Dos muchachos esperaban aburridos a que las chicas con las que habían quedado dieran señales de vida.
-Esto es muy aburrido, dattebayo.-se quejó el muchacho rubio de ojos de cielo, mientras que el moreno de ojos de noche no decía ni una sola palabra.-Esas dos se están pasando.
El de ojos negros estaba perdido en sus pensamientos, intentando no mirar al de ojos de cielo.
Me he dado cuenta que ha ido surgiendo, poquito a poco, entre los dos
Una corriente, que nos desborda, no contenemos ni tú ni yo.
El rubio también miraba de reojo al moreno, con el corazón latiéndole con fuerza en el pecho y ganas de salir corriendo. ¿Por qué se sentía tan raro junto al teme?
En ese momento llegaron Hinata y Tentén, la pelicastaña se colgó del brazo del rubio y la tímida pelinegra del brazo de Sasuke. Ambos muchachos habían comenzado a salir con las dos amigas unas dos semanas atrás.
-Quiero ir al cine.-declaró muy emocionado el kitsune, obteniendo una sonrisa cariñosa de su novia y Hinata, y un gesto que pretendía ser hosco de Sasuke.
-Pues vamos todos, dobe.-dijo el azabache con indiferencia.- ¿Qué película quieres ver?
-Una de peleas y acción, dattebayo.-trinó con alegría el rubio, mientras los dos amigos caminaban muy emocionados juntos, dejando un poco atrás a las chicas, que los miraron un poco preocupadas.
Ya todos notan, cuando nos vemos, que yo te presto más atención
Es el momento, o fuera o dentro, no hay otra forma, seguir o adiós.
Cuando acabaron de ver la película, las chicas fueron al baño y dejaron a los chicos esperándolas fuera. Naruto comenzó a ponerse nervioso, porque cuando estaban acompañados por las chicas, él se sentía con fuerzas para dominar todo lo que estaba sintiendo por su mejor amigo, pero cuando estaba sólo con él, sentía que llegaría el momento que no pudiera contener sus sentimientos.
Jamás pensamos, que haríamos daño, no somos libres, es un error
Más quién le pone puertas al campo y quién le dice que no al amor
Cuando las chicas regresaron, las dos parejas se fueron a tomar unos helados y unos refrescos. Sentados en una terraza, las dos parejas hablaban tranquilamente, bueno tres personas lo hacían, Sasuke se limitaba a escuchar y gruñir, mientras seguía sutilmente todos los movimientos del ojiazul.
Si tú te atreves, por mi vida que te sigo
Si tú me olvidas te prometo que te olvido
Despues de todo, sólo queda un sueño roto
Y evitamos mil heridas que jamás podrían cerrar
Los dos chicos fueron arrastrados por sus alborotadas novias a la disco de moda de Konoha "Deseos prohibidos", que había abierto hacía muy poco y ya era muy famosa. Era propiedad de Itachi y Kakashi, y como sus dueños eran sumamente pervertidos, la discoteca era de una sensualidad desbordante, con exóticos cócteles y bebidas, luces tenues y propicias para la intimidad y pequeñas salas VIP dónde se podía hacer de todo XD.
-¿Qué quieren tomar, chicos?-preguntó Kakashi con diversión, al ver la cara de pena de los dos chicos y los ojos emocionados de las chicas.
-Nosotras queremos un "Beso prohibido"-chilló Tentén eufórica, pues era un cóctel que le había recomendado Ino.
-Yo quiero probar un "Sueño prohibido"-dijo el rubio emocionándose con la carta y todo lo que había en ella.
-Yo sólo quiero zumo de melocotón.-gruñó Sasuke.
El peliplateado decidió ser malvado, y añadió a todos los pedidos de los cuatro chicos, una bebida alcohólica muy interesante, muy rara de conseguir en la aldea...Absenta. De unos noventa grados de alcohol y si se bebía sola, amarga, diluida entre los ingredientes de los cócteles de los chicos y con un poco de azúcar, en el zumo del Uchiha menor, ninguno se daría cuenta...hasta que fuera demasiado tarde kukuku.
Itachi notó perfectamente lo que estaba haciendo el jounnin, impropio de un ninja de su edad y nivel, pero lo dejó estar. También quería saber lo que harían los chicos poco acostumbrados a beber bajo la influencia de la Absenta, casi un elixir mítico y misterioso, del que se decía que casi era una droga.
Sasuke estaba irritándose por momentos, Hinata no hacía más que mirarle y mirar al suelo llena de timidez, y el dobe estaba charlando alegremente con la pelicastaña, logrando que se sintiera muy, muy celoso.
Si tú te atreves, yo renuncio al paraíso, a amar contigo, a soñarte a que me sueñes,
Y al fin y al cabo, más que a nadie nos amamos, son pasiones ya tan fuertes
Que lo nuestro hay que olvidarlo... Si tú te atreves.
Kakashi llegó con los pedidos de los chicos, y tres de ellos le sonrieron agradecidos.
-Como es la primera vez que venís, chicos, esta ronda va por cuenta de la casa.-dijo el peliblanco con su ojito feliz.
-Kyaaa.-chillaron las chicas emocionadas.
-Muchas gracias, Kakashi-sensei.-trinó el rubio feliz, mientras Sasuke solo bufaba, recibiendo una patada de Naruto y una mirada como diciendo, agradécele.
-Tsk. Gracias.-dijo el azabache seco.
Kakashi se marchó muy satisfecho de haberles puesto la Absenta y esperando que el amargado de su alumno Sasuke se soltara la melena, totalmente inconsciente de que lo que había hecho cambiaría la vida de sus dos alumnos.
Naruto se tomó su bebida de un trago, ante la divertida mirada de las chicas y la resignada del moreno, que sabía que su dobe era un bestia.
-¡Qué rico, dattebayo!-dijo Naruto saboreando el cóctel y poniéndose más cómodo en el sillón donde estaban sentados los cuatro, pues la discoteca tenía tres pisos, uno era una gigantesca pista de baile con luces tenues y ambiente sensual, otro una especie de selva tropical, con plantas y un ambiente muy fresco y el último y dónde estaban ellos, una enorme terraza con sillones cómodos y un ambiente genial para hablar.
Kakashi e Itachi estaban de relaciones públicas, mirando que todo fuese bien, mientras sus empleados, que eran el resto de los ex Akatsuki, se ocupaban de todo.
-Vamos a bailar.-dijo Tentén emocionada, bebiéndose el cóctel y casi obligando a Hinata y Sasuke a que hicieran lo mismo. Como a los diez minutos, ya estaban los cuatro en el segundo piso, que era la gigantesca pista de baile.
Los cuatro (bueno, los tres, porque Sasuke es un amargado) comenzaron a bailar, pero pronto comenzaron a sentirse muy extraños. Las dos chicas perdieron toda razón y comenzaron a bailar sensualmente las dos juntas. Sasuke se empezó a marear y buscó un lugar para sentarse, mientras Naruto iba hacia los baños.
Las dos chicas pronto fueron rodeadas de moscones, recibiendo la mayor atención que habían recibido en sus vidas y bailando y bebiendo con ellos, olvidándose de los chicos a los que decían amar kukuku.
Sasuke, aún sentado y muy mareado, vió con asombro todo lo que hicieron Hinata y Tentén, sin imaginarse siquiera que era por obra del alcohol, incluso el mareo que estaba sintiendo, y se sintió horrorizado cuando vió que se abrazaban a Kiba y Neji, bastante bebidos los dos y se comenzaban a besar delante de todo el mundo.
Definitivamente ya nada le retenía ni al él ni al dobe, y fue en su busca, porque ambos se habían enamorado y no se atrevieron a hacer daño a las chicas que decían amarles.
Es el momento, o fuera o dentro no hay otra forma, seguir o adiós
Jamás pensamos, que haríamos daño, no somos libres, es un error
Más quién le pone puertas al campo y quién le dice que no al amor
Naruto se estaba mojando la cara con agua fría cuando Sasuke dió con él, y al encontrarse sus ojos, la bebida y el inmenso amor que ambos sentían se desbordó. Sasuke tomó la cara morenita de su rubio y besó sus labios con desesperación, beso que fue devuelto con creces por el rubio.
Infinidad de besos acabaron con toda la cautela y vergüenza de los chicos, acariciándose por todas partes y sacando suculentos gemidos del contrario. Sasuke terminó un último beso devorador y levantó el ruborizado rostro de su dobe.
-Si seguimos así no podré contenerme.-dijo roncamente el azabache.
El rubio bajó la vista lleno de culpabilidad.
-Pero lo que hacemos está mal, teme.-murmuró Naruto.-Yo estoy saliendo con Tentén y tú con Hinata.
-Ya no, dobe.-dijo con firmeza el Uchiha.-Tentén estaba comiéndose a besos a Neji, como Hinata se comía a Kiba.
Los ojos aguamarina de Naruto se abrieron como platos, mientras que la sorpresa y el alivio se reflejaron en su rostro.
-Así que... ¿Qué vas a hacer ahora?-preguntó el azabache.
Si tú te atreves, por mi vida que te sigo
Si tú me olvidas te prometo que te olvido
Despues de todo, sólo queda un sueño roto
Y evitamos mil heridas que jamás podrían cerrar
Naruto sonrió zorrunamente y lo abrazó.
-Todo lo que sea si es contigo, teme.-dijo alegremente, aliviando el corazón del azabache.
-Pues sígueme, dobe.
Sasuke lo llevó a uno de los lugares VIP, allí, casualmente (Si claro, y yo me lo creo kukuku) estaba Itachi, que les miró acercarse en silencio, tomados de las manos.
-Déjame pasar, aniki.-dijo Sasuke con calma, mirando a los ojos a su hermano mientras Naruto se ponía aún más colorado.
-Sólo lo haré si estás seguro de lo que estás haciendo, ototo baka.-dijo Itachi para nada sorprendido de la pareja que Sasuke había elegido, pues supuso que le amaba desde siempre.-Si te arrepientes despues no habrá marcha atrás, y ambos estáis bebidos.
-¿Pero qué dices?-chilló Naruto indignado.-Nosotros somos menores, no podemos beber.
-Si que podéis beber, aun cuando no lo hacéis, pero esa es otra cuestión.-dijo Itachi tan fresco.-Kakashi os añadió Absenta a vuestras bebidas y por eso actuáis así, por lo que voy a repetiros la pregunta- ¿Estáis seguros de lo que vais a hacer?
Los dos chicos lo fliparon pues nunca se hubieran imaginado que había sido la Absenta esa lo que les había permitido reconocer que se amaban y también comprendieron que sus ex novias habían actuado así por estar borrachas...pero eso no lo hacía menos grave, pues una traición era una traición kukuku.
Si tú te atreves, yo renuncio al paraíso, a amar contigo, a soñarte a que me sueñes,
Y al fin y al cabo, más que a nadie nos amamos, son pasiones ya tan fuertes
Que lo nuestro hay que olvidarlo... Si tú te atreves.
-Yo estoy seguro de lo que estoy haciendo.-dijo Sasuke convencido.
-Y yo, Itachi-chan.-dijo Naruto agarrándose con más fuerza de la mano del teme, temeroso de que el Uchiha mayor hiciera algo por separarlos.
-Entonces podéis pasar.-dijo Itachi con una sonrisa, que ambos chicos le devolvieron y entraron, dejando muy contento al Uchiha mayor y sonriendo como un verdadero bobo.,
-¿Y por qué esta linda sonrisa?-preguntó una voz.
Itachi se volvió hacia la voz, que era de Kakashi y sonrió aún más, abrazando al peliplateado que era su pareja.
-Porque gracias a tí y la Absenta, Naruto y mi ototo baka han dejado de dudar.
Kakashi se bajó la mascara para besar al moreno, feliz por los dos chicos.
En la sala VIP, que disponía de un gran sillón y una mesa con bebida y refrescos, y estaba preparada para aislar el ruido de la música de la discoteca, los chicos se besaban con desesperación.
Boca contra boca, comenzaron a despojarse de la estorbosa ropa, que no les dejaba acariciarse como ambos deseaban, hasta que sólo los bóxer los separaba de la completa desnudez.
Dejaron de besarse para mirarse, ambos satisfechos con lo que veían, ojos azules estudiando el cuerpo musculado y perfecto del de piel de marfil y ojos negros maravillados por el cuerpo sensual y proporcionado del de piel canela.
-Etto, teme.-murmuró el rubio con pena.-Nunca he pasado de unos besos con Tentén, así que no sé lo que hay que hacer...
Sasuke se sintió el ser más feliz del mundo, porque su niño no había sido tocado por nadie que no fuera él Muahahaha. Él tampoco había hecho nada con Hinata y era tan virgen como el rubio, pero antes muerto que confesarlo.
-No te preocupes, déjamelo todo a mí.-dijo con todo su orgullo Uchiha a flor de piel y agradeciendo que Kakashi fuera un pervertido y se hubiera empeñado en que leyera el Icha Icha Paradise kukuku.
Con delicadeza, acostó al rubio en el sillón, despojándole del los bóxer al mismo tiempo que se deshacía de los propios, dejando a la vista sus semi erecciones, excitando al rubio y a sí mismo. Mientras tomaba con pasión la boca del rubio, acercó su propia erección a la del ojiazul y comenzó a masturbarse y masturbarle, rozando sus durezas mientras el rubio se abraza con desesperación a él y ambos gemían en la boca del contrario. Los dos se corrieron a los pocos minutos, y se abrazaron jadeantes.
-Ahhh, teme. ¡Eso ha sido genial!-dijo el rubio emocionado.- ¿Ya hemos hecho el amor?
Sasuke, respirando entrecortadamente, casi se muere atragantado por su propia saliva, por la refrescante inocencia del rubio. Con sorpresa, sintió que su caída erección se erguía y decidió enseñarle al zorrito a hacer el amor.,
-Aún no, dobe, pero ahora te lo hago.-ronroneó el azabache.
El rubio se sobresaltó cuando la boca de fuego de Sasuke tomó la suya, pero se dejó hacer, ya que confiaba totalmente en él. Sasuke untó su mano derecha en el semen de ambos que descansaba en el vientre del ojiazul, lubricando sus dedos y comenzando a preparar la entrada de su amado.
Naruto se tensó un poco al principio, pero se dejó hacer dócilmente, pues quería darse entero a su amado teme, comprendiendo lo que estaba haciendo el azabache, pues se dio cuenta que al no ser mujer sólo había un lugar por dónde tomar todo lo del ser amado...
Mientras seguía besando sensualmente al rubio, Sasuke fue introduciendo el segundo y el tercero, abriendo el estrecho agujerito que quería conquistar y llenando de ansias al rubio que comenzaba a sentir placer con los dedos de su teme en su interior y quería saber qué se sentía al tener dentro de ti al hombre que amas.
-Hazlo ya.-susurró Naruto separando sus labios de los labios del azabache.-Introdúcete en mi interior.
Verle tan lindo, con las mejillas como rosas en flor y esos ojillos azules y maravillosos por no hablar de ese cuerpazo que se gastaba el dobe y esa vocecita tierna y violable, acabó con la poca cordura que atesoraba el azabache y abrió con ansias las piernas del rubio y se posicionó cómodamente entre ellas, deslizándose con suavidad y firmeza en su interior, besándole apasionadamente.
Notó perfectamente que el rubio se tensaba por el dolor de su embestida, pero decidido a que él también disfrutara, comenzó a penetrarle rítmicamente al mismo tiempo que masturbaba su floja erección, haciéndole perder la cordura.
Naruto no podía negar que le dolía, pero esa sabia mano masturbando su dureza y saber que tenía dentro de sí a Sasuke, lo acabó excitando muchísimo...y cuando Sasuke logró encontrar el punto que lo hizo enloquecer, fue tremendo.
-AHHHHHHHHHHHH, SSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII.-aulló Naruto como poseído.-DÁ OTRA VEZ, OTRA VEEEEEEEEZ.
Sasuke se quedó paralizado y miró el rostro contraído por el placer del rubio un poco ido.
-Maldición, teme.-gruñó Naruto con los ojos rojo sangre y sobresaltando aún más al pobre Sasuke.-No es momento de pararse, o sigues o te lo hago yo a ti.
Ni corto ni perezoso, Sasuke comenzó a moverse como un loco en el interior del ojiazul, llenándole de gozo con cada embestida y logrando que se retorciera sensualmente bajo el cuerpo pálido de Sasuke, que estaba a un milímetro de la combustión espontánea. ¡Dios mío! Si llega a saber antes que el dobe era tan sensible y sexy, haría años que se lo hubiera cogido, quisiera él o no, muahahaha.
Con un último empujón, Sasuke logró que el rubio se derramase y que su interior se estrechara maravillosamente, logrando que el azabache se derramase en el fogoso rubio y se dejara caer exhausto sobre el ojiazul, que abrazó con gusto a su teme, muy saciado y satisfecho.
-Esto si que ha sido genial.-ronroneó Naruto sensualmente, haciendo gemir dolorosamente a Sasuke, que estaba exhausto y tan cansado como él, pero su cuerpo le pedía más guerra kukuku.
Sólo puedo decir que fue una larga noche para los nuevos amantes.
Tres meses despues.
Naruto tuvo que apoyarse contra la pared al sentir un inmenso mareo, casi cayéndose al duro suelo, mientras Tsunade se levantaba de su sillón y corría hacia el rubio.
-¿Te sientes mal, Naruto?-preguntó muy preocupada, ayudando a sentarse al rubio en una silla.
-Si, oba chan, dattebayo.-susurró débilmente el kitsune.-hace unos días que me siento muy mareado y no sé por qué.
La rubia se preocupó mucho y arrastró al rubio hacia el hospital de la aldea para examinarlo ella misma. Cuando terminó de hacerlo, había algunas cosas que no cuadraban en el grafico.
-Mmmm.-murmuró pensativa, levantando los ojos de los resultados y posándolos en el rubio acostado en la camilla.-Tengo que hacerte unas preguntas.
-Vale, datteba.-dijo el rubio.
-¿Tienes novio o novia?-preguntó Tsunade.
El rubio la miró con los ojos muy abiertos y sonrojado.
-Novio.
La Godaime se quedó con cara de OMG y comenzó a ponerse pálida.
-¿Tenéis relaciones sexuales?
La cara de Naruto rivalizó con un tomate, dando la respuesta sin palabras a la rubia, que suspiró y levantó su mano derecha a la sien, sintiendo el comienzo de una horrible jaqueca.
-Bien, pues entonces tráete a tu pareja a mi despacho, Naruto.-dijo Tsunade con voz cansada.-Tengo que anunciaros algo.
El rubio, aún ruborizado y muy confundido, salió en busca de su teme, que estaba entrenando con su hermano en el campo 5, acompañado de Sakura y Kakashi, que miraban interesados el combate de los dos usuarios del Sharingan.,
Cuando Sasuke estaba por atacar a Itachi, vió por el rabillo del ojo acercarse a su dobe...y desmayarse, haciendo que Itachi casi se matase contra un árbol al verse sin oponente, porque su ototo corrió hacia su pareja a la velocidad de la luz, dejando pasmados a los dos espectadores y el Uchiha mayor.
-Dobe, dobe.-decía muy asustado el azabache dando suaves palmaditas en la mejilla al rubio, que estaba inconsciente.
Muy preocupados, los tres fueron hacia el hospital, con Sasuke llevando en brazos a su dobe, aunque Kakashi o Itachi quisieron llevarlo, porque ambos muchachos eran casi de la misma estatura y peso, pero recibieron una mala mirada con Sharingan del azabache y un gruñido.
Al ver desmayado al paciente que la Godaime acababa de atender, la enfermera jefe, Shizuka, mandó llamar a Tsunade, que estuvo allí en un momento.
Al ver a los cuatro acompañantes y al rubio desmayado, Tsunade comenzó a descartar gente y pidió a la pelirosa que saliera de la habitación, para extrañeza de esta y de los otros tres ninjas. La rubia los comenzó a taladrar con la mirada, con evidente mala leche, haciendo que Itachi y Kakashi se revolvieran incómodos y Sasuke la mirase de igual manera (que genio tiene la criatura kukuku).
-¿Quién de vosotros es la pareja de mi niño?-gruñó con los dientes apretados y una amenaza de muerte en la voz.
-Yo.
La Godaime se quedó de piedra al recibir la respuesta del hombre que menos había esperado...Sasuke Uchiha.
-¿¿¿¿Tú????-aulló la rubia mayor sorprendida con un tono de voz de ocho millones de decibelios por lo menos ^^.
-Si, yo.-volvió a decir Sasuke, mirándola sin pizca de pena o vergüenza y acercándose a su desmayado dobe.- ¿Por qué quieres saberlo, Hokage borracha?
La rubia mayor dejó pasar el insulto y miró con verdadero interés al huraño azabache, mientras una lenta sonrisa comenzaba a formarse en los labios.
-Felicidades, Uchiha. Naruto y tú vais a ser papás...
La cara de los tres ninjas, y de Naruto que recobraba la conciencia, no tuvo precio.
Cinco meses despues, paritorio
-¡Juro que te mataré por estoooooooooooo!-aullaba Naruto empujando lleno de dolores mientras apretaba con toda su fuerza la mano del sufrido Sasuke.-O eso o te dejo a palo seco durante toda la vidaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.
Tsunade y Shizune que asistían el parto del rubio, intentaban ocultar por todos los medios su diversión, porque mientras el ojiazul chillaba y se retorcía, Sasuke no decía ni una sola palabra y estaba más pálido que un muerto, porque al revisar Tsunade a Naruto, un mes antes del parto, se dió cuenta de que el bebé era demasiado grande y necesitaba provocar el parto...si en realidad era uno sólo kukuku.
Despues de seis horas de trabajo de parto, Naruto y Sasuke fueron los orgullosos padres de un par de gemelitos, los dos varones. Con lágrimas en los ojos, Naruto tomó posesivo a sus niñitos mientras levantaba su mirada al rostro maravillado y feliz de Sasuke.
-¿Estás feliz, teme?-preguntó el rubio conmovido.
-Muy feliz, dobe.-murmuró mientras acariciaba con un dedo la mejilla de uno de los bebitos y besaba en la frente a su esposo.-Inmensamente feliz.
-¿Cómo deberíamos llamarlos?-se preocupó el rubio al momento.-Yo creí que era una niñita y quería llamarla Mikoto, como tu madre...no busqué nombres de niño.
Sasuke suspiró, porque su dobe esposo era un cabezón. Se le había metido en la cabeza que tendría una niña y no había querido elegir ningún nombre de varón, por mucho que el azabache había insistido para ello.
-Mmm, pues supongo que los pensaremos sobre la marcha.-dijo el azabache devanándose los sesos para encontrar los nombres perfectos.
Al final se decidieron por Ryuusei (prosperidad, exhalación) y por Yuuki (atrevimiento, coraje, valor, espíritu, corazón).
Los dos nuevos miembros del clan Uchiha fueron recibidos por toda la aldea con dulzura y amor.
Dos años despues
-Yuuki, Ryuusei... ¿Dónde estáis?
Un joven muy hermoso de unos veinte años, de cabellos rubios y ojos azules, buscaba en el pequeño cuarto a sus dos retoños, mientras jugaba al escondite.
Sus ojitos celestes se estrecharon y saltó hacia el sofá, encontrando escondiditos detrás a sus dos amores, de cabellos negros y ojos azules, haciéndoles reír alborozados, mientras su mami los tomaba en brazos y les hacía cosquillas en la barriguita.
Sasuke, que llegaba en ese momento, muy cansado por la pasada misión, miró con ternura a sus tres tesoros, con el alma en paz y el corazón lleno de amor.
Si tú te atreves...
Fin.