-¡¡Naruto!! , ¿No estás emocionado?, ¡mañana es tu primer día! – decía un pelinegro de piel excesivamente pálida en la cama de su novio, sentado frente al mismo.
-Nee Sai la verdad no, ya no soy un niño de primaria; y el entrar a una escuela nueva me parece algo normal – contestaba con desgana el rubio.
- Naru que te pasa, te oyes tan desanimado, estarás en mi escuela, nos veremos más seguido, ¿que eso no te emociona?
-Si Sai, lo sabes, pero... me siento algo triste, ya que Naruko quedó en el turno de la tarde, y casi no nos veremos.
-Ay Naruto, yo también, pero, si Naruko se esfuerza, lo más probable es que el próximo semestre se pueda cambiar a la mañana.
-¡Tienes razón Sai, y yo la apoyare!
-¡Yo también Naru! – le dice el pelinegro jalando al rubio por la cintura para abrazarlo, y darle un corto beso en los labios, mientras el menor se aferra a su cuello volviendo a besarlo durando esta vez un poco más.
-Nnhhn… Sai - Después de un tiempo besándose se separaron porque comenzaba a faltarles el aire, se miraron a los ojos, ambos sonrojados y jadeantes por el beso dado.
El pelinegro recostó despacio a Naruto en la cama quedando sobre él mientras el otro simplemente se dejaba hacer; comenzó a besarle la comisura de sus labios, siguiendo un camino hasta llegar a su cuello – Mhhm… Sai aahh… no… mmhh - mientras colaba sus manos por debajo de la camisa rozando suavemente con el pecho del rubio, levantando asimismo la prenda, pasándola lentamente por los brazos levantados de este.
- ¡¡NARUTOO!! – entro gritando una chica rubia de dos coletas parecida al menor de los chicos a excepción que esta no traía las marquitas en su rostro como su hermano.
-¡¡WOAAA Naruko!! – se sobresalto el rubio provocando que diera un salto e hiciera a un lado a su novio y se cayera el mismo de cabeza en el suelo – Itaai~ – decía sobándose el golpe y levantándose del suelo.
- ¡Naruto eres un baaaka!, ¿Por qué no me llamaste?, habíamos quedado en que la siguiente vez me llamarías – le gritaba a su hermano tomándolo por los hombros y sacudiéndolo.
- ¡¿Qué?! – Dijo soltándose del agarre de la rubia – ¡Yo no acordé nada contigo, tú misma lo decidiste, yo nunca acepté!
-¡Pero que..
- Em hola Naruko-chan – saludó el pelinegro con su típica sonrisa
-Kyaa~ Sai-kun – la chica corrió efusivamente a saludar a su cuñado rodeándole el cuello con sus brazos y dándole un beso en la mejilla.
-¡WA!, ¡Naruko suéltalo! – decía el menor acercándose y jaloneando a su hermano para que soltara a su novio.
-No-o, porque Sai-kun me quiere más a mí – le decía la Naruko a Naruto sacándole la lengua.
-Jejeje – reía Sai, se divertía tanto con ambos y es que se conocían hace ya 5 años cuando ambos hermanos tenían 15 y el 17 y después de 3 años hacían unos 2 meses que había empezado una relación con el rubio – oigan... chicos – trataba de llamar su atención pero seguían peleando – ¡hey! – aún sin resultado - ¡UZUMAKI! – y ambos guardaron silencio y le miraron atentos – vaya, hasta que me escuchan.
- gomen – dijeron ambos rubios al uníoslo bajando la mirada.
-Je, no se preocupen chicos… por cierto, ¿qué estaban discutiendo cuando llegó Naruko?
-Ah, nada jeje – rió tímidamente la rubia separándose por fin de Sai levantándose de la cama mientras Naruto seguía a un lado.
-¡¿ Cómo que nada?! ¡Anda, dile porque me gritaste! – le decía a su hermana haciéndose la víctima recostándose sobre las piernas de Sai.
- Ay Naruto cállate – decía la chica – bueno Sai-kun, es que veras… yo … pues… jaja, no por nada.
- ¡¿Eh?! No no no, dile que tú querías fotografiarnos cuando estuviéramos… juntos – comentaba el rubio.
- ¿Juntos? – cuestionaba el pelinegro
-No es cierto; ¡Naruto cállate! – gritaba Naruko
- Ehm si, bueno… juntos… tu sabes… J-U-N-T-O-S – Le decía Naruto a Sai algo apenado y en voz baja.
-¡Ah!... – Sai se levanto y tomo a Naruto por la cintura acercándolo a su cuerpo con la mano derecha y tomando su barbilla con la izquierda, acercándolo a su rostro haciendo que Naruto se sonrojara – ¿Así Naruko?
-¡Kyaa~! – gritó con emoción la mencionada – voy por mi cámara
-Jaja es broma Naruko – dijo soltando a su muy sonrojado novio – oigan ya es tarde, es hora de que me vaya, y ustedes tienen que dormir también – saliendo de la habitación hacia la puerta de la sala, seguido por ambos rubios.
-Adios Sai-kun – dijo la hermana, dándole otro beso en la mejilla y un fuerte abrazo yendo a su habitación para que la pareja se despidiera en paz.
-Etto.. adiós Sai… buenas noches – dijo cabizbajo el menor para ocultar su sonrojo.
-Adios Naruto… - El moreno se acercó al rubio abrazándolo de la cintura mientras el rubio correspondía el abrazo ocultando su rostro en el pecho del mayor, estando así un rato – Nos vemos mañana en la escuela; Suerte – dijo deshaciendo el abrazo y dándole un suave y corto beso en los labios a Naruto para después salir y dirigirse a su casa.
Naruto regresó a su habitación, se dio una ducha y se puso el pijama para luego ir a desearle buenas noches a Naruko, pero cuando entró a su habitación vio que ya estaba dormida con televisión encendida, la apago, y las otras luces de la casa también, regresó a su cuarto y se recostó en la cama; mientras pensaba en cómo sería el día siguiente y el resto del año sin darse cuenta se durmió.