UN ANGLE LLORA - SONG FIC
“Las flores ya no llegan
El poema se acabó
Lo que un día fue amor
En amargura se volvió”
Desde el día en el que me dijiste “debo irme” siempre te he estado esperando, conteniendo mis ganas de volver a ser tuyo, suspirando por aquel tan anhelado día de tu regreso, ahora después de 2 años te volví a ver, pero me di cuenta de una cosa…ya no eras el mismo, cambiaste por completo, en aquella discusión que tuvimos nuestra relación se fue a la basura.
-Bienvenido a casa amor- me acerque a ti y te di un beso en la boca que correspondiste…indiferente.
-Hola, sabes, estoy cansado iré a dormir-
-Pero…prepare una cena especial con tu platillo favorito- te dije amablemente sin embargo…
-¿Qué no entiendes? Estoy cansado…deberías también dormir…- seguiste tu camino sin siquiera voltear a mirarme y por primera vez en mi vida me habías levantado la voz
-¿Qué te paso?- te pregunte sumamente triste, la forma en la que me hablaste me hizo flaquear.
-¿Qué?- Paraste en seco, pero nunca volteaste a mirarme, me acerque a ti y te abrase por la espalda
-¿Qué fue lo que te paso? Si no te has percatado, por primera vez en nuestras vidas, me levantaste la voz- Contuve mis ganas de llorar – No sabes cuanto anhele este día, no sabes cuanto te extrañe…-
-Jiroh escúchame, solo estoy cansado…-volteaste y me abrazaste, tus brazos ya no tenían el mismo calor- Además, no crees que deberíamos separarnos de vez en cuando…-
-¿Qué?- me separe de ti y te mire a los ojos -¿Estas diciendo que…?-
-Jiroh, no todo el tiempo estaremos juntos además, aun no somos formales y…-
-¿Qué quieres decir?...Keigo- No pude mas y las lagrimas comenzaron a rodar lastimosamente sobre mis mejillas
-Ah…bien…te diré la verdad…-tus palabras me hicieron temblar de pies a cabeza- Jiroh en estos dos años, volví a encontrarme con Oshitari y pues…él y yo pensamos…casarnos.
No pude mas, aquellas palabras hicieron que todo mi mundo se derrumbara, ¿te casaras con Oshitari?, ¿que fue lo que paso?, ¿Por qué?, ¿Por qué me haces esto?, después de haber estado juntos la secundaria, la preparatoria, la universidad, después de aquel día en el que me dijiste “vivamos juntos”, vienes y me dices que te casas con otro, me siento fatal.
-Jiroh no llores…yo-
-¿Qué no llore? ¿Acaso quieres que me ría? Eres un completo idiota, después de dos largos años de soledad, dos años de esperarte, vienes y me dices como si nada que te casas con otro, lo sabia…- me deje caer en el suelo de rodillas y pose mis manos sobre mi cabeza – por eso no me hablabas, por eso nunca contestaste mis llamadas, nunca…-
-Jiroh, lo siento de verdad, lo siento, pero lo nuestro no iba a progresar y yo…- posaste una mano sobre mi hombro y yo me aleje de ti bruscamente- ¿Jiroh?
-…- no dije nada y me levante del suelo, tome mi cartera, las llaves de mi auto y me acerque a la mesa que había arreglado perfectamente para la cena – has lo que quieras…- tome la botella de champagne que había en esta y te la arroje, la esquivaste difícilmente y salí corriendo del apartamento subí en mi auto y salí hecho la raya del lugar
“El quiere regresar
El tiempo que pasó
Para poder revivir
Los placeres del ayer”
Como me hubiera encantado que en estos dos años, hubieras estado a mi lado, sin embargo ahora me da rabia el imaginarme cuantas veces te revolcaste con ese maldito, cuantas veces te beso, cuantas veces te hizo suyo, cuantos hoteles ensuciaste, los odio a los dos…Me encantaría poder regresar el tiempo y nunca haberte dejado ir, nunca haberte perdido así, pero eso es imposible, en mi desesperación tome mi celular y llame a Gakuto…Gakuto…¿Oshitari estaba con Gakuto no? Entonces esto fue…¿planeado?…
-Hola…-
-Gakuto soy Jiroh- dije desesperadamente
-…Estas llamando al celular de Gakuto, posiblemente haiga olvidado mi celular o se le haiga terminado la batería, deja tu mensaje y después me comunico contigo…tuuu...-
-Demonios…- finalice la llamada y busque otro numero y llame…
-Hola, Ootori al habla…-
-¿Chou-chan?-
-Ah, Jiroh-san, me da gusto volverlo a oír…¿Qué se le ofrece?- al fondo pude escuchar la voz de Shishido, al final quedaron juntos, eso me alegro demasiado, al menos tú habías cumplido tu sueño
-ah…veo que estas con Shishido…jejeje- reí nerviosamente
-Si, asi es, ¿paso algo?- te oi preocupado
-Ah…nada olvídalo…-
-¿Jiroh-san?-
-Choutaro…te quiero…cuídate mucho y cuida mucho a Shishido…- una vez mas comenze a llorar, escuchaste mis sollozos y te exaltaste
-Jiroh-san ¿Que pasa? Hola… ¿Hola?...¿Jiroh-san?...-
-Perdóname…me voy…no te preocupes por mi…solo avísale a mis padres ¿si? Adiós…-
-Espere Jir- colgué y avente mi celular por la ventanilla del auto, lo deshizo un autobús, era de noche y yo también estaba cansado, tome una de las tantas avenidas principales y comenze con un tour nacional…
“Ya no puede ver
Las cosas igual
Porque en el mar de olvido
Todo ya quedó
Ya el océano ha perdido
Su color azul.”
De pronto, mi vista se nublo, me maree y solté el volante para agarrarme la cabeza, todo me daba vueltas, mire hacia el frente y los colores cambiaban constantemente, me sentí horrible, quise vomitar, sin embargo me resistí, de pronto, solo escuche el claxon de algo y un horrendo golpe…sentí que mi vida había llegado a su fin, bueno…desde hace dos años…ya había terminado…tome aquel colgante que me regalaste justamente hace dos años en nuestro aniversario de novios y lo apreté contra mi pecho…solo escuche el llanto de un niño, fue lo ultimo que escuche…
“Las estrellas miran,
La luna lo abraza
Y un ángel llora.”
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“Pasaron ya los años
Y a él se olvido
De el amor que prometió
Cuando lo conoció”
No sabes cuanto me dolió haberte dicho eso, pero…pero sino lo hacia, pudieron haberte hecho daño, pudieron haberte matado, él me amenazo y me dijo que si no te dejaba y me quedaba con él te iba a asesinar, me hubiera encantado decirte la verdad, sin embargo, no podía, el me dijo que había instalado cámaras en nuestra casa sin que nosotros nos diéramos cuenta y que se daría cuenta si lo hacia o no…perdóname, perdóname… de pronto sonó el teléfono y atendí a la llamada
-¿Si? ¿Diga?-
-¿Atobe-Keigo-san?-
-Amm…soy yo…¿Qué se le ofrece?-
-Hablo del hospital general de la ciudad, ¿conoce a Akutagawa Jiroh?-
-Si…es mi…-por un momento me quede pensando ¿ahora que era de mi?- es mi amigo…- que idiotez, es el amor de mi vida.
-Usted debe venir inmediatamente, lo estaremos esperando…-
¿Qué habrá pasado? De pronto ideas horrendas comenzaron a inundar mi mente y con todo el miedo del mundo salí del apartamento y me dirigí al hospital, cuando llegue me acerque a la recepcionista y di mi nombre y pregunte por ti…
-Soy Atobe Keigo, vine porque me llamaron…-
-Ah, señor Atobe, acompáñeme por favor…- la seguí y subimos por el elevador hasta el cuarto piso, salimos del elevador y caminos unos cuantos metros y de pronto la enfermera se paro frente a la habitación 371 de la cual salió un doctor acompañado de otra enfermera
-Disculpe soy Atobe Keigo ¿Qué le sucedió a Jiroh?-
-Ajem…lo que le voy a decir no es fácil…- temblé de pies a cabeza – el señor Jiroh…acaba de perder la vida
-…- me quede estático, mis ojos se agrandaron y mi cuerpo no me correspondía, en mi garganta se formo un enorme nudo, mis ojos se inundaron de lagrimas, y unas cuantas resbalaron por mis mejillas, utilice toda mi fuerza para poder articular palabra…- ¿Q-Que…le…p-paso?-
-El señor Jiroh sufrió un grave accidente, choco con un enorme camión, cuando llego aquí seguía vivo, pero desafortunadamente no sobrevivió, murió a las 10:57 pm. Lo siento tanto…-
-¿Puedo…v-verlo…?- mi voz temblaba, todo mi cuerpo lo hacia, pronto caería…
-Adelante-
“Entra la habitación
Y en la cama el lo vio
Toma su cuerpo frío
La tristeza lo mato”
Entre a la habitación y ahí estabas, una fina sabana de seda te cubría por completo, me acerque a tu cuerpo, sin más, rompí en llanto dejándome caer sobre ti…sobre el cuerpo de mi propiedad…para mi, pasaron horas, días, semanas, meses…años…me levante y quite la sabana de tu rostro y lo acaricie, no lo soporte y tome tu cuerpo enredándolo entre mis brazos, aunque quisiera, no podía devolverte la vida, no podía devolverte tu calor, ya no podía hacer nada…volví a dejarte en aquella cama y mire tu mano derecha…estaba cerrada…la tome y abrí tus dedos…en la palma de tu mano, se encontraba aquella cadena que te regale en nuestro aniversario…mi vida se destrozo…
“Las flores ya llegaron
El poema empezó
Sobre una tumba fría
Él llora su dolor”
Ahí estábamos, frente a tu tumba, los gritos de tu madre resonaron en mi cabeza, los sollozos de Ootori inundaban mis ojos, sus palabras hicieron que mi llanto fuera el mas doloroso, “me llamo y me pidió perdón” dijo Ootori antes de volver a llorar, llore a mas no poder…mire a mi izquierda y ahí estaba ese bastardo…Oshitari Yuushi… ¿Cómo? ¿Aun tiene el cinismo de venir al entierro? Es un maldito…se acerco mas y mas a mi y me susurro al oído…
-Al final…no pudiste hacer nada…-
-Hijo de perra…- le susurre
-Shh…se educado…estamos en un entierro…-
-Vete…vete…maldito bastardo…-
-No te preocupes, hice mi cometido no me volverás a ver…-
“El solo quiere regresar
El tiempo q paso
Para poder perderse así
En la dulzura de su voz”
Se alejo de mi y volví mi vista hacia tu tumba, rodeada de flores, yo simplemente quiero que el tiempo regrese y aprovechar este perdido, evitar todo esto, pero es imposible…volví a mirar a mi izquierda y ahí estaban mi madre y mi padre, mi madre lloraba como nunca, jamás la había visto así…se acercaron a mi y mi madre me abrazo
-Hijo…hijo mío…se fuerte…es una perdida muy grave…yo…lo…quería tanto…Jiroh-kun…-me soltó y se arrodillo frente a tu tumba, me incline y la acompañe en su dolor, pero te aseguro que mi dolor era mas grande como el de ninguno…eres el amor de mi vida…
-Atobe…- la voz de mi padre me saco de mis pensamientos y me levante para verlo a la cara, pasamos unos segundos viéndonos y de pronto nos abrazamos fuertemente…palmeo mi espalda y de pronto escuche sollozos…-tu madre tiene razón…-se separo de mi y me tomo por los hombros –seamos fuertes…-
Volví a abrazarlo y caí junto a él de rodillas, mi madre nos abrazo y yo simplemente lo dije…- era…el amor…de mi vida…-
-Hijo…-
Sin mas grite con todas mis fuerzas, debía desahogarme, calmarme y volverte a ver…
“Las estrellas miran, la luna lo abraza
Y un ángel llora”
Nuestros amigos simplemente nos miraban con mucha tristeza, mi padre me abrazaba y lo único que escuche fue tu llanto…así es, tú, mi ángel, estabas llorando…Yo no se para que hice todo lo anterior, si al final…te perdí…me arrepiento tanto…
Semanas después en las noticias salió un reportaje donde se informaba que el tenista profesional y pareja de Oshitari Yuushi, Gakuto Mukahi, había sido asesinado en su propia casa.
-Bien hecho…el dinero esta en la mesa…puedes irte Fuji…y gracias-
-No te preocupes…llámame cuando necesites desacerté de alguien…hasta luego…- Cuando salió, simplemente sonrei macabramente y apage el televisor
-Es tu turno…Oshitari Yuushi…debes sufrir lo mismo que yo...jajajaja-