~Narra Naoko~
¿Que onda?
¿Quien soy?Pues me llamo Naoko,tengo 14 años y asisto a una secundaria privada,(prácticamente,es para hijos de padres con dinero)no es de sorprenderse que algunos no te agraden,pero también hay chicos/as honestos con valores que te caerian bien.Tengo mi cabello hasta mis hombros de color negro y mis ojos son de color rojo.Es contradictorio que sea hemofobica,ya que mis ojos me recuerdan mucho a la sangre,jeje.
Vivo sola con mi padre,en un penthouse del edificio más caro y cotisado de Tokio en la zona metropolitana.Y no es de sorprenderse que yo haga casi todos los quehaceres de la casa desde que estaba pequeña,así que estoy acostumbrada.Nadie nos visita a excepción del tío Deidara (que no es mi verdadero tío,si no un amigo de papá),su pareja Sasori y Sakura,otra amiga de papá.No hay sirvientes,como decía mi tío Deidara"si quieres sirvientes,tienen que interactuar para que no se aburran ni tu ni ellos",pero como estoy casi todo el día fuera y mi papá también pues...
Acabo de levantarme,y por alguna razón me ciento con mucho más animo que en semanas pasadas a pesar de ser Lunes,pero eso no me molesta en lo más minimo.
Creo que es por la que una chica nueva se tranferirá a mi clase hoy,y como yo conozco a media secundaria pues no veo problema en ser un poco amable y conocer a una persona más,jiji.
Bueno,continuando con mi rutina,me levanté muy temprano (la emoción no me dejaba dormir),me duché,me puse el uniforme e hice el desayuno favorito de papá. (Waffles,dango con caramelo y té verde.)
¿Quieres conocerlo?No importa si dices que no,igual te lo decribiré con el mayor detalle.
Para empezar,tiene el cabello negro,largo y sedoso amarrado en una coleta baja;unos ojos negros muy lindos y radiantes;siempre usa trajes formales para ir a su trabajo (es presidente de una empesa,hay que comprender) pero en sus ratos libres usa jeans y camisetas de mangas cortas que se amoldan a su cuerpo,dejando ver el resultado de su ejercicio (osea sus músculos) cuando ya no tiene montones de trabajo o papelería que redactar me lleva al parque,al cine o a la plaza y me compra todo lo que yo le pida,pero no soy muy abusiva,eso sí.
¿Su nombre?...Uchiha Itachi,y me enorgullesco de llevar su apellido.
Y hablando del rey de Roma,ahí viene...
-Buenos dias,princesa.-Me saludó con cortesía.
-Buenos dias,Otou-san.-Le devolví el saludo a la vez que le servía el desayuno.
Traía puesto un traje negro con la chaqueta abierta,dejando ver su camiseta blanca y su corbata negra con rojo.Su traje favorito.Es increible que nunca lo manche de jarabe de maple.
Te preguntarás donde esta mi madre,pues tengo que decirte que ni yo sé donde está.
Mi papá casi nunca habla de ella,y cuando traté de invertigar por mis propios medios (me metí al cuarto de papá y busqué en su armario) me descubrió y me castigo sin salir de la casa por una semana;sin televisión,sin teléfono,sin computadora.No fue agradable.
Sin darme cuenta,él ya había terminado de desayunar y yo apenas llevaba la mitad de mi plato.Así que,atragantándome,terminé mi porción para salir lo antes posible y no llegar tarde,ya que pensar mucho te distrae de los deberes.
-¿Quieres que te lleve a la escuela?-
Mi día no podía ir mejor,eran pocas las veces que mi papá me hacía esa pregunta y ya iba tarde,así que¿por qué desaprovechar una oportunidad así?
El viaje se me hizo corto,Otou-san no habla mucho,pero conmigo es diferente.Espero que algun día pueda usar eso a mi favor para sacar más información sobre mi madre.
-Que te vaya bien,princesa.-Me dijo a la vez que yo abría la puerta del deportivo y él depositaba un beso en mi frente.
-Igual a tí,papá.-Sonreí un poco a la vez que bajaba del auto y cerraba la puerta tras de mí.
-Nos vemos en la noche.-Me despedí meciendo mi mano en el aire,mirando en la dirección por la que se había ido.
Suspiré...
¿Qué más podía hacer? Hombre solo,con una hija,dueño de las empresas Uchiha.Sé que aún soy pequeña pero comprendo a la perfección como se siente.
El timbre dio pasó a masas de estudiantes en estampidas,tratando de llegar al interior del colegio y arrastrandome en el proceso.
De camino a mi salón,me encontré con mis mejores amigas;Sabaku no Ayume y Nara Mariko.Hijas de los socios de mi padre,los Nara tienen alianzas directas con los Sabaku así que mi papá no le vio ningún pero en asociarse con ambos.¿Te mencioné que son primas?
~End Narración Naoko~
~Narra Tomoyo~
Voy de camino a la escuela,creo que ya voy tarde pero no me importa,estoy disfrutando la compañia de Otou-san;ya que como trabaja para las empresas Uzumaki,el abuelo casi no le da descanso por ser el futuro heredero.Así que ni mamá ni yo lo vemos seguido.
Con solo pensar que el abuelo Minato me exigirá lo mismo algún día me deja con los nervios de punta.
-¿Estas nerviosa?-Preguntó de pronto sacándome de mis pensamientos.
-¿Por qué tendría que estarlo,tou-san?-
-Porque estabas en otra escuela totalmente diferente y aquí no tienes a tus amigos del alma.-Me dijo mostrandome una de sus más lindas sonrisas.
-No creo que eso importe mucho,si pude hacer amigos antes no veo porque ahora no.-Me encojí de hombros y miré por la ventana por la que se divisaba el colegio.
El auto paró justo en frente de la entrada,no había nadie a la vista,así que supuse que las clases ya habían empezado.
-Toma.-Dijo papá extendiendome un papel doblado en tres partes.-Dáselo a la directora¿sí?.-
Lo odio,siempre que me sonrie así no puedo darle una negativa,tal vez mamá se enamoró de él por la misma razón.
-Claro.-Tomé el papel,y me dispuse a salir del auto,pero sentí que acariciaban mi cabeza,era su forma de despedirse.
-Que te vaya bien,linda.-Bajé del auto y me despedí con mi mano en el aire.
Bien,hora de entrar a la escuela.Me identifiqué con el guardía y me dio las indicaciones para llegar a la oficina de la directora.
Por cierto,mi nombre es Uzumaki Tomoyo,tengo catorce años recién cumplidos y me acaban de transferir por el trabajo de Otou-san,la vida es dificil pero hay que tomarla por el lado positivo.
Tengo mi cabello algo corto,color rubio como mi padre y ojos tan negros como los de mi madre,él es el unico que me hace compañia cuando me quedo sola en casa y papá no esta.Sí,use la palabra "él",mi mamá es un hombre,pero podría pasar por una mujer,es demasiado femenino,jaja.
Que puedo decir,él me trajo al mundo,pero esa parte aún no me la quieren explicar con detalles.
Al llegar al frente de la oficina de la directora,toqué la puerta un par de veces y esperé una respuesta positiva,la cual escuché a los pocos segundos.
-¿Sí?.-Era una persona muy hermosa,cabello rubio agarrado en dos coletas bajas,ojos miel muy lindos;se veía muy joven,a pesar de que había oido que era un vejestorio.
-Buenos dias,soy Uzumaki Tomoyo.-Hice una pequeña reverencia una vez entré a la habitación y cerré la puerta.
-Ahh,claro.Acércate,te estaba esperando.-Me acerqué y no pude evitar pensarlo...¡sus pechos eran demasiado grandes! podría jurar que eran operados,pero se veían tan reales.
-Mi padre me dijo que le diera esto.-Le extendí el papel que me dio papá,era una carta de recomendación de mi anterior colegio y agradecimientos de mis padres hacia la directora por admitirme.
Ella comenzó a leer,parecía que le agradaba un poco lo que habian escrito sobre mí,eso me tranquilizó.
-Bien,vamos a tu nuevo salón.-Dijo una vez que se levantó de su asiento.
Yo solo asentí,ya habían pasado unas horas desde que el timbre de entrada sonó y me salté las tres primeras clases.
El recorrido fue corto,pero tedioso.Al final mi salón estuvo en el tercer piso,y era salón fijo,así que tendría que empezar a hacer ejercicio desde temprano.
El ruido dentro del salón era nulo,no había.Al parecer el profesor que impartía la clase era muy estricto,pero eso no evitó que la directora entrará al salón conmigo siguiendola de cerca.Le pidió un momento al profesor y comenzó a hablar.
-Bien,chicos.Como ya se los habiamos dicho,esta mañana llegaría una nueva alumna.-Todos los ojos se centraron sobre mí,eran 25 personas así que eran..1,2,3...50 ojos,me puse un poco nerviosa.
-Y aquí esta,ella es su nueva compañera,Uzumaki Tomoyo.-Dijo empujandome solo un poco para saludar,por lo que hice una leve reverencia.
-Buenos días,espero nos llevemos bien.-Dije algo apenada,ocultando mi rojizo rostro bajo mi fleco.
-Esta bien.-Interrumpió el maestro,creo que de literatura.Miró hacia los pupitres y divisó a una chica de cabello negro.-Uchiha-san.-
-¿Sí,Kakashi-sensei?.-Creo que ese profesor infunde más miedo del que creía,ya que la chica estaba nerviosa.
-¿El lugar a tu lado esta ocupado?-Preguntó señalando a dicho lugar.
-N-no,claro que no,sensei.-Dijo sacando el aire de sus pulmones en señal de alivio después de responder.
-Bien,Uzumaki-san,toma asiento junto a Uchiha-san,por favor.-Pidió amablemente el profesor a lo que yo asentí y me dirigí a mi nuevo lugar a la vez que la directora se retiraba.
Ahora comprendo porque esa chica estaba tan nerviosa,estaba haciendo dibujos en su pupitre con un lápiz,pero tengo que decir que ese dragón abrazado a una rosa le estaba quedando bien.
~End Narración Tomoyo~
La clase transcurrió normal para los alumnos del salón 305,su sesión de literatura fue algo pesada ya que era un tema nuevo,pero eso no importó bastante.
Al tocar de nuevo la campana para el cambio de maestro,Naoko vió una oportunidad de hablar con la nueva estudiante.
-¡Hola!.-Saludo efusivamente la morena.
-Ahh,hola.-Saludo la rubia algo cohibida por el repentino saludo de su compañera.
-Soy Naoko.-Extendió la mano hacia la rubia para darle animos de contestar.
-Yo soy...Tomoyo.Mucho gusto,Naoko-chan.-Dijo extendiendo tambien la mano para estrecharla con la contraria en un gesto de amistad.
-Si quieres puedes omitir el "chan",solo Naoko¿sí?-Le dirigió una sonrisa muy linda y grande,cosa que le sorprendió ya que la acababa de conocer.
La ojicarmín hizo una seña con la mano hacia los asientos de enfrente,donde se encontraban una pelirroja y una castaña.
-Chicas,ella es Tomoyo.-Les dijo a sus amigas que miraban a la chica nueva.-Tomoyo,ellas son Ayume y Mariko.
-Que bien que por fin haya caras nuevas por aquí-Comentó la peliroja junto a su prima.-Hace mucho que no había gente de nuevo ingreso.-Sonrió con dulzura.
-Es cierto,sin personas nuevas es dificil saber que hacer aquí.-Dijo la castaña.
-¿Y eso por qué?-Preguntó curiosa la rubia.
-Veras.-Comenzó a hablar la morena.-La mayoría de las personas que asisten a éste colegio son..-
-Presuntuosas.-Interrumpió tajante Ayume.
-Sí,la mayoria son presuntuosos,como el hermano de Ayume.-Dijo divertida Mariko.
-Callate,¿crees que me gusta tener a ese presumido cerca de mí?-Dijo alterada la pelirroja.
-Ya calmense,chicas.-Pidio calmada Naoko con una gotita resvalandole por la sien.
Esas tres chicas,a los ojos de la rubia,eran agradables.Así que,por qué no empezar una amistad.
Pero no pudo hacer mucho,porque el maestro de educación física entró dando un anuncio.
-Buenos días,chicos y chicas.-Dijo desde su escritorio sin sentarse y haciendo calentamientos.-Hoy tienen todo el día libre porque le debo un reto a su profesor de literatura y me toca ganar a mí.Además de que habrá junta de maestros y bla,bla,bla.Ya saben el resto.-Dijo mostrando una sonrisa reluciente.
-¡Espero le gane esta vez,Guy-sensei!.-Se escuchó por detrás.
-Sí,ya estamos hartos de verlo humillarse solo.-Dijo otra persona a lo que todos rieron.
-Entonces,terminé.Me voy,adiós.-
El profesor salió por la puerta como alma que lleva el diablo,dejando a los estudiantes recogiendo sus cosas.
Tres de las cuatro chicas no perdieron la oportunidad y se llevaron a su nueva amiga a la plaza donde la podrían conocer mejor.Pero alguien siempre tiene que interrumpir (Chibi:almenos en mis fics,no se los demas n_n)
-Naoko-san.-Dijo un chico de cabellos negro azulado y ojos perla.-¿Puedo hablar contigo?
-Sí,¿que se te ofrece,Daiki-kun?-Preguntó ingorando las insitentes burlas de sus compañeras,porque sabían que Daiki y ella se llevaban más que bien.
-Queria saber...si no estabas muy ocupada hoy...podríamos salir a tomar un café o ir por un helado.-Dijo algo sonrojado por la repentina invitación.
-Perdoname,Daiki.Pero acabo de quedar con mis amigas para ir a la plaza,otro día será ¿sí?-Preguntó con dulzura mientras miraba a esos ojos perla.
-Claro.-Le dedicó una sonrisa a su amiga,pero por dentro estaba algo decepcionado.-Te veo mañana.
-Sí.-Naoko se alejó de él para ir con sus amigas,que la estaban esperando en la puerta del salón,viendo todos los movimientos y acciones de ambos chicos.A la vez que le explicaban ciertas cosas a Tomoyo.
~Uchiha corp~
Un hombre de traje negro y cabellos largos de igual color,se encontraba sentado frente a su gran escritorio,siendo ayudado con el papeleo por su secretario y amigo Deidara.Se veía algo estresado por tener que hacer tanto trabajo tan temprano pero tenía a sus fieles amigos "el brandy,el coñac,el whisky" y a Deidara para pasar el rato.No se podría aburrir¿o sí?
Tocaron un par de veces la puerta antes de dar paso a una chica de cabellos rosas y ojos esmeraldas,de uniforme rosa pastel.
Se acercó al escritorio donde ninguno de los dos hombres le puso atención hasta que dejo caer un sobre lleno de papeles importantes sobre el mesón.
-Sakura,ves que aun no hemos terminado y todavía traes más trabajo.-Se quejó el ojiazul mirando cansado a la pelirrosa.
-Yo no tengo la culpa de que seas tan flojo,Deidi.-Dijo entre risas.-Esto lo mandan desde las empresas Sabaku,dijeron que eran importantes,así que vine en cuanto los recibí.-
-Esta bien.-Dijo el moreno haciendo un ademan con la mano.-Puedes irte.
La chica así lo hizo,dejando solos al rubio y al moreno con todo el papeleo pendiente.
-¿Malhumorado?-Preguntó de repente el chico de ojos azules
-¿Por qué la pregunta?.-Preguntó con desgano.
-Es que te ves más deprecibo de lo normal.-Dijo apuntando a su cara de pocos amigos.-Te lo he dicho antes y te lo digo ahora,te hace falta pa-re-ja.
-¿Te estas apuntando?.-Preguntó con una sonrisa forzada en su rostro.
-Claro que no,tu sabes que yo quiero mucho a Sasori y no le sería infiel ni en broma.-Tomó un poco de papeleo y los puso en un archivero.
-Al menos tú eres feliz.-Suspiró resignado.-Ojala te dure la felicidad antes de que te arranquen el corazón.
-No hables así,ya verás..Sasuke debe andar por ahí y tarde o temprano tiene que darsé cuenta de su error.-Le ofreció una copa con coñac con hielo.
-No lo creo,lo he esperado más de 14 años y aun no regresa,dime¿aun tengo esperanzas?.-Dijo tomando el vaso y acabandolo de un solo trago.
-Es tan corto el amor y tan largo el olvida ¿nee?.-Dijo acompañando a su "jefe" con una copa de whisky.-una vez llego a mis oídos una frase que va exactamente contigo querido amigo.
-¿y cúal es?sí se puede saber.-Dijo desganado revisando el papeleo restante y firmandolo con mucha flojera.
-"A veces el amor une a dos seres que no saben nadar y viven en dos islas distintas".-Dijo con una expresión de ternura en su rostro recordando a su respectivo Koi
-¿Qué quieres decir con eso?.-No pudo evitar la pregunta,Deidara había captado toda su atención en el asunto de Sasuke.
-Si Sasuke te ama tanto como tu a él...volveran a estar juntos por azares del destino ¿no lo crees?.-Pusó una linda sonrisa en su rostro,razón por la que era el dueño del corazón de Sasori.-Además,tienes una parte de él viviendo contigo¿no?.-señaló un marco de plata encima del escritorio,en donde estaba una Naoko de 4 años en los hombros de Itachi,ambos muy felices en un parque estatal.
El moreno sonrió al recordar esa escena.
Un calido día de verano,el parque más famoso de todo Tokio.Hace mucho que no salía a pasear con la niña de sus ojos,y ese día era perfecto.
~~~FlashBack~~~
Los arboles del lugar llenaban todo el parque con una escencia delicada,mezcla entre lirio y cerezas,dandole un aroma dulce y sutil al ambiente tan verde de arbustos y cesped.
Una niña de aproximadamente cuatro años corría con una pequeña pelota entre sus manos,dejando que su vestido rojo se meciera con el calido viento de la tarde.
Llegó bajo un pino,donde reposaba su padre,al parecer estaba dormido,pero eso no evitó que se acercara un poco para confirmarlo.
Dejó la pelota cerca de las piernas del mayor,acercandose siguilosamente a su cara para confirmal que aún respiraba.Los leves silbidos que salían en ocasiones de su boca con cada suspiro lo confirmaban,estaba dormido.
-Otou-san,despierta,hemos venido a divertirnos,no ha dormir.-Decía mientras que con sus fragiles manitas mecía levemente el brazo de su padre,que no parecía querer despertar.
La niña,cansada de tanto "esfuerzo fisico innecesario",eventualmente se aburrió y decidió retomar su juego de hace unos minutos.
Cuando iba a tomar su pelota azul de los pies de su padre,unos brazos la apresaron en un reconfortante abrazo,y elevandola a una altura"algo conciderable"para una niña de su edad.
-Te tengo.-Dijo el moreno con su hija hecha risas sobre sus hombros.-¿A donde crees que ibas,princesa?.-
-¡Ahh,baka,baka,baka Otou-san!-Dijo la niña por la impresión y por estar a esa altura.-Pensé que estabas dormido.
-Ya vez que no.-Dijo más relajado.-¿A donde ibas?
-A jugar con mi pelota,¿jugamos?.-
El mayor aceptó,mientras eran observados por un rubio y un pelirrojo,que miraban enternecidos la escena bajo un árbol de manzanas.
-¿No te parece lindo?.-Le preguntó el rubio al pelirrojo.-Desde que Naoko llegó a la vida de Itachi,él ha cambiado mucho.
-Tienes razón,y tu también te has encariñado con esa niña¿no es así?.-Le miró con ternura.-¿No te gustaría tener tus propios hijos,Deidara?
-Tal vez algun día,Sasori.-Dijo pensando en las posibilidades.
-¿Y por qué no ahora?.-Se acercó en plan meloso a su pareja,degustando cada escencia que su cuerpo despedia,importandole poco que el rubio le reprochara que era un lugar publico.
-Tou-san¿Qué le esta haciendo Sasori-san a Deidara-nii?.-Preguntó la niña inocentemente,a lo que Itachi le tapó los ojos como pudo para luego aclararse la garganta y atraer la atención de sus exihibicionistas amigos.
-Deidara¿no quisieras que Sasori nos tomara una foto?.-Preguntó Itachi con el proposito de "despegarlos".
-Sí,claro.-Empujó un poco a Sasori quitandoselo de encima,a lo que el pelirrojo reprochó un poco.
Sasori tomó la cámara entre sus manos,enfocando a ambos morenos en un buen angulo donde no le diera mucho el sol de frente.Tomando una fotografía de la mitad de un "cuadro familiar",era obvio saber quien faltaba.
-Atrapala,Sasori-san.-Dijo Naoko en un descuido del pelirrojo.
Le había lanzado la pelota azul directo a la cara,haciendolo caer de espaldas.
Itachi chocó palmas con su hija,al parecer le había enseñado muy bien como funcionaba la venganza indirecta,y la ojicarmín era su inocente complice.
~~~Fin del FlashBack~~~
-No tienes que estar deprimido por cosas así,volvera...tal vez no hoy,tal vez no mañana,pero ten por seguro que lo hará algun día.-Dijo Deidara tratando de darle animos a su amigo.-Ya verás que todo saldrá bien,pero ya deja de beber.-Dijo apartandole la botella de Brandy,la cual Itachi tenía muy abrazada a su cuerpo.
-Tu empezaste,me serviste primero.-Dijo cual niño chiquito al que intentan quitarle su biberón.
-Itachi,hay límites,caray.-Decía aún intentando quitarle la botella,estaba muy ebrio.
-Primero tendras que quitarmela de mis fríos y ebrios dedos,Deidara.-Dijo antes de recibir un golpe en la nuca,cortesía de "arenas rojas" Sasori.
-¡Sasori!¿Qué hiciste?¿Y si lo mataste?.-Dijo Deidara muy alterado con la botella de alcohol en la mano.
-¿A sí?...naa,sólo esta dormido.-Dijo como si fuera de lo más normal,porque era cierto,Itachi esta ebrio e inconciente sobre su escritorio.-Eso va a doler mañana.-
-Si no es quele duele hoy y se pone de mal humor.-Dijo el rubio poniendo las botellas con alcohol bajo llave.-¿a que has venido?-
-¿Me estas corriendo?Nunca lo pensé de tí,Dei-chan.-Dijo en un falso enojo,acercandose más a él sin que se diera cuenta.-
-No te estoy corriendo,lo que pasa es que tengo mucho trabajo.-Apuntó con su dedo índice al escritorio,donde se encontraba Itachi encima de mucho papeleo.
-¿Y es tan importante como para empezar a beber?.-Preguntó abrazado al cuerpo de éste.-Porque hueles a Whisky y tú sabes como me gusta el Whisky.-Dijo mordiendo ligeramente el lobulo del oído de Deidara.
-Sa..sasori..¿Dónde estas metiendo tu mano?.-Preguntó sintiendo como la mano de su Koi recorría facilmente la bragueta de su pantalón hacía abajo y acariciaba sus más sensibles partes.-Estamos en una oficina,por el amor de Dios,y lo peor de todo,la de Itachi.-
-Por mí ni se preocupen,yo sigo como si nada.-Dijo Itachi despertando de su inconciencia,pero aun seguía ebrio.
-¡Maldito!.-Le lanzó una lampara de oficina que había cerca,dejandolo inconciente de nuevo.-Maldito matapasiones.-Dijo respirando agitadamente subiendose la bragueta de nuevo.-¿Ya me vas a decir que haces aquí?.-Preguntó recobrando la respiración.
-Ahh,sí.Quería darte esto.-Sacó algo de su pantalón(Ojo:del bolsillo,no de otra parte n///n).-Feliz cumpleaños,Deidara.-Dijo descubriendo una caja de por lo menos de 11x11.-Espero que te agrade.
Deidara lo miró confundido,con la caja en sus manos.Era su cumpleaños y se le había olvidado por completo¿como pudo olvidar su propio cumpleaños?
Al abrir la caja,se encontró con un reloj muy fino,un rolex para ser exactos.Con la correa hecha de metal negro y detalles en "opale de feux"mejor conocido como ópalo de fuego,por todo el contorno.Ciertamente,le había impresionado,y bastante.
-¿Dónde lo...-Su boca no formaba palabras por la impresión,¿tan mala memoria tenía?
-No importa donde lo haya conseguido,lo que importa es que tu estes feliz.-Besó delicadamente sus labios,deleitandose con el whisky que aun quedaba en ellos.
-¿Tienes el día libre?.-Preguntó repentinamente,quería que fuera un día especial para su rubio ángel,y no quería que se la pasara en una oficina.
-Ehh..yo no sé.-Se acercó a Itachi picandolo con un dedo como si fuera un animal muerto o algo similar.-Itachi...¿Puedo irme a casa?Es mi cumpleaños,se me había olvidado.-
-Sí,sí..como quieras.-Dijo haciendo señas con las manos como de "vete ya" o "vete antes de que se me pase la cruda y me arrepienta".-Solo dejame la llave del minibar.-
-Eso nunca.-guardó la llave para tomar de un brazo a Sasori y salir de allí.
Sakura,que había visto salir a Deidara con Sasori,se preguntó ¿qué había pasado?porque no muy a menudo les daban días libres.
Así que con sigilo,entró a la oficina,viendo a su jefe extendido por todo el ancho y largo del escritorio,algo semi-dormido.
-Itachi,Itachi.-repetía insistentemente mientras que,al igual que Deidara,lo picaba con un dedo en la mejilla.-¿A dónde fue Deidara?.-
-Se fue a casa a celebrar su cumpleaños,nada del otro mundo.-Bostezó un poco,dando el tan distinguido aroma a alcohol de frente a Sakura,lo que le dio una idea.
-¿Pues que crees?hoy también es mi cumpleaños¿me puedo ir?.-Dijo rapidamente esperando convencer a Itachi con la borrachera que se cargaba.
-Haz lo que quieras,solo deja el minibar abierto.-
La pelirrosa,de buena fe,sabía que el rubio secretario siempre llevaba esa llave colgando en su cuello,y sólo la sacaba para casos "deplorables",por así decirlo,por los que pasaba Itachi en veces.
Así que antes de irse,dejó un par de analgésicos efervescentes acompañado de jugo de naranja con mandarina,por la futura resaca al despertarse y también por los golpes recibidos,o al menos eso había escuchado.
~Después de la plaza~
Cuatro chicas se encontraban caminando por el centro de la plaza,ya habían tomado un café y habían conocido mejor a su compañera,que era el objetivo principal.
Eran como las dos de la tarde y a la rubia se le ocurrió una "gran" idea.
-¿Quieren ir a mi casa?.-Preguntó de repente,haciendo que las otras tres pararan su caminata.-Sé que es muy repentino,y más por que las acabo de conocer,pero siento que las conozco de toda una vida,de veras.-Dijo sinceramente sacando una que otra sonrisa.
-Por mí no hay problema.-Apoyó Ayume.-No tengo nada que hacer,además no quiero llegar a casa y ver a nii-san.-Dijo cruzandose de brazos.
-Yo también voy,no creo que mamá se moleste.-Dijo Mariko.-Siempre esta con tío Gaara y el tío Kankuro.
Todas miraron a Naoko,esperando que diera una respuesta neutro como "debo preguntar" o "no lo sé",pero no,accedió gustosa de poder ir a la casa de alguien diferente.Papá no llegaría hasta pasada la resaca.
Zona Norte de Tokio,unos pocos kilometros más allá del centro de la ciudad.Zona residencial para personas ricas de Tokio.Mejor conocido por los millonarios como "dollar village" porque sus casas bien podrían valer los millones que se invierten en ellas.Casi,casi,la zona futurista de la ciudad.
Casas de mismos tamaños y estructuras por doquiera que las chicas voltearan,se podían diferenciar por el color,pero no era muy variado que digamos.
Al fin llegaron al final de un "callejón sin salida"que tenía por los menos seis casas en la misma calle,pero ya no había paso más alla.
Estaban al frente de una casa de por lo menos tres pisos,con jardín frontal y trasero,una piscina en éste último,y un moreno de,a lo más,30 años en la puerta.
El moreno vió con una sonrisa como su hija se acercaba con otras tres jovencitas,eso le agradó,primer día y ya traía personas a casa.
-Okairi,Tou-chan.-Saludó alegre la rubia.
-Okairi.-Saludó de igual manera,invitando a pasar a las otras chicas.-¿Quienes son ustedes?.-Dijo refiriendose a las otras tres.
-Deja te las presentó,ellas son Ayume,Mariko y Naoko.-Dijo respectivamente por el lugar que habían tomado en la sala.-Chicas,el es tou-chan,Sasuke.
-Mucho gusto,señor.-Dijeron las tres al mismo tiempo.
-Igual,¿quieren algo de comer?.-Preguntó haciendo ademan de retirarse.
-No se preocupe,Sasuke-san,acabamos de tomar un café y estamos bien.-Dijo Mariko,tratando de no molestar y hablando por todas.
-Entonces si no necesitan nada,estaré en mi oficina,Tomoyo.-Dijo retirandose por completo.
-Claro,tou-chan.-
Una vez se escuchó la puerta de la oficina cerrarse,los cuchicheos empezaron entre las cuatro chicas lo más bajito posible.
-¿Porque no nos dijiste que tu papá estaba tan bueno?.-Preguntó repentinamente la castaña.
-¡Mariko!.-Reprendió la pelirroja.
-¿Qué?¿Me vas a negar que esta bueno?.-Preguntó con una mirada algo insinuante.
-Eso que ni que.-Se pusó algo roja por su propio comentario y por el de su prima.
-¿Dónde esta tu mamá,Tomi-chan?.-Preguntó Naoko con una sonrisa.
-Es que...jeje.-Se puso nerviosa,comenzando a hacer pequeños circulos en el sillón con los dedos.-Se podría decir que él es...mi mamá.-
Todas la miraron con una cara neutral,¿por qué se apenaba?quien sabe.
-¿Y?-
-¿Cómo que "Y"?-Dijo algo histerica.
-¿Qué tiene de malo que tu "mamá" sea un hombre?.-Dijo Naoko restandole importancia al asunto.
-¿No les parece extraño?.-
-Claro que no,aquí tienes a mi prima de ejemplo.-Dijo Mariko colgandose del cuello de la pelirroja.-Y a mi otro primo,claro.
-Así es,mis padres son hombres,ambos.Y no le veo nada de malo,ni Ren nii-san ni yo le vemos problema de tener dos padres en vez de una madre y un padre.-Dijo con naturalidad.
-Que alivio.-Suspiro sacando su frustación.
-Entonces la pregunta correcta seria¿Dónde esta tu Otou-san?.-
-¿Es tan sexy como tu otou-chan?.-Preguntó Mariko con unsa sonrrisa en su rostro a lo que Naoko y Ayume la regañaron con un sape bien merecido en la cabeza.
-Siempre está trabajando y hay veces que no lo veo,porque el abuelo lo presiona demasiado.-Dijo con una gotita bajando por su sien.
Un muu~y incomodo silencio se hizo presente después de ese comentario.
-Podría decirte que mi papá es igual al tuyo.-Aseguró la morena.-Por eso no paso mucho tiempo en casa,porque sin compañia,me aburro.-
-Eso es cierto.-Afirmaron ambas primas.
-Y respecto a mi pregunta pasada¿Esta bueno,sí o sí?.-Preguntó la castaña frente a las miradas incredulas de sus compañeras.
-Por ser mi padre no puedo comparar esa palabra con lo que creo que la estas comparando tú.-Dijo tomando el control remoto de la televisión.-Pero si te refieres a que está guapo,musculoso y deseable...se podría decir que sí.-Dijo volteando a ver a la castaña,que estaba babeando su propio brazo imaginando quien sabe que perversión.
-¿Y cómo es tu papá?.-Preguntó la pelirroja.-Me refiero a describirlo,no a definirlo como lo acabas de hacer.-Rió nerviosa.
-Pues...es un poco más alto que otou-chan,tiene el cabello rubio y los ojos azules;tres marcas en cada mejilla.-Se masajeó las sienes intentando definirlo con otras palabras.-Le encanta comer ramen,es muy imperactivo y llega a ser un gran amigo;tiene una sonrisa muy linda,yo he notado que llega a sonrojar a otou-chan.-
Mariko sólo podía babear(Chibi:¿Y quien no?)pues de sólo imaginarselo daban ganas de...(*¬*).
Así se la pasaron casi toda la tarde,charlando sobre cosas de la escuela,perversiones,"guarradas",artistas,etc.Hasta que llegó el momento de irse,ya que se habían entretenido tanto que ya eran aproximadamente las seis y el sol se empezaba a esconder por el horizonte.
Al salir de esa comoda recidencia,las chicas empezaron a hablar "cosas".
-Mariko¿puedes dejar de babear?Ya empapaste todo el sueter.-Dijo Ayume dirigiendose a la castaña de ojos negros.
-Pero...es que...de sólo imaginarse a los padres de Tomi-chan y juntos.-Dijo con estrellitas en en vez de ojos con fondo de burbujas rosas.-¡Ganarían un concurso de modelaje en ropa interior!-Cascaditas de saliva recorrían las comisuras de su boca.
-¿Sólo piensas en eso?.-Gritaron histericas la morena y la pelirroja.
-Es dificil tenerte como prima¿sabes?.-
-Aun así me amas,primis.-
-Creo que va a necesitar un babero tarde o temprano.-Sugirió la morena indicando el camino que habían tomado las cascaditas.
-No va a ser necesario...tengo algo llamado auto-control.-Dijo haciendo enfasis en la palabra "control"
-Creo que tu "auto-control" lo dejaste tres cuadras atrás,porque no tienes ni una pizca de eso en éste momento.-Las otras dos rieron,mientras la de ojos verdes se limpiaba la boca.
-Y cambiando de tema...-Dijo Mariko atrayendo la atención de ambas chicas-¿Notaron que Sasuke-san se parece mucho al papá de Naoko?-
Ambas lo pensaron un poco,los ojos y cabellos negros,la piel blanca,la frialdad que despedian con la mirada,la sensualidad...
-Yo lo noté un poco,pero podría haber una gran diferencia si te fijas bien.-Dijo pensativa la pelirroja.
-¿Tu que piensas,Naoko?-Preguntó la castaña.
-Pues...admito que si tienen parecido,pero no creo que tengan algun parentesco.-Admitió negando con la cabeza.-Mi papá y yo somos los unicos que quedamos con el apellido.-Expresó una sonrisa triste,la cual notaron las otras dos.
-Animate,¿sí?algún día tienes que conocer a tu mamá¿nee?.-Animó la pelirroja con una mano en su hombro,transmitiendole algo de animo y confianza.-Ahora vamonos,que ya oscureció.
Sin darse cuenta habían llegado a una zona muy concurrida del centro,al otro lado de la calle,estaba una camioneta negra verdosa,en la cual estaba al frente un chico de cabellos rojos y ojos aguamarina;vestía jeans negros y una camisa de mangas cortas roja,al igual que una chaqueta de piel que le cubría del aproximado frío por el anochecer.
-¡Tou-chan!-Gritó efusiva la pelirroja para lanzarse a su papi y abrazarlo.
-Buenas noches,Gaara-oji.-Saludó Mariko ya más relajada.
-Hola,niñas.¿Dónde habían estado toda la tarde?.-Preguntó el pelirrojo refiriendose a su hija,a su sobrina y a su amiga.
-Estuvimos en casa de una compañera,Gaara-san.Nada del otro mundo.-Dijo Naoko riendo nerviosa.-¿Cómo nos encontró?-
-Pues hace dos horas recibí un mensaje de Sai,queriendo que viniera "por quien-sabe-que-cosa",aquí,al centro.Así que de camino me las encontré a ustedes de casualidad.-Dijo con simpleza.-¿Nos vamos?Si llegan más tarde Itachi y el flojo de Shikamaru me van a matar.-Dijo sacando las llaves de la camioneta.
-¡No hables así de mi otou-san,oji!.-Dijo en su defensa la castaña.
-Sí,sí,sí...sólo vamonos ya.-
El recorrido fue algo corto,pararon en la zona más cercana para ellos en el momento,la zona de penthouses,donde Naoko se bajó despidiendose de sus amigas y Gaara.Le secundó Mariko,que la dejaron al frente de su casa con Temari en la puerta.Y al final Gaara se fue con su hija a casa,donde le llegaría un leve pero respectivo reñado por no avisar.
~Penthouse Uchiha~
El cerrojó de la puerta principal hacía el clásico ruido de abrirse por el apoyo de unas llaves,una morena entraba por ella,dejando esas llaves tiradas por ahí.
-Otou-san,ya vine.-Dijo en voz alta esperando escuchar una respuesta,la cual nunca vino.Una de dos;papá no había llegado o estab durmiendo placidamente en su cama como para no oír a su hija.
Suerte,suerte.Otou-san no estaba en casa.Y como dicen"si la vida te da limones,vendelos".Así que la ojicarmín dejó su mochila en la sala,dirigiendose directamente al cuarto de su padre,más especificamente,el ropero.
Un baúl se vislumbraba al fondo de éste,con algo de esfuerzo lo sacó de ahí,abriendolo lo más rapido para evitar contratiempos.
-Veamos,certificados de escuela...papeles oficiales...actas de nacimiento...¡ay!que linda estaba de bebé,Dios mio,pero que belleza.-Se apreciaba a sí misma en una foto mientras urgaba en la papelería del baúl.-¿Qué es esto?
La morena había encontrado,entre toda la papelera del mueble,una fotografía algo vieja,al parecer de unos veinte años atrás,en la que a su parecer se encontraba su padre de unos catorce años,apoyando sus brazos y cara en la cabeza de un niño más pequeño;de a lo más unos diez años.
-Éste de aquí es tou-san,eso se ve a kilometros,¿pero éste niño quien es?.-Se preguntaba para sí,hasta que escuchó ruidos provenientes de la sala.
-Naoko,ya estoy en casa.-Se escuchó desde la sala,al parecer era Itachi.
La morena se alarmó,tomó la foto entre sus manos y la guardó dentro de su sueter;guardó todos esos papeles en el baúl para dejarlo en su lugar correspondiente para salir corriendo de ahí.
Al pasar por la sala,miró a su padre acostado en el sillón,se veía cansado.Así que decidió arroparlo con un cobertor que tenía a la mano.La rutina de Lunes a Viernes.
-Que descanses,tou-san.-Le dijo al oído para después besarle la frente con dulzura e irse a dormir.
Mañana seria otro día...
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