Habían transcurrido tres meses desde que se cumplieron dos años de esa disputa que había tenido con Tezuka en la cual ninguno de los dos ha querido dar el primer paso para pedir perdón.
Y si el no me pide perdón yo no pienso hacerlo, además esta semana como es la ultima del primer semestre los alumnos e incluido yo estamos mas preocupados por nuestro promedios que por otras cosas.
Ya que en esta semana ponen las notas finales, sacan los promedios, se hacen los entrenamientos finales, se decide por sorteo que semana del tercer mes de vacaciones se comienzan los entrenamientos de verano y las familias planean donde irán de vacaciones.
En mi familia, mi padre se encuentra trabajando en el extranjero y dudo mucho que venga a pasar las vacaciones con nosotros aquí en la casa, mi madre se ira con unas amigas a las termas.
Mientras que mi hermana se ira con su novio a la playa y mi hermano menor se iría con su club de tenis a acampar a las montañas, yo me quedare en casa ya que no tengo la mas minima intención de salir y mucho menos si no tengo a nadie que haga compañía.
Ya que mis amigos se irían con sus familias a pasar las vacaciones a diferentes playas, ríos, lagos, etc. Cuando me entere de que todos saldrían comencé a pensar que seria el único del club de tenis de Seigaku que se quedaría solo en su casa para estas vacaciones.
Pero me equivoque ya que Tezuka también se quedaría solo en su hogar ya que sus padres se irían de viaje a Francia para ver unos familiares que no ven desde hace muchos años y su abuelo se iría de campamento con unos antiguos compañeros de la universidad.
La verdad cuando me entere de eso no me sorprendió en lo más mínimo ya que Tezuka pasaba prácticamente solo todos los días, raramente dice cosas profundas, ya que solo da órdenes y dice cosas pero siempre son breves y sin rodeos.
Yo pensé que pasaría unas vacaciones muy tranquilo y sin ninguna preocupación pero me equivoque ya que dos días antes que se fuera mi mama me comento algo que me congelo hasta los huesos.
Esa tarde yo me encontraba regando mis captus y diciéndoles alguna que otra palabra bonita, cuando de la nada entro mi madre a mi habitación, se sentó en la cama con una cara decirme algo muy importante y serio.
Yo deje la regadera de lado, me senté en la silla de mi escritorio para quedar en frente de ella para que comenzara hablar de una vez pero mi madre no me quitaba los ojos de encima y no me decía nada, yo cansado de la situación, rompí el silencio.
- ¿Sucede algo mama?- le pregunto preocupando viéndola a los ojos
- Si hijo pero no es nada malo- me dice con la sonrisa falsa de los Fuji
- ¿Segura?- le pregunto con desconfianza
- Si mi amor
- Entonces ¿Por qué tiene esa carita de preocupación?- le vuelvo a preguntar aun mas preocupado
- Por que hay algo que debí decirte de hace mucho tiempo y nunca he tenido el valor de hacerlo hasta hoy – me dice abriendo sus ojos con seriedad la cual me asusta
- ¿Qué me ha estado ocultando?- pregunto seriamente viéndola aun los ojos
- Que cuando eras un bebe recién nacido yo y tu padre te comprometimos con alguien mas para que se casen a finales de esta año – me dice muy seriamente
- ¿Qué?- pregunto sorprendido ya que eso nunca se me paso por la cabeza
- Lo que escuchaste
- Pero ¿Por qué lo hicieron mama?- pregunta en forma de reclamo
- Por que hace artos años atrás cuando tu estabas mi vientre, a tu padre lo habían despedido de su trabajo por un motivo que nunca supe y no tenia trabajo, yo no podía trabajar por mi estado de embarazo y tu hermana era una niña pequeña la cual no podría trabajar, entonces comenzaban a llegar las cartas de las deudas y estas se fueron acumulando hasta que nos llego una orden judicial que si no pagábamos en treinta días nos quitarían la casa y nos dejarían en el calle, solo faltaban diez días para que eso ocurrirá cuando me encontré con una vieja amiga y le conté lo ocurrido ella me dio el dinero para ponernos al día y para que nos pudiéramos mantener hasta que tu padre encontrara otro trabajo yo muy agradecida de ella le dije que después que tuviera a ti trabajaría duramente hasta juntar cada yen que me había prestado pero ella me dijo que no quería eso si no que las dos comprometiéramos en matrimonio a nuestros hijos que estaban en nuestros vientres y que este boda se la relazaría cuando los dos egresaran de la secundaria y yo acepte
- Comprendo mama y ¿Quién es mi prometido?- digo entiendo a la perfección lo ocurrido y pregunto con curiosidad
- No lo se hijo no lo conozco, ¿alguna otra pregunta?- me dice cerrando sus ojos nuevamente
- No mama y gracias por contarme la verdad – le digo con una sonrisa falsa sin pararme de la silla
- De nada hijo
Luego de eso mi mama se fue mientras que yo me encontraba quemándome el cerebro pensando ¿Quién será ese otro chico?, pero lamentablemente no lo pude sabre ya que nadie me lo quiso decir solo me decían lo sabrás el día de tu boda.
Y no me quedo mas remedio que espera tranquilamente hasta que llegase el famoso día de mi boda para saber con quien compartiría por el resto de mi vida.
Continuara
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