Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Die Romantic por Candy_voice

[Reviews - 13]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Fanfic dedicado a mi amigo Ryuki que me hizo el resumen uwu

Notas del capitulo:

HOLIIIIIIIIIII >O< ya sé, no he actualizado mi otro fic en meses! >_< pero... lo siento ;O; es que simplemente la inspiración no me da e_e

Y bueno, como ya me sentí culpable, vengo con este fic algo loco que hice en una noche loca (? es algo fuera de lo común.. nha, la verdad que no, pero igual.

 

Em.. en recompenza que no he actualizado les dejo esto, espero lo disfruten y sobre la conti no se preocupen, ya he terminado con esta historia, así que la iré actualizando pronto, depende de como sea recibida.

Muchas cosas de la historia son sacadas de canciones de Aiden, de from first to last y the blood brothers.

Ahora sí, lean ^^

Te odio, te odio, te odio, te odio, te odio, te odio, te odio, te amo…


-¿Qué haces aquí de nuevo?

-Perdiendo el tiempo.

-Lo único que sabes hacer.

-Lo único que me enseñaste.


Ensordecedor, silencio, negro, blanco, vista nublada, desnuda.


¿Qué quieren esos de mí? ¿Yo hice eso? Tú hiciste aquello. Nosotros no hicimos nada. Déjenme en paz. No. Sí. No. Sí.


-Si supieras comportarte no estarías aquí.

-Mi comportamiento es correcto.

-El tuyo es erróneo.

-Me gusta.

-Me gusta más.

-Nos gustamos.

-Dame más.


Palabras, sonidos extraños. Me estoy volviendo loco.

Aquí.

Allá.

En todo lugar.

Incoherencias.

¿No te gusta?

Aprende a interpretar.


Odio, odio, odio, odio, odio, odio, odio, odio, siento odio, odio, odio, odio, odio, odio.


Amor, amor, amor, amor, amor, amor, amor, sientes amor, amor, amor, amor, amor, amor.


El amor rima con lástima ahora.

El amor rima con simpatía ahora.

El amor rima con dolor, el amor rima con sentimientos, el amor rima con felicidad, el amor rima con presión, el amor rima con…

El amor no tiene rima.

Nadie entiende el amor.

Nadie entiende a el amor.


Gentleman.


Lady.


Sonny, this is urgent.

Akiharu.


……Duele.


-Despierta.

-¿Q-qué?

-Estuviste durmiendo toda la tarde. Es hora que me complazcas.

-Madre, ya no quiero más.

-¿Madre? Yo no soy tu madre.

-No quiero verte desnuda de nuevo.

-Mírame.

-No quiero.

-Jamás tendrás el suficiente odio.

-Te amo, te odio, te odio, te amo.

-Ódiame.

-Ámame.

-De eso me encargo perfectamente.

-¡¡NO!!


*~*~*~


Takuya vivía solo con su madre, quien nunca se encargaba de él.

Takuya era lo suficientemente responsable, pero tenía un grave problema.

No tenía suficiente odio.

Necesitaba odio, más odio, odio, odio… odio para acabar con todo.

Él era el hijo perfecto, educado, responsable, disciplinado. Claro que a simple vista lo era.

No tenía amigos, y por eso, nadie se daba cuenta que él no era nada de lo que demostraba. Él estaba traumado, loco, enfermo, desquiciado.

Su madre lo violaba.

Su hermana lo acosaba.

Su padre… no tenía padre.


Cierto día, iba caminando con toda tranquilidad hacia su hogar mientras tarareaba una dulce y melancólica canción.

De pronto, un fuerte trueno comenzó con todo. Llovía, llovía como no lo hacía hace tiempo. Él, tranquilo, miró al cielo y cerró los ojos, sin dejar de tararear su adorable canción. Sintió como una mano lo jalaba en otra dirección, pero no le tomó importancia y nunca abrió los ojos.


-Hola.


Entonces, los abrió, mirando todo a su alrededor y deteniéndose a observar al tipo que estaba frente a él.


-Hola.- respondió sin mucho interés.

-¿Qué hacías ahí parado?

-No te importa.

-No, no me importa.

-Me voy.

-¡Espera! Me llamo Akiharu Tsukiyama.- extendió su brazo en señal de saludo. El otro sólo le miró extrañado, alzando una ceja y apenas respondió.

-Mi nombre es Takuya.- de inmediato, dio media vuelta para dirigirse a su hogar.

-Lindo…


*~*~*


-Dos ruedas, dos ruedas, quiero dos ruedas.

-No. Necesitas esto.- se quitó la toalla que cubría su cuerpo, mostrándose sólo con un pequeño sostén y una braga encantadora.

-No quiero.

-Debes querer.

-Déjame.

-Sabes qué sucederá si te niegas.

-No…

-Ámame.

-Odio.

-Ámame.


De nuevo ahí estaba su madre, entregándose a su propio hijo, obligándolo a tener sexo con ella. Takuya siempre terminaba vomitando, no dormía bien y como defecto extra, se cortaba a sí mismo. Por ende, su piel era de un tono amarillezco. Sus ojos, apagados, siempre rojos y con ojeras. Tenía los brazos y piernas llenas de cicatrices, muchas de las cuales tenian marcas de haber sido suturadas por la profundidad con que se las había hecho.


Esa noche no fue la excepción para que Takuya no se hiciera daño a sí mismo.


*~*~*


Un nuevo día y con ello una nueva aventura.

Qué idiota.


Se preparaba con formalidad ya que comenzaría un nuevo semestre en la facultad de música. Estuvo trabajando por años para ahorrar y poder pagarla. El día finalmente llegaba y aunque no estaba emocionado, era una razón más para evitar suicidarse.

Llegó a tiempo. Exageradamente temprano, diría cualquiera. Recorrió el lugar interesado, buscó su aula y esperó ahí a que las clases comenzaran.


-Hey…- de pronto sintió como alguien con un lápiz le picaba.

-¿Ah?- le miró y se sorprendió un poco al darse cuenta de quién se trataba. Aun así, no hizo más que alzar una ceja y volver su vista hacia el frente.

-Casualidad… una gran casualidad, ¿no crees? Es divertido.

-Exactamente, ¿qué es divertido?

-¿No te parece extraño? Apenas ayer te vi y ahora… ahora resulta que estaremos en la misma clase durante todo un semestre.

-Qué pesado te vuelves.

-Oye… yo sólo quería conversar.

-Piérdete.

-Claro, lo que tú digas.- le miró enfadado cambiándose de lugar.


Después de eso, no ocurrió nada más interesante.

 

 

Al día siguiente fue lo mismo, el chico rubio le hablaba con toda confianza, no le quedó más que soportarlo, después de todo, le era indiferente.

 


~ Cuatro meses después ~


-Muerte romántica.

-¿Ah?

-Así se llama una muy buena novela que estoy leyendo. Suena mejor en inglés: “Die romantic”. ¿No es…- lo interrumpió.

-¿Romántico?

-¡Exacto! ¿Ves? Nacimos para estar juntos.

-Qué bobadas dices.

-Está bien, terminemos esto.


Ahí estaban Takuya y Akiharu. Hace apenas dos meses uno de sus maestros les había pedido que hicieran equipo para un proyecto que se entregaría al final. Casualidad, ¿no? Así lo llamaba Akiharu, tan enérgico, tierno y adorable como siempre.


-Entonces…

-¿Sí?- preguntó a medida que leía unas partituras.

-¿De qué trata el libro que me dijiste?

-¿Eh?- lo miró confundido y después soltó una pequeña risita. -sabía que no te podrías resistir.

-Calla.

-Si callo no podré decirte.

-¿Me dirás o no? No quiero perder más mi tiempo si te pones así.

-Ya, Takuya. A veces deberías relajarte un poco.


El menor miró al suelo, de forma tal que su cabello cubrió gran parte de su rostro.


-¿Takuya?

-…

-Taku…

-¿Me dirás? Por favor…

El rubio se sorprendió. Por vez primera vez Takuya se había mostrado gentil e inocente. Utilizó un tono de voz adorable y se veía totalmente indefenso. Quiso abrazarle y besarle pero… pero… ¿Qué carajos pensaba? Sacudió su cabeza aturdido y solo atinó a responder.

-Claro, claro... Es sobre una especie de ente que provoca a las personas a hacer cosas malas. Se ven varios casos como un robo, una chica con bulimia y un tipo que se suicida.

-S-se… ¿se suicida?

-Sí, sí, te diría más pero sería mejor si tú lo leyeras. Es bueno.

-Entonces…

-¿Sí?

-¿Por qué ese nombre?

-Mm… Yo tengo mi versión. Tú deberías descubrir la propia.

-Ya veo… ¿me lo prestarías?

-Claro que sí. ¿Qué tal si voy hoy a tu casa?

-No.

-Oh…

-Yo iré a la tuya, ¿sí?

-Bueno.


*~*~*


Se salvaría, se salvaría, esa noche se salvaría.

Esta es la pesadilla de morir completamente.

 

Estaba tranquilo. Se quedaría a dormir con su amigo, por lo que, obviamente, estaría lejos de esa mujer. Al menos esa noche no le obligaría a hacer nada y descansaría de una buena vez.


-¿Te vas?

-Debo. Es un proyecto muy importante.

-Me dejarás sola y triste. No es justo.- se fue acercando sensualmente a él.

-Me voy.- rápidamente terminó de meter sus cosas, agarró su bolso y salió de su cuarto a toda prisa, antes que su madre se lo impidiera.


*~*~*~


-¿Te gusta?

-Me gusta.

-Es bonito. Pienso que podríamos utilizarlo.

-Seguramente.

-¿Estás bien? Buu, volviste a ser frío. Creí que el gusto me duraría un buen rato.- rió bajito.

-Idiota.- le lanzó un cojín en señal de fastidio.

-Auch. Eres cruel, Taku-chii…

-¿Qu-qué?

-Taku-chii~

-N-no…

-Oh, vamos. Se escucha tierno, Taku-chii~

-¡¡Cállate!! ¡Déjame en paz! ¡¿Qué te pasa?! ¡¿Estás loca?! ¡Cómo se le ocurre! ¡Tiene trece años! ¡Asco, asco, asco!

-¡Takuya! C-cálmate, por favor…


El rubio estaba asombrado. Nunca había visto así a su compañero. Era siempre tranquilo y cortante. Sin embargo, ahora, se tiraba de sus cabellos al grado de arrancar algunos y se rascaba intensamente brazos y mejillas. Estaba totalmente rojo y despeinado. Akiharu sólo le miraba con miedo. Estuvo a punto de llorar de la desesperación. No sabía qué le pasaba y mucho menos tenía idea alguna de qué hacer. El pelirrojo siguió gritando descontrolado, sin parar de lastimarse. Fue entonces cuando el joven Tsukiyama reaccionó al ver que el menor se arremangaba su playera para seguir rascándose mucho más fuerte y con claras intenciones de dañarse. Eso le asustó de sobre manera, pero lo que no pudo soportar fue ver todas esas cicatrices de heridas profundas. Lo peor era que había algunas que aún tenían los puntos de las suturas y su compañero se rascaba sobre ellas como si nada, logrando abrirlas ligeramente.


-¡No! ¡Cálmate, por favor! ¡¿Qué te pasa?!- ahora sí no pudo retener su llanto. Lloraba muy asustado sin saber cómo actuar. Hubiera forcejeado con él, pero ver sus brazos lastimados le hacía pensar que si hacía algo sólo lo ayudaría a terminar de abrir sus heridas.

-¡Te odio, te odio, te odio, te odio!

-¡No! ¡Takuya!- tomó valor de alguna parte que desconocía y sujetó a Takuya de los brazos. Era obvio que aún y no lo tocara, el menor de igual manera se lastimaría por su cuenta.

-¡Suéltame! ¡Te odio! ¡Déjame en paz!

-¡Basta! Takuya, soy yo, Akiharu. ¡Recuérdame!

-No, no, no, no, no, no, sólo quieres hacerme daño. ¡Te odio! ¡¡AGHH!!

-¡Yo nunca te haría daño, Takuya! ¡Te quiero!


Como si de palabras mágicas se trataran, Takuya se detuvo de inmediato, mirando a la nada. El rubio le fue soltando de a poco. Después, al ver que el otro se encontraba mucho más tranquilo, lo abrazó fuerte.


-¿Qué pasó, Takuya?- Akiharu acariciaba su espalda dulcemente, aun llorando.

-¿M-me… me quieres?

-Sí, sí, aunque te burles de mí. Yo te quiero, demasiado. Aunque seas frío conmigo, eso te hace especial y diferente. Yo sé que no estás loco, como todos dicen. Es que nadie te entiende, nadie sabe, ni siquiera yo. Por favor, Takuya… déjame, déjame. Yo te quiero, te quiero mucho y odio verte así…

-Tsukiyama…

-¿Taku?- se separó de él para verlo a los ojos.

-Ayúdame…

-Yo lo haré. Te lo prometo.

-Gracias... Puedo confiar en ti, ¿no?

-Claro que sí. Jamás te traicionaría… no podría…

-Gracias…

-Ahora nos encargaremos de eso.- señaló los brazos de su compañero y de inmediato fue a buscar su botiquín de primeros auxilios. Curó las heridas del menor con mucho cuidado y cariño. Al final, sonriendo, le entregó una paleta. El otro no hizo más que tomarla con total seriedad. -Ha sido un día largo, ¿quieres ir ya a dormir?

-Por supuesto.


Se pusieron de pie, limpiaron la escasa sangre que el pelirrojo había derramado al piso y se dirigieron a la habitación del mayor, la cual ya estaba preparada para dos personas.


-Gracias…

-Dulces sueños.

-Gracias por todo, Akiharu.

-Te quiero, Takuya.

Te quiero, Akiharu.

 


Claro que eso último sólo lo pensó.

Notas finales:

wermjlovkirlkfkjnr espero les haya gustado D:! la historia avanza muy rápido para mi gusto, pero no quería alargarla tanto, se me hubiera hecho muy pesado y de hecho quería fuera un two-shot, pero creo que me emocioné y no sé cuantos capítulos salieron erkjvbnrkinvr em...

 

Hay muchas palabras que no tienen nada que ver, como "Getleman" y "Sonny, this is urgent" xD lo siento por eso, es sólo que.. no sé, era la idea que al principio fueran palabras incomprensibles, era como un sueño que Takuya tenía o algo así..

 

Bueno, depende de como le vaya al fic, actualizaré el lunes sin falta :3 más tardar el martes, pero de ahí no salgo (?

 

Ahora sí, me voy a dormir que son las 5:45 de la mañana y batallo en encontrar los botones xD

 

Ja ne~ :3 <3

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).