tristeza?- le dijo muy preocupada ya que su amiga cambio de cara de un segundo a otro.
-es que creo que tu ya no confías en mi- dijo abrazándola, lo que causo que María se pusiera mas que nerviosa.
-“no es que no confíe en ti es que me enamore de ti Sofía”- pensó mientras le acariciaba el pelo a su amiga- yo si confío en ti pero créeme no estoy enamorada de nadie, enserio si yo estuviera enamorada ti serias la primera que lo sabría.
-bueno te creo- al decir esto se separo un tanto de su amiga y le deposito un beso muy cerca de sus labios lo que hizo que María temblara- perdón no me fije que estaba tan cerca de tu boca.
-no es nada, mejor sigamos caminando- dijo tratando que se le pasara el terrible sonrojo que tenia.
-bueno sigamos- dicho esto le toma el brazo y comenzaron a caminar juntas.
En el camino María no podía dejar de pensar en ese beso que Sofía le deposito tan cerca sus labios y se sintió feliz en ese instante ya que pensaba que ese beso era por voluntad de ella no por accidente. Mientras pensaba Sofía le soltó el brazo de repente, y María quedo muy sorprendida de esa acción.
-¿te sucede algo Sofía?-
-no, no pasa nada, es que hace calor y el estar tan apegada a ti me da mucha mas calor, eso es todo.- dijo con una sonrisa que se veía muy falsa.
-si tu lo quieres- respondió para no darle vueltas al asunto.
Estaban ahora caminando separadas, María delante de Sofía y la primera no sabía porque el cambio de animo de su amiga, era muy extraño que Sofía se comportara de esa manera, tal ves era su culpa, no, no, no como si no había echo nada.
-“no puedo someterla de esa manera”- pensaba María- “se que por fuera ella se ve fuerte pero por dentro se va a destruir si tenemos una relación así, la gente será cruel con este tipo de relación, sus padres no lo aceptaran y yo solo quiero verla feliz, solo quiero que sea feliz, no me perdonaría si llorara por mi culpa. Me muero por besarla y me moriría si no la tuviera cerca, prefiero tenerla como amiga aunque me duela, mas me dolería si la perdiera. Este amor enfermizo que siento por ella, este amor que no he sentido por nadie, me desvelo pensando en ella, cuando estamos en clases me encanta contemplarla tan atenta, tan linda, tan perfecta, pero a la ves es horriblemente distante, estoy a un paso de su boca pero estas dudas que tengo no me dejan acercarme con otras intenciones a ella. Como me gustaría ser hombre para que tu mirada se posara en mi, ¿Por qué esto tiene que ser así de complicado?, yo quiero ser feliz a tu lado pero se que tu no sientes lo que yo. Te amo Sofía, te amo a mas no poder, te amo aunque tenga que ocultarlo diciendo que lo que siento por ti es solo amistad, te amo aunque este dolor ya no lo puedo aguantar”.
En ese momento se dio cuenta que Sofía estaba parada y no avanzaba, tenia la mirada baja y sus ojos se veían tristes mirando algún punto del suelo, María se preocupo y fue donde estaba su amiga para tratar de averiguar que es lo que le pasaba.
-Sofía tu sabes que no me puedes mentir- dijo levantándole el rostro- conozco esa mirada de tristeza ¿puedo sabes que te sucede?
-María- dijo con un hilo de voz- dime… ¿yo te gusto?
-¿Qué?- dijo muy sorprendida y sacando su mano de la cara de su amiga- ¿Por qué me preguntas eso Sofía?
-porque tal ves amiga…- al decir esto la abrazo y se acerco a su oído- yo sienta lo mismo que tu…
CONTINUARA--------------------