Movimiento Circular
DocentexPeriodista / SagaxShaka
Shaka Valckar.
¿Quién no conocía a Shaka Valckar? Toda persona que tuviera afán a la lectura del matutino sabía lo que significaba ese nombre. Hombre de 26 años, de procedencia Hindú, cabellos dorados que llegaban por debajo de la media espalda, cascada ensortijada que caía en capas… Ojos seductores, hechizantes, cual turquesas que reflejaban el azul del tesoro del cielo… Rasgos finos… Piel de leche… Labios de durazno… Hombre atrayente… Cuerpo delgado que se erguía orgullosamente… Periodista de Profesión. Shaka Valckar prestaba sus servicios al periódico “New Age” de la Ciudad de Atenas… El mejor matutino, pertenecía al top ten mundial. Todo el que laboraba ahí contaba con un prestigio magistral, Shaka Valckar no era la excepción. Graduado de la Universidad de Oxford en Ciencias de la Comunicación, Valckar tenía su propia columna en la sección de Cultura…
Sí querías sobresalir en el universo de las artes, cómo música, literatura, pintura y todo el mundillo de las artes cultas, sólo tenías que ganar su respeto… Sólo tenías que convencerlo. Se conocía como un hombre demasiado altivo, su mirada turquesa intimidaba, te desarmaba prontamente… Quedaban sin habla… Con una ética inquebrantable… Muchas veces altanero, orgulloso de sus raíces… Y si a Shaka Valckar no le gustabas…
Estabas fuera.
El te hacía entrar a la gloria por las puertas del triunfo…
Pero también te hacía caer y ahogarte en el sucio pantano.
Una crítica de él significa vivir o morir.
Hombre de mente liberal también era. El sexo opuesto no le llevaba la contienda. Desde niño supo sus preferencias. Y por eso se gastaban rumores alrededor de la vida privada del Hindú, más él no se inmutaba ni hacía por desmentirlos… Que creyeran lo que quisiesen. Al final, el que tenía la última palabra era él….
Se decía que había llegado al lugar que estaba por adornar la cama de Shion Zavalle, el Director General de New Age. Hombre maduro que le llevaba 10 años de diferencia, Shion Zavalle, un hombre crudo… Ojos amatista que te seducían como el canto de una sirena, pero que si caías te enredabas con esos cabellos verdes revueltos, era una hiedra.
Se entendían… Más no como los rumores decían. Shaka tenía un lazo de afecto hacia Shion, aparte de que sabía que definitivamente su cama ya estaba ocupada.
Ahora se encontraba justamente en la oficina del Director General… Esperaba golpeteando con sus dedos el escritorio de vidrio… Ya Shion estaba retrasado… Imaginándose que se encontraba de nuevo en sus juntas casuales… Juntas que sólo participaban el mismo Director y el Fotógrafo principal del periódico… Ya casi eran las diez de la mañana… El tiempo pasaba rápidamente… Tenía una cita a las 12 en la Universidad de Atenas… Iba por su próxima presa.
-¿Tienes mucho rato esperando? -
El hombre de cabellos verdosos entraba a su oficina, un traje verde militar de Boss “desajustado” le hacía ver sumamente sensual… Shaka le miró mientras se sentaba en aquella silla fina de piel… ¡¡Lo que hacía el poder!!
-Crees que por ser mi Jefe puedes hacerme perder mi tiempo- Sereno, inamovible. Shaka le mandaba esa mirada cargada de soberanía.
-Estaba follando…- Shion no tuvo reparo en mandarle una sonrisa cínica… -Sabes que es lunes y debo aprovechar…- Terminó ajustándose la corbata que hacía juego con el traje.
-No me interesan tus actividades matutinas… En fin, ¿Para qué me quieres?...- Cruzándose de piernas, sus manos unidas por la yemas a la altura del mentón.
Shion soltó una carcajada… -¿Te suena Grace?- el rubio esbozó una media sonrisa… -¿Así que ya lo tienes en la mira?...-
-Tengo entendido que en unas semanas lanzará su libro sobre el método de enseñanza que imparte… Profesor de Dinámica de Partículas en la Universidad de Atenas… Saga Grace… Se habla que es de los mejores Docentes.-
-Se me hace raro…- Shion se levantó de su silla… -¿Desde cuándo te introdujiste en las Ciencias Exactas?...-
-Me atrae…- soltó parándose de aquel asiento… -La forma en que hablan de él… Esa fama debo comprobarla… Digamos que quiero tener sustento en el cual basarme para cuando su libro salga…-
-¿Es sólo eso?...- Shion caminaba hacia el Hindú.
-Digamos que tengo hambre de destrozar a alguien…- sus ojos azules que centellaron de lujuria.
-Entonces que esperas… Quiero verte en acción…-
Tan juntos. Tan cercanos. Una relación. Como Padre e hijo.
Shaka acomodó la corbata, su mano fue a parar al muslo derecho… Limpió. Un dedo que fue llevado a la boca del mayor… Chupó.
-¡¡Mhnn!! Amargo… Cómo él mismo-se alejó para sentarse de nuevo en su silla, mostrando su rostro imponente.
-Deberías llevarlo a la tintorería…- caminó hacia la puerta… -Salúdamelo cuando lo veas…- Salió de ahí con ojos puestos en su figura. El personal empezaría a cuchichear. No le importaba… Se sonreía… Le agradaba. ¡Total! Que la gente hablara, señal que iba caminando.
*****
Bajó del convertible color rojo que recientemente había comprado. Vestía unos jeans prelavados, sus tenis importados de Brasil, verde amarella como la combinación brasileña. El jersey de cuello redondo azul eléctrico que hacia que el brillo se reflejase en sus ojos… Su cabello tomado en una coleta baja, haciendo que los cabellos ensortijados de la primera capa salieran desaliñados… Pisó la universidad.
Se sintió en sus años gloriosos…
El ambiente le parecía fresco. Ver a la manada juvenil con libros en manos le encantó de sobremanera. Justo las doce del día. Sólo tenía media hora para encontrar el ala de Física e ir al salón dónde Grace impartía Clases. El periodista no aparentaba su edad, se le veía como uno más en la Universidad, los lentes que le daban una expresión sumamente jovial con aires de superficialidad. Se mordía el labio… Muchos hombres y mujeres le observaban el caminar elegante… ¡¡HA QUE TIEMPOS MOSOS!! No podía negar que estaba como quería… Era un verdadero deleite a las pupilas ajenas…
Más tenía que dejar el coqueteo con aquellos que le veían. Se encontraba en horas de trabajo, debía guardar seriedad… ¡¡Más no lo podía evitar!! Sólo tenía 26 años y a pesar de ser una gran figura en lo que hacía, también disfrutaba de los placeres de la vida. Con andar armonioso llegó al ala de Física. Preguntó a un joven español, por el acento. Muy “bueno” el acento… El universitario le miró lascivo, recorriendo la figura del periodista… Shaka rió ante tal atrevimiento… Más no dijo nada, dejó que el de cabellos negros lo disfrutara… ¡El ver no te empobrecía!... Lo halagaba más… Cansado del coqueteo le guiñó el ojo al ibérico, se alejó por dónde le había indicado.
Después de haber recorrido varios pasillos y pasar por las aulas de clases, llegó a la que buscaba…
Aula G “Saga Grace” Dinámica de partículas…
Bonita placa, pensó. Eran las 12:30 exactamente cuando entró a aquella aula de clases vacía. Magistral cuando la vio. Tipo cámara de Diputados pensó, cada fila se extendía a lo largo de aquella aula, divisó la última, allá arriba tendría la vista perfecta para observar a su presa… Se colocó en aquel lugar, desde ahí observó el panorama que tenía, se fijó en el escritorio de caoba, con un tallado sencillo, había una pantalla para proyecciones, un pizarrón blanco muy amplio, el cuál seguramente Grace ocupaba a menudo. Sacó su lap top y decidió esperar por el resto del tiempo… Decidió conectarse y buscar información extra sobre aquel hombre.
Saga Grace. Originario de Grecia, 34 años y ya su nombre sonaba en el mundo de la Docencia. Licenciado en Física graduado de la misma Universidad de Atenas. Con maestría en Cinemática y Dinámica y un Doctorado en Dinámica de Partículas, Grace el mejor investigador científico en toda Gracia debido a sus investigaciones de movimientos de partículas. En la mañana se dedicaba a la investigación, de tarde daba clases en toda el área de Física. Reconocido por su método de enseñanza, algo tradicional pero vanguardista, toda persona que tomaba clases con Grace tenía que saber Física… La terminarías amando al final del curso. Un hombre entero en todo el sentido de la palabra, culto, recio. Su porte daba seguridad, destilaba conocimientos, siempre llevaba el seño levemente fruncido, siempre estoico, siempre neutro. Amaba lo que hacía, vivía por la Física. De cabellos azules salvajes, siempre atados en una cola baja, hombre de piel bronceada, minas de esmeraldas… Griego alto, altivo, sin sentido del humor. Respetable…
Con una especial cualidad…
Lo que lo hacía observable.
Lo que lo hacía entendible.
Lo que lo hacía difícil de no captar…
Y por la cual decenas de estudiantes tomaban su clase. Era difícil no prestar atención a la clase de Grace. Una vez que se paraba en el pizarrón, y empezaba a escribir y explicar, todos se centraban en la soltura de aquella mano, que acompañada con sus palabras la Física entraba para no salir. Próximamente Saga Grace sacaría su libro, acerca de su método de enseñanza que lo hacía tan popular.
Eso a oídos del joven Periodista había causado un cierto interés, no había sido bueno en Física, tendría que ver que tan bueno era como decían… Y si simplemente no le parecía, acabaría con el libro que seguramente elevaría el nivel de popularidad de Saga Grace.
El griego sabía… Sabía que su carrera podría verse influida por aquel periodista hindú. Más no le importó… El daría su clase como siempre, teniendo a la centena de alumnos poniendo su atención en él. La presencia de aquel que se decía que podría terminar con su carrera no era de interés… Más le mostraría solo para callarle la boca.
Fue así como entró a su aula, aún vacía…
Sólo el periodista y el docente.
-Muéstrame lo que tienes Grace…- susurró.
El periodista recargaba su cabeza en la palma de su mano…
El docente entró sin prestar atención…
El periodista le sonrió…
El docente lo encaró…
Sus manos dentro de aquel pantalón negro.
-Shaka Valckar…-
-Saga Grace…-
-¿Así que a usted debo convencer…?-
-La pregunta es… ¿Lo logrará?...-
-Tal vez ahora si aprenda Física…-
Una imperceptible sonrisa…
Que al hindú se le antojó como amenaza.
¿Con qué había indagado sobre él?... Era de esperarse de aquel hombre. Más Shaka ahora tenía más ganas de aplastarlo. Su hambre se incrementó.
-El alumno es el reflejo del maestro… La prueba será de usted-
No hubo más comunicación… El aula se empezó a llenar del alumnado. Shaka siguió los movimientos del que lo había retado. Se supone que el era el retador… Saga subió al estrado…
Era la hora de empezar su clase de Dinámica de Partículas…
La mano zurda fue al pizarrón…
“Movimiento Circular”
Su mano escribió… Empezó la explicación…
Y Shaka Valckar observó con embelesamiento aquellas manos…
Aquellos que eran una cualidad. Se asombró… Todo universitario se encontraba en silencio, poniendo atención al maestro. Sólo el acento griego se escuchaba, sólo las manos griegas haciendo movimientos en al aire, explicando el movimiento.
Y el Periodista seguía viendo…
Y el Docente seguía explicando…
Y Shaka entendió algo. Era difícil no prestar atención…
Aquellos dedos largos que poseía Grace eran la explicación… Tal vez su método era bueno, pero no cabía duda de que los dedos eran la principal atracción.
*****
Se define al movimiento circular como aquel movimiento cuya trayectoria es una circunferencia. Se tiene dos tipos de movimiento circular… El movimiento circular uniforme y el movimiento circular uniformemente acelerado…
Bailaban.
Esas manos bailaban el vals con el aire…
Delineaban.
Esos dedos delineaban la trayectoria del movimiento que explicaba.
Era hipnotizante… Esas falanges griegas, tan largas. Eran impresionantes. Sus manos gruesas, sin duda, pero esos dedos se llevaban el Oscar. Gruesos… Largos. Ahora entendía porque todo el mundo, especialmente estudiantes, hablaban maravillas acerca del Docente. Se mordió los labios… Quería que esos dedos trazaran el movimiento circular en una parte específica de su cuerpo… Por un momento apartó la vista de ellos. Se recriminó a sí mismo. El docente lo notó.
No era posible que él, Shaka Valckar, con toda la reputación que se cargaba, estuviese deslumbrado por un Docente, seguramente ratón de biblioteca… ¡¡PERO QUE TENÍA UNOS DEDOS!! ¡¡POR BUDA!! Empezaba a removerse en su asiento. El griego seguía explicando el primer tipo de movimiento.
Sin duda había captado su atención y el Docente lo sabía. Sabía a la perfección de sus “grandes dotes”, más eso lejos de enorgullecerlo le causaba algo de gracia. Los jóvenes de hoy eran un tanto “faltos de percepción”. Aunque digamos que no desperdiciaba la ayuda de sus largos amigos, un poco de publicidad no le caía mal a nadie. Eso sí, ya en el aula de clases mostraba sus verdaderos dotes como Físico. Hacía que los jóvenes universitarios amaran a la Física, o al menos sintieran empatía por ella.
Pero había algo que no le agradaba. “El dedotes”… así se le conocía a Grace. Le molestaba de sobremanera que le llamasen así. Era un Investigador y Docente respetado, pero eso no lo descartaba del sobrenombre “tan acertado”. A fuerzas tenía que lidiar con ello. Ya su fama traspasaba los límites de la Universidad, hasta habían llegado a los oídos de aquel periodista engreído.
Le mostraría el peso que significaba su nombre. Y sería precisamente ese día… No iba a dejar que pisotearan su trabajo. El amaba la docencia ante todo, y su próximo libro era muestra de ello, por más famoso que era Valckar, él era Saga Grace.
Y seguía explicando el movimiento…
Y Shaka de nuevo observándolo…
Y Saga moviendo sus dedos.
Si seguía así Grace, pronto su fuerte se levantaría. Ya habían pasado dos horas de haber iniciado la clase. Un receso por parte del profesor y la sala quedó vacía… Solo ellos dos. Shaka de nuevo se perdió en el computador, una idea macabra le pasó por la mente. Quería ver más de cerca esos dedos, el griego se había sentado en su escritorio re visando el libro de texto. No cruzaron palabra.
Encendió la cámara de su laptop y encofró aquellas manos. Casi se desmaya de la impresión… Era realmente morboso tener esos dedos. Aumentó el zoom, los pudo apreciar mejor. Se relamía los labios. Le pareció delicioso, se sonrojó de inmediato. ¡¡SI LO VIERA SHION!!
-¿Y que tal le parece Sr. Valckar?- Saga dejó el libro en el escritorio y se paró de su asiento… -¿Lo hago bien?- caminó para quedar frente a su escritorio…
Shaka tragó en seco. Cerró su laptop y enfocó al griego. Era guapo, demasiado. Lo admitía… Y ese porte tan reacio, tan “Soy el mejor en lo que hago” era supremo… La camisa blanca, el pantalón y chaleco negro junto con sus zapatos de piel le hacían ver tan apuesto. Y por primera vez deseó poder perderse en unos brazos así, como los del griego. Pero su ética se lo impedía, una cosa era liberarse antes de trabajar, como el coqueteo del que había hecho hace rato, y otra muy diferente hacerlo en horas de trabajo…
-Tiene una buena relación con sus alumnos por lo que aprecié…- Abrió de nuevo su computador… -Aún falta mucho por impresionarme…- Y no lo siguió viendo más. Dedicó a escribir su próxima columna. Saga Grace sólo atinó a regresar a su lugar.
*****
La clase de nuevo comenzó. El aula estaba llena de nuevo, las decenas de estudiantes solo observaban al maestro que con su temple explicaba el segundo tipo de movimiento. Grace daba los ejemplos… Sus manos se elevaban, dejaban al descubierto esos largos dedos. El periodista de nuevo se centraba en su explicación mientras hacía unas notas…
No lo podía negar. El método de enseñanza, omitiendo a los pequeños, era bueno… Muy bueno… Tenía muy buena relación maestro-estudiante, el ambiente era muy liberal, nada tedioso. Se desenvolvía de una forma magistral… No dejaba dudas en sus explicaciones, y si las había, te volvía a explicar hasta que entendieras… La Física era bella a su lado, difícilmente podrías jactarte de ella… Saga Grace era un gran hombre en todo el sentido de la palabra… No tenía mucho que comprobar.
El tiempo seguía pasando…
Ya casi las seis de la tarde… Su jornada laboral estaba por culminar.
Había construido una nota acerca de Grace. Escuchaba y escribía. Quiso dejar de mirar esas manos que se movían… Mas sin embargo, en ratos desocupados, prendía la cámara y enfocaba más de cerca aquellos dedos… Ya deseaba que la clase terminara y poder salir de aquel edificio.
Entonces lo podemos describir mediante tres magnitudes…
La posición angular.
La velocidad angular.
Y la aceleración angular.
Manos moviéndose al compás de su voz. Se le tornó tan sensual… se limitó a seguir observando, a seguir escuchando… El periodista estaba perdido en el cuerpo de aquel hombre, deseó mandar la ética al carajo y lanzársele encima una vez terminada la clase.
Y con esa ideología presente la clase fue pasando… La clase fue dando sus últimos suspiros. Los alumnos saliendo uno por uno… hasta de nuevo, dejar el salón vacío. Grace salió atrás de ellos, Valckar se quedó un rato más…
*****
Y de nuevo una junta casual…
A pesar de ser lunes y que el ocaso apenas se daba. Los cuerpos se fundían una vez más… Cuerpo moreno sobre marmoleado. Cabellos azules y verdes sudados. Ojos que como espejos mostraban las llamas del infierno.
Deseo carnal…
Gemidos incontrolados…
Bocas hambrientas, sedientas. Gargantas roncas, morbosas. Alebrestadas de pasión insana.
Estocadas certeras, profundas, mal sanas.
Movimiento sensual de caderas…
Folladera de nuevo a las 6…
Relación prohibida, relación mal vista. Relación antimoral.
¿Pero importa eso?
No si el amor era el principal motor…
Y así como cada junta casual, así mismo los cuerpos se entregaban, se prodigaban caricias blasfemas. Uno estocaba, el otro rasguñaba piel acanelada. No había porque pensar. El sexo, el placer, el amor los nublaba.
El Director General del periódico se retorcía bajo ese cuerpo de acero. Besaba con hambre, con fervor, con ansias de que profundizara más, de que llegara más, de que terminara porque ya el orgasmo lo asaltaba.
El fotógrafo se sonreía maliciosamente, le encantaba desesperar al todo poderoso Shion Zavalle, su relación algo enferma le excitaba… Le quemaba…
Invadía con fuerza… Penetraba como si no hubiera mañana. El de amatistas se arqueaba, recibía al invitado de honor como todos los días… Acostado en la mesa de reuniones, su sudor se evaporaba con el aire, su pierna izquierda que colgaba de la mesa, su pierna derecha que estaba sobre el hombro moreno…
Éxtasis liberal…
Arranque de lujuria sexual…
Dos cuerpos con un vaivén acelerado… Metamorfoseado…
La cúspide de la montaña que está más cerca…
Las respiraciones que se derrumbaban…
Un fuerte roce de miembro caliente. Una llamarada que empezó a crecer…
Suavidad parada.
Electricidad que viajaba desde el cerebro a la espina dorsal…
Orgasmo premeditado. Orgasmo saboreado. Orgasmo pecaminoso…
¡¡¡SOLO ORGASMO!!!
Semen eruptivo.
Beso de desciende pasiones. Solo dulce… Sólo uno de niños.
-¡¡MMHNN!! Delicioso…- El Director se quitaba de encima el cuerpo del fotógrafo… -Creo que habrá que comprar una mesa mas resistente…- vio como aquella mesa de vidrio estaba cuarteada… -Por darle tan fuerte Mani…- una risa divina
-No me culpes a mi…- le ayudó a vestirse…-Tu eres el que pide más- un beso que encendía la llama…
-Y te seguiré pidiendo…-
Otro revolcón de seis a siete.
*****
Saga Grace entró de nuevo al aula magna. Vio como el periodista estaba en el estrado, observando todas las anotaciones que había en el pizarrón.
-¿Entendió la clase Sr. Valckar?- se aproximó hasta quedar a lado de él…
Shaka sintió esa cercanía… Volteó a verlo… Reparó en aquellos dedos. Saga llevó el emparedado a su boca… Comió…
Se le antojó… Estuvo peleando internamente por aquello que empezaba a sentir. Esa extraña sensación… ¡¡¡Ese hombre era doble máscara!!!
-El movimiento circular… - llevó su mano a aquel emparedado… El Docente solo sonrió… -No me quedó claro Profesor Grace…-
-Déjeme que le de una clase personal…-
Un paso. Un acercamiento.
Labios que buscaron hacer lo perverso.
¡¡¡AL CARAJO CON LA ÉTICA!!! ¡¡¡ESTA ERA CLASE DE FÍSICA!!!
No quiso ni pensarlo. No le importó que el Docente le acorralara sobre el pizarrón… Se sentía extasiado. Esa boca griega hacía milagros… Levantó su fuerte solo con unas cuantas lamidas, unas cuantas mordidas.
Fuerte sabor a menta…
Sabía lo que estaba pasando. Los dos eran ya adultos, no amor de por medio, sólo sería sexo. Sólo un hombre que lo había deslumbrado y aunque no lo quisiera reconocer, lo había hechizado… Tal vez, y solo tal vez, después de eso pudieran entablar una conversación…
Pero ahora no había espacio para eso.
Shaka se empezaba a derretir entre esos besos. Seguía acorralado entre el pizarrón y el cuerpo griego… Sumergido en un maremoto de placer. Saga besaba, era experto… ¿Quién creería que ese Docente enseñaba tan bien?... Se sonrío… Abrió sus ojos para encontrarse con los del demonio, esmeraldas portentas que se reflejaban en zafiros hambrientos…
Un seductor…
Se vanaglorió. Era un verdadero deleite… Quería ese cuerpo, esos dedos embestirle.
-Te enseñaré el movimiento circular-
Ronco sonido en su oído. Un lengüetazo en el interior de la oreja.
Claro gemido…
Saga llevó a Shaka hasta el escritorio, le sentó sobre él. El profesor de Física se desabrochó el chaleco negro, logró quitárselo ante la mirada divertida de Shaka. Lo dejó caer en el respaldar de la silla… Lentamente fue desabrochando los botones de la camisa blanca, la desfajó y solo quedo abrochado el último botón…
Pecho griego que ardía en llamas…
Shaka se relamía sus delgados labios… Quería, deseaba… Su dedo fue parar al pecho del maestro… Tocó músculo… Grueso, fuerte, de acero…
Zafiros destilando lujuria.
Y pronto el pie que fue a parar a aquel bulto…
Tomó la mano derecha del griego… Lamió los dedos…
-¡¡Mnn!! Si así está el camino…- mirada penetrante… -¿Cómo estará el destino?...- un empuje a la hombría abultada…
Un jadeo con voz ronca…
Un arranque de deseos…
Saga se abalanzó hacia el rubio… De nuevo besando, de nuevo encontrándose. Sus manos griegas se apoderaron de esas caderas, sus labios bajaron al níveo cuello… Marcando, haciendo gemir al menor… Cautivando con elegancia…
Haciendo saber que no sólo de Física vivía.
Shaka se perdía en los alebrestados besos, en las caricias que prodigaba el maestro. Su miembro, ya despierto, apretaba sus jeans, quería ya salir… Se removió en el escritorio.
Saga noto el incomodo…
Con parsimonia desabrochó el pantalón… Bajó el cierre hasta dejar salir el divino premio…
¡Que sorpresa!
El rubio no llevaba ropa interior.
Se mordió los labios…
-La costumbre…-
-Que buenas costumbres tienes…-
Y no se detuvieron. De nuevo besos. Ya se habían vuelto una adicción. Saga fue bajando aquellos jeans ajustados, quedaron a la altura de sus pies. Shaka tembló por estar descubierto… Saga dio las gracias al divino por ofrecerle ese manjar suculento… Las columnas hindúes eran largas, blanquecinas, delgadas pero delineadas. El vello dorado era muy escaso… Los muslos mas gruesos que protegían al señor del universo: Su hombría…
Hizo nota mental que más tarde la probaría.
Volvió a acercarse al periodista…
-¿Listo para la clase?- un asentimiento de cabeza… -Voltéate-
Y así tan pronto escuchó el mandato lo obedeció. Shaka bajó del escritorio y se volteó. Recargó sus antebrazos sobre éste… Estaba inclinado… Dando todo un espectáculo al griego docente…
-Empecemos con el movimiento circular uniforme…-
De nuevo esa voz varonil… Shaka tenía lagunas al escucharle…
Un jugo de naranja que fue vaciado entre sus nalgas. El hindú respingó ante lo frio del líquido… Saga se agachó para abrirse paso por las redondas montañas… Lengua que saludó…
-¡¡HAAAA!! ¡¡¡BUDAAA!!!-
Sólo fue a tantear el terreno. Demasiado estrecho, pensó el maestro… Estuvo un rato entreteniéndose en aquel anillo de fuego. Shaka solo gemía del placer provocado… ¡¡ERA UN DELITO!! Todo en el docente era un delito. Se paró y se acomodó en la misma posición de Shaka, ahora, con el tronco recostado sobre el escritorio… Sus cabellos azules ya mojados por el sudor… El menor jadeaba todo sonrojado…
Peligroso…
-Entonces alumno… Las magnitudes que describen el movimiento circular uniforme son…- una sonrisa diabólica… -La posición angular…-
Y Saga metió un dedo.
Un grito de dolor…
-¡¡¡¡AAARRRRRGHHHHHH!!!!-
Era terrible. Era animal. Ese dedo había entrado sin premeditación alguna. Sólo sentía como sus carnes se contraían alrededor del índice de Saga…
-Encontremos tu posición… Encontremos a theta- un beso en el cuello… para calmar el dolor.
Y se habría paso. Ese dedo buscaba dentro de sus carnes. A Shaka le dolía inmensamente… Se partía al sentir el grueso falange. Jadeaba, gemía, casi gritaba… Decía que parara. El docente solo le besaba. Haciendo a un lado sus cabellos… Descubriendo su matizado cuello… Recorriendo desde éste al pabellón de la oreja.
Calmaba…
Y seguía buscando. Empezando a orbitar adentro.
El movimiento circular era llevado a la práctica.
-¡¡¡DIOSES!!! Due… ¡¡¡DUELEEEE!!!-
No le importó que le dijera que parara. Esos gemidos que exclamaba eran suficientes para hacerle saber que en el fondo le gustaba… Y así siguió. El dedo se movía en círculos, dilataba la entrada, quería encontrar la posición exacta…
Metió el medio…
¡¡Dos dedos!!
Shaka exclamó de dolor. Ni el miembro de su ex pareja era tan grueso como esos dedos juntos… Aun así le dolía infinitamente más… Se dejó llevar por los besos que le brindaba. Sentir esa lengua en su boca de alguna manera le controlaba…
La labor seguía…
Movimiento circular en práctica…
Índice y medio que hacían la trayectoria de una circunferencia.
Buscaban…
El punto que nubló.
El punto que bajó defensas…
El punto que hizo gritar al rubio sin contemplación.
La posición…
-¡¡¡¡¡OHHHH DIOSSSSSS!!!!-
-¿Entonces aquí es?...- estocadas dentro del anillo de fuego… -Ya tenemos la posición Shaka…-
El rubio asintió.
-¿Cuál es la otra magnitud?-
Apenas y podía hablar.
-La ¡¡mmhn!! Velocidad…-
-Buen alumno… Entonces agreguemos velocidad… ¿Cuánto crees que pueda valer omega?-
Y empezó de nuevo. El calor era infernal. Los dedos tomaron la velocidad angular. Seguían circundando el terreno, seguían orbitando en el sagrado templo. Shaka movía su cabeza de un lado para otro, sus piernas temblaban, sino fuera por el brazo izquierdo de Saga que lo sostenía por su pecho, ya hubiera caído cual muñeco de trapo.
El sudor ya mojaba su jersey… También Saga sentía la camisa húmeda… El salón era testigo del placer perverso del docente y periodista. ¿Quién lo imaginaría? Apenas y tenían horas de conocerse, pero admitían que la atracción había sido evidente. Durante la clase Shaka peleó internamente con su moral… Pero el deseo le ganó. Para Saga no fue diferente… La belleza hindú le hipnotizó.
Sabía de él. Quería demostrarle lo que era capaz de hacer con su método de enseñanza, pero a mitad del camino, se dio cuenta que no podía dejar de pensar en esos ojos zafiros… Quiso deslumbrarlo.
Y lo logró…
Tal vez ahora era sexo… Explorar nuevas áreas de investigación…
No descartaba al amor…
Y seguía besando. Su miembro lo había liberado hace poco, quería sentir mayor contacto… La velocidad del movimiento seguía uniforme…
Cambiaron de posición…
De un movimiento rápido jaló a Shaka consigo y lo puso sobre él… El griego recargado en el escritorio… Sus miembros se encontraron…
Empezaron a transferir calor.
Erectos se besaron. Las turgentes virilidades hacían conexión. Shaka seguía sonrojado, desbordando pasión… Exclamando, desesperándose… Quería llegar a la iluminación. Y los dedos seguían trabajando, circundando, tocando la posición, yendo a una velocidad impuesta por el Docente…
-¡¡MHNN!! ¡¡¡MÁS!!! Sa…¡GA! Rápido… más nnghnn ¡¡RAPIDO!!-
-Shaka… espera… ¡¡mhnn!! Sólo un pocos más…-
No aguantaban.
Los dedos en su interior, sus hombrías replegándose, los besos, las lenguas… ¡¡ERA ELECTRIZANTE!! El rubio se movía, mientras el griego dilataba el hindú se auto penetraba…
¡¡¡ESTABA A PUNTO DE CULMINAR!!!
-Bien Shaka… ¿Te quedó claro el primer movimiento?...- una mordida en el cuello que el Griego no pudo resistir… Los dedos invadiendo, con posición, con velocidad… -Ahora pasemos al movimiento circular uniformemente acelerado…-
Y Shaka lo supo…
Ya se venía…
-¿Qué nos falta alumno?
-¡¡¡ARRGHHH!!! Al… alpha…-
-Lo que lo hace diferente mi Shaka… El segundo movimiento, además de tener posición y velocidad… Tiene aceleración… alpha…-
Y no tuvo que decir más.
Los dedos aumentaron la velocidad del movimiento.
Aceleraron…
¡¡¡¡SHAKA VEIA LA CREACIÓN DEL UNIVERSO!!!!
No lo podía creer… Esos dedos lo partían, lo laceraban, inmovilizaban… ¡¡¡Perdía todos sus sentidos!!!
A Saga le nublaba la excitación. Seguía restregándose con el miembro del periodista… Ya el líquido seminal empezaba a eyacular… Los besos ahogados, los gemidos perdidos en gargantas desbocadas, sudores perlados, acanelados…
¡¡¡LOS LLEVABA AL ORGASMO JAMAS SENTIDO!!!
Y los dedos dentro de Shaka que aceleraban… Más, más, más y más.
Y sus carnes apretaban más… Y sus carnes engullían… Pero el movimiento circular era llevado con alevosía… De uniforme a uniformemente acelerado…
Posición angular (, theta): Aquél que hacía retorcer a Shaka. Que era el punto dónde se liberaba. El origen del orgasmo…
Velocidad angular (omega): La misma que a partir de la posición, los dedos se desplazarán en un determinado tiempo...
Aceleración angular (alpha): El incremento de velocidad que tomaba el movimiento de los dedos.
La clase perfecta…
El mejor Docente que podría darla…
El periodista que le quedaba claro que su método de enseñanza valía la pena…
Y así al ritmo del baile con los miembros, del movimiento circular con los dedos… Entre caricias, besos, gemidos de quiero…
Así el momento cumbre llegó…
El movimiento llegó a cero…
Orgasmo que hizo explotar moléculas en millones de átomos…
El nombre contrario de sus labios… El semen que bañó los vientres de ambos…
No hubo palabras… Ni engaños… Ni te amos…
-Eso fue…- el primero en hablar fue Shaka…
-Sí… el mejor… ¿Ahora sí le quedó claro?-
-Sin ninguna duda…-
Un dulce beso…
¿Y ahora? ¿Qué hay después de eso?...
-Aunque… Sigo siendo malo en Física…- El griego rozó la nariz con el hindú… -Y termodinámica aun no la llego a comprender…-
Una mirada de zafiro…. Una sonrisa de labios finos…
El amor se podría consumar con el tiempo…
-Entonces la próxima clase será de transferencia de calor…-
Un beso, sonriéndose. Por lo pronto tendrían que terminar la clase…
Cabe resaltar que Shaka ya no aplastaría al Docente en la publicación de su libro. Tal vez… Tal vez lo aplastara pero en su cama.
“La Física es como el sexo, claro puede producir algunos resultados prácticos… Pero no es por eso que la hacemos” Richard Feynman