Eran cerca de las seis de la mañana y un apuesto joven caminaba por las calles de parís. Ya era costumbre levantarse temprano para dirigirse a su trabajo en uno de los más lujosos hoteles del lugar.
Para él no era más que otro monótono día en el que tenía que atender a gente con dinero la cual al parecer no podía hacer nada sola, siempre quejándose por el servicio y disfrutando mientras que el solo sonreía ante cualquier petición, por más estúpida o absurda que fuera.
Odiaba eso, pero que mas podía hacer, ese había sido su trabajo desde que había cumplido veinte años, ya que después de la muerte de sus padres cuando este tenía diez años, su hermano y el no habían tenido mas opción que dejar sus estudios y trabajar para vivir, ya que nunca habían sido ricos ni nada por el estilo.
A pesar de eso, un día, cuando el tenia trece, su hermano lo había dejado solo, en un pequeño departamento, y nunca volvió a saber de él.
Ahora, a sus veinticinco años, no extrañaba ni pensaba en el bastardo que lo había dejado solo cuando más lo había necesitado, solo pensaba en sobrevivir con lo poco que ganaba y llevar una vida tranquila.
-Hola Sasuke- le saludo una pelirroja de lentes mientras entraba por la puerta de empleados al lujoso hotel.
- Hola Karin- respondió al saludo- ¿Por qué esta mi nombre en el turno nocturno?- Pregunto el azabache mientras miraba el tablón donde se anunciaban lo turnos en los que trabajarían los empleados.
-Suigetsu enfermo, o al menos eso dijo al llamar y decir que no podría venir a cubrir el turno en el bar, así que Kakashi dijo que estaría bien que lo cubrieras tu, pero tranquilo, te pagaran tiempo extra- finalizo Karin mientras terminaba de acomodar su uniforme y salía del lugar.
Genial, lo único que le faltaba, tener que cubrir en el bar, de seguro era una de esas venganzas de Kakashi por haber mojado ese estúpido libro porno que siempre cargaba encima; aun no comprendía como ese idiota que siempre llegaba tarde pudo haber sido ascendido a gerente.
0----------------------0--------------------0
- Bien Naruto, llegamos, el hotel más lujoso de Paris, como te lo prometí- decía un hombre de unos cincuenta y tantos años, de piel pálida y rasgos de serpiente, mientras se bajaba de un lujoso auto.
- mmm... pero Orochimaru, el hotel de Praga parecía más grande, ¿este no te parece algo más pequeño? - Decía un rubio de ojos azules y de hermosa figura que bajaba del carro y sujetaba por el cuello a su acompañante - solo espero que la cama sea muy cómoda- comento con voz insinuante y con un toque de inocencia que sabía volvía loco a cualquier hombre y mujer con quien lo utilizaba.
Desde pequeño Naruto había aprendido a usar sus encantos tanto en hombres como en mujeres; era consciente de que su aspecto infantil e inocente pero a la vez sensual, combinado con sus palabras insinuantes disfrazadas de ingenuidad y encanto podían poner a sus pies a cualquiera, usando eso a su favor para obtener lo que quisiera, desde ropas caras hasta joyas y diamantes cotizados en miles y hasta millones de euros.
Pero hace un par de meses atrás, Naruto se había encontrado con un verdadero diamante al conocer a un viejo millonario sin hijos ni familia a los que heredar. Así que haciendo uso de todos sus encantos, había logrado conseguir que le propusiera matrimonio con un costoso anillo de plata con una piedra de zafiro muy lujosa; poco faltaba para la boda y para que por fin pudiera tener todos los lujos y comodidades que siempre había querido.
- Dime, Naruto, ¿Qué quieres hacer primero?- preguntó Orochimaru a su rubio acompañante.
- No lo sé, escuche que el hotel tiene una boutique donde venden ropa muy linda- respondió con tono infantil.
- Pero Naru, tu ya tienes ropa suficiente, ni siquiera cabe en las maletas-
-Perdón, es solo que...- Naruto puso cara de niñito recién regañado.
- ¿Qué Naru, que ocurre?-
- Nada... olvídalo- contesto comenzando a caminar hacia el lobby del hotel con claras intenciones de dejar la conversación hasta ahí, pero una mano lo detuvo del brazo, provocando una sonrisa de satisfacción en su rostro que nadie notó, para borrarla en segundos y cambiarla por un gesto de arrepentimiento y tristeza disimulado y darse la vuelta hacia la persona que lo sujetaba.
- Dime Naruto, ¿Qué te ocurre?, sabes que no me gusta verte así-
- Bueno, yo solo quiero lucir bien para ti, no me gusta que me veas como una fotografía, siempre con la misma ropa-
- En ese caso, te comprare toda la ropa que me pidas, solo vamos a registrarnos- dijo Orochimaru sonriendo y llevando a Naruto dentro del hotel- Kabuto, encárgate del equipaje- ordeno a su chofer, un joven de pelo gris y anteojos que siempre iba con Orochimaru a donde fuera y le obedecía en todo.
- "iluso, siempre cae con lo mismo, lo bueno es que dentro de poco de lo único que tendré que preocuparme es de que mi nombre este en el testamento de este vejete"-
Realmente Naruto deseaba que la boda llegara pronto, no porque quisiera a Orochimaru, de hecho para él no era otra cosa que un viejo pervertido que lo único que deseaba de él era su cuerpo como los demás, si no porque ya se estaba cansando de todas las fiestas y lugares que tenía que frecuentar, las charlas aburridas que tenía que soportar y el interés fingido hacia lo que hacían los viejos ricachones solo para sacarles dinero y algún que otro gustillo como ropa o joyas, pero casi nunca podía quedarse con ellos ( o ellas, solía darse la ocasión) por que tenían familia o por qué realmente no le agradaba esa persona.
Pero el que Orochimaru le propusiera matrimonio era una oportunidad única que obviamente no dejaría ir.
0----------------------0--------------------0
El día había pasado rápido para Sasuke, una vez que se acostumbro a subir y bajar con maletas, ir y venir con comida o cualquier otra cosa, ya el resto había sido pan comido; ahora solo quedaba una cosa por hacer y esa era estar en el bar por la noche.
Solían emplearlo como barman porque él era bueno en servir y hacer bebidas, ya que Suigetsu (en esos momentos llamado por Sasuke "el maldito al que se le ocurrió faltar") le había enseñado todo lo que sabía del bar.
Eran cerca de las doce de la mañana y el bar estaba solo, ya que el hotel estaba dando un fiesta en un salón adjunto, por lo cual la gente se encontraba ahí.
- No sé porque estoy aquí si es obvio que no vendrá nadie; maldito Kakashi - maldecía por lo bajo recargado en la barra.
-Sasuke, ¿quieres que te cubra un rato? Te ves cansado- pregunto un pelirrojo con marcadas ojeras que acababa de entrar al elegante bar.
- No gracias Gaara, está bien así, de todos modos no hay nadie y faltan dos horas para mi salida, soportare un rato- contesto Sasuke, mientras jugaba con una copa girándola en la barra.
- Sai me llamo de Costa Azul - dijo Gaara acercándose a la barra y recargándose en esta, quedando enfrente de Sasuke- dijo que había visto a Itachi-
En cuanto Gaara pronuncio ese nombre, la copa que Sasuke giraba, salió volando por los aires para estrellarse en la pared. Sasuke quedo estático unos momentos asimilando lo dicho por el novio de su primo y después regreso a su postura fría y seria.
-¿Y a mi qué demonios me importa lo que Sai haya visto en Costa azul?- Fue la Respuesta que dio Sasuke a Gaara antes de darse la vuelta e ir a recoger los pedazos de cristal regados por el suelo.
- El dijo que tal vez sea buena idea que lo busques para aclarar el asunto- Y sin esperar más, Gaara salió del bar dejando solo a Sasuke.
- No hay nada que aclarar con ese bastardo- dijo, sabiendo que ya no había nadie más que él en el bar.
0----------------------0--------------------0
- ¿Pero porque no iras?-
-Sabes que odio el ruido, además estoy cansado, mejor adelántate y yo voy mas al rato-
Naruto miro a Orochimaru con molestia antes de salir de la suite dando un portazo.
Se suponía que Orochimaru y el irían a la fiesta del hotel, pero Orochimaru había preferido no ir; no era que a naruto le molestara ir solo, es más, así era mejor, lo que realmente odiaba era que el viejo quería que Kabuto lo acompañara, y de Orochimaru a Kabuto, prefería ir con Orochimaru.
Subió al ascensor lo suficientemente rápido para que Kabuto no pudiera seguirle, realmente odiaba que lo siguiera.
- Necesito un trago-dijo para si antes de presionar el botón y dirigirse al primer piso, donde estaba el bar.
0----------------------0--------------------0
Sasuke se había quedado rendido por el cansancio, tanto que decidió recostarse en uno de los sillones de cuero negro que se encontraban en el bar solo para descansar un rato; pero al parecer se quedo dormido en cuanto su cabeza toco la suave piel del sillón, por lo cual no se dio cuenta cuando minutos después, Naruto entro al bar.
Cuando naruto vio a aquel joven de elegante traje negro recostado en el sillón supuso que era un huésped mas del hotel, al cual paso de largo para dirigirse a la barra.
- Hola, ¿hay alguien?- tras no recibir respuesta de algún mesero o alguien, se dirigió hacia el joven dormido y le movió un poco para despertarlo- disculpe, señor-
-mmm...- Sasuke abrió los ojos perezosamente tratando de enfocar bien a la persona que tenía enfrente.
Se sobresalto un poco al darse cuenta de que se había quedado dormido y de que un joven, a su parecer muy hermoso, estaba intentando despertarlo.
-Lo siento si lo molesto, pero, ¿de casualidad no sabe dónde está el barman?- pregunto Naruto - "guau, es muy apuesto, me pregunto si estará aquí solo"-
- Eh, yo solo estaba...-
- ¿descansabas de un día pesado?, está bien, no pasa nada, después de todo es aburrido estar solo en un hotel como este, porque, estas solo ¿cierto?- pregunto Naruto sentándose a un lado de Sasuke.
- ah...este...sí, claro- Sasuke no podía dejar de contemplar al rubio, tan hermoso, son unos lindos ojos azules y tres graciosas marquitas de cada lado de sus mejillas y una sonrisa un tanto infantil.
- Y dime, ¿en qué habitación te hospedad?-
Un segundo, ¿acaso el rubio pensaba que él se hospedaba en el hotel? , vaya confusión, pero aun así Sasuke por alguna razón decidió seguirle el juego.
- Pues en la suite imperial, me llamo Uchiha Sasuke ¿y tú?-
Para Naruto saber que era en la suite más cara del hotel donde se hospedaba el moreno era más que suficiente para saber que le convenía estar con él.
- Uzumaki Naruto, mucho gusto- conocer a jóvenes con dinero era difícil, en especial si eran guapos, como el que tenía enfrente, así que no perdería esa oportunidad tan única- dime Sasuke,¿ porque dormir aquí y no en tu suite?-
-Yo... esperaba al barman-
-Ya veo, pues al parecer no está, con las ganas que tenia de un trago-
- Si quieres yo lo hago-
- ¿Sabes cómo?- pregunto Naruto viendo como Sasuke se dirigía a la barra y se colocaba detrás de esta.
- Claro, ¿Qué es lo que deseas?-
-Mmmm- Naruto puso su dedo sobre sus labios dando a entender que lo pensaba, sabiendo que ese gesto infantil y sensual derretiría a Sasuke, y si que estaba acertado, Sasuke no podía estar más embobado viendo a Naruto - creo que un Martini estaría bien- contesto sonriendo de forma zorruna .
-¿Eh?- tan concentrado estaba en Naruto que no escucho lo que este le había dicho.
- Dije que un Martini estaría bien-
Sasuke comenzó a preparar ágilmente el Martini mientras Naruto lo contemplaba.
-Aquí tienes- dijo Sasuke entregándole la bebida.
-¿Tú no tomas?-
- No, así está bien-
Sasuke contemplo como Naruto bebía de su copa, aun seguía pensando que era realmente hermoso.
-¿Vienes solo?-
- No, Vengo con mi prometido, pero es desesperante, tal vez rompa el compromiso "si todo sale bien contigo, igual y lo hago"-
-Ya veo- Sasuke no podía imaginar lo afortunado que era el tipo del que Naruto hablaba, realmente le había gustado el rubio, y un deseo de conquistarlo salió a relucir y crecía mientras más lo miraba.
-Bueno, creo que debo de irme, mi prometido debe estar esperándome- dijo Naruto con un falso tono de tristeza en la voz, como del que alguien que espera ser rescatado.
- Este...Naruto, ¿te gustaría subir a mi suite un rato?- y Sasuke cayó en la trampa de Naruto, como todos hacían.
-Pues...no sé, tal vez solo un rato- en ese momento Naruto se sentía orgulloso de saber cómo manipular a un hombre usando el tono de voz y las palabras adecuadas.
- Bien, vamos. "supongo que si uso la copia de la llave de la suite imperial que me dio Kakashi por unos momentos no pasara nada"-
Ambos subieron al ascensor y Sasuke apretó el número treinta, el piso donde se encontraba la suite y se quedaron callados por unos momentos.
- Creo que...- Sasuke no logro terminar la frase pues Naruto le había comenzado a besar de manera algo demandante.
Ante su sorpresa, Sasuke tardo unos segundos en reaccionar y devolverle el beso, separando los labios para que Naruto metiera su lengua en su boca y hiciera el beso cada vez más intenso.
Comenzando una guerra entre sus lenguas por ver quién tenía el control, Naruto paso sus manos por el cuello de Sasuke, para así profundizar más el beso, y Sasuke pasaba sus manos alrededor de la cintura de Naruto acercándolo más a su cuerpo.
Se separaron un momento para tomar algo de aire y comenzaron de nuevo la faena, esta vez Naruto rodeando la cintura de Sasuke con sus Piernas y Sasuke sujetándolo por los muslos y recargándolo en la pared del ascensor.
0----------------------0--------------------0
- ¿Lo encontraste?-
-No señor Orochimaru, busque por todos lados pero no había rastros de el.-
-Maldito mocoso, ya me imagino que debe de estar engatusando a algún otro estúpido, pero mañana vera que conmigo no se juega -