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Vanidad interrumpida por Musaga
Notas del capitulo: Siguiendo con mi tema central “las bizzarradas” les traigo este pequeño fic…más bien es un drabble de la Sleepless Pair.
*Aclaración: hagamos de cuenta que los personajes ya están en la preparatoria de Hyotei, bueno no me imagino a unos niños de catorce años pensando en sexo jaja.
*Prince of tennis no me pertenece*
Atobe Keigo, el joven ms emblemtico de todo Hyotei, el nico capaz de mover masas con un solo chasquido de dedos. Personalidad indomable, con una presencia fuerte y difcil de ignorar, caminar pausado pero siempre elegante y seguro de si mismo. Arrogante, altanero, brabucn y egocntrico. Egocntrico por sobre todas las cosas, pero nunca por encima de l mismo, su desmesurado ego trae consigo una ola de vanidad inaudita, de seguir existiendo la “hoguera de las vanidades” seguro el joven Keigo sera el primero en arder en las llamas.
Estuvo cerca de considerarse a si mismo como su fan nmero uno, pero eso cambi cuando descubri que Jiroh ya se haba autoproclamado como el fan nmero uno de “Ore-sama”. Se sabe imponente y un icono cercano a la perfeccin en todos los mbitos, en especial en el tennis, con un juego agresivo y con pinceladas de aristocracia pura en cada una de sus ejecuciones, cada saque es exquisito y exacto, nada mal para un joven de su edad.
Cualidades mltiples respecto a su personalidad se refiere, pero sin dudad una de las caractersticas ms emblemticas de Atobe es su envidiable y perturbador fsico, sin duda ese hombre haba sido bendecido por los dioses, tenia el favor divino de la belleza; rostro simtrico y afilado, pmulos delgados al igual que sus carnosos labios carmn, ojos grandes rasgados y expresivos, comnmente expresan soberbia y exceso de confianza. A pesar de su edad ya posea un cuerpo alto, delgado pero bien trabajado, atltico y proporcionado, cubierto por una capa de nvea piel.
Era perfecto, tena un rostro envidiable, pero esa maana de verano…
-Atobe tienes un barro!- grit horrorizado Gakuto, sealando con espanto la imperfeccin en el rostro de su capitn, no era espantoso el hecho de ver un barro, pero si era extrao ver algo como “eso” en el rostro suave y liso del mandams de Hyotei.
-Ore-sama no tiene imperfecciones, Gakuto-
-Buchou, ah….- deca Otori junto a Mukahi.
-Eh?- Por su parte, el aludido llev su mano a la altura de su mejilla, lugar donde Gakuto seal. Pas un par de veces sus dedos sobre la parte inflamada de su piel, abriendo los ojos enormemente, dejando apreciar la sorpresa que se apoderaba de l.
-Qu pasa Atobe, tu fastuosa fortuna no es suficiente para comprar un jabn?- Keigo era capaz de someter verbalmente a Shishido en cualquier momento, pero cuando se hablaba en especifico de un tema como su vanidad y rostro, en donde se pona en tela de juicio el estado terso de su piel dioses que senta perder la cordura!
-Jiroh duerme mucho…- fue lo nico que pudo decir el joven Keigo a modo de queja en un casi inaudible susurro mientras agachaba un poco la cabeza ocultando su rostro. Otori miraba a todos, pues el resto de los titulares se rea, Atobe dijo un chiste?
-No entiendo, de que se ren?-
Shishido se acerc a su pareja –Veras Otori, se dice que cuando te sale un barrito es debido a que te aguantas las ganas de… de…estar con tu pareja y pues si Jiroh duerme mucho…- Otori no entenda de que hablaba el joven, busc a su siempre confiable amigo Hiyoshi.
-A mi no me veas- dijo el muchacho alejndose de ah.
-Otori, lo que Shishido intilmente trat de explicar, es que Atobe tiene eso en la cara por que casi no tiene sexo con Jiroh por que nuestro holgazn amigo duerme mucho- dijo Gakuto intentando no rerse. Atobe slo meneo la cabeza.
-Buchou!-grit Otori un poco ruborizado.
Al instante se percataron de que el alegre castao apenas iba llegando, saludos a todos con una jovial sonrisa, poniendo especial atencin en Keigo dando un pequeo beso en los labios del contrariado capitn de Hyotei. -Qu sucede Atobe?- pregunt Akuragawa. -Estos inutiles se burlan de Ore-Sama- se quejo el capitn, Jiroh parpadeo, ignorante a que la causa de la burla posiblemente era debido a l. Keigo al instante fue por sus cosas a la banca y tomo de la mueca a Jiroh y lo empez a jalar.
-Hoy no entrenaremos- sentenci Keigo ante la mirada divertida del resto del equipo –Vamos Jiroh, debes regresar a la perfeccin el rostro de Ore-sama-
FIN
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