Envestida tras envestida, gemido tras gemido y beso tras beso…
Y en mi mente retumbaba las palabras, pasión, deseo, lujuria, sexo, gemidos, placer, dios cada golpe certero en mi interior cada envestida, desbordaba pasión, propia de su dueño.
De mis labios sale un-seto…mas…dame…mas ahí, ahí, ahí sigue mmmmh-en roncos gemidos, rasguñaba su espalda, no se si por el placer o por recompensa, cada ves que da en un punto de mi estrecha entrada haciendo que arquee mi espalda hacia delante impulsándome hacia el, provocando así que me entierre mas en su erecto miembro tocando otra ves ese punto que me vuelve loco gimo con mucho mas fuerza y es cuando me da un escalofrío placentero al sentir la respiración de Kaiba cerca de mi oído, escuchando su respiración acelerada y un intento en vano en no gemir pero claramente puedo sentir que esta cada ves mas excitado al igual que yo…
El éxtasis nos llena por dentro y las penetraciones de Kaiba son mucho más rudas que al principio y creo que lo ebrio se me ha quitado, recorre con habilides mis piernas y de ahí se sube a mis muslos llegando hasta mis glúteos acariciándolos deliciosamente.
-se siente…bien…Wheeler?-¿me pregunto?, no lo se yo no proceso bien en este momento, mi mente esta en blanco por las oleadas de placer yo solo me limito a sentir y gemir cada ves mas fuerte. Toma mis cabellos rubios halándolos hacia tras dándole una perfecta vista de mi blanco cuello, posa sus labios hambrientos mordiendo succionando, lamiendo, cada centímetro de mi piel-dime…Wheeler-me besa con pasión embistiéndome con mucho mas fuerza, sacando de mi boca otro gemido que se pierde en los labios del otro mordiendo así mi labio con demasiada fuerza sacándome sangre y yo mas que reprocharle solo puedo gemir y pedir mas volviéndome loco completamente llenándome de placer, Kaiba hace un rugido que hace que me recorra un escalofrío embriagante…
Y exquisitamente delicioso…
-quien es tu dueño perro- me dice sorprendiéndome por su pregunta… yo no cederé no pienso ni pretendo decir lo que me pide, yo solo niego y le digo- ¡ja! Nun…ca ricachón…arrogante-para de pronto las embestidas.
Y en un rápido movimiento me coloca a cuatro tomando mis caderas con sus finas pero largas manos-¡DILO!... perro quien es tu amo-vuelve a pedir pero yo solo niego con la cabeza.
-métela ya… Kaiba… onegai-se que no ruego pero es que si este bastardo no mete su miembro hasta el fondo de mis entrañas terminare por volverme loco del placer-por favor- le suplico pero el muy bastardo se mofa por mis constantes pedidos porque me penetre.
-si quieres que te la meta, entonces di quien es tu dueño Wheeler, dilo y cumpliré tu deseo cachorro- toma mi cara con unas de sus manos levantándome en el proceso de mi antigua posición-dilo y te are gritar como una vil puta-sonríe prepotentemente, haciéndome fruncir ligeramente mi entre cejo.
-púdrete Kaiba-toma uno de mis rosados y erectos pezones entre sus dedos apretándolos al grado de hacerme gemir de dolor por la reciente tortura hacia mi piel- jamás te rogare Seto Kaiba, jamás-muerdo uno de sus dedos que tiene cerca de mis labios.
-arrg, maldito perro me mordiste-y con furia vuelve a colocarme en cuatro patas penetrándome rudamente haciéndome daño causando ala ves un extraño escalofrío excitante que saca de mis labios hinchados un gemido ronco combinado con placer y dolor, saca nuevamente su sexo de mi interior y se acerca hasta quedar a unos centímetros de mi oído-di quien es tu amo perro-dice torturando otra ves mis pobre pezones- ¡CON UNA MIERDA QUE LO DIGAS MALDITO PERRO, QUE ES TAN DIFICIL DECIR ESO WHEELER¡-grita al borde del cólera, haciendo mas presión en mis pezones, gritando por el ardor que causa en mi sensible piel.
-y…ya Kai…ba…me…haces daño-aprieto mis ojos por el dolor-entonces dilo Wheeler-cabreado es poco, a comparación a como en realidad esta Kaiba esta furioso, y en todo mi cuerpo me recorre un extraño miedo apoderándose de mi poco a poco.
Muevo mi cuerpo inquieto tratando de zafarme de las fuertes manos de Seto, para poder liberarme de el y correr como un condenado, tengo miedo y esto se esta saliendo de control, lo que empezó como un buen polvo se convirtió en sexo rudo y mi mente esta procesando que corra lo antes posible que mi vida corre peligro y por fin me libero del fuerte agarre, pero el toma mi brazo para evitar que me levante de la cama.
-¿Tienes miedo cachorro?- me pregunta el muy imbesil.
-esto se esta saliendo de control Kaiba-le digo desafiante y mirándolo con enfado.
Rápidamente me coloca otra ves en cuatro diciéndome al oído-dilo… solo ¡DILO!- me penetra sin moverse-DILO MALDITA SEA PERRO-toma mis caderas y casi puedo jurar que dejaran marca sus dedos en mi.
-tu…Kaiba tu eres mi dueño-sedo por fin a sus sucio deseos, y las penetraciones se hacen presente ocasionándome una oleada de placer, volviéndome loco con cada embestida que da a mi próstata, haciéndome gritar y gemir con placer desbordante.
-quien es tu amo-lo dice y se que espera que diga que le pertenezco-tu Kaiba…hay dios…que bien se diente…-me penetra con mucho mas fuerza, y mi miembro requiere atención inmediato, así que llevo mi mano hacia mi erecto pene y me masturbo al son de las embestidas, siento mi orgasmo cerca y el de Kaiba también así que acelera mas las penetraciones llegando por fin al tan ansiado éxtasis. Derramándose así Kaiba en mi entrada y yo en las negras sabanas de seda.
Me desplomo sin fuerza sobre la cómoda cama, respirando con dificultad por el reciente orgasmo, y Seto también lo hace sobre mi espalda, sintiendo aun el post orgasmo.
-eso fue genial-digo con una sonrisa estampada y con mi respiración aun acelerada acomodándome boca arriba.
-lo podemos repetir cundo quieras Wheeler-me dice con sensualidad mal disimulada.
-enserio, eso estaría muy bien-suelto una risita y beso sus labios jugando perezosamente con ellos.
Me separo de el dirigiéndome al baño para tomar una ducha, y recuerdo como llegamos a esto…
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Veía como mis compañeros corrían de un lado a otro haciendo regocijo por que dentro de unas horas seria la fiesta de Halloween, todos arreglando el salón de gimnasia, y entre risas y bromas se nos hiso mas amena la actividad.
Yo solo me limitaba a mirar con alegría lo que hacían mis amigos, no tenia ganas de hacer nada así que saque mi mini reproductor de música, me coloco los audífonos para enseguida escucharlo.
Me recuesto en una de las bancas de por ahí escuchando la dulce melodía de *Sha la la*(1) relajándome al instante y moviendo la boca pronunciando en silencio la letra de la canción, pero mi dulce momento es interrumpido por Yugi quien me mueve insistentemente, abro un ojo levantándome al instante.
-¿Qué pasa yug?-le pregunto con mi inusual sonrisa y el me la devuelve.
-únete a nosotros Joey, ven a dorna junto con nosotros-yo niego con una sonrisa aun en mis labios.
-lo siento Yug, pero no estoy con ánimos de nada hoy-vuelvo a acostarme, para relajarme nuevamente con la melodía tranquila de la canción y solo veo como mueve su boca para yo enseguida serrar mis ojos nuevamente.
Y después de un buen rato siento nuevamente que alguien me mueve insistente-hey levántate, ya nos tenemos que ir viejo-me dice Tristan con una sonrisa que yo devuelvo con ganas-ya es hora de irnos dentro de dos horas cera la fiesta-me levanto con pereza estirándome en el proceso acompañado de un gran bostezo.
-ya tan rápido, ¿cuanto me quede dormido?-digo después de otro gran bostezo, caminando a la par de Tristan.
-la verdad no mucho pero apresurémonos si queremos alcanzar a vestirnos-me dijo corriendo como un niño pequeño hasta la entrada del campus.
Sonrío con mas ganas corriendo igual que el-valla, valla, valla el perro corriendo detrás de su amo, fabuloso que mas sigue Wheeler, ¿traer la barita?-volteo con cara de enfado acercándome hasta el poseedor de esa estupida voz arrogante, tomándolo de las solapas de su uniforme.
-que demonios quieres Kaiba, no tiene algo mejor que hacer como…-callo un poco como meditando mis palabras-a si, como irte a tu empresa-suelto sus solapas y me doy media vuelta.
-que gracioso hace un rato estabas corriendo como un perro, y ahora te pones a gruñir como animalejo roñoso-me dice el muy bastardo pero lo ignoro-OH, el perro me esta ignorando-no me contengo mas y voy con la intención de propinarle un golpe pero Tristan me detiene tomándome del brazo y arrastrándome prácticamente a la salida.
-vamos viejo tenemos que irnos deja al maldito de Kaiba-me arrastra y a regañadientes le obedezco, alejándonos de la escuela y perdiendo de vista a la figura esbelta de Kaiba.
Después de que Tristan me dejo en la casa me arregle inmediatamente cambiándome con mi disfraz y ahora estoy solo retocando un poco mis ojos contornándolos de negro para darme un aspecto mas vampiresco o brujesco, ja ni siquiera se si existen esas palabras, me miro por ultima vez en el espejo y mis ojos se ven realmente de negro pues mis parpados están completamente de negro y bajo mi ojo también delineándolo resaltando mas mis mieles iris, tomo mi capa(2) y subiendo mi gorro, salgo con rapidez de mi casa, tomando un taxi para enseguida dirigirme a la fiesta.
Y después de ahí fue todo muy rápido, Tristan, Yugi, Tea, Duke, Malik, Marik y Yami, tomando bebidas en una mesa donde enseguida yo les acompañe, risas, bromas y anécdotas vividas, y poco después Duke llego con alcohol y en eso llego el ricachón yo llevaba con unas 3 copas del votka que trajo Deblin.
-miren hay viene el ricachón prepotente- se deja oír Duke con una sonora carcajada, volteando todos a mirar al recién llegado y en mis labios se surca una sonrisa de burla.
-OH que generosos son alah, y budas al honrarnos a nosotros los plebeyos con tan honorable presencia-me mofo ante mi broma y todos los demás me siguen.
-que gracioso Wheeler-se sienta con enfado en sus facciones cerca de Yugi, para después mirar la botella de vino sobre la mesa-¿Qué es esto?-frunce ligeramente el entrecejo.
-yo pensé que tu IQ era demasiado grande como para darte cuenta que es vino genio-digo a modo de molestarlo y empezar una pelea.
-claro que se que es vino, a lo que me refiero que es lo que pretenden con esto- señala con su mirada la botella media bacía.
-solo es un poco de alcohol para alegrar el ambiente-responde Tristan.
Y después de eso ya no supe más de mi, solo música, bebidas alcohólicas, bailes cadenciosos y risas.
Sentía que todo se me movía alrededor y solo sentí unos fuertes brazos alrededor de mi cintura sosteniéndome para no caer-estas borracho joey deberías irte a tu casa- me dijo en mi oído-vamos te llevare-me dice en un susurro.
-no- me detengo en mi caminata-quiero ir a tu casa-le digo coquetamente dirigiéndome a el con sensualidad y pegando mi cuerpo al suyo.
-a que juegas Wheeler-me dice con una ceja levantada-no caeré en tus jueguitos.
-oh vamos Kaiba yo no le diré a nadie solo una noche de sexo y ya-le propongo en su oído y veo claramente como se le eriza la piel al contacto con mi aliento contra su piel, beso sus labios con pasión al principio Kaiba no correspondía el beso pero después rodeo con sus fuertes brazos mi cintura pegándome mas a el y yo abrazo su cuello haciendo el contacto mas agradable y excitante después nos separamos con la respiración agitada y el solo me señala la limusina, subimos a esta y fuimos rumbo a su mansión dentro de la limusina nos besábamos con frenesí y deseo pasional. Kaiba hace mas presión entre nuestros cuerpos acariciando mi espalda y piernas que descansabas una a cada lado de la cadera de Seto moviéndome deliciosamente sobre nuestros miembros rozándolos sacando de mis labios gemidos de excitación y lujuria, el ver cada reacción de Kaiba me hacia estremecer, y mas cuando me miraba con esos posos azulinos.
Después de llevar un buen rato de agasajarnos y besarnos hasta decir ya no, llegamos a la mansión adentrándonos en esta e ir directo a su cuarto, donde nos desvestimos con desesperación, sin dejarnos de besar y acariciarnos, llegando por fin a su cama donde se deja caer sobre mi sin dejar todo su peso sobre mi, baja hasta mi cuello desabrochando lentamente mi camisa, besando cada pedaso de piel que se expone gustosa con cada botón que desabrocha, liberándome de esta lame mis pezones erectandolos al instante de mis coxis hasta mi nuca me recorre un escalofrío excitante arqueando mi espalda hacia atrás, poco a poco las prendas nos faltan y solo quedamos con boxers, besándonos con lujuria acariciándonos y frotando ambos sexos sacando mas de un gemido de nuestras bocas ya hinchadas por los resientes besos.
Rápidamente Kaiba se deshace de mi boxer dejando al descubierto mi mas que erecto miembro tomando mi pene con ambas manos masajeándolo y besando mi cuello descendiendo cada ves mas hasta llegar a mi ombligo y de ahí bajar hasta mi hombría metiéndosela de lleno y sacándome un gemido agudo, saca y mete en su boca mi miembro haciendo maravillas con su boca y siento que mis músculos se tensan al sentir el orgasmo avecinarse, corriéndome en la boca de Kaiba.
-lo…lo siento Seto-cubro mi cara de vergüenza y el quita mis manos.
-no te preocupes no me desagrada-me besa exigentemente dándome a probar mi esencia y mientras lo hacia sacaba un tubito de lubricante de su mesita de noche vertiendo un poco de este en sus dedos, dirigiéndolo a mi entrada metiendo un y luego dos y tres dedos ensanchando mi entrada.
Retira sus dedos de mi no tan virginal entrada sustituyéndolos con su pene penetrándome de una sola estocada y yo gimo con fuerza solo puedo sentir placer y de inmediato empieza con el vaivén despacio y luego rápido.
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Salgo del baño con el cabello escurriendo secándolo con una toalla, y otra amarrada en mi cintura.
-no te vas a bañar-le pregunto acercándome a la orilla de la cama.
-si, pero antes-me atrae con sus brazos y me besa apasionadamente-primero quiero otra ronda-me siento a cuclillas sobre el.
-mmh, entonces de nada sirvió que me bañara-sonrío sobre los labios de Kaiba y otra ves empieza la danza de los besos, carisias, pasión y lujuria todo una convivencia de emociones.
Fin...
Eeeeeeh ya se termino.
(1): así se llama la canción de naruto shippuden el opening 5
(2): la capa como las de harry potter de uniforme.
Bye cuídense