Cap. 11 – Just…I can’t forget those feelings.
- Que la paso a Sora? – Preguntó el rubio menor totalmente exasperado, porqué simplemente no le podían decir la verdad, en vez de desviarle la mirada? – Se que lo saben, por favor.
- Mira, cálmate un poco.- Le dijo Axel tomándolo de los hombros y sonriéndole con una sonrisa que no convencía a nadie.- Nos encargaremos de esto, lo captas? Tú quédate tranquilo.
Como diablos podían decirle que se quedara tranquilo cuando ni siquiera tenía noticias de su persona más importante? Con brusquedad se apartó del agarre de Axel y miro a su hermano. Cloud ni siquiera se digno a mirarlo sin importar cuantas veces le llamará y eso lo hizo enojar mucho más.
- Entonces por lo menos díganme de que iba ese supuesto “reporte”…- Dijo, su voz estaba cargada de frustración y su mirada celeste estaba que echaba chispas.- Sora no quiso decírmelo…
-…- Su hermano finalmente lo miró, pero de él solo pudo conseguir una expresión vacía, sin intención de decirle nada. En cambio de Axel consiguió unas cuantas palabras, pero que de nada le servían.- Si él no te dijo es porque no era buen momento, lo captas? No quería…
- Iré.- Dijo Cloud, interrumpiendo las palabras del peli rojo, mientras agarraba el celular de Axel que estaba en la mesita. Traía el ceño fruncido, pero sus ojos mostraban algo de preocupación por su pequeño compañero.- Cuida de Roxas.
- No, espera! Yo también iré, Nii-san.- El pequeño y preocupado Roxas se agarró de la chaqueta negra de Cloud como si su vida dependiera de ello. Su hermano lo miró con lo que parecía un poco de culpa, pero porqué culpa?
Cloud le hiso un rápido gesto a Axel, que el peli rojo entendió de inmediato, después de todo habían sido compañeros de trabajo desde hace mucho. Inesperadamente Roxas sintió como le cubrían la nariz con un trapo y, sin haber entendido lo que había ocurrido, se quedo dormido dejándose caer en los brazos de Axel.
- Cierra todo y quédate cerca de Roxas.- Le dijo Cloud seriamente. Axel simplemente asintió mientras recostaba al rubio en el sofá.- Si dejas que algo le pase a mi hermanito, no te perdonare.
- Por supuesto.- Le respondió el peli rojo algo sorprendido, pues la manera en que el rubio lo había dicho dejaba perfectamente en claro que no estaba bromeando, ni siquiera un poco.- No te olvides de traer al peque.
- Bromeas? – Dijo Cloud con una muy, pero muy disimulada sonrisa en sus labios, sin embargo su mirada seguía llena de preocupación, eso si que no podía ocultarlo.- Si dejo que le pase algo, Roxas jamás me perdonará.
Y en cuanto termino de decirlo salió de la casa. En cuanto escuchó el sonido de la puerta cerrándose, Axel no pudo evitar reírse un poco, pues se veía muy claramente que el hermano mayor se había encariñado muy rápido con el pequeño rubio.
- Entiendo porque.- Se dijo Axel a sí mismo mientras mostraba una pequeña y sincera sonrisa. Pero, esta se perdió un poco en cuanto susurró.- No debí haberme ido.
Parecía que el peli rojo se arrepentía. Estaba sentado en el suelo, frente a Roxas, mientras pasaba suavemente una de sus manos por entre sus rubios cabellos, seguían siendo igual de suaves que en el pasado. Lo miraba con ternura, pero a la vez también con tristeza.
Se dio cuenta de algo que lo perturbo un poco. Las miradas del rubio, sus sonrisas, sus caprichos, sus celos, sus sentimientos…ya nada de eso era dedicado a él, ahora le pertenecían al castaño, a Sora. Y, negaba tener que aceptarlo, pero eso realmente le molestaba, se había convertido en un ex, en un simple amigo.
Acaso seguía enamorado del rubio? Claro que lo estaba, nunca lo había dejado de amar. Pero podría algún día simplemente superarlo y olvidarse de aquel sentimiento?
La respuesta era obvia. No.
Mientras tanto…
Cloud no la estaba pasando mejor. Había llegado al lugar que indicaba el mensaje del castaño, una bodega abandonada muy sospechosa. Se encontraba avanzando por entre los pasillos de manera sigilosa, no había visto a nadie y no parecía que alguien se estuviera escondiendo en aquel lugar…
Comenzaba a desesperarse, pensando que quizá se habría equivocado de lugar, hasta que no muy lejos de ahí, en una habitación cercana, escucho unas voces. Una de ellas le fue fácil reconocerla, era la voz de Sora.
-…no lo permitiré.- Decía el castaño. Su voz estaba cargada de rencor y enojo, Cloud se quedo impresionado, jamás había escuchado su voz de aquella manera, y pensar que era por el cariño que le tenía a Roxas lo dejaba aun más sorprendido.- No dejaré que se acerquen a él.
- Ha! Crees que esa determinación tuya nos detendrá? – Decía socarronamente.- Esto no tiene nada que ver contigo, así que mejor no te metas!
Cloud estaba a punto de hacer su entrada sorpresa, pero justo cuando iba a hacerlo, las palabras del castaño lo detuvieron, dejándolo simplemente sin palabras…
- Claro que tiene que ver conmigo! Él es lo más importante para mí, no permitiré que le pongan las manos encima.- Pero justo en cuanto terminó de decirlo, el rubio escucho un fuerte golpe y un quejido que misteriosamente parecía ser de Sora.
- Quizá ya sea tiempo de enseñarte a guardar silencio…- Decía aquella voz, desconocida para Cloud, y al mismo tiempo también escucho como el castaño se quejaba de nuevo.
No era momento para estar escuchando, debía hacer su trabajo, si seguía escondiéndose las cosas se complicarían aun más para Sora. Así que decidido entro por la puerta con los puños fuertemente crispados, pero la escena con la que se encontró lo cabreo como nunca…y sin ser totalmente consciente de lo que hacia le soltó un puñetazo a ese chico de pelo plateado.
Sora, el pequeño castaño, se encontraba con las manos amarradas detrás de la espalda, tenía unos cuantos golpes en la cara y de la comisura de sus labios salía un poco de sangre. Después de ver eso, era obvio que Cloud no pudiera contenerse, quizá se sobre paso un poco, pero no podía importarle menos.
- Estas bien? – Le preguntó a Sora, mientras le liberaba las manos, a lo que el castaño simplemente asintió.- Tonto, te apresuraste demasiado.
El castaño no tuvo tiempo de decirle nada, ya que Cloud estaba demasiado ocupado. Aquel chico peli plata, llamado Xemnas, se había recuperado del golpe y ahora se encontraban entablando una “pequeña” riña. Sora intento ayudarle, pero el rubio lo apartó de inmediato.
- Deja de hacer el tonto. Llama a la policía! – Le gritó mientras le regresaba el golpe a Xemnas.
Por un instante Sora se había quedado en blanco, de alguna forma, el ver al rubio de esa manera, algo golpeado y tan enojado, lo dejaba paralizado y le hacía dar gracias de no ser uno de sus enemigos. Y para cuando terminó de darle los detalles a la policía, Cloud ya tenía esposado a Xemnas.
Los oficiales llegaron a la bodega en una media hora, saludaron a los detectives y subieron a Xemnas a la patrulla, después de eso simplemente se fueron. El rubio y el castaño se quedaron en silencio hasta que dejaron de oír la sirena de las patrullas.
- Que pasó? – Pregunto Cloud en cuanto todo había quedado totalmente en silencio, Sora se quedo callado por unos minutos, como si no lo hubiera escuchado, así que el rubio lo sacudió un poco.- Hey, mocoso, que paso?
- Ya se quien esta detrás de Roxas.- Dijo por fin, mirando a Cloud directamente a los ojos. El mayor simplemente mostro una gran sorpresa y una ansiedad que Sora nunca le había visto.- Es un sujeto llamado Diz…que sigue las ordenes de Xehanort.
- Espera que?! – Gritó Cloud totalmente furioso. Ya tenía una ligera sospecha de quien sería, gracias a la información que les dio Terra, pero escuchar que de verdad era ese sujeto el culpable realmente lo cabreaba. Cuando lo capturará lo golpearía hasta quedar satisfecho.
- Si. Es ese sujeto.- Afirmó Sora, con su mirada llena de enojo.- Lo que no entiendo es la razón. Porque persiguen a Roxas, Cloud?
- No tengo idea.- Le respondió el rubio con el ceño fruncido y una mirada concentrada.- Vamos. Iremos a casa de Terra-san.
Sora asintió en silencio y comenzó a caminar al lado de Cloud en dirección a la casa del tío de Roxas.
Y de nuevo con Roxas…
Axel había comenzado a caminar de un lado a otro. Ya había pasado al menos una hora y no tenía noticias de ninguno de sus dos compañeros y eso estaba a preocupándolo demasiado.
- Sora! –
El peli rojo cayó estrepitosamente al suelo. Quien no lo haría después de que Roxas despertara, inesperadamente, gritando el nombre del castaño? El rubio se sentó de golpe y miró a todos lados como esperando que Sora y su hermano hubieran regresado, pero solo pudo observar a su amigo peli rojo, tirado en el suelo y que lo miraba con los ojos abiertos de par en par.
- Que haces ahí tirado? – Le preguntó Roxas, pues no comprendía porque Axel estaba acostado en el suelo como si nada cuando había problemas más grandes.- Nii-san y Sora no han vuelto?
-…- El peli rojo se quedo en silencio. Sabía que si le contestaba con la verdad, el rubio comenzaría a preocuparse más de la cuenta y ya era más que suficiente con que solo él estuviera tan preocupado. Al menos uno de los dos debería estar en calma…
- Axel! Que fue lo que pasó?! Dímelo, por favor.- Pero claro, esa persona no iba a ser Roxas, era obvio qué él no podría estar tranquilo en aquella situación.
- Mira, te lo explicaremos todo…- Comenzó a decirle Axel, mientras cerraba los ojos y soltaba un suspiro largo, Roxas estuvo a punto de decir algo, pero el peli rojo continuó hablando.- Cuando llegue el momento, lo captas? Hasta entonces solo…
En ese momento, el teléfono sono. Ambos se sorprendieron al escuchar el primer *riiiing* pero al segundo reaccionaron. Roxas quiso contestar la llamada, más sin embargo Axel fue mucho más rápido que él y agarro el teléfono antes, con la esperanza de algunas buenas noticias.
- Axel estamos en casa de Terra-san. Ven…y trae a Roxas, es tiempo de decirle todo.-
Y, tan sin más, se termino la llamada. El peli rojo no pudo siquiera articular palabra, pues para cuando pensó en hacerlo, Cloud ya le había colgado, dejándolo solo. Miró a Roxas, quien simplemente lo observaba con confusión en la mirada.
Tendría que llevarlo con su tío, pero sería eso buena idea? Después de todo, la condición en la que Terra se encontraba no era muy favorable, sin mencionar que era desconocida para el rubio. Suspiró, no es como si tuviera otra opción realmente, así que sin pensárselo más salieron de la casa.
En todo el trayecto ninguno de los dos dijo algo, Roxas estaba demasiado ocupado pensando en porqué de pronto tenían que ir con su tío, o en como es que ellos conocían a Terra ó, lo más importante, que había pasado con su hermano y con Sora.
Mientras que Axel no pensaba mucho, sino que más bien se encontraba alerta, mirando fijamente a todo lo que tuviera en frente, por si hubiera algo sospechoso. Tenía que estar concentrado y cuidar al rubio en el camino si no quería ganarse a Cloud como enemigo y claro tampoco es que él quisiera que algo le llegase a pasar a Roxas, si eso sucedía ni siquiera él mismo se lo perdonaría.
No tardaron mucho en llegar con el tío Terra y en cuanto estuvieron frente a la casa la puerta se abrió, dejando en claro que Cloud los estaba esperando. Entraron un tanto nerviosos…pero estaban tan preocupados pensando en otras cosas, que no se dieron cuenta de que al parecer alguien los había seguido…