**Han pasado 3 semanas desde que…desde que… Mmm digamos desde que Usagi-san y yo nos peleamos a causa de sus celos y de que él llegó tomado por tratar de olvidar nuestra discusión…
Las cosas habían regresado a la realidad, Usagi-san trabajaba en la publicación de su nuevo libro y yo… bueno… en la editorial también trabajando.
Durante este tiempo ni Usagi-san ni yo hablamos de la discusión, por que las cosas parecían normales, ya que como siempre, en cada oportunidad que tenía, Usagi-san me abrazaba muy fuerte, me decía que todo estaba bien y recargaba mi cabeza en su hombro durante algunos minutos hasta que yo me separaba de él. Incluso durante estas semanas, se portaba más cariñoso de lo normal, varias veces a mitad de la noche iba a mi habitación, se acostaba a mi lado para dormir y me seguía abrazando toda la noche, como acostumbraba hacerlo antes de que nos peleáramos.
Pero mientras trascurrieron los días las cosas cambiaron y me fui dando cuenta de que algo andaba mal, poco a poco Usagi-san dejo de abrazarme, decirme que todo estaba bien y de recargar mi cabeza en su hombro.
Ya no me besa, ya no me molesta, o trata de tomar mi cuerpo a la fuerza, ni insiste ir por mí a la editorial, ya no va a mi cama para quedarse dormido a mi lado, en lugar de eso me he dado cuenta de que últimamente ya no duerme por las noche como si vigilara que yo no me fuera de la casa y se queda dormido en el día.
No es que me preocupara por qué me impide irme o que pensara en abandonarlo, pero es que me preocupa cada vez Usagi-san actúa más raro...
Como hoy que me toca comprar la despensa, pensé que era un buen pretexto decirle que iba a ir para que saliéramos juntos y platicar un rato, como siempre lo hacíamos, pero cuando lo oyó, solo me miro tristemente, como si dudara de mi, después de unos minutos se acerco, me abrazo muy fuerte, como si quisiera que no me fuera de su lado y posteriormente me pregunto “¿Misaki solo es la despensa verdad?”
Yo… yo no supe que contestar eso, me dejo pasmado totalmente… ¿Acaso Usagi-san desconfía de mi?, solo pude asentir con la cabeza. Usagi-san intensifico su abrazo y después de unos segundos muy lentamente me fue soltando.
Cuando sentí sus manos caer y vi sus ojos llenos de melancolía me altere… ¡¡Yo yo no sé reaccionar cuando esta así de triste!! Y traté de salir rápido de lugar pero justo antes de que saliera corriendo volvió a pronunciar mi nombre “Misaki...yo" no escuche lo demás solo salí lo más rápido que pude.
No sé qué le pasa a Usagi-san, ¿Por qué piensa que lo voy a abandonar? Yo no lo dejaría… (Sonrojo) bueno es que yo…lo que quiero decir es que… ¿Por qué Usagi-san sigue pensando que lo engaño con Sumi-sempai? Si el día que llego tomado yo le dije que él era solo un amigo y el bueno… es que él es… este él es… Ammm algo más.
En fin sé que no fue una buena idea decirle que quería mucho a sempai y que era una persona especial para mí… pero no fue mi intensión, yo no sabía que eso lo lastimaría… de verdad no lo pensé… **
Pensaba melancólicamente un estudiante de 19 años sentado en una de las bancas de un famoso centro comercial, que se encontraba a escasos metros de su hogar.
Las cosas con su casero se habían empeorado y a pesar de que trato de remediarlas, haciendo todo que fuera humanamente posible y que estuviera en sus manos para quitar la evidente tristeza de peli-plata, todavía los sentimientos de culpa permanecían en él y la inseguridad en el escritor.
¿Pero por que el novelista había y hacia tanto revuelo por insignificantes palabras?
Quizás por el tono en que su amado las había pronunciado, la seguridad en que se las había dicho y el evidente destello de alegría que tenia Misaki al momento de recitarlas. Además de que gracias al alcohol que había ingerido esa noche, no recordaba ni una sola palabra que su niño había dicho para reconfortarlo.
Así que en términos finales, las cosas se encontraban como al principio, Akihiko celoso y con miedo de que Misaki se fuera de su lado y el castaño dándose de topes por haber pronunciado tan crueles palabras.
“Si tan solo pudiera cambiar las cosas, regresar al pasado y evitar decirlas, pero desgraciadamente eso no era posible y por su culpa el mayor se encontraba más que deprimido.”-Recapacito, el oji-verde mientras veía a varias personas de centro comercial correr ansiosas hacia un punto de este.
Pero no era momento de culparse, tenía que hacer algo y pronto, si no las cosas empeorarían...
¿Pero qué podía hacer para convencer al oji-violeta de que lo que le decía era verdad? ¿Regarle un Suzuki-san más grande del que tenía? No, eso sería mala idea, ya eran demasiados los osos que coleccionaba… ¿Prepare una buena comida? No, no funcionaria, durante varios días el oji-verde le preparó diferentes platillos y solo consiguió la misma respuesta triste de su casero.
Entonces… ¿Que le podía regalar? ¿Una buena sesión de sexo?
¿Cómo hacer eso? Si hacía una semana, el mayor solo se limitaba a acariciarlo por encima de su ropa como si tuviera miedo de lastimarlo y cuando estaba a punto de proceder a algo más se disculpaba con él, y se marchaba del lugar, dejándolo totalmente paralizado…
¡¡¡ ¿Qué hacer para que Akihiko lo perdonara?!!!!
Durante varios minutos el castaño se quedo meditando sobre su regalo hasta que por arte de magia oyó en el altavoz del centro comercial…
-¿Tienes problemas amorosos? ¿Tu vida sentimental está hecha un caos? ¿Ni siquiera sabes que palabras decir o que hacer para que esa personal especial te perdone? Entonces… ven a nuestros famosos masajes relajantes quita tensiones, donde te aseguramos que con nuestro servicio se aclararan tus pensamientos para que puedas solucionar tus problemas amorosos y continuar con tu feliz matrimonio. Ven te esperamos en.... dentro del centro comercial…-
Una rara forma de solucionar sus problemas, incluso Misaki pensó que sería una estupidez creer en semejante propaganda barata, pero estaba desesperado y a lo mejor lo que decía el anuncio podría solucionar sus problemas o por lo menos aclarar su mente… ¿Que tenía que perder?
Decidido, el joven estudiante se dirigió al local de masajes y pregunto por el anuncio que había escuchado. De inmediato, la recepcionista lo paso a una habitación y le invito a que desvistiera para que pudieran la encargara comenzar su trabajo.
Nervioso por lo que iba a ser, el castaño empezó a quitarse su camisa; Sin embargo, antes de que se quitara lo demás de su ropa, aprecio una bella mujer que amablemente le indico que cuando lo hiciera se recostara en la plancha de madera.
Por unos minutos Misaki dudo en hacerlo o no, ya que el pudor estaba a flor de piel, además de que nunca había asistido a un masaje de este tipo; No obstante, al ver como la muchacha lo veía con gran naturaleza, como si se trata de algún familiar suyo, el menor accedió y después de colocarse la toalla a mitad de su cintura se coloco en la mesa de madera para que empezara el masaje.
-Así que estas aquí por lo del masaje de anuncio ¿Verdad?- Le pregunto sonriente la mujer mientras empezaba a realizar su trabajo.
-…Si-
-Me alegra mucho que un hombre venga aquí para solucionar sus problemas amorosos, es tan lindo que quieras reconciliarte con tu novia- Respondió emocionada la mujer, al ver que Misaki se ponía rojo de la vergüenza cuando le mencionaba lo de la reconciliación.
-Este… bueno… yo…-
-Pero dime ¿Que paso con tu novia por que se pelearan? Si se ve a simple vista que eres un niño muy tierno y lindo-
-Bueno es que yo…-
-Ah ¡Espera! ¡Espera! déjame adivinar…. ¿Olvidaste su aniversario?-
-No, no fue eso-
- ¿La dejaste plantada en algún lugar…?- Pregunto al mujer mientras comenzaba impartir el masaje por el cual el oji-verde había pagado.
- Tampoco…-
- Entonces…-
-Bueno… es que él cree que yo lo engaño…- Susurro muy quedito el castaño mientras apoyaba su cabeza la cama de masajes y volvía pensar en el problema que lo aquejaba, sin poner atención en la frase que anteriormente le había comentado, ni en la expresión que había puesto la masajista al saber que ese tierno niño tenía novio en lugar de novia.
-Ah ya veo… ¿Y si lo engañaste?- Reafirmo la mujer mientras que con una sonrisa continuo su trabajo y el castaño se relajaba con el olor a incienso que tenia la habitación.
-¡¡No!! Yo… yo no lo engañaría…- Replico el castaño -Solo que… bueno el es muy posesivo y entendió mal las cosas-
-¿A ti no te gusta que sea posesivo?-
-No, no es eso… solo que a veces me molesta un poquito que se encele de todas las personas que se acercan a mí-
-Ah ya, pero eso no es malo, solamente te quiere mucho y no quiere que te aparten de su lado ¿No crees?…- Contesto la masajista mientras se ponía a reflexionar en lo que acaba de decir y qué clase de persona era su pareja para enojarse con el lindo niño que tenía enfrente de ella.
-Sí, pero Usagi-san exagera, ¡¡ ¿Por qué tiene que tiene que ser así de posesivo?!! Yo no engañaría…-
Sin ponerse a pensar en lo que había dicho y totalmente relajado por el masaje, grito algo molestó el oji-verde pensando en lo que había pasado esa semana y como había terminado todo por culpa de los tontos celos de su casero; No obstante, al oír el nombre de Usagi la joven quedo paralizada ¿Acaso ese joven salía con el escritor Usami Akihiko mejor conocido como Usagi? ¡¡No no podía ser!! Por qué el escritor era Heterosexual ¿no?... Pero se veía que el niño no mentía y decía la verdad… Ahora que lo recordaba ese escritor se veía envuelto, hace unas semanas, en un problema amoroso con una mujer llamada Misaki porque lo había engañado… Sin duda no podía ser ese joven.
-¿Pero has hablado con él? Si te quiere mucho entenderás como te sientes ¿no?-
-He tratado pero cuando estoy cerca de él, me paralizo y no sé qué decir… además él esta ahorita muy enojado conmigo y no sé cómo decirle que todo fue un mal entendido… bueno también yo no he hablado directamente con él desde esa noche… quizás si lo enfrento y le digo lo que siento… puede que comprenda ¿no crees?-
-Sí, creo…-
Durante algunos minutos aquella mujer trato de pensar en una posible solución para el problema sentimental de su cliente con su amado; Sin embargo su mente solo podía pensar en Usami Akihiko y su aparente Homosexualidad. Así lo hizo hasta que calladamente la mujer termino la supuesta hora de masaje y le indico a Misaki que ya había finalizado…
Ante esto Misaki dio las gracias alegremente por que le había ayudado el masaje a aclarar sus problemas sentimentales y ya sabia que hacer, le pago y sonriendo tomo sus cosas y se dirigió a la salida con el único objetivo de hablar con su seme y explicarle que todo había sido un error y había entendido mal su conversación; No obstante, cuando estuvo a punto de salir del centro comercial escucho como una voz lo llamaba por su nombre…
-Hola Misaki-kun ¿Vienes a ver a sensei?- Pronuncio una mujer pelirroja mientras alegre se dirigía hacia él.
-¿Usagi-san esta aquí?-
-Sí, hoy sensei va a dar una conferencia, una entrevista y una firma de autógrafos para promocionar su nuevo libro “El conejo que vive en la luna… es un ser incomprendido” ¿No te lo había dicho? -.
Escuchando esto Misaki se pasmo, su casero no le había mencionado que saldría, mucho menos que daría una conferencia en el mismo centro comercial a que asistiría. Quizás por eso no le había acompañado.
-No lo menciono Aikawa-san… yo creo que se le olvido-
-Ah… Bueno, entonces ven conmigo, si quieres puedes esperarlo detrás del escenario, no creo que tarde mucho la firma de autógrafos, a sensei le dará gusto verte-
Sin esperar respuesta del menor, rápidamente Aikawa tomo del brazo a Misaki y lo llevo a atrás del escenario donde justamente se estaban llevando los preparativos para el evento.
“Quizás si lo veía por unos segundos, a Usagi se quitaría la tristeza que sus ojos reflejaban y el enojo que tenia por que lo había sacado de su casa” Pensó la editora mientras buscaba la peli-plata por todo el lugar
-Aikawa-san no creo que sea buena idea… No quiero dar molestias-
-No te preocupes Misaki-kun no es ninguna molestia tenerte en un evento de sensei-
Durante por algunos minutos la pelirroja busco al novelista, con el único deseo de decirle que ahí se encontraba su inquilino, hasta que por fin lo encontró. Más justamente cuando este vio la presencia de Misaki en el centro comercial, Isaka-san había nombrado su nombre enfrente de sus fans y tenía que subir a decir el estúpido discurso que su secretario había escrito.
-Ah lo siento, sensei acaba de subir al escenario, tendremos que esperar un rato para decirle que estas aquí-Menciono algo triste aquella mujer pensando que por culpa de la depresión del oji-violeta acabaría en un desastre la firma de autógrafos.
Sin decir más el menor y la editora se dirigieron a un lugar donde había sillas y se dedicaron a escuchar el discurso que el escritor iba a decir; No obstante, de inmediato Misaki se quedo contemplando el panorama ¡De verdad que el escritor era famoso! ¡Habían cientos de mujeres esperando su llegada en el centro comercial! gritando felices consignas sobre él, portando mil y un artículos con su imagen y todas cargando el más reciente libro de su autoría.
Por unos minutos Misaki se quedo viendo tal espectáculo hasta que un ruido disipo sus pensamientos…
-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡KYYYYYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! ¡¡¡¡¡VIVA!!!!!!!!!!- Se oyó, a no más poder en aquel recinto, un gran grito proveniente de todas las admiradoras al contemplar como hombre de cabellos plateados y expresión seria, caminaba hacia el escenario y se dirigía para comenzar el espectáculo que su editorial había organizado; Sin embargo, al momento Isaka-san le paso el micrófono para que recitara las palabras de su discurso, Akihiko lo ignoro y se sentó en una de las sillas que tenía enfrente para empezar el odioso trabajo de firmar autógrafos y la entrevista con los medios de comunicación…
-¡Mil disculpas! Al parecer Usami-sensei no quiere hablar en este momento, que les parece si empezamos con las preguntas de los medios- Pronuncio Isaka mientras que con la mirada reprendía al escritor por tal descortesía con sus admiradoras-… ¿Quién quiere comenzar con las preguntas?-
Al oír esto varios reporteros se acercaron al escenario y empezaron a tomar fotos y hacer preguntas a aquel hombre de expresión seria y mirada triste.
-¿Sensei es cierto que al saber que su pareja lo traicionó fue a un bar y desahogo su pena?- Peguntó la reportera del noticiero “El puntual” dando principio a la serie de interrogativas que todo el mundo quería saber “La traición amorosa que había sufrido el Gran escritor Usami Akihiko-sensei”
Al escuchar esto de inmediato, Isaka-san se levanto de su asiento y se dispuso a calmar a los periodistas... “Sin duda si el peli-plata oía ese tipo de interrogativas terminaría nuevamente ahogado en el alcohol y no podría cumplir el trabajo en la editorial” Pensó alterado el Director.
-Señorita, ese tema no es el apropiado, la conferencia es para presentar el nuevo libro de Akihiko-sensei- Reprendió el Director General, al ver como, por el amarillista comentario, el oji-violeta se quedaba callado y su tristeza se agudizaba.
-Akihiko-sensei ¿Es verdad que el engaño fue con el mejor amigo de ella?-Volvió a preguntar otra persona, haciendo revuelo entre los periodistas, admiradoras y personal de la editorial.
-Por favor, repito nuevamente la conferencia es para la presentación de libro-Intento calmar los ánimos del mayor; Sin embargo, esto no fue posible, la expectativa de que uno de los autores más codiciados de Japón había sido traicionado, era el detonante perfecto para que todas las televisora, estaciones de radio y revistas, buscaran tener la exclusiva y la confesión de primera mano del escritor acerca de su engaño.
No obstante y ante esto, tanto como Usagi ni como Misaki, en su respectivo lugar se quedaron impactados, ¿Por qué demonios todo mundo se había enterado de su pelea amorosa? Y peor ¿Por que intentaban hacerla más fuerte?
La respuesta era sencilla, alguien que no quería verlos juntos, había esparcido el rumor de lo que inconsciente había dicho el novelista en esa conferencia apocas horas de haberse enterado de que su amado lo traicionaba, con tal de sacarle provecho a la noticia.
-Por favor señores de los medios, todo eso son rumores. Enfóquense al objetivo de la conferencia o me veré en la penosa necesidad de cancelar el evento- Amenazo Isaka-san al ver como con cada pregunta que se le hacía, Akihiko se le veía más deprimido.
Y no era por más, si sabía perfectamente que su adoración no lo amaba y estaba a punto de irse de su casa abandonándolo para irse con su amante, y ahora venían a reafirmarlo haciéndolo público y gritándolo a los cuatro vientos. Sin duda era más de lo que podía soportar.
Dispuesto estaba el peli-plata a abandonar el lugar para irse a su departamento y ocultar su tristeza que desde hacía una semana tenía en su ser; Pero, antes de que pudiera siquiera abandonar la silla en la cual se había sentado, una pregunta lo hizo paralizar…
-Sensei ¿Acaso es verdad que “su Misaki” se acuesta con alguien más a escondidas de usted?- Pregunto maliciosamente una reportera del programa de chismes y espectáculos “El chismoso andante” intentando sacar la verdad al escritor y obtener la exclusiva
Esa pregunta fue el detonante, Si de por si el peli-plata estaba dolido de la confesión que su querer a pocos días le había hecho, ahora imaginar que él no era el único que tenía el privilegio de amar al castaño y tocar su cuerpo, había sido fatal para el escritor y había logrado que se desmoronara y se quedara con los ojos abiertos sin poder mover ningún musculo de su cuerpo.
Al escuchar esto, Isaka-san rápidamente se dirigió con el único propósito de cancelar la conferencia y sacar al novelista de ahí ¡Todo se había vuelto un desastre! ¡Jamás se le ocurrió pensar que el rumor de la traición corriera tan rápido a los medio! Sin embargo una voz lo distrajo de su objetivo, tanto a él como a todos los presentes
-¡¡¡¡YO NO ENGAÑE A USAGI-SAN!!! ¡¡¡Y YO NO ME HE ACOSTADO CON NADIE MÁS, QUE NO HAYA SIDO ÉL!!!-
Grito alguien a no más poder detrás del escenario, y de la cual los sonidos provenía de un histérico niño de cabellos color cafés y ojos verdes que intentaba subir hacia donde se encontraba su casero para aclarar que todo lo que había pasado era un error y él por ningún motivo lo engañaría.
¡Ya era suficiente! Primero Usagi-san no le quería creer sus palabras ¿Y ahora todo el mundo lo tachaba como si fuera un criminal? ¡¿Qué rayos tenía que hacer para que le creyeran?! Él en su vida había pensado traicionarlo, ni siquiera con la mente y ahora todo el mundo decía lo opuesto por las estúpidas palabras que sin pesar había pronunciado.
Ante esto de inmediato todo mundo se escandalizo y más los periodistas ¿De quién era la voz que habla gritado eso? ¿Acaso era la supuesta “Misaki” la cual había roto el corazón del sensei? Sin duda eso sería un chisme valioso… (Pensaron los reporteros)... Tener la exclusiva de la confesión aquella mujer que había traicionado al Gran Usami Akihiko. ¡¡Seria la primicia de la semana!!
Al pensar esto, instantemente todo los reporteros fueron en busca de aquella persona que había gritado tan fuerte confesión; No obstante, de inmediato, el secretario de Isaka-san tomo a Misaki de la muñeca y se apresuro a llevarlo a uno de los baños del centro comercial para evitar que se hiciera más fuerte el problema que se les venía a todos los de la editorial Marukawa.
Pero ¡¿Cómo se le había ocurrido gritar al menor eso sabiendo, que Akihiko estaba en un escándalo de traición?! ¡¡Si se enteraban que la supuesta pareja del escritor era un hombre seria el acabose para todos!!
-Yo… yo... no sé que me paso Asahina-san...yo lo siento...mucho- Pronuncio el menor justo después de que el mayor cerrada la puerta de la habitación y mientras avergonzado a no más poder él escondía su sonrojada cara de los ojos de aquel hombre intentando borra lo que había dicho.
-No te preocupes…-Trato de reconfortarlo. El haber dicho eso enfrente de todo el mundo sin duda había sido un gran esfuerzo para el menor y la cara avergonzada que tenía en ese momento se lo confirmaba.
Pero no era momento de re confortaciones tenía que actuar rápido y sigilosamente para no agrandar el problema. Quizás si sacaba al castaño antes de que la prensa los encontrara, podría salvar algo la situación; Sin embargo, antes de que pudiera decirle otras palabras de aliento o buscar la manera de salir sin ser descubiertos, llego el Director de la Editorial furioso a no más poder e interrumpió toda tranquilidad del castaño…
-¡¡¡¿¿Qué demonios Chibi-tan??!!! ¡¡¿¿¿Sabes ¿que lo acabas de hacer???!!! ¡¡La prensa nos va devorar con semejante confesión!!! - Grito más que enojado Isaka, Y no era por demás si todo el trabajo de años con el novelista se venía abajo por un simple arranque de emociones
-Yo… yo… no quería decirlo… es que…yo...-
-Chibi-tan ¡¡Si la prensa descubre la verdad!! ¡¡¡Sera el fin de todo!!! ¡¡ ¿Cómo rayos se te ocurrió decir eso enfrente de todo el mundo?!!!-
-Tranquilícese Ryuichiro-sama, no es tan grave-
-¡¡¿¿Qué demonios dices Asahina??!! ¡¡Claro que si es grave!! ¡¡Los reporteros están vueltos locos tratando de saber quien fue quien grito eso!! ¡¡Y todo gracias a Chibi-tan!! ¡¡ ¿Qué rayos te paso por la mente para gritar eso?!!
-Yo… bueno… yo… es que últimamente Usagi-san y yo... hemos tenido problemas... y él cree que yo lo e-engaño… y la gente decía…- Menciono muy bajito el oji-verde mientras volvía a ocultar su cara de la pena y comenzaba a dejar salir lagrimas de preocupación.
-¡¡¡Lo que pase con ese bastardo de Akihiko y tú no me importa!!! ¡¡¿¿Sabes lo que costara hacerle creer a la prensa que lo que supone es mentira?!!-Vivió a gritar más fuerte Isaka mientras veía furiosos como el oji-verde comenzaba a llorar de la regañada que le estaba poniendo.
-Ryuichiro-san ¿Me permite hablar con usted un momento?- Pronuncio el secretario mientras, sin esperar a que contestara su interrogativa lo jalo hacia afuera del baño.
-¡¡Oye!! ¡¡¡ ¿Qué crees que estás haciendo bastardo?!!!-
- Ryuichiro-san contrólese, está haciendo llorar a Misaki-kun-
-¡¡ ¿Y qué crees que pretendo Idiota?!!¡¡La prensa estará sobre de nosotros por su descuido!! ¡¡Sabes que será un problema lidiar con ellos!!-
-Si señor pero ya usted lo oyó, él lo hizo porque tiene problemas con Akihiko-sama, Él todavía es muy joven y no sabía cuáles eran las consecuencias que le traería decir eso-
-¡¡No lo justifiques Asahina!! ¡¡ Es imperdonable un error así!! Debió pensar más las cosas antes de haber abierto su boca.-
Era un hecho, después de que todo se solucionara, ¡¡Sin duda Isaka mataría y descuartizaría tanto al escritor como a su inquilino por semejante problema que habían creado!!
-Bueno señor si es lo que usted quiere…- (Suspiro resignado el secretario)-… Ryuichiro-sama usted y yo sabemos que este problema no es para tanto. No es la primera vez ni la ultima que Akihiko-sama tiene un escándalo. Además el menor lo dijo inconsciente como lo hizo usted, hace tres años cuando en plena reunión familiar le gritó a su padre que yo era de su propiedad y que dejara de molestarme ¿Recuerda?-
Ante esto el castaño palideció e inmediatamente bajo su enojo… No cabía duda su secretario sabio como herirlo y de qué forma suavizar las cosas.
-….Creí que no lo habías escuchado la vez que le dije eso a mi padre- Cambiando totalmente la expresión de su rostro y el tono de voz enojado por uno arrepentido, Isaka-san pronuncio lo anterior.
Sin duda el mayor había dado en el punto fatal para que su pareja cambiara la tensión del momento; y bajara la voz ante el menor que des tras de la puerta se encontraba llorando a no más poder, por la imprudencia que minutos antes había tenido.
-No señor, yo lo escuche como toda su familia, solamente que justifique su arranque de emociones con el hecho de que estaba muy presionado por la editorial y por el distanciamiento que habíamos tenido esa semana por brindar mis servicios a su padre. Y eso fue, hace tres años usted estaba… digamos “celoso” de él y este hecho no lo dejo pensar bien las cosas-
-¡¡Yo no estaba celoso de mi padre!! Solo… (Sonrojo)… no me gusta que se lleve lo que me pertenece-
Ante esto el mayor sonrió, sin duda aquel hombre que se hacía cargo de la Dirección de la Editorial seguía siendo el mismo niño capricho y consentido del que años atrás él se había enamorado. De inmediato y no sin antes ver que nadie los observara, Asahina se acerco a su jefe y lentamente lo abrazo haciendo que el sonrojó se agrandara.
-Aclarado ese punto Ryuichiro-sama, creo que lo mejor que podríamos hacer es llevar a Misaki-kun a su casa y tratar de hablar con la prensa para evadir los rumores-
-¿Y cómo se suponme que haremos eso Kaoru? Si ni siquiera creo que podremos dejarlo salir de ahí dentro, sin ser descubiertos–
-Ya he pensado en eso señor, y el dueño del centro comercial me menciono, cuando acordamos el evento, que hay una puerta trasera en…-
Trato de decir aquel hombre de aspecto sereno y voz calmada; Sin embargo, antes de que pudiera decir sus planes, Akihiko interrumpió su voz.
-¡¿Donde está Misaki?! – Grito el peli-plata mientras veía como rápidamente Isaka se alejaba del acogedor abrazo de su pareja y acomodaba su traje tratando de disimular lo evidente.
-Está adentro de esa habitación Akihiko-sama, pero no creo quesea buena idea que usted…-Menciono el secretario pero por segunda vez el oji-violeta interrumpió sus acciones, ya que sin esperar a que terminara su frase abrió la puerta del baño encontrándose instantáneamente al castaño en un mar de llanto, por el regaño que le había dado Isaka-san.
-Yo... yo… Usagi-san yo… yo… no quería causar problemas…perdóname…- Trato de decir el menor con las lagrimas escurriéndole por las mejillas; No obstante, su sentimiento eran más de lo que podía controlar y sus palabras no pudieron salir por más que quisiera.
Ante esto de inmediato Akihiko se le acerco y sin decir ninguna palabra fue directo abrazarlo como si su viera dependiera de ello.
-Misaki todo está bien…-
Acto seguido el mayor se acerco lentamente a los labios húmedos por las lágrimas de Misaki y sin desear otra cosa que hacer prontamente le fue brindando un romántico beso que de inmediato y penosamente correspondió el castaño.
El beso no duró mucho ya que, después de un rato de tan embriagante contacto y de que por este las lágrimas cesaran, el oji-verde se separo del mayor para pronunciar en un tono muy bajito…
-Usagi-san… yo…yo…no te engaño, solo fue una confusión… no quise decir eso aquel día… yo…-
El joven estudiante no termino de decir su frase ya que nuevamente los labios del peli-plata se le acercaron y prontamente lo besaron, pero esta vez más tiernamente.
-Misaki, Estoy muy feliz-
El saber que su adorado niño no lo traicionaba y para demostrarlo lo había gritado enfrente de todo mundo; Sin duda hizo que el novelista no cupiera en la felicidad y quisiera verlo para abrazarlo en ese momento; Sin embargo la tonta de su editora lo había retenido para clamar la prensa y no había podido tener al castaño antes de que Asahina lo ocultara de los medios de comunicación.
Pero ahora tenerlo enfrente del diciendo lo que desde hace una semana quería oír y con sus ojos llenos de sinceridad hizo que el escritor, deseara en ese momento tener intimidad con su pequeño Misaki para demostrarle lo mucho que lo quería y cuando le había hecho falta.
Lentamente el peli-plata intensifico que el abrazo que los tenia juntos y con un voz sincera le pronuncio a su acompañante...
-Misaki te amo… no sabes cuánto necesitaba escucharte decirlo-
Después de esto muy despacio el oji-violeta empezó a besar el cuello de su amado mientras que con una de sus manos intentaba desabrochar la camisa de este.
-Usagi-san estamos en un baño… no es el lugar correcto- Menciono, al paso de unos segundos el castaño, mientras su seme iba recorriendo seductoramente la delicada piel de su cuello; No obstante y aunque Misaki no lo admitiera, deseaba muy adentro de su ser que este no se detuviera y continuara tocándolo. Y no era por demás si la última semana el escritor solo se dedicaba mirarlo sin tratar de hacer algo más dejándolo bastante confundido.
Ante esto el mayor, se despegó por unos minutos de la piel del menor, le sonrió dulcemente y volvió a continuar con sus caricias hasta que logro que por el contacto las piernas de Misaki temblaran y este cayera al suelo.
Sintiendo como su querer caía rápidamente de sus brazos, el novelista imito la acción de este y cayo quedándose justamente enfrente del rostro de su pequeño.
Al sentir la profunda mirada del escritor, rápidamente el castaño intento apartarse retrocediendo de su lugar, para ocultar el visible sonrojó que tenia y los sonoros latidos de su corazón; Sin embargo una de las paredes de aquel baño se lo impidió,
-De verdad Usagi-san este no es lugar… dejémoslo para otro momento- Intento pronunciar el oji-verde sabiendo de detrás de ese cuarto había miles de fans, periodistas y el personal de la editorial. No obstante, su casero no estaba dispuesto a postergar tan esperado momento. Desde hacía mucho tiempo que no lo tocaba ni lo besaba y sus deseos no iban a soportar dejarlo ir.
Sin contestar a lo último Akihiko se le fue acercando mientras desabrochaba su corbata, hasta con sus labios empezó nuevamente a posesionarse de la piel del abdomen de su amado, que minutos anteriores había dejado visible al desabotonar su camisa.
No tardo mucho tiempo para que al sentir los besos del peli-plata Misaki dejara salir pequeños gemidos de placer dándole a saber a este que al igual que él su cuerpo había extrañado su presencia. Sin embargo cuando el escritor el localizo su botón derecho y empezó a estimularlo con pequeño besitos sobre él Misaki aumento el sonido de sus jadeos hasta que una voz se hizo presente en aquella habitación.
-¡¿Qué demonios crees que estás haciendo Akihiko?! ¡¡Sal de una vez!! ¡¡La prensa esta vuelta loca buscándote!!- Pronuncio Isaka detrás de la puerta, intentando no imaginar lo que el escritor le estaba a haciendo al menor para que soltara tan sugestivos sonidos.
-¡¡¡LARGATE!!! ¡¡ESTOY OCUPADO!!-
-¡¡Me importa poco si estas o ocupado a no!! ¡¡Sal en este momento!! Y ve a calmar a la prensa ¡¡Idiota!!-
-¡Calmar a la prensa es tu trabajo no él mío! Yo ya cumplí-
-¡¡¿Qué demonios?!! ¡¡¿Como que tú ya cumpliste?!! ¡Si los minutos que estuviste frente a ellos no hablaste nada! ¡¡Bastardo!!-
Dispuesto estaba Isaka a entrar y sacar a patadas a ese desobligado escritor, que lo había abandonado con él problema que él y su inquilino había creado; Sin embargo, antes de que pudiera si quiera abrir la puerta, su secretario hizo presencia en aquella calurosa discusión y lo evito de hacer tal acto.
- Ryuichiro-sama, venga conmigo dejemos que Akihiko-sama termine de hablar tranquilamente con Misaki-kun-
Acto seguido, el peli-gris tomo del brazo a su jefe y lo aparto del lugar para que no interrumpiera la “conversación” del escritor con el menor.
-¡¡Oye!! ¡¡Oye!! ¡¿Por qué hiciste eso?! Si tú fuiste el primero que dijo que sacáramos a Misaki-kun del lugar-
- Ryuichiro-sama es de muy mala educación interrumpir la plática de otras personas; Además no creo que sea muy buena idea obstaculizar en estos momentos las negociaciones de Akihiko-sama con su inquilino-
.- ¡¿Eh?! ¿Obstaculizar negociaciones? ¿A qué te refieres? ¡Explícate Asahina!-
-Señor ¿Acaso quiere que Akihiko-sama lo mate y descuartice por entrar y ver el momento de intimidad que tiene en estos instantes con Misaki-kun?... ( Pregunto seriamente el peli-gris mientras veía como su jefe se sorprendía de lo que le decía)… Ryuichiro-sama lo mejor que podemos hacer es confiar que el escritor llegue a buenos términos con su inquilino y calmar por lo menos por dos horas la prensa para que le dé tiempo de qué pueda tranquilizar al menor por lo que dijo-
Sin más que decir y pensando en cómo iba a matar al oji-violeta por haberlo dejado en semejante problema y más por las perversiones que en esos instantes estaba teniendo él y Chibi-tan. Isaka-san acepto la propuesta de su secretario y se dispuso a clamar a los reporteros que pedían a gritos hablar con el escritor para que diera una contestación factible a sus problemas amorosos
Mientras tanto en el baño…
-Ahhh Usagi-san Ahh deberías salir y hablar con la prensa Ahh- Gimió excitado el menor mientras el novelista lo sentaba en uno de los lavabos del lugar y abría sus piernas para degustar su ansioso miembro.
-No te preocupes Misaki, ese es trabajo de Isaka-san, que él lo resuelva-
-Ahh Usagi-san ahhh ve si no se va a hacer más grande el problema ahhh-
-Misaki no pienso salir y dejarte así- Contesto el escritor mientras periódicamente introducía y sacaba la parte más sensible del castado de su boca.
-Ahh Pero… Usagi-san ahhh-
-Misaki, ya estuve lo suficiente con ellos, ahora quiero estar contigo y demostrarle cuanto te deseo-
Ante esto el menor callo y en su rostro se intensifico más el sonrojó. ¡¿Por qué Usagi-san siempre tenía que ponerlo nervioso con tan pocas palabras?!
Escuchando como su pequeño se quedaba callado por tal contestación, el mayor cambio su boca por su mano derecha e intensifico sus movimientos empezándolo a masturbar mientras lo besaba románticamente en sus labios.
Así pasaron las cosas hasta que después de un rato de sentir como su seme, sin pena alguna lo masturbaba, el oji-verde empezó a sentir los espasmos y contracciones anunciándole que terminaría pronto.
-Ahhh ¡¡Usagi-san!!! ¡¡Detente!! ¡¡Ya me voy a venir!!- Anuncio el castaño; Sin embargo, su casero no hizo ningún caso ante tal suplica, por el contrario aumento la velocidad de de su mano mientras que le susurraba en su oído izquierdo “Hazlo Misaki, no te reprimas” y le mordía extemporáneamente su oreja.
No duro mucho para que con las caricias que sufriera de parte del novelista, Misaki se tensara y dejara salir su esencia; No obstante antes de que pudiera terminar el mayor retiro su mano de su entrepierna y el cambio por su boca para poder disfrutar del embriagante regalo del menor.
-Ahh ¡¡N-no debiste hacer eso U-Usagi-san… tu ropa se mancho!!- Pronunció el oji-ver al contemplar minutos después de su orgasmo como una parte de la camisa blanca del novelista se había ensuciado con su semen.
De inmediato, al ver como por su culpa el vestuario del peli.-plata se había mojado, Misaki giro un poco y tomo una toallita de papel que había sobre el lavabo y sin pensar en las consecuencias acerco su mano hacia la mancha e intento limpiarla;
Sin embargo, al sentir como lindamente su adoración acariciaba su pecho una y potra vez el libido del novelista se agrando y no soporto más. ¡¡Eran muchos días que no lo había tocado y que lo sedujera de esa forma como lo estaba haciendo!! ¡¡Era mucho para él!!
Prontamente Akihiko tomo la mano de su pequeño, la beso y rápidamente le abrió las piernas para prepararlo a lo que por obviedad proseguía.
La preparación no tardo mucho ya que en pocos minutos el cuerpo del oji-verde le anuncio que estaba listo para recibirlo. Sintiendo esto, rápidamente Usagi tomo su erecto y deseoso miembro, lo coloco enfrente de la entrada del cuerpo de su niño y muy despacio empezó a introducirse en él
-Ahh Ahh Usagi-san ahhh- Gimió excitado el menor al sentir como el peli-plata entraba con un solo movimiento en él. Y no era por demás, si hace mucho tiempo que no lo tocaba de esa forma y el último intento él lo hizo para hacerle creer que no lo engañaba.
-Misaki, relájate estas muy tenso- Pronunció pausadamente el novelista, al sentir como, por ese recuerdo, las entrañas de su castaño impedían el paso de su miembro.
Al escuchar esto, el menor respiro hondo, se abrazo del cuello del escritor y empezó tranquilizar su cuerpo para que el novelista pudiera introducirse por completo en él.
Después de unos minutos de intentar estar dentro de su castaño, Akihiko logro a completar su objetivo y comenzó con las estocadas haciendo que el oji-verde principiara con sus gemidos de placer los mismos que seducían a cada instante al oji-violeta.
-Ahhh Ahhh Usagi-san ahhh-
Prontamente el deseo de Usagi creció, más porque tenía a su niño abrazado de él estremeciéndose por cada penetración que le daba, y principio a aumentar la tonalidad de sus estocadas mientras besaba, sin querer evitarlo, al lindo niño que tenia gimiendo y jadeando sin pena alguna por su contacto.
-Ahh no lo hagas tan fuerte Ahh Yo… no puedo controlar y ahhh alguien nos va a escuchar-
-Misaki no te contengas, deja salir tu voz y muestra a quien nos oiga quien es el responsable de llevarte al límite cada noche - Sonrió seductoramente el oji-violeta mientras volvía a reanudad la intensidad de sus envestidas.
Sin embargo al escuchar esto, casi se le sale el corazón al oji-verde... Después de lo que había gritado hace algunos minutos ¿Todavía habría alguien que duda de lo que el escritor decía?
Viendo como su pequeño se quedaba pensativo por lo que había dicho, Akihiko se separo por unos minutos de tibio cuerpo de su amado, lo bajo del lavabo donde se encontraba y lo condujo hacia una de las paredes de aquel pequeño cuarto. Posteriormente acomodo su trasero y por detrás, lentamente lo volvió a penetrar mientras lo abrazaba y mordía seductoramente su oreja a la par de sus envestidas.
-Ahhh Ahhh Usagi-san ahhh no hagas las dos cosas al mismo tiempo ahhh Ahh-
-¿Por qué no? Si quiero llevarte a la locura del placer Misaki y que todo aquel que pase por el lugar lo escuche-
-Ahhh no digas eso Usagi-san ahhh te puede traer pro… ahhhhhhh- Misaki no pudo terminar su frase ya que al momento sintió como el mayor tocaba ese preciso punto que lo hacía estremecer y suspirar por el placer que Akihiko le ofrecía.
Al escuchar esto el mayor volvió a incrementar sus estocadas una y otra vez hasta que sintió como pronto él dejaría salir su esencia dentro del cuerpo de su amado.
Sabiendo que estaba a pocos minutos de terminar, Usagi-san tomo el erecto miembro de su adoración y rápidamente empezó a masturbarlo, par que sintiera el mismo placer que él sentía en esos instantes. Así lo hizo hasta que con un gran y sonoro gemido Misaki anuncio su orgasmo viniéndose al momento.
-Ahhhhhhh Usagi-san ahhhhhhh ya... ya me vengo ahhh-
Sintiendo como el cuerpo de su oji-verde se tensaba por las contracciones, Akihiko dejo salir su semilla en su interior mientras que con un abrazado por detrás de él se sostenía a su cuerpo y le susurraba en su oído “Misaki Te amo... no sabes cuánto”
Tras las cuatro paredes de un reducido baño público y sabiendo que afuera de este todo el mundo se volvía loco por la expectativa de la supuesta traición de su amado. Misaki se entregó totalmente a su seme una y otra vez par que no le quedara duda del gran amor que sentía por él y solo por él.
Después de un gran rato de intensa actividad física, no apta para menores de edad, lentamente los cuerpos de aquellos dos hombres se fueron separando con el único deseo de descansar un rato y recuperar sus fuerzas.
Prontamente el menor fue a buscar su ropa para ponérsela mientras el escritor hacia lo propio con la suya; Sin embargo justamente después de que el castaño termino de colocarse su vestimenta el escritor se le acercó, ya cambiado, lo abrazo por detrás y lo llevó hasta una de las paredes del recito para que acurrucado sobre su pecho descansara de el agotamiento que había sufrido.
-Usagi-san ¡Espera! ¡¿Qué haces?! Tienes que ir a hablar con la prensa...- Pronuncio sentado en el suelo Misaki, mientras sentía como amorosamente el oji-violeta acariciaba su cabello.
-Deja que haga su trabajo Isaka-san… Mi prioridad en estos momentos es estar contigo Misaki-
Después de esto, el escritor se dedico a acariciar la mejilla de su adoración mientras lo acercaba más hacia él.
Dispuesto estaba el oji-verde a discutir esa frase de su casero, pero apenas las cosas se habían a reglado y este lo acariciaba como antes lo hacía. Sería un estupidez interrumpir ese momento por sus preocupaciones.
Lentamente, y sin contestar nada, Misaki cerró sus ojos y se dedico a dejarse consentir por tan maravillosas caricias y por el tranquilo sonido de los latidos del corazón de Usagi-san.
Después de unos minutos el menor se quedo dormido mientras su seme le acariciaba con paciencia su mejilla y lo observaba embelesado dormir sobre él.
-Misaki te amo demasiado- Recito el escritor al sentir como su niño soñaba entre sus brazos.
Por varios minutos las cosas se quedaron así, Misaki abrazado de su seme durmiendo y Akihiko consintiéndolo, así hasta que el mayor decidió que ya era tiempo de llevar a su amado a su casa para que pudieran dormir juntos en su cama.
Tratando de no despertarlo, el peli-plata se separo de él, se coloco su saco que había quedado en el suelo y posteriormente con toda la suavidad del mundo, cargo entre sus brazos a Misaki como si fuera una princesa, para llevarlo hasta su lecho; Sin embargo, antes de que pudiera si quiera visualizas la salida del túnel que conducía hacia la explana principal del centro comercial, la bruja de su editora lo vio con su pequeño entre sus brazos y le aviso inmediatamente a Isaka-san de su salida
-¡¡Akihiko!! ¡¡Qué bueno que saliste!! ¡¡La prensa está desesperada preguntando por ti!! ¡¡Ve y habla con ellos!!- Grito desesperadamente el Director General mientras veía como el escritor caminaba decididamente, sin ponerle tención.
-Ese es tu problema Isaka-san, Misaki y yo nos vamos- Menciono molesto el novelista al ver como aquel odioso hombre le impedía sus planes.
-¡¡¿Qué demonios?!! ¡¡¡Bastardo!! ¡¡¿Como que te vas?!! ¡Tienes que ir a hablar con ellos y disipar los rumores!! ¡Además todavía no acabas tu trabajo! ¡¡Falta la firma de autógrafos!! ¡¡Idiota!!-
-¡Habla tú con ellos! ¡No voy a despertar a Misaki por tus estúpidos compromisos!-
-¡¡¡¿Y cómo piensas salir?!! ¡Si la prensa te ve con él, en tus brazos será el final de tu carrera!! ¡¡Imbécil!!-
-No me importa, mientras lo tenga a él, que todo el mundo lo sepa o que el universo se destruya si es necesario- Sentencio el peli-plata mientras decidido se disponía a salir del lugar con su amado en brazos; Sin embargo, al ver la desesperación de su jefe y pareja, Asahina con toda la paciencia del mundo pronuncio, lo siguiente dejando pasando y pensativo al novelista por tal frase.
-Akihiko-sama, ¿Ha pensado en lo que dirá Misaki-kun cuando se entere del escándalo de homosexualidad que se verá envuelto si sale hacia donde están los periodistas con él entre brazos?-
-¿Escándalo?- Repitió el peli-plata mientras se detenía y veía directo al secretario, el cual al ver como le ponía atención reafirmó…
-Sí señor, si usted sale con el menor entre brazos y con este abrazándolo de la manera que lo está haciendo, sería un escándalo por todo Japón y su inquilino seria “literalmente” acosado por la prensa por ser su pareja... Piense en lo que sufriría Misaki-kun al ver como su mundo se desmoronaría por la pequeña imprudencia que usted cometió, en lugar de protegerlo…-
Finalizo Asahina sabiendo de ante mano que el novelista no se atrevería hacer algo que hiciera sufrir al niño que reposaba tranquilamente en sus brazos y aceptaría su propuesta.
Y así fue, resignado a no más poder por las palabras del astuto secretario del imbécil de su jefe, Akihiko acepto el trato no sin antes poner sus condiciones.
-……………………Quiero un lugar donde Misaki pueda dormir tranquilamente y que nadie lo despierte.-
-Entendido señor en un momento lo tendrá y yo me asegurare que nadie interrumpa su sueño. Ryuichiro-sama, por favor vaya a hablar con la prensa y dígales que en un momento saldrá Akihiko-sama para responder sus dudas. Aikawa-sama ¿Puede ir a buscar por favor a la encargada de vestuario para que arregle su traje y pueda salir presentable?-
Al escuchar esto inmediatamente la editora y el Director General salieron corriendo a no más poder a realizar al petición que el secretario les había encargado, pensando en la gran astucia que había tenido el peli-gris por haber logrado que el oji-violeta hubiera aceptado hablar en público. Así mismo Asahina también se alejo del lugar para buscar un sitio donde pudiera reposar tranquilamente el castaño.
Sin duda el secretario había dado en el punto débil del escritor y esa debilidad la había aprovechado perfectamente para que él realizara su trabajo.
Después de unos minutos, Asahina le informa al mayor que la tienda de masajes relajantes “El Patito Feliz” le había proporcionado amablemente el sofá de su recepción, para que el oji-verde pudiera dormir y este estaba colocando detrás del escenario para que nadie pudiera observar ni molestar al menor en su sueño.
Escuchando esto, prontamente Akihiko se dirigió hacia el lugar, coloco con toda la delicadeza del mundo a su adoración sobre el sillón y lo cobijo con su saco para que no pasara frio.
Al paso de esto Aikawa llego con la encargada de vestuario y rápidamente acomodaron el traje del oji-verde, o lo que quedaba, ya que sin saco, Akihiko se quito la corbata quedándose en un look informal pero que mostraba elegancia.
-Una cosa más Akihiko-sama, todos los periodistas creen que “la causante” de sus problemas amorosos se encuentra en este lugar y harán cualquier cosa por encontrarla. No deje que descubran la verdad o Misaki-kun estaría en un gran problema- Menciono el secretario mientras le decía a Isaka que el novelista estaba listo para salir ante los medios.
-No se preocupe -
Después de esto, con una gran sonrisa en el rostro, la cual por obviedad había sido provocada por la larga “conversación” que había tenido con su amado, el Gran Usami Akihiko-sensei arribo al escenario donde minutos atrás había estado.
Al instante de verlo, las fotografías no se hicieron esperar así como las impertinentes preguntas de los medios que buscaban como fuera lugar conseguir la exclusiva de ese momento; Sin embargo, ante tan despiadadas interrogativas, el peli-plata no dejo de sonreír y pidió amablemente silencio a los presentes.
-Señor periodistas, el tema de mi vida privada no es relevante en estos instantes; No obstante, tengo que aclarar que en estos momento no me encuentro en alguna relación amorosa con ninguna dama; así que todo lo que han dicho sobre mi persona y la traición son rumores.- Aclaro el escritor con una despampanante sonrisa que de inmediato puso a dudar a todos los presentes… ¿Qué no estaba deprimido hace tan solo un par de horas?
-Akihiko-sensei si eso es verdad ¿Por qué no contesto nuestras anteriores preguntas?- Interrogo la reportera de la revista “La metiche”
-Señorita si yo le diera importancia a falsas interrogativas, ustedes medios de comunicación, hubieran aprovechado para sacarle provecho, además no creo que sea relevante mi vida privada-
-¿Y lo de acerca del triangulo amoroso con la tal “Misaki”? ¿Qué dice al respeto sensei?- Debatió el reportero del programa de radio… “¡No te interesa!”
-Señor reportero, creo que se confundió de escritor eso es parte del argumento del nuevo libro del Gran y Magnifico “Akikawa Yayoi” y del cual estoy familiarizado por trabajar en la misma editorial que él- Respondió sínicamente el peli-plata, sabiendo de antemano la verdad.
-¿Y qué dice acerca de la voz que se escucho detrás del escenario? ¿También fue falso rumores Akihiko-sensei?- Pregunto desafiante la conductora del programa ¡¿Qué te importa?!
Ante esta interrogativa por unos minutos el oji-violeta se quedo callado pero después de unos segundos contesto seguramente y con la misma sonrisa que antes.
-No, eso fue una admiradora que tuvo una conmoción por tales acusaciones y para defender mi nombre, quiso justificar los rumores-
- Si fue así ¿Porqué dudo en responder Akihiko-sensei?- Cuestionó el reportero de radio “El intrigoso”-
- Por respeto a ella señor. No es de un caballero hablar de una dama a sus espaldas- Finalizó el novelista mientras que a lo lejos escuchaba un sonoro “Kyyyyyyyyyyyyaaaaa” del resto de fans que se encontraban del lugar y que apoyaban a no más poder sus respuestas.- Ahora agradezco mucho su presencia, medios de comunicación; Sin embargo, es momento de pasar a la firma de autógrafos. Por favor señoritas ¿Podrían hacer una fila para que pueda empezar a firmar sus libros?-
Al escuchar esto, de inmediato la multitud de mujeres que habían esperado al sensei por más 5 horas se amontonaron impidiendo que la prensa siguiendo a haciendo preguntas despectivas sobre la vida privada del novelista, el mismo que por unos minutos bajo del escenario para que Isaka-san se encargara de dar las indicaciones a las admiradoras.
-Muy bien manejada la situación Akihiko-sama. No se preocupe Misaki-kan todavía se encuentra dormido-Felicito Asahina mientras se encargaba de que nadie absolutamente nadie sea cercara a Misaki.
Ante esto rápidamente el peli-palta miro de lejos a su adoración, confirmo las palabras del secretario y se dispuso a volver al escenario para continuar su odioso trabajo de escritor; Sin embargo, solamente lo hizo por las palabras que el astuto Asahina le había dicho y por la idea de no comprometer a su adoración y no hacerlo sufrir.
No obstante algo era un hecho, apenas pudieran salir de ese lugar, Akihiko se llevaría a su niño a un lugar donde pudiera recuperar la semana que no había tenido intimidad con él y pudiera tocar sin interrupción alguna su lindo y hermoso cuerpo una y otra vez.
Después de una semana de dudas, incertidumbres desamor y confusiones, Misaki entre sueños, se dio cuenta de que todo problema se hubiera evitado si tan solo hubiera puesto atención en sus palabras y hubiera aclarado desde el principio.
Pero más se dio cuenta de que pasara lo que pasara Akihiko siempre reafirmaría su amor por él y solamente por él….
…Su amado Misaki Takahashi
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