Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Promesas inevitables por Manabuu

[Reviews - 1152]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Uruha: POR UNA MEJOR CALIDAD EN FICOS! Y ORIGINALIDAD EN IDEAS!

Taka-chan: ANIMENSE A DEJAR UN REVIEW!

*LEER NOTAS FINALES

Inevitable XXII - parte C

 

 

Mi respiración retumbaba contra su pecho, apreté su tetilla hasta el punto en que se volvió dolorosamente rosa.

 

¡Ah, ahh, nooo, ahhh, más, más fuerteee!

 

Salí de su interior y lo empujé contra la pared, mis ojos se fijaron en los arañazos que tenía el papel tapiz verde oliva, tenían las marcas de Taka. Apoyé el mentón sobre su hombro y empujé fuerte haciendo que él saltara, gritó contra la pared y luego me envió a la mierda, no obstante a los segundos volvió a decirme cómo quería que arremetiera contra él.

 

¡Quédate ahí! sí,¡¡¡en círculos!!!

 

Obedecí mordiendo su cuello y luego su mejilla ya inflamada, el golpe que se había dado al caer al suelo estaba pidiendo a gritos que no me detuviera.

Un golpe en mi costado hizo que por casi trastabillara, lo abracé por la cintura y reí mordiéndole el lóbulo derecho, chupé su argolla y la jalé sin intentar hacerle daño.

 

¡No te detengas! ¡Aki, Aki, Akiiii!

¡Mmm, ya casi!

¡No, no, yo aún no!

 

¿Fuerza sobrehumana?

Después de un mes sin meterme dentro de él era comprensible que ya estuviéramos en la tercera ronda y eso que nuestros ánimos, por lo visto, nos pedían ir más allá de lo que usualmente hacíamos.

 

¡Más!

 

Apreté su miembro entre  mis dedos y lo sentí escurriendo. De inmediato hice que cayéramos al suelo, la cabeza de Taka se apoyaba incómodamente sobre la pared, le abrí las piernas, lo vi relamerse y volví a entrar en él, aún no había acabado, empujé hasta el fondo produciendo un grito descomunal no solo en él, sino en mí.

La cabeza me daba vueltas, los colores opacos de la tarde de otoño que se asomaba por la ventana me produjeron vértigo cuando por fin acabé en él.  Apoyé mis brazos en la pared mientras respiraba agitadamente, Taka tenía la columna encogida por la posición semi sentada en la que estábamos.

Al poco todo se enrumbó de nuevo, le obligué a masturbarme con su boca hasta correrme y él lo hizo sin ponerme peros o mala cara. Después de aquello solo me quedó hacérselo con mis dedos, su delgado cuerpo se retorcía debajo de mí, sus manos arañaban mi espalda...

 

¡Yaa, yaa!

 

También lo hicimos en el baño, encima del inodoro, debajo de la ducha, al costado de la puerta y echados en la mesa de la cocina.

Casi cuando no pude notar sus facciones por la oscuridad noté que nos encontrábamos de nuevo en la habitación. Taka me besaba ahí debajo y yo solo acariciaba su cabello, lo ceñí hacia delante cuando el corrientazo del orgasmo se quiso prender por mi entrepierna.

 

¡Eh!

¡Solo una más Aki-chan, solo una más!

Pervertido.

 

Me sentí ahogado cuando me hizo entrar una vez más en él, nos besamos desesperadamente y solo pude caer, después, al suelo mientras lo sentía saltar sobre mí.

 

¡Taka!

¡La última, la última!

 

No fue esa la última.

No recuerdo cuál fue en realidad, ya que cuando desperté me di con que lo tenía abrazado contra mi pecho. Intenté moverme, pero un dolor en la espalda me lo impidió, palpé su piel y la sentí fría, busqué incorporarme para alcanzar su ropa, pero...

 

No te muevas o me enfado contigo otra vez.

¿Taka?, ¿te desperté?

No.

 

Cambié de posiciones e hice que se echara sobre la alfombra, no veía su cara, sin embargo era acertado que el enojo se le había volado muy lejos y solo estuviera engriéndose conmigo.

 

Mi Taka-chan travieso... 

Ni siquiera te acordaste de nuestro aniversario.

Sí me acordé, te di un beso mientras dormías.

¡Mentiroso!

 

Reí cuando sus puños golpearon levemente  mis clavículas.

 

Idiota.

Ok.

¡Retrasado!

Ya.

¡Maricón!

¡Oye!

¡Buaaa!

 

Lo acorralé con mi cuerpo y lo sentí pelear por querer levantarse, sonreí como idiota y busqué sus labios para besarlo de una buena vez.

 

Lo siento Taka, lo siento en serio.

...

¿En paz?

Aún no me muero.

Taka...

 

Entrelacé mi lengua con la suya, le besé como tanto le gustaba, enredé mis dedos en sus cabellos...

 

Te amo Taka... 

 

Un temblor hizo que sonriera.

 

¿Taka?

...

Taka por favor... 

Tonto.

Dímelo... 

¡No!

¿No?

No, es no.

No seas cruel.

Tú lo fuiste más...  idiota.

 

Mire hacia la ventana podía notar a lo lejos las luces nocturnas, estuve a punto de incorporarme cuando los brazos de Taka se apresaron entorno a mi cuello.

 

Vale, yo también.

Taka...

Pero aún estoy enfadado.

Ok, ¿podré hacer algo al respecto?

Tienes que ganar puntos.

 

Rasqué mi mejilla adolorida.

 

¿Puntos?

Sí, puntos, así como los que dan en los centros comerciales, si acumulas puntos al final te sacas algo bueno, algo así como un premio.

¿Tú eres mi premio?

...

Si solo tú eres mi premio seré muy bueno.

Más te vale.

 

Volví a besarlo.

Por lo menos no me rechazaba, de inmediato el cerebro se me iluminó.

 

Ya tengo puntos acumulados.

¿Por qué?

El depa... 

¿Qué? Muy chistoso, el departamento no vale.

¡Que no vale!

No.

¡Claro que vale, lo has disfrutado al máximo!

¡Akira!

Jaja, es broma....   Taka... 

¿Qué?

 

Tome aliento antes de hablar.

 

Te prometo que le diré a Shiroyama.

¿Ah?

Que le diré que somos novios, ¿si? No te tienes que preocuparte por eso, se lo diré dentro de poco.

 

Besé su hombro.

 

Porque somos novios, somos eso, no tengo porque avergonzarme... Taka yo... 

Ya olvídalo... 

Taka...

Que lo olvides, estaba enfadado cuando lo dije.

Nunca me avergonzaría de ti.

Ya lo sé.

¡No lo sabes!

¡Akira ya!

No voy a avergonzarme de que te quiero, recuérdalo ¿si?

Ok...  Aki-chan.

 

Sonreí cuando Taka aprisionó mi cintura con sus manos, el leve cosquilleo de su respiración en mi cuello me tranquilizó. 

 

Aki... 

¿Mmm?

Yo también te quiero...

 

Lo abracé y rodamos a un lado.

 

Ya sé.

Pero sigo molesto.

Haré que se te quite el enojo enano llorón... 

¡A quién le dices!

A mi enano llorón...

Tarado...

 

 

A la mañana siguiente fue el caos.

Taka estaba agripado y yo igual. Sin contar que él no podía caminar bien y eso me descontó los puntos que tenía de la noche anterior, no obstante descubrí en su comportamiento la necesidad de hacerme sentir culpable y pendiente de sus pasos.

 

Uno, dos... uno, dos...

¡Aguarda, me duele enfermo sexual!

¡Qué!

Lo que oyes.

Que recuerde fuiste tú quién quiso los tres últimos rounds.

¡Quién dice, a ver, quién dice!... ¡achuuu!

Jaja, está bien, cuidado que te tropiezas.

Takanori tiene sed.

¿Quieres un zumo?

¿Akira me comprará un zumo?

¿De qué sabor quieres?

 

Tuvimos que tomar tres buses para que no caminara de más, sentí temblar mis bolsillos cuando él hablaba en tercera persona sobre sus necesidades alimenticias.

 

¿No vamos a Matina, Aki?

Mejor vamos a casa ¿no?

¿Cuándo nos mudamos?

Cuando tú lo quieras.

Bueno...

 

Al bajar en la estación tuve que llevarlo sobre mi espalda mientras que él se embutía las roscas de arroz dulce que me hizo comprar en la panadería.

 

¿No quieres verdad Aki?

No, cómelas tú, aliméntate.

Bueno.

¿Están buenas?

Están ricas.

Me alegro.

 

Al divisar la tienda cerrada suspiré aliviado, los abuelos aún no volvían de Kyoto de seguro, menos mal, sino tendríamos que inventarnos excusas por el estado de Taka. Antes de abrir la puerta senté a Taka en el muro de la entrada, regresé corriendo por él y subí las escaleras con las últimas fuerzas que tenía.  Descorrí la puerta y cuál no fue mi sorpresa al ver a Shiroyama sentado entorno al kotatsu.

 

¡Bienvenidos!

 

Cabrón de Shiroyama, soy yo o los dos parecemos novios de Taka por la táctica de "complace a tu enano en menos tiempo y gánate un cuatro por cuatro..."

 

Sus caras están un poco amoratadas.

 

Ayudé a Taka hasta que lo dejé sentadito al alcance de unas manzanas que Shiroyama había empezado a cortar o bueno, que intentó cortar.

 

Oye Takanori...

Aki-chan tengo frío, la nariz me gotea, papel sanitario...

Ok, ahora lo traigo, ¿algo más Taka-chan?

Quiero un té calentito.

A la orden.

 

Le eché una mirada a Shiroyama antes de salir.  Di unos pasos hacia el baño y me llevé el papel para Taka-chan.

Al volver me quedé un minuto oculto en la entrada.

 

Oye Takanori...

... 

¿Takanori?

Hay un bicho molesto aquí...  un bicho gordo y feo.

¿Quiere la princesa que lo mate?

¡Tarado!

 

No me aguanté una carcajada.

 

Pues tú te lo pierdes, a que no adivinas qué hay debajo del kotatsu....  es algo que creo que te gusta...

 

Aguaité y me dio risa ver la cara fastidiada de Taka, era de película también la expresión de Shiroyama controlándose por no enviar lejos a mi enano por sus disfuerzos.

 

¿No quieres verlo?

... 

Bueno...  ¡pero mira qué es esto!

 

Mi amigo tenía en las manos una caja triangular forrada en papel de arroz con pinceladas azules, la movía de un lado a otro haciendo que su contenido sonara enérgicamente.

 

Que mala suerte que Takanori no quiera ver esto de aquí...

 

Decidí entrar cuando Taka le arrebataba de las manos la caja.  Le dejé a un lado el papel y me fui directo al armario.

 

¿Qué suena?

Ábrelo entonces.

 

Me quité la camisa y la tiré en el cesto de ropa sucia.

Taka rasgaba con cuidado la envoltura y Shiroyama tenía en los labios una sonrisa de triunfo.

 

¡Oh!

¡Son los últimos que quedaban!

 

Me aproximé curioso y los vi.

 

¿Kukuruchos?

¡Pero no son cualquiera, son los Kukuruchos de...!

¿Son la edición limitada que salió en la tele hace un mes?

¡Exacto Takanori!

Debiste de sufrir para conseguirlos, eh Shiroyama... 

¡Se, seee, ábrelos pues Takanori, abre uno, tienes que abrir uno!

 

Me senté al lado de ambos, Shiroyama estaba eufórico, tanto que él mismo abrió uno para Taka-chan.

 

Cómelo.

¿Ahora?

¡Que ahora, carajo!

Akiiii-chan, ¡Shiroyama me ha gritado!

Shiroyama... 

No le he gritado, ¡fue una expresión!, pero ábrelo, mira así...  ahora quiébralo por la mitad... 

Shiroyama, déjale que Taka los coma cuando quiera.

Nah, nah, rómpelo, así... ¿vez?

¡Tienen sorpresa!

¡Obvio!

 

Tome entre mis dedos la pequeña figurita de Nobita, al parecer esas eran las benditas sorpresitas de los Kukuruchos de edición limitada.  Taka volvió a mirarlo y sonrió complacido. Shiroyama tenía los brazos cruzados sobre la mesa, feliz, resplandeciente, ¡desgraciado, haberse esperado que yo sufriera la peor parte...!

 

¿Qué tanto estás mirando Aki?

¿Eh?

 

Escuché la risa de Shiroyama. 

 

¿Y el té?

Ah sí. Ya lo traigo.

¿Y qué tanto te sonríes tú, Aoi-san? ¿Ya preparaste el almuerzo?

¿Qué?

Son las tres de la tarde, acaso piensas matarme de hambre, ¿eh?

¡Ahhh!

 

Taka le miró con los ojos muy grandes y conmocionados, me fijé en sus manos crispadas, el semblante a punto de estallar... 

 

 Ya lo preparo...

¡Vale!

 

Acto seguido Taka se tiró sobre el tatami y cerró los ojos a la vez que se embutía la mitad del chocolate de un solo bocado.

 

¡¡¡Maldito enano degenerado chantajista!!!

 

Salté a un lado cuando miré el cuchillo que tenía Shiroyama hundirse en la madera de picar verduras.

 

Tranquilízate hombre.

 

Le dije mientras escurría el agua restante de los fideos recién hervidos.

 

¡¿Que me calme?!

 

Un nabo cayó en el suelo.

 

Aja, por lo menos está en casa.

¿Y eso qué mierda? Qué va a querer ahora ¿ah? Que le sople y le mastique la comida ¿ehhhh?

 

Controlé el fuego y coloqué la cazuela con agua hervida.  Fui donde el tofu y lo pique en trozos. 

 

Exageras.

¡Ustedes exageraron! ¿Te has visto la cara Susuki?

 

Abrí la alacena y saqué el pomo de salsa de soja, la escurrí sobre los trozos de pollo y la regrese a su lugar.

 

¡Además nos dejaron asustados! Sabes que pensé que el enano se largaría de Gazette, estuve a punto de entrar en pánico, Tazawa-san se hubiera colgado... 

Jejeje, Yune exageró un poco.

Mal nacido... 

Eh ya deja de jugar con el cuchillo y pica esa verdura.

¡Me vas a dar órdenes tú también!... ni que fuera su criada, hijo de... 

 

Reí por lo bajo y alcancé una sartén de cuenco profundo, la puse al fuego, eché un chorrito de aceite natural, un tanto de sal, un poquito de azúcar y coloqué los tallarines, luego agregué el pollo y lo salteé enérgicamente.  Al poco Shiroyama incorporó las verduras y le dejé el puesto para empezar a preparar el guiso de pescado que Taka me había pedido que le hiciera.

 

¿Meto el tofu aquí?

No... es para el guiso.

Creo que le has puesto mucha agua.

¿Tú crees?

Seee.

 

Estaba preparando las zanahorias cuando escuché el timbre de la puerta. Shiroyama ni se movió y yo tampoco, Taka estaba más cerca, tendría que ir a contestar, sin embargo esa idea quedó descartada al sexto timbrazo.

 

¡Laaaaa puertaaaaa!

Es en vano, ve abrir Shiroyama...

¿Y yo por qué?

¿Te lo recuerdo?

Muérete.

 

Di una carcajada amarga y lo vi yéndose con el delantal puesto, se le veía tan cómico pero no iba a decírselo.  Al instante volvió puteando al recién llegado.

 

¿Y Ruki?

Vete al infierno.

¿Y eso? Jajaja, no quise burlarme, pero imagina como fue de chocante verte con delantal, jajaja.

¡Qué te mueras!

¡Shiroyama deja ese cuchillo! Está arriba, Shima.... 

¿Quieren que les ayude?

Claro, desaparece.

¡Yuu! ¿Sigues enfadado por lo de ayer?

No me jodas.

Shima mejor sube, hazle compañía a...

A la princesa, está toda histérica eso sí, eh... 

 

Caminé hasta Shima y le obligué a subir al segundo piso.

Shiroyama encima te quejas, Taka ya ha dejado del lado su disgusto.

¡Pues que venga a cocinar entonces!

Pero si tú siempre cocinas, no sé de qué te quejas.

¡No me quejo!

 

Después de media hora toda la cena estaba lista. Shima tuvo que ayudarnos a llevar los platos ya que los dos no nos abastecíamos.  Los dejamos encima de la mesa y noté que Taka ensimismado mirando una caja de chocolates.  Shima sonrió y lo entendí, uno más a la lista de mantén a tu enano feliz.

 

Taka está servido, ven a comer. 

No quiero comer aún.

 

Le tapé la boca a Shiroyama cuando estuvo a punto de gritarle.

 

Ruki-chan todo tiene buena pinta, comamos.

Aún no viene Yune-chan.

¿Yune?

 

Shiroyama finalmente habló.

 

¿Cómo que va a venir? Nadie me dijo nada.

Yune-chan va a traer helado de manzana de Norte Feliz. Esperémoslo un poco más, me dijo que está a quince minutos de aquí. 

 

No pudimos protestar o contradecirlo, salvo bajar al primer piso y traer algunos platos para tapar la comida, así evitaríamos que se enfriase.

 

¡Ya llegó!

 

Yo tuve que bajar para abrirle la puerta, estaba abrigado hasta por demás, en una mano tenía la bolsa con el logotipo de Norte Feliz y en otra un sixpack de cervezas, le ayudé con las latas y ambos subimos al segundo piso.

 

¡Yune!

Hola a todos, aquí está tu helado Ruki.

¿Lo pongo en la nevera?

Vale, que yo voy.

 

Shima se dedicó a servirnos a todos, dándole una porción extra a Taka que estaba que se le volaban los ojos con todo el cargamento de comida que estaba sobre la mesa.

 

¿Has ido a Matina?

SEE...  alcánzame el arroz. 

Ten, y... 

Shiroyama déjalo comer.

Bah no importa Reita. ¿Me están preguntando por las ventas?

 

Sorbí los fideos.

 

Pues no sé.

¡Cómo que no sabes!

 

Dejé a un lado los palillos y estuve a punto de agregar algo cuando...

 

Eres el maniático de las cuentas y ahora no sabes nada de las ventas, hazme el favor, quieres ¿Yune?

Aoi-san déjanos comer en paz.

No me contradigas enano.

¡A quién le dices enano, abusador y golpeador de amigos!

¡Qué!

Ya chicos que la sopa se enfría... 

¡Eso eres, me dolió la cara!

Y para qué quieren las cifras.

¿Me preguntas a mí, Yune?

¡Come callado!

No van bien las ventas ¿no?

 

Los cuatro nos quedamos en silencio mirando a Shima.  Lo vi dejar a un lado el tazón humeante y colocar los codos sobre la mesa, él sabía, era obvio y la manera en cómo Yune intentaba esquivar la conversación no ayudaba tampoco. 

Me dirigí a Yune y le pregunté yo mismo.

 

Aún es pronto para dar resultados, no vamos ni una semana.

Pero las anteriores veces la mitad de tiraje se iba en la presentación y después de dos días.

Pero también recuerda que el número de ejemplares era menor.

En pocas palabras Yune, estamos en la cagada, ¡lo sabía!

 

Le di un codazo a Shiroyama por ser tan idiota a veces. 

 

Bueno ya nos irá mejor ¿no? Qué rico te quedó todo Aki-chan ne, comamos, comamos, ñan ñan...

Ruki...  oye Ruki...

¡Qué comamos joder yaaa, que estoy bien, tampoco me miren como si fuera un suicida!

Takanori... 

No jodas Aoi-san, solo come la puta comida de ahora... ¡maldición!

¡Taka!

 

Taka aventó la comida y se fue de la habitación sin decirnos ni pío. 

 

Déjalo solo.

Pero...

Que lo dejes solo Aki, que se le pase el coraje, cualquiera se sentiría frustrado, ya sabes cómo es el enano.

Mira que desperdiciar así mis hermosos nabos...

¡Yuu!

Tú tuviste la culpa.

¿Yo?

Sonaste como si fuera el fin de mundo, no siempre nos irá bien, sabes que ese mismo día había seis presentaciones más, sin contar que... 

Lo sé, Yune, lo sé, pero fue un decir.

Pues contrólate, pareces retrasado.

 

Hice caso omiso de lo que Shima me dijo y me levanté para ir a buscarlo. Fui al baño y no lo hallé, bajé a la primera planta y no di con él tampoco, por lo menos en la cocina no estaba. Caminé hasta el patio en dónde colgábamos la ropa y lo vi sentado encima de un balde rojo.  Me arrodillé a su lado y esperé en silencio sin verle la cara. 

Sabía que le entristecía. 

Nos habíamos esforzado enormemente, casi habíamos arruinado nuestra relación, y para qué... para que el single no fuera, tal vez, lo suficientemente bueno para ser vendido.

 

Taka...

Te tardaste mucho.

Yo...

Siempre te tardas mucho Aki-chan.

Lo siento. Oye... 

Ya estoy bien. Solo me enfadé un poco, lo siento. Espera un momento más y subimos a comer, ¿si?

 

Lo abracé sin decir nada.

Sé que era lo que necesitaba, yo también en su lugar lo hubiera deseado.  Después de un rato me separé de él y acomodé su flequillo desordenado, le acaricié las mejillas y le di un beso en el cuello. 

 

Buscas ganarte unos puntos, eh, Aki-chan.

No.

 

El me miró sorprendido. 

 

Solo soy yo dándote ánimos.

 

Taka sonrió y luego de dar un suspiro prolongado me dio la mano para irnos.  

 

¡Y mi sopitaaaaa!

Fue Yune.

¡Yuu!.

No, fue Takashima.

¿Yo?

¡Oigan!

Porque no vamos al parque de diversiones ¿eh?

Engendro ¿no has tenido infancia?

¡Yo solo lo decía par... ajjjj, te odiooo!

 

A las cinco de la tarde mientras la tarde moría nos encontrábamos en la rueda de la fortuna, no se podía ver el mar, pero si la ciudad y el cielo.  Taka estaba a mi lado y al frente Yune y Takashima sosteniendo a Yuu de los brazos, aún no superaba su miedo a las alturas. 

Apoyé los codos en mis rodillas y me dediqué a sentir el balanceo débil que provocaba el viento, cerré los ojos para intensificar los sonidos y sensaciones.

El crujido del metal hizo que olvidara todo a mi alrededor, no era el cuerpo que poseía lo que llevaba conmigo, no era nada...  era el viento.  El abandonar tus sentidos y vaciar la mente...  yo lo logré en ese instante.

Me sentía en armonía aún con los múltiples problemas que se abalanzarían a mí apenas tocara el suelo,  no pude sonreír, pero las luces que aparecían a través de mis párpados parecieron decirme...  

 

Lamento ser desesperante.

 

No abrí los ojos pero moví la cabeza en dirección a Yune.

 

Quiero que Gazette sea lo mejor. Trabajaré duro para ello.

 

Casi al instante la voz de Shima se prendió.

 

La última vez no toqué como debía. Y siempre estoy distraído...  me esforzaré para que vendamos mucho más en el futuro.

 

Reí bajito frente a lo que decía Shima, luego de un suspiró la voz calmada de Taka me llegó dulce...  

 

Siento haberles preocupado...  debí llamarles. Pero estaba enfadado, lo lamento. Prometo no hacerlo muy seguido.

¡QUE!

¡Yuu!

 

Aunque me cubrí la boca para impedir carcajearme fue inútil.  Shiroyama no podía con su humor, ni siquiera en una situación así de espiritual, jaja.

 

¿Qué hice ahora?

Arruinas la atmósfera.

¡Ni que estuviéramos en sesión de alcohólicos anónimos!

¡Ay Yuu no seas aguafiestas!

¿Yo?...  ustedes son los aguafiestas...  solo me desesperan... los cuatro...  odio que no nos vaya bien, ah carajo que lo odio... 

¡Jajaja!

¡Qué te ríes Takanori!

Eso sí sonó a alcohólicos anónimos, ajaja.

¡Es el encanto de Aoi-san!

Cállate enano.

Buuu.... 

Prometo que dentro de tres años nos van a rogar para tocar en diferentes night club, van a hacer cola, ¡van a ver! Se van a acabar las entradas, y vamos a tocar en el Budokan, ¡he dicho!

 

Todos estallamos en risas, incluido el loco de Shiroyama que la hacía de pitoniso anunciando un futuro que aún no sabemos. 

 

Eso sonó a mecánica de autoestima, jajaja.

Yuu estarías bien para animador, la haces eh...

¡Eh!

Ne, neee. Que falta Aki-chan. 

 

Abrí los ojos, mis amigos había dejado de reír y Taka me miraba expectante. 

No tenía nada especial en mente, no tenía palabras formales o disculpas como ellos...  yo solo...  

 

¡Quiero que esto dure para siempre!, jajaa

 

Me dieron ganas de abrazarnos a los cinco, incluso a este yo que se confunde tantas veces... 

 

Ese es mi amigo, venga, ¡aaaaaaaaah!

 

Los brazos de Shima me apretaron fuerte, las manos de Taka se colaron por mi cintura, me sorprendí a ver que fue el mismo Shima que desligándose de mí jaló a Yune para meterlo en el hueco que ambos formamos segundos antes al abrazarnos.

 

¡Yuu!

¡Aoi-san, solo faltas tú en el súper abrazo comunitario de Gazette!

Déjense de niñadas...

 

Le dimos mala cara... 

 

Ah, demonios... yayayayaaa, pero tantito y rápido que me da calor.

 

La tarde ya ha muerto...  y aún no nos bajan de este aparato gigante.

¿Se habrán olvidado de nosotros?

O tal vez estamos en la dimensión desconocida. 

Sería divertido quedarnos un rato más aquí...  

 

 

 

Continuará... 

Notas finales:

Hola a todos pequeños amiguitos, jajaa, cómo están???

Mil gracias por sus reviews, ya están respondidos todos y gracias en verdad, yo... ah diablos... solo que gracias.

Bueno yendo al capi, se lo violó con consentimiento, jajaa. Ah, bien que lo disfrutó, parecían dos enfermos, ok, no.

Jaja... a ver... no sé no tengo mucho que decir, si hay suerte subo un capi por Valentín, sino, pues nop.

La última escena salió de puro sentimiento, canción que logró que Manabuu terminara el capi fue FUJICHAKU, de los grandes Tsubakiya Shijuusou.

Ah ya sé!, no te salvas mujer pervertida, Misa-Misa!

Sabían que Reita tiene el dedo anómalo! Su pulgar izquierdo es deforme, jaja y el mío también, hahaha. Si no lo sabían lo saben ahora...   toda esa noche larga que me enteré,  nuestra conversación se centró en el DEDO y sus funciones:

Manabuu: eres tú mi butterfly? dice:

*noo nooo

*yupiii tengo una anomalia como reitaaaa

*yupiii

*lo pondre en las notas finales

*jajajaa

                                     a33;     Blue P la n e t         a33;     I will not regret,No matter what you wish...        Misa dice:

*jajaja yaa sabes...

*tiene que anotar todo lo que va a colorcar en las notas finales

*xDD tienes una lista ya...

Vexxx te dije que saldrías y además tú eres la pervertida porque tú empezaste con el dedo, muhjajaa. 

Manabuu: eres tú mi butterfly? dice:

*mi acercamiento a la dividad reitistica

Porque los que amamos a Reita nos sentimos, asì! Pero yo amo a Yuu, pero bueno en este capi yo amé a Reitita!

                                     a33;     Blue P la n e t         a33;     I will not regret,No matter what you wish...        Misa dice:

*al dedo deforme de Reita... quizás que cosas hace Reita conn ese dedo

*xDD

Manabuu: eres tú mi butterfly? dice:

*desde este momento mi DEDO no sera el mismo

*jajajajaa

*noooo

 

Algo mÁs...  quería unirme a una campaña loca que se me ha ocurrido pero que no sé porque lo pongo aquí... BUENO EN VERDAD SÌ,  DE VERDAD QUE ESPERO QUE EL NIVEL DE ESCRITURA EN AMOR YAOI SUBA,  NO ME PARECE JUSTO QUE PERSONAS QUE EN VERDAD ESCRIBAN FENOMENAL NO RECIBAN LA ATENCIÓN NECESARIA...   Y QUE PERSONAS QUE NI SIQUIERA SABEN HACER UN RESUMEN TENGAN TANTA EXPECTATIVA AÙN CUANDO SU REDADCCIÒN Y ORTOGRAFÌA DEJA MUCHO QUE DESEAR. 

 

Si eres lector y escritor sabes que un review es una alegría inmensa, una recompensa a tus tardes atareadas y tus malos ratos por no saber cómo continuar o hacer un capi entretenido digno de los lectores queridos.

 

Si eres solo lector anímate a dejarnos tus críticas y comentarios, sé respetuoso también al hacerlo; sé que la página no anda, pero ABRIR UNA HOJA DE WORD O EL BLOG DE NOTAS PARA ESCRIBIR primero ahí y luego pegarlo a la página no te hará más viejo. Es solo cuestión de minutos.

 

Bueno eso era todo y también respeten las ideas de las autoras, ¡NO AL PLAGIO! 

 

Me despido de ustedes con un beso gigante, gracias a las personas que me siguen desde el primer capítulo, es por ustedes y todos los que leen que aún no me borro.  Sin ustedes y su ánimo hace mucho que hubiera dejado de escribir. 

 

Manabuu

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).