Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Bebidas, recuerdos y un parque por konaxtakuya

[Reviews - 9]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

uuf, fué todo express el fic xD, se me ocurrió lo escribí y lo subí :B así de rápido xD espero les guste :) no escribo muy bonito but... es lo que hay xD

well n___________n disfruten, si quieren o_ó 

Estaba perdido en la acera, miraba cada detalle de ella como si en ese lugar pudiera encontrar la respuesta al como y porque te perdí, como si mirar cada imperfección de ese trozo de cemento fuera a decirme que es lo que debía hacer para recuperarte. Por mas que busco soluciones a mis interrogantes no las encuentro, todo se hace mas difícil si tu no estas cerca. De pronto comienzo a recordar como fue que todo lo que hoy terminó, comenzó… sonrío ante tal recuerdo. Era invierno y yo me olvidé mi chaqueta, mas no me importó porque estaba totalmente sumido en mis dolores y recuerdos tal cual como ahora. El frío era abusivo, no dejaba moverse con facilidad, podía sentir como el viento helado cortaba mi rostro al mas leve contacto como si de cristal se tratase; el agua, caía de forma descomunal mojando mi cabello, mi ropa y todo mi cuerpo… pero seguía sin importarme, podría decirse que ni siquiera me había percatado del “pequeño detalle” :  estaba lloviendo.

 

Paré un momento, miré al cielo y contemplé como caían las frías gotas de lluvia y fue en ese momento cuanto algo reventó de lleno en mi estómago haciéndome salir de mi ensimismamiento, apreté fuertemente mi vientre por el dolor para caer en cuenta de que alguien me había arrojado una lata de algo caliente.

 

- que malos reflejos… - decía alguien parado frente a mi, alguien al cual yo estaba odiando por tal acto.

- … -no respondí, sólo envié una mirada fulminante que hablara por mi,  pero fue en aquella fracción de segundo en que levante la mirada, cuando te vi, ahí parado, mirándome, esperando cualquier reacción de mi parte, hasta la mas descortés. Quedé estupefacto al ver el profundo color negro de tus ojos,  al ver como caía tu largo pelo negro y mojado sobre tus hombros, y al ver como el mismo contrastaba perfectamente con tu nívea piel. En sólo segundos fui capaz de analizarte, de conocerte por completo, sólo con una mirada que terminó por ser mas que intimidadora, una mirada agradecida… agradecida porque en el momento que vi tu hermosa sonrisa supe que eras tu… tu serías el amable caballero que me sacaría de la perdición en la que me encontraba.

- perdón, no era mi intención molestarte – fueron las segundas palabras que brindaste a mi persona, a las cuales respondí con una sonrisa. Mi cuerpo experimento mil y una sensaciones cuando diste la vuelta para partir, muchas ideas de no volver a verte cruzaron por mi cabeza… eso si sería la ruina. Me era imposible concebir la idea de que un desconocido halla despertado tantas sensaciones en mi en tan sólo segundos, en que por lo demás, ni siquiera un dialogo se había entablado.  

- g—gracias … - dije en un intento desesperado por mantener tu presencia algunos minutos mas junto a mi… Volteaste tan sólo para mirarme y esbozar una ligera sonrisa de satisfacción.

- será mejor que la cojas antes de que se enfríe – mencionaste apuntando con tu dedo índice algo que al parecer estaba en el suelo, tardé algunos segundos en entender de que hablabas… claro, la bebida caliente que me arrojaste. La tomé y volví a agradecerte a lo que tan sólo respondiste con un “¿cuantas veces mas darás las gracias? … digo, como para saber cuantos ‘de nada’ tendré que preparar para ti”. Ahora debo admitirlo, me avergoncé con aquel comentario.

 

Mas tarde me atreví a preguntar porqué me habías dado la bebida, pero no recibí respuesta, sólo dijiste “ no te lo diré, me gusta ser sincero y es algo que no puedo decirte… aun no”. No entendí tus palabras en ese momento, pero claramente después de algún tiempo comprendí lo que querían decir.

 

Después de aquel primer encuentro seguí frecuentando el parque en mis horas libres, sólo para saber si podía encontrarte una ves mas… no tenía como contactarte, no intercambiamos teléfonos ni nada ¡que idiota me sentía por eso! ¡no sabía siquiera tu nombre! . Pero que mas daba, tan sólo tenía la esperanza de volver a encontrarte. Día tras día iba al parque, ya había olvidado el porqué lo frecuentaba tanto, pero sin embargo sabía que debía hacerlo. Un día en una de mis tantas caminatas por el mismo lugar, unas manos se posaron en sobre mis hombros… me asusté, quise matar a quien fuera que estuviera tocandome con esa libertad, pero era tú, por fin te había vuelto a encontrar, mas bien… por fin volviste a encontrarme. Esta ves no olvidé preguntar como te llamabas, a lo que con una calida sonrisa en el rostro dijiste “Shiroyama Yuu, pero puedes decirme Aoi” luego preguntaste el mío con gran curiosidad, al parecer recién te habías dado cuenta que no sabías mi nombre.

 

- Takashima Kouyou – te respondí intentando calentar mis manos frotándolas una con la otra, sonreíste y tomaste una mis manos y la metiste al bolsillo de tu abrigo, y sin soltarla seguiste caminado. Así pasó el tiempo y poco a poco me fui enterando de mas detalles de tu vida, como por ejemplo tu predilección por el color azul, el porque tu seudónimo Aoi… ‘Flor de Malva’ y que amabas las guitarras, al igual que yo . También un día me confesaste que estabas enamorado… fue como caer al vacío, alguien me tomó y me dejó caer en el momento en que me diste esa noticia, jamás terminaba de caer, pero pude poner los pies en la tierra nuevamente cuando dijiste que estabas enamorado nada mas y nada menos… que de mi. No supe que decirte en ese momento, pero me tranquilizaste diciendo que no debía responderte si no quería hacerlo, y que me darías tiempo para pensar si era necesario porque sabías que venía saliendo de una relación bastante complicada, pero yo sabía que era lo que sentía, te amaba y de ello no había duda, mas decidí aceptar tu propuesta… lo pensaría, tenía claro que estaba enamorado de ti, pero no sabía si estaba listo para otra relación, aun tenía miedo… no sabía si podría soportar otra ruptura como la anterior.

 

El tiempo pasó, y aun no te daba una respuesta… comenzabas a impacientarte, intentabas que no se notase, sin embargo yo podía ver la inquietud en tus ojos. Un día llovía muy fuerte y quisiste dejarme en mi departamento, estaba listo para ingresar al edificio cuando tus calidos brazos me rodearon por la espalda,  y en mi oído susurraste

“ perdóname…”  no entendí el porqué te disculpabas, me volteé para quedar frente a frente “…perdóname por amarte tanto”  dijiste para cellar tus palabras con un dulce beso. Esa fue la primera ves que pobre tus apetecibles labios, los que hace ya un tiempo estaba deseando degustar, al parecer no esperabas respuesta alguna de mi parte ante aquel hermoso gesto al que era sometido, sólo deseabas un roce casual en el cual lograras tener un mínimo adelanto de lo que era totalmente tuyo sin saberlo siquiera… te sorprendiste cuando acerqué mi cuerpo al tuyo y te rodeé con los brazos por el cuello para evitar que rompieras la unión que teníamos en ese momento… Vacilaste un poco antes de tomar la iniciativa y pasar tus hermosas manos de guitarrista por mi cintura, y con un leve mecimiento dejarme entre la fría pared y tu calido pecho, el cual daba pequeños botes por el exagerado latir de tu corazón.

 

Esa fue la noche en que me prometiste el cielo y la tierra, el mar y el universo entero si así lo deseaba. Dijiste entre suspiros, gemidos, caricias y besos que me amabas, que confiara en ti, que no me harías sufrir como él lo hizo… esa fue la primera ves que me entregué a ti sin importarme mis miedos, mis debilidades y mis faltas… todo me daba igual, en ese momento éramos sólo tu, yo, y el amor que sentíamos el uno por el otro que daba sus primeras señales de vida aquella noche en que hicimos el amor.  

 

Comenzamos una relación en donde reinaba la paz y tranquilidad, como en pocas relaciones. Éramos una pareja ideal, pocas veces tuvimos problemas, siempre intentábamos evitarlos,  creíamos que si hacíamos las cosas así podríamos pasar el resto de la vida juntos, mas esta analogía con el pasar del tiempo nos jugó una mala pasada. Al parecer el no decir las cosas que nos molestaban fue deteriorando nuestra en algún momento perfecta relación, por lo que buscaste consuelo y comprensión en otro lugar… me dejaste y ya no hay nada mas que hacer, al parecer muy tarde comprendí que si no estas a mi lado no valgo por mi mismo, debí hacer algo cuando lo creí necesario, mas en ves de fiarme de mis creencias preferí  aferrarme a tus promesas, prometiste que jamás dejarías de amarme y que no me dañarías… Aquí me tienes ahora, rindiéndome ante la evidencia, me dejaste …“gracias por todo” fue todo lo que dijiste, estoy sólo como aquella ves, perdido en mis pensamientos y en mis recuerdos, lamentándome y tratando de encontrar un porqué que me es mas que conocido.

 

Han pasado 3 meses desde que rompimos, sin embargo sigo sin poder sacarte de mi mente, eres una imagen que se cruza una y otra ves frente a mis ojos que por mas que intente evitar mirar me es imposible, tu recuerdo sigue presente. De pronto una sensación de ‘dejabú’ interrumpe mis pensamientos… sin saber como, e llegado al parque en que todo comenzó, estoy caminando bajo la lluvia sin abrigo… todo es igual a aquel día… pero con una sola diferencia : un chico, al parecer está en las mismas precarias condiciones en las que hoy me encuentro. Me entran unas ganas enormes de conversar con él, tiene algo que me llama mucho la atención, pero… ¿como me acerco? , desvío la miraba buscando una respuesta a mi interrogante… y es ahí cuando veo que al cruzar la calle hay una máquina de bebidas calientes…

Ahora comprendo todo, el porqué me hablaste aquel día, el porqué de la bebida caliente, el porqué fuiste tan amistoso. Me viste tan amargado y triste que sentiste la necesidad de hablarme, al igual que yo con este chico que usa una bandita en su nariz, sólo quiero que no se sienta tan desdichado. Pero aun así hay un detalle mas importante que cualquier otra cosa… ese día… tu estabas igual de sólo y destrozado que yo… como este chico que ahora me agradece por la bebida caliente.

 

Me encuentro en tus zapatos Aoi… y sólo puedo decirte “gracias por todo”       

 

                                            

Notas finales:

woah! *O* espero que les haya gustado n_n

dejen reviews, me alegrarían la vida *-* y obvio si algo no les gusta me dicen :) así podré mejorar mis siguientes Fic's n_n , las críticas reconstructivas son buenas (Y) xD 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).