CAPITULO 2:
El vuelvo había estado bien… lento, incómodo y estresante, como todos, la comida del avión nunca le había gustado y nunca le iba a gustar, todo tan blanco, lo más interesante que podía hacer era dormir todo el viaje.
Iba pensando en su estrategia para poder cumplir con su objetivo.
Según sus informes, los cuales sostenía en sus manos y los leía con detenimiento, allí describían completamente a su próxima víctima, Uzumaki Naruto.
Por lo que leía no era la gran cosa, era una año menor que él , su paso por la universidad no había sido puntualmente muy buena, y ahora trabajaba de mesero en una bar bastante popular, por lo que veía vivía en una departamento , y además era soltero.
En el mismo informe había una foto de Naruto de frente y de espaldas, y la verdad que tenía cara de estúpido, tan solo ver esa sonrisa tonta en sus labios y esas marcas extrañas en las mejillas, parecía bastante inocente… sería facil persuadirlo.
Pero algo llamó su atención, en la parte inferior al lado de su tipo de sangre, decía que era un “doncel” … ¿Qué era doncel? ¿Algún tipo de religión? No lo sabía… en fin, no le interesaba saberlo seguro no era algo importante de saber.
“Por favor, permanezcan sentados, comenzaremos con el aterrizaje , gracias por volar con nosotros”
Guardó todo en su bolso y aguardó a que el aterrizaje terminara.
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A unos pocos kilómetros de allí se encontraba un rubio durmiendo plácidamente en su departamento Nº 102.
Unos rayos de sol que se colaban por su ventana le despertaron, y bostezando se fijó en su reloj la hora, que marcaba 8:50 am.
-….8 y 50…- Dijo refregándose uno de sus ojos…- Mierda… 8 Y 50!!!! – Gritó levantándose de un salto de su cómoda cama, yéndose corriendo al baño.
Cepillaba sus dientes mientras se colocaba los calcetines naranjas que tanto le gustaban , luego se peino un poco y termino de vestirse, le dio de comer a su gato, y luego de ver nuevamente el reloj que esta vez marcaba las 8:58 , salió corriendo de su departamento a su trabajo.
-Bien, si corro muy muy rápido quizás llegue a las 9 – Se decía el rubio mentalmente acelerando el paso, corrió y corrió por cuadras, a todo lo que sus pies le permitían y cuando estaba a punto de llegar a el restaurante en donde trabajaba de mesero chocó accidentalmente con otra persona.
-LO SIENTO! DISCULPE PERO LLEGO TARDE AL TRABAJO!- Se disculpó siguiendo su camino sin ni siquiera voltear a ver con quien había chocado.
-Estúpido…- Susurró la persona, mientras recogía su maleta que había caído en el impacto, volteó a ver de quien se trataba y lo único que alcanzó a ver fue su espalda y sus rubios y alocados cabellos, con algo de prisa buscó en su bolso la foto de Naruto Uzumaki, la vio y volvió a ver al joven que doblaba en ese momento por la esquina…
Si, era él.
Una sonrisa maliciosa brotó en sus labios, ya le tenía, sin duda era un dobe, no le pudo haber tocado una persona más fácil para quitarle información, su padre… es decir, Fugaku estará orgulloso del resultado de su misión. Ni siquiera veía necesario usar el arma, un par de palabras amistosas, quizás llevarlo a la cama un par de veces y listo, misión completada.
Se dirigió hasta la esquina en donde Naruto había doblado , viendo así en el lugar donde éste entraba, con que allí trabajaba, y a las 9 empezaba su turno… miró su reloj de muñeca y una mueca burlona.
“Le regañarán, son las 9:05, dobe” - Pensó el morocho, y luego de aquello, dio media vuelta para irse a su nuevo hogar, el departamento 101, junto al de Naruto.