4 años despues por Heeshica

4 años después…


Yo sabia que algo así pasaría, ¡claro! No por nada me he esforzado todo este tiempo.

“Ustedes serán parte de este proyecto, Super Junior 05”

Fui tan feliz cuando nos anunciaron aquello. Así que no tarde en llamar a Junsu y darle la noticia, por fin yo también debutaría, aunque…siendo tantos miembros ¿esto funcionara?

-No te preocupes, todo ira bien – me dijo con su sonrisa.
-¿Por qué crees que estoy preocupado?- pregunte dándole la espalda.
-¿No lo estas?, mmm, bueno, entonces me voy.
-¡Espera! – dije dándome la vuelta y echándole los brazos al cuello – dijiste que me invitabas un helado…y si, tienes razón estoy preocupado.

No se como Donghae había aprendido a conocerme tan bien, para saber cuando algo iba mal o no con solo mirarme, digo, ni siquiera Junsu podía hacer eso.

Caminamos un poco, la heladería no estaba tan lejos, en esos momentos lo menos que quería era ese helado, solo era por estar con Donghae un poco mas.

-Te aseguro que seremos el mejor grupo que exista – dijo sonriendo ampliamente. Yo también lo hice, algo que había notado era que si Donghae sonreía yo lo hacia también, en un especie de acto reflejo.

-¿Qué sucede? Te quedaste callado de pronto – me pregunta dejando su helado a un lado.

-Recordaba…el día que nos conocimos.- sonreí.
-uff! Ese día…- dijo tomando una cucharada de su postre. – estaba nervioso, era mi primer día y ya me habían regañado.-
-No hables con la boca llena…y tú me pareciste un chico muy extraño-
-¿en serio? Tú me agradaste desde el primer momento

-no te creo – reí.
-me sentí tranquilo cuando supe que serias mi compañero de castigo…ya te había visto bailar antes y estaba ansioso de conocerte- esa tarde Donghae sonrió de una manera diferente, no sabría explicar el que era diferente, pero si que era mas brillante y que eso también me gustaba.

-¿eras mi fan? Vaya de haberlo sabido antes – intente mirar a otro lado, sentía mis mejillas arder y no quería que lo notara a pesar de eso sonreí contento.
-¡claro! Lee Hyukjae…yo soy tu fan numero uno…y siempre seré tu mayor admirador.


Hace pocos meses que nuestro álbum salio y me siento feliz por todo, las cosas aunque con sus altibajos están saliendo mejor de lo que esperaba,
Aunque ya no seremos doce por lo que se.

-El trece de la suerte – me dijo
-Creí que el numero trece era, de hecho, de mala suerte Donghae- dije sin mirarlo.
-pues estas equivocado – dijo abrazando mi cintura, eso ya comenzaba a ponerme nervioso – el trece será de la suerte será nuestro numero, ¿has escuchado al chico?
-Si, la verdad es que lo hace muy bien- y era verdad, solo lo había escuchado una vez, pero ese niño llamado Kyuhyun tenía una voz muy hermosa.
-pues ahí esta – dijo soltándome y poniéndose frente a mi - ¿Cuándo me e equivocado?
-pues…
-Eunhyuk! – sonreí, después de que me dieran ese sobrenombre Donghae ya solo e llamaba así.

-De acuerdo, tu solo confía – me guiño un ojo y sonrió de una manera que me hizo pensar que si Donghae me decía que el cielo era verde yo le creería.





Hoy llore de dolor, sentí que el corazón se me estrujaba y que no podía hacer nada, llore de dolor, de impotencia y frustración.

Llore porque lo vi llorar a el, era el a quien dolía, era el quien había perdido a una persona tan importante, su padre.

Y me sentí tan mal de no poder aliviar su pena, de no poder remediar de alguna manera ese pesar.


Solo acompañarlo como ahora, mirándolo dormir y el aun derramando lagrimas. Como quisiera transferir esos sentimientos a mi propio corazón, que el no pasara por esto, quiero ser yo el único llorando, pero no el.

Esa sonrisa, ¿la volveré a ver? Tengo miedo, si, estoy asustado de que Donghae ya no vuelva a sonreír. No se que hacer.

-Eunhyuk…- dijo abriendo los ojos.
-¿Qué sucede? – intente sonreír y limpie mis lagrimas, el lo noto.
-gracias…- dijo mirándome a los ojos.
-¿gracias de que? ¿Te sientes…?
-por intentarlo- dijo y me sonrió, descubrí otra sonrisa, una que no era tan traviesa o alegre, pero que también me gustaba, una que me dio paz y calma.

-Aunque no pueda quitarte ese dolor – dije acariciándole la cabeza – siempre me tendrás para compartirlo, entre dos es mas fácil.- dije sonriendo levemente, me acerque y lo abrasé, el correspondió con mas fuerza aquel abrazo, y lloro y yo con el. Y fue en ese momento cuando supe cuanto lo quería.




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