Juguémosle una broma a Fuji
Si algo había aprendido Momoshiro y el resto del equipo de Seigaku con los años, era que Fuji tenía veneno en sus venas en vez de sangre. Ya era cuestión de todos los años que terminaban casi más de la mitad de los titulares del Seigaku en esas condiciones tan deplorables antes o durante el día del inocente.
No podía creerse tan estúpido de caer en la misma broma todos los años, pero de algo estaba seguro y los años lo hicieron sabio para llegar a esa conclusión; Syusuke Fuji era un maestro del engaño.
Y es que todos los miembros titulares se preguntaban: ¿Cómo podía con esa cara de bueno que se traía, jugar bromas tan sucias? Es algo que ni el tiempo podía aclarar.
Ese día todos los miembros del equipo de tenis había tenido un entrenamiento como todos los días cuando de repente al abrir sus casilleros algo les saltó encima y aun estaban tratando de pensar que demonios era y que afilada tenía sus uñas pues los habían dejado a todos lastimados mientras Fuji sonreía del placer. Realmente era una maquina de maldad su amigo y tensai.
- ¡Esta se la va a cobrar! -Dijo Momoshiro a sus compañeros los cuales intentaban curarse las heridas-. ¿No creen que ya Fuji se rió suficiente de nosotros? ¿Que hablar el día que nos digo que el capitán nos había mandado a hacer 200 vueltas? Casi todos terminamos hechos trizas y al final Tezuka no había dicho nada y volvió como tal cosa y nos pidió que hiciéramos las vueltas de rutina de siempre.
- Como olvidarlo, casi pierdo mis dos piernas -dijo Ryoma sacándose la gorra.
- Si, es verdad, a veces Fujiko se pasa -dijo Eiji mientras se colocaba su ropa cotidiana.
- ¿No les parece que deberíamos devolverles sus bromas de mal gusto? -preguntó Momoshiro y el resto del equipo lo miró.
- ¡Momoshiro tiene razón! Hay que hacer callar a Fuji de una vez -musitó Kaidoh, lo que hizo que todos lo miraran extrañados ¿Momo y Kaoru se pudieron de acuerdo?
- Bueno, si ustedes creen que es conveniente -dijo Kawamura mientras se colocaba una bandita.
- Pero Fujiko no lo hace de malo -murmuró Kikumaru.
- Van dos años seguidos de bromas de mal gusto Eiji, y tú debes tener más porque compartiste más tiempo con él, ¿no te cansa?
- Bueno Momo, a veces Fujiko se pasa, pero es buen chico -musitó sonriente alzando su dedo pulgar y todos suspiraron. Definitivamente o Eiji era demasiado bueno o demasiado tonto.
- Bueno chicos, si todos estamos de acuerdo, entonces pensemos en una buena broma -sonrió Momoshiro y el resto afirmó.
Esta vez, Fuji no la iba a sacar barata, de eso estaban seguros.
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Broma Nº1: El bote de pintura.
Kaidoh y Kawamura se encontraban alistando todo en el pasillo mientras Momoshiro supervisaba al igual que Ryoma. Inui trataba de ver las posibilidades de que el bote de pintura cayera a una distancia aproximada de 2,5 milímetros para que no golpeara de lleno la cabeza de Fuji y lo dejara inconciente tragando pintura, querían jugarle una broma, no matarlo.
Por otra parte estaba Eiji y Oishi caminando por los pasillos, mientras el primero sonreía el segundo hablaba solo diciendo que si Tezuka se enteraba de eso lo iba a suspender por dejar que los miembros de un equipo de tenis respetado hicieran una broma de mal gusto a uno de los miembros más importantes del club.
Llegaron a la altura de Momo que dejó de mirar el tarro de pintura para concentrarse en lo que decía Shuichiro en voz baja.
- ¿Puedes dejar de hablar en voz baja? Me estas desconcentrando -dijo Momoshiro para volver la atención a su maquiavélico plan.
- Es que si Tezuka se da cuenta de esto nos matará a todos, nos hará correr tantas vueltas que cuando terminemos seremos ancianos, y Fuji nos hará sufrir más que si muriéramos a manos de un asesino loco. ¿Qué no oíste que Fuji tiene la misma sensibilidad que Jack el destripador? -dijo Oishi preocupado.
- Tranquilo Oishi, Fujiko no se dará cuenta de nada.....-dijo abrazando a su pareja de juegos por el cuello.
- Bien, esta todo -dijo Ryoma e Inui cerró su cuaderno.
- En 5 minutos reloj Fuji cruzará esa puerta y al abrirla, el pote de pintura caerá en su cabeza con una probabilidad del 80% de que lo deje todo de color rosa -Musitó Inui mientras se acomodaba las gafas.
- Bien, bien. Por cierto ¿Saben donde está Tezuka? -preguntó Momoshiro mientras se alejaba de la escena de la broma junto a sus compañeros para ubicarse en el lugar más privilegiado y lejano para ver como Fuji recibía una cucharada de su propio veneno.
- Creo que estaba en clase de inglés -dijo Oishi.
- ¿Y por qué tu no estás con él? ¿No son del mismo curso? -preguntó Ryoma.
- No, es que las clases de inglés yo la tengo con Oishi, Kawamura e Inui en media hora, pero Tezuka y Fuji tienen inglés ahora mismo -dijo Eiji con una sonrisa de oreja a oreja, aunque los otros estaban helados por la noticia.
- ¿Cómo? ¿Ósea que Tezuka está dentro de ese salón? -preguntó Momoshiro con gran asombro.
- ¡Si! -dijo un contento Kikumaru.
- Diez, nueve, ocho....-contó Inui.
- ¿Qué está contando? -preguntó Kaoru.
- Los segundos que falta para que todos salgan -dijo Oishi con preocupación.
- Cinco, cuatro, tres, dos....uno -todos levantaron la cabeza cuando sonó el timbre.
Momoshiro fue el primero en correr hacia la puerta, pues vio por la ventana que Tezuka era el primero que saldría junto con Fuji, y ante la duda de que el bote cayera encima de su capitán fue corriendo a recibir el líquido rosa que al abrir la puerta cayó bañando completamente al moreno de cabello parado. El capitán y el Tensai se quedaron perplejos al ver como la pintura rosada escurría por el cabello, la cara y el cuerpo de Takeshi, con gran asombro.
El moreno simplemente cedió el paso haciendo que los demás estudiantes pudieran retirarse del salón ante las burlas y señales con el dedo que recibía.
- ¿Qué pasó? -preguntó Tezuka con cierto enojo. Fuji empezó a reír por lo bajo.
- N-no...nada....-musitó Momoshiro-. Sólo creía, que....me venía bien un cambio de look -dijo mientras trataba de contenerse para no ponerse a llorar.
Los demás miembros de esa sucia broma salieron huyendo apenas escucharon la voz del capitán, mientras que el mismo simplemente miraba interrogante a uno de sus compañeros y el Tensai reía, pues es obvio que esa broma la habían preparado para él, Fuji no es tonto. Pero ahora que sabía las intenciones de sus compañeros, sabría como contraatacar a cada una de aquellas burlas que planeaban para él.
No por nada se había ganado su titulo. No sólo es prodigio en tenis, sino también en maldad.
Primera broma. FRACASO.
Continuará.
Bueno, es algo corto, pero espero les guste el comienzo.