Austin estuvo una semana en el hospital, aunque su única herida grave era su brazo no podía pararse sin que todo su cuerpo le doliera, ocasionando que tardara un par de días en volverse a parar, el único medicamento que le daban era el acido fólico, cortesía de la doctora que lo atendió primero, justo el día que iba a salir ella hablo con él.
- Austin, hoy cumples un mes de embarazo exactos -¨ ¿Un mes exacto?¨, hizo las cuentas mentalmente sonrojándose al darse cuenta que su concepción no había sido la primera vez, si no la otra- Tendrás que cuidarte mucho, como en una mujer, cada embarazo es diferente, así que los síntomas que padecerás serán variados.
- Ok -ella le entrego la bolsa donde estaban dos frascos de la valiosa medicina.
- Ven aquí cuando se te acabe, además me gustaría charlar alguna vez -él asintió antes de retirarse.
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Ring. Ring, ring
- Nya -una gata negra entro a un cuarto donde salto sobre un hombre- ¡Nya!
- ¿Qué sucede? -él se levanto tan brusco que tiro al pobre animal- ¡Oh!, perdón Yami -Ring, ring, él corrió al teléfono.
- ¿Hola? -gracias a las llamadas ya reconocía esa voz.
- Hola Ian -tomo una silla para sentarse cosa que el peludo animal aprovecho para acostarse en su regazo- ¿Cómo están? -al otro lado de la línea Ian sonreía, Evan nunca preguntaba por su hijo primero, era indirecto, sonreía ya que se comportaba como un jovencito enamorado.
- Muy bien, Austin ya salió del hospital -Evan se paro de golpe dejando caer, de nueva cuenta, a Yami, que enojada se retiro al cuarto para acostarse en la cama.
- ¿Enserio? -trato de calmarse, pero no podía reprimir la alegría de que Austin estuviera bien.
- Si -Ian rio suavemente ¨Si, como un adolescente¨- Te propongo algo, ven a nuestra casa a comer para que lo veas, Sue también quiere verte de nuevo -Evan sonrió, le gustaba la forma en que los padres de Austin lo habían aceptado tan fácilmente- A las 3:00, ¿okey?
- De acuerdo -Evan colgó antes de regresar a la habitación y abrir el armario por algo de ropa, tomando algunas prendas tirándolas a la cama.
- ¡NYA! -el volteo al escuchar el maullido dándose cuenta de que a Yami le había caído todo el peso de la ropa encima.
- ¡Yami! -Las quito apenas se dio cuenta- Perdona, enserio -la gata simplemente se sentó enfrente de la ventana, Evan entendió el mudo mensaje- Pero...-la gata levanto la cola y alzo la cabeza- Ok -abrió la ventana provocando que una ráfaga de aire frio entrara haciéndolos temblar, Yami lo pensó mejor antes de regresar a la cama.
- Sera mejor que lleve una chamarra -volvió al armario- Veamos si esa ya me queda -saco una chamarra de cuero acorde con la ropa que yacía en la cama a lado de un activo felino.
- ¿Nya? -Evan miro a Yami que había comenzado a olfatear la chamarra-Nya
- Es olor ha guardado, era de mi padre, me dijo que me la daría cuando me quedara -él rio suavemente mientras la gata regresaba a la cama, tomo su ropa y se dirigió al baño.
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- Ah, ah, Evan, ah -un muchachito gemía recostado en la tina mientras sus manos se movían sobre su miembro- mm -aunque él estaba ahí su mente estaba en la vez que hizo el amor con Evan sin poder evitar calentarse.
Toc, toc, toc
- ¿Austin? -apenas escucho esa voz se detuvo- ¿Cuánto vas a tardar?, es mi turno -Austin rio.
- En un momento Sue -escucho los pasos de la niña al irse, como una señal de que podía continuar- Ah, Mmmm, ah.
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Evan camino hacia la puerta de la casa con paso seguro aunque al llegar dudo un poco toco el timbre, lo que más le sorprendió fue que quien abrió era...
- E-Evan -instantáneamente sintió los brazos del muchacho en su cintura, de seguro si hubiera podido las hubiera enredado en su cuello.
- Austin -él respondió al abrazo, había extrañado al joven, y para Evan era grandioso saber que estaba bien, pero el muchacho aprovecho la situación y acerco sus labios para besarlo aunque no logro nada porque una corriente de dolor le recorrió al sentir una presión en su brazo izquierdo.
- ¡Eso duele! -reclamo Austin dando un paso para atrás- ¿Por qué lo hiciste?
- Se discreto estamos en la casa de tus padres...
- También la mía, puedo hacer lo que quiera -dijo el muchacho pegándose al cuerpo del mayor.
- Atrás -mando Evan, pero esto no iba a detener al joven.
- O-blí-ga-me -Evan sujeto la nuca del muchacho y se pego a su oído mordiéndolo suavemente- Ah.
- Si quieres más compórtate por ahora -él tenia los ojos cerrados mientras asentía- Buen chico.
-¡Kazuki-san! -Sue corrió hacia Evan para abrazarlo, él al no poder abrazarla bien decidió cargarla.
- Ola, Sue -ella al verse levantada por él le dio un beso en la mejilla, cosa que le respondió.
- Veo que serás buen padre Evan -dijo Austin, haciéndole recordar al profesor su condición- ¿Cuándo tendremos los nuestros?
- Nii-chan, tu eres hombre, no puedes tener hijos -reclamo la niña cruzándose de brazos.
- ¡Ouch! -apenas escucharon eso los tres fueron a la cocina donde Ian estaba, él levanto la vista al escuchar que alguien venia, la imagen que vio le dejo sin palabras, Evan cargando a Sue y Austin a lado de él, se veían como una familia.
- Dad -Evan bajo a Sue- Are you okay? (¿Estas bien?)-ella se acerco a Ian tomando la mano que tenia una mancha roja en los dedos- Blood! (Sangre)
- No Sue -Ian se dirigió al lavabo para retirarse todo- Solo me corte con el cuchillo mientras cortaba un tomate.
- Ian, si no te molesta podría ayudarte -Ian al escucharlo recordó que aunque lo había visto no lo había saludado, decidiendo aceptar su petición con un sonrojo en sus mejillas. Mientras ellos cortaban y mezclaban los ingredientes Austin y Sue solo miraban.
- Nii-chan, Kazuki-san te tendrá muy consentido -le comento Sue admirando como Evan alcanzaba algunas cosas de unos estantes altos con solo estirarse un poco, cosa que Ian no podía.
- Si, pero si no me consiente lo obligare -ambos rieron, escucharon la puerta de entrada, sabían que era Shunsuke, cuando todo estuvo listo se sentaron a comer y comenzaron a platicar, era una mesa para seis, en uno de los costados estaba Shunsuke, a su derecha Ian y Evan, y a su izquierda Austin y Sue.
- Oto-san, ¿Cuándo puedo regresar a la escuela? -pregunto Austin mientras planeaba algo.
- El lunes, para que el fin de semana descanses -respondió Shunsuke, Evan tomo su vaso y bebió pero por poco se ahogaba cuando sintió una caricia en su pierna.
- Que bien, así Nii-chan me podrá acompañar a la primaria -exclamo Sue, sin notar el sutil movimiento de su hermano hacia la entrepierna de Evan.
- Así podre ir a recogerte para comprar un helado y...-el muchacho mordió su labio reprimiendo un gemido al sentir el pie de Evan sobre su miembro, ya que su pierna estaba alzada por la caricia que le había propinado su pie llego directo a la zona.
- Si, y si Kazuki-san no esta demasiado ocupado me encantaría que nos acompañara -comento la pequeña sin notar nada, ambos dejaron de hacerlo, Austin por que no quería tener una reacción allí, enfrente de todos, y Evan por que creía que ya había sido suficiente castigo. De pronto el teléfono sonó y Shunsuke fue a contestarlo, apenas unos segundos después se escucho un celular, aparentemente era el de Ian.
- Tengo que irme, tengo una urgencia en el trabajo -Ian se paro mientras cerraba su celular.
- Llévame de camino, también me acaban de hablar -Shunsuke frunció un poco el ceño, no por que le molestaba tener que llevar a Ian si no que iba a dejar a Sue y Austin solos con Evan.
- De acuerdo -ambos salieron a prisa dejándolos solos.
- Vamos a recoger las cosas Sue -ambos llevaron los platos al lavabo, Evan decidió ayudar a lavarlos, mientras que Sue los secaba y Austin los acomodaba, al terminar el timbre sonó.
- Yo voy -dijo Sue antes de ir a la puerta, aprovechando que ella fue Austin se acerco a Evan para besarlo.
- No, me desobedeciste -dijo este al empujar suavemente al muchacho.
- Pero, sabes que así te gusta que sea, ¿no? -Evan sujeto con su manos la cara de Austin para darle un beso rápido- Evan, más.
- No.
- Nii-chan, ¿puedo ir con Lily? -Austin sonrió mientras iba a la puerta.
- Puedes ir pero no llegues tarde-ella asintió antes de irse.
- Perfecto -Austin regreso a la cocina y casi se aventó a Evan para besarle toda la cara.
- Austin, espera -reclamo este sujetando sus caderas.
- Evan estamos solos, y te necesito -pronuncio sensualmente mientras se pegaba a él, Evan no soporto más, con un movimiento subió al muchacho a lado de la estufa, bruscamente le desabrocho la camisa y apenas término comenzó a mordisquear la piel descubierta.
- Ah, mm, ah-si hubiera estado menos necesitado le habría pedido que fuera más suave, pero ambos lo querían ya- ¡Evan! -gimió el muchacho al sentir la boca de su amante en su miembro.
- Austin -se separo un momento de su tarea para besarlo, la necesidad era demasiada, sus bocas no se besaban más bien se devoraban- Te quiero -murmuro en su oído.
- Evan yo...
Ding dong ding dong
Ese simple sonido ocasiono que su burbuja se rompiera, pero Austin no iba a dejar que su oportunidad se esfumara.
- Ignóralo -dijo el joven mientras enredaba sus piernas en la cadera de Evan.
- ¿Y si es importante? -pregunto mientras intentaba desenredar las piernas de Austin descubriendo que estaba completamente desnudo.
- Yo soy más importante -reclamo enredando sus brazos en el cuello de Evan notando el dolor en su brazo izquierdo soltándolo al instante.
-¡Austin!, ¡Austin! -él enseguida reconoció las voces quedándose estático, pero Evan no.
- S-son, mis, compañeros, de clase -apenas el muchacho lo pudo pronunciar.
- Si me ven aquí -¨ ¿Como nos libramos de esta?¨