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Nuvole Bianche por IntoTheFire

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Notas del fanfic:

Mi primer fic Yaoi! :D [Mi primer fic de cualquier tipo u_u]

Esta historia es como mi primer bebé, le tengo un cariño muy especial y espero que con el tiempo ustedes también! :D


Sin más que decir, les dejo con Nuvole Bianche! :D [Significa Nubes Blancas en italiano, pero asi suena más bonito XD]

Notas del capitulo:

Ojalá les guste! :D Sorpresa en las notas finales del cap!

 

 

 

 

Si alguien quiere ser considerado un verdadero artista, es un requisito estudiar en la universidad de artes liberales Konoha.

 

Dentro de sus imponentes paredes de ladrillo han florecido los personajes más importantes del ámbito cultural japonés del último siglo. Sí, parte del prestigio que tiene esta universidad nace de los casi 120 años de actividad educativa. Fue la primera universidad de artes liberales de toda Asia y sin duda, la más exigente. No en vano se dice que Konoha nunca ha formado un solo estudiante mediocre en toda su trayectoria. Todos son buenos y destacan en lo que hacen… Aparte de estar cubiertos en dinero.

 

Pero bueno, ¿qué universidad no estaría plagada de genios si sus pruebas de ingreso son un verdadero infierno?

 

Anualmente, Konoha abre sus puertas a 200 alumnos que se reparten entre los departamentos de música, artes escénicas, artes plásticas y literatura. Estos son elegidos entre alrededor de 45 000 aspirantes que tienen que enfrentarse a 3 etapas (o filtros como los llama Jiraiya). En la primera etapa el aspirante debe realizar una audición. Suena sencillo, ¿cierto? Pues bueno, no lo es. Intenta convencer a 4 personas con cara y corazón de piedra de que en realidad dominas lo tuyo en tan solo 10 minutos. Déjenme decirles que no es nada fácil.

 

En la segunda etapa se aplica un examen de conocimientos de todo tipo. Para derribar este segundo muro se debe dominar la física, la matemática, la cultura general, la redacción, la historia; se deben tener aptitudes verbales, espaciales, psicológicas y lógicas. Según lo que leí, este procedimiento se implementó más o menos en el año de 1940 cuando se soltaron los rumores maliciosos de que todos los artistas eran personas que no tenían aptitudes para ninguna otra cosa, que escudaban tras sus “talentos” a su ociosidad. Como medida para callar a todas esas personas envidiosas, Konoha implementó este filtro, demostrando que sus alumnos estaban preparados para sobresalir en cualquier campo. Si mal no recuerdo, incluso tres presidentes fueron egresados de esta universidad y sus periodos gubernamentales fueron mucho mejores que otros.

 

Por último, en la tercera etapa el departamento de admisiones realiza una entrevista personal con el estudiante en su domicilio para medir, entre otras cosas, su calidad humana, actitudes sociales, personalidad y capacidad de expresión. Otra cosa admirable de la universidad es el pensamiento de que la educación no es un negocio, sino un servicio prestado a la comunidad. El costo de la carrera depende enteramente de la situación económica del aspirante, sumándole a esto la posibilidad de acceder a una de las 50 becas que son otorgadas anualmente a los mejores puntajes entre audición y examen.

 

Si me hubiesen dicho que yo, Naruto Uzumaki, ingresaría en una universidad como esta; sinceramente me hubiese muerto de la risa. Sin embargo, aquí estaba yo, con mi instrumento en la espalda y el corazón en la garganta buscando el departamento de música.

 

Nunca fui un buen estudiante, ni siquiera me esforzaba. Mis notas siempre causaron más de un dolor de cabeza en mi tutor y creo que sobra decir que mi disciplina tampoco era inmaculada. Al final, supongo que todas las horas que me fugué del colegio para tocar la guitarra no fueron en vano. Obviamente tuve que estudiar lo que no había estudiado en toda mi vida para pasar la segunda etapa de admisiones, pero después de haber superado una audición a la que fui por pura coincidencia, ¿quién no lo hubiese hecho?

 

El 26 de mayo fue un día caluroso que transcurría sin muchos sobresaltos. Después de tocar un rato en el parque y ganar unas monedas fui a comprarme un helado. En el camino, me tope con la fila de personas más larga que hubiese visto en mi vida.

 

 

 

-¿Vas a audicionar? –preguntó una chica de cabello negro y ojos grises como neblina, viendo con curiosidad el estuche de mi guitarra.

 

-Ehm…

 

 

 

Tenía tres opciones:

 

1) Responder que si y conversar con ella (era guapa y se la veía muy agradable).

 

2) Responder que no, sentirme como un imbécil e irme.

 

3) Preguntar de qué diablos estaba hablando, ser un imbécil y quedar en vergüenza.

 

Opte por la primera opción sin poder predecir que todas las personas que estaban adelante y atrás suyo empezaron a gritar enfurecidos que me pusiera al final de la fila y que ni pensara en colarme porque me lincharían.

 

A medida que me empujaban hacia el final, me veían con cara de repugnancia y aires de superioridad. En sus ojos claramente podía leer: “JA! Otro rubio con una guitarra acústica”.

 

Hoy, quisiera buscar a todas esas personas y darles las gracias, porque fue por ellos que audicioné y lo logré.

 

Pero creo que no tenía mucho tiempo para eso.

 

Miré mi reloj. 8 y 10. Genial, tenía 10 minutos para llegar al aula y endulzando un poco las cosas, seguía perdido.

 

El campus era tan enorme y confuso. Había muchos jardines, piletas, bancas y gente que se movía de un lado para el otro. Me sentí tan descolocado  que me dieron ganas de lanzarme en posición fetal al suelo y temblar, pero no podía hacer eso, al menos no aquí.

 

 

 

-Ok. Naruto, fíjate en las personas. ¿Qué debes buscar? –me pregunté a mi mismo. Lo pensé unos momentos, hasta que por fin me pude responder  r  ¡INSTRUMENTOS!, tarado… ¡INSTRUMENTOS! Sigue a esa chica de cabello rosado que lleva un oboe.

 

Me abrí paso rápida y sigilosamente detrás de ella, como si fuera un ninja.

 

Resulta que el edificio de música (que parecía un palacio medieval) estaba ubicado en el ala oeste del campus universitario. La entrada consistía en un enorme arco de piedra con una puerta de vidrio que dejaba ver el patio central en todo su esplendor.

 

Caminé como alienado por los pasillos observando cada pequeño detalle arquitectónico. La facultad tenía 5 pisos de alto… ¡Era colosal! Sus paredes de piedra labrada, las gárgolas en los balcones y los vitrales creaban un ambiente tan mágico y abrumador. Sin embargo, se podía percibir cierto aire melancólico que no podía ser roto ni por el incesante cuchicheo de la gente. Sentí como un nudo se formaba en mi garganta.

 

 

 

-Oye, antes de que continúes con tu persecución, ¿no quieres cerciorarte de si vas al mismo sitio que yo? –dijo la pelirosa mientras me observaba con curiosidad y con los brazos cruzados en el pecho – ¿O solo me estás siguiendo porque eres un pervertido?

 

-¿Qué? –respondí completamente descolocado. Su mirada verde irradiaba tanta  fuerza que asustaba –Eh… ¡No! Yo… yo…

 

 

 

Busqué con torpeza en mis bolsillos el horario de clases. Estaba más que seguro que mi cara estaba roja como un tomate. Intenté abrir la hoja varias veces pero, sin perder la costumbre de sabotearme a mí mismo, fallé estrepitosamente. En eso, ella me quitó el papel de las manos y lo observó entretenida. Mi cara ardía de la vergüenza.

 

 

 

-Educación auditiva teórica y rítmica I –masculló con una sonrisa bailándole en los labios; luego me extendió la mano – ¡Mucho gusto compañero, mi nombre es Sakura Haruno y tenemos aproximadamente 2 minutos para llegar al cuarto piso!

 

-Naruto Uzumaki, encantado –alcancé a decir mientras me acomodaba la guitarra para que no cayera. Sakura ya había tomado mi mano y me arrastraba vergonzosamente hacia las escaleras a una velocidad casi imposible.

 

 

 

Me soltó la mano cuando entramos en el aula. Sentía que el pulmón se me había caído en algún lugar entre el segundo y tercer piso mientras ella miraba alrededor más fresca que una lechuga. Miré el reloj en mi muñeca. 8 y 19. Al menos me había salvado de empezar mal mi carrera universitaria.

 

Cuando me recompuse le eché un vistazo a todas las personas que estaban en el salón. Las que no nos miraban con miedo estaban escuchando música o conversando entre ellos. Todos menos uno. Estaba sentado en el último puesto de la última fila y miraba distraídamente por la ventana. Su cabello, así como sus ojos, eran negros como la tinta. Su piel era muy blanca y tenía un aspecto suave y terso; exquisito. Era más hermoso que cualquier hombre que yo hubiese visto hasta el momento.

 

La camiseta azul marino que vestía se apretaba contra su pecho, revelando una respiración pausada y tranquila. No tenía ningún instrumento a su alrededor… Me partí la cabeza pensando que era lo que tocaba. En todas mis alucinaciones, con cualquier instrumento; desde la armónica hasta el ukulele; se veía como una perfecta estatua de mármol blanco.

 

 

 

-¿Te parece si nos sentamos? –dijo Sakura –Luego te lo puedes comer con la mirada.

 

 

 

La manera que tenía esa mujer para decir las cosas era muy directa. No es que no hubiese estado disfrutando de la vista, pero no era necesario que lo dijera en voz alta. Lo que pasó después de su atinado comentario fue muy violento (emocionalmente hablando). No sé si el chico de la esquina lo escuchó o si fue una de esas coincidencias que pasan una vez cada mil años, pero en ese momento sus ojos se cruzaron con los míos. Su mirada era vacía, carente de cualquier expresión. Más fría que un tempano de hielo. De  nuevo se me comenzó a formar un nudo en la garganta. La conexión (que probablemente duró unos segundos) se me hizo tan eterna y difícil de sostener que tuve que desviar la mirada avergonzado. Asentí un par de veces en dirección a Sakura y caminé cabizbajo al asiento libre más próximo. Segundos más tarde llegó el profesor. Era un hombre muy curioso. Su cabello era gris (aunque probablemente no pasaba de los 30 años) y le cubría enteramente uno de sus ojos.

 

 

 

-Bueno, mi nombre es Kakashi, mi apellido no les interesa y soy su profesor educación auditiva. Bienvenidos a la universidad, bla, bla, bla… Como ya deben saber, esto no es nada como el colegio. Aquí nadie los va a estar persiguiendo para que cumplan o se comporten, es su dinero y su tiempo, pero eso si… No acepto gente en mi clase que se quiera pasar de lista. ¿Tienen ganas de molestar, dormir o jugar? Hay un enorme patio allá afuera. Si quieren pasar el semestre conmigo, hagan sus tareas, coman sus verduras, pongan atención o cómprenme una cajetilla de cigarrillos; lo que se les dé mejor. Vamos a hacer esto rápido e indoloro. Cada uno se levanta, dice su nombre se sienta, ¿Capichi?

 

 

 

Las presentaciones pasaban tan rápido que uno no tenía ni tiempo para procesar quien era quien. Sobrará decir que olvidé casi todos los nombres de inmediato. Ya se imaginarán cual no pude borrar ni aunque hubiese querido.

 

 

 

-Sasuke Uchiha –dijo el chico de la esquina. Su voz era ronca y un poco aterciopelada. Muy masculina; pero al igual que sus ojos, no había emoción.

 

 

 

Esa voz hizo eco en mi cabeza lo que sobró del día.

 

 

Notas finales:

Y bueno, qué tal? :D [Sonrío mucho, lo sé] Espero que me dejen sus reviews con sus opiniones... De esto dependerá si continuo o no con esta historia u_u [Aunque en realidad no creo que pueda abandonar a mi bebé! XD]

Explicaciones:

La historia será narrada enteramente por Naru... Los pensamientos de Sasu siempre han sido (y siempre serán) un misterio para mí.

No se ustedes, pero no me gustan los ukes todos delicaditos y eso :S Soy de la idea de que nadie se complementa con nadie... Para mi, el amor no es llenar las carencias de una persona  y eso, sino al ser yo una persona realizada y mi pareja también, podamos trascender juntos... Me hago entender? XD haha bueno, por eso le quiero dar a Naruto un toque un poco más masculino y maduro aun cuando es el uke (tampoco va a ser TOOOOODO un machote, pero bueno.. ya lo verán! XD)

 

Queridos lectores, he aqui la sorpresaaa! :D jaja

http://photobucket.com/nuvolebianche

Me tomé la libertad de diseñar el vestuario del primer día de clases de nuestros personajes! :D haha [Si hay algo que me encanta, es la ropa] en ese album encontramos a Saku, Sasu y a Naru! espero que les guste! :D si son bien aceptados, más adelante iré subiendo más vestuarios!

Bueno, me despido! :D hasta el siguiente cap! [Viernes de la próxima semana... o antes ;)]


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