Diferencia entre realidad y ficción por Haibara-chan

Diferencia entre realidad y ficción


Se removió incomodo en su asiento, esperando ansioso a que su teléfono se iluminara. Observó la habitación, sucumbida por el escándalo que estaban ocasionando Sungyeol y Sungjong, y suspiró, si su preocupación no fuera tan grande, él se encontraría en ese mismo instante junto a ellos. Quizás por esa razón, sus tres compañeros restantes lo miraban extrañado, y con el ceño ligeramente fruncido, mientras que él por su parte solamente desvió la mirada.

Myungsoo, Woohyun y Sunggyu se miraron entonces entre sí, sin llegar a entender del todo la razón de la actitud que, en los últimos días, había tomado su amigo. Sin embargo una ligera idea cruzaba por sus mentes y es que, Hoya, debido a las promociones de su drama regresaba tarde a casa, cuando ya todos dormían, y, cuando lo hacía temprano, estaba tan cansado que solamente se dirigía a su habitación y se acostaba a dormir, lo que provocó que, sin planearlo, el bailarín principal se distanciara un poco de ellos. Inclusive de aquel que ahora se encontraba deprimido en el sofá . 

Las miradas de los tres volvieron a encontrarse, y sin decir palabra alguna se levantaron y se dirigieron hacia su amigo, sentándose a su lado. Sunggyu le rodeó los hombros con su brazo izquierdo, mientras que Woohyun posó su mano derecha en la pierna izquierda del rapero, Myungsoo por el contrario se sentó frente a él y le observó fijamente.

- Hyung, ¿estás bien?.- preguntó Woohyun. En ese instante todo el ruido que invadía la habitación ceso, y es que una vez que Sungyeol y Sungjong escucharon esa pregunta, se giraron rápidamente para ver qué era lo que sucedía. Se acercaron lentamente a su hyung y se sentaron a ambos lados de Myungsoo. Fue entonces cuando Dongwoo levantó la mirada, encontrándose rodeado de todos sus amigos. Se sorprendió en un primer momento, observándolos con los ojos bastante abiertos, y, obligándose a sí mismo a calmarse, les sonrió, afirmando lentamente con la cabeza.

- Solamente estoy preocupado por Hoya, es muy tarde, y no ha avisado de que iba a tardar.- comentó suavemente. Los demás se miraron nuevamente, entendiendo ahora choding y maknae lo que estaba ocurriendo.- Le mandé hace dos horas un mensaje y, al ver que no contestaba, le llamé pero había apagado el teléfono.

- No te preocupes.- dijo entonces su líder.- Él está bien, es probable que, al estar grabando, tuviera que apagarlo antes incluso de que le mandaras el mensaje.- los demás asintieron mirando al rapero quien solamente soltó una risa que pretendía ser despreocupada. 

- Tenéis razón.- murmuró.- Además es probable que haya salido a tomar algo con Seo In Guk de nuevo… después de todo últimamente es lo único que hace.- desvió la mirada, no quería que sus amigos se percataran de lo molesto que estaba. Sin embargo lejos de ello, cada uno de los chicos que se encontraban alrededor pudieron percibir el tono que el rapero había usado. Provocando en algunos unas sonrisas maliciosas y en otros un fruncido ceño que no pasaba desapercibido. 

- Hyung.- habló Sungyeol, y las miradas se dirigieron hacia él.- No me digas que estás celoso…- vio la expresión horrorizada del mayor frente a él, y sus sospechas crecieron aun más.- ¿A ti te gusta…- de pronto se escuchó un portazo, y al girarse hacia la entrada, pudieron contemplar a Hoya observándolos desde el quicio de la puerta, haciendo que Sungyeol callara de repente y que quedara en su lugar una extraña sensación. 

Un silencio incómodo se instaló, entonces, en la habitación, provocando que el bailarín principal desviase la vista durante unos segundos. ¿Era posible que sus amigos hubieran estado hablando de él? ¿Por qué callaron nada más entró en el lugar? Suspiró unos instantes y se dispuso a hablar.

- Buenas noches.- dijo seriamente.- Siento haber interrumpido la conversación.- habló intentando sonar tranquilo y despreocupado, sin embargo solo lo consiguió a medias.- Me voy a mi habitación, para que podáis hablar tranquilamente.- volvió a decir de nuevo, sintiendo como ahora un tono enojado había escapado de entre sus labios. Se quitó los zapatos y, bajo las atentas miradas de sus amigos, cruzó el comedor y entró en su habitación. 

Tras escuchar el sonido de una puerta cerrarse, seis suspiros aliviados escaparon de seis bocas diferentes. Se miraron entre sí unos instantes, hasta que Myungsoo, que se encontraba al lado de Sungyeol, le dio un codazo y dijo.

- Casi pones en evidencia a hyung, idiota.- el mayor de los dos hizo un puchero, a lo que Myungsoo sonrió enternecido y acarició su cabeza.

- Sin embargo…- dijo de pronto Sunggyu.- el problema ahora es que él cree que estábamos hablando de él.

- Pero es que así era, hyung.- comentó Sungyeol nuevamente.

- No me refiero a eso.- suspiró molesto.- lo que quiero decir es que no sabe de que hablábamos, al habernos callado justo cuando él ha entrado, puede llegar a pensar que no estábamos diciendo precisamente cosas buenas.- los menores miraron a Sunggyu, y posteriormente a Dongwoo, quien se encontraba con la vista fija en el suelo.

- Puede que tengas razón, hyung.- comentó entonces Woohyun.- si es así, es un problema, Hoya últimamente ha estado bastante raro, si encima ahora piensa que nosotros lo estábamos criticando nos distanciaremos aún más de él…- Dongwoo levantó la vista entonces, y posó una asustada mirada en Woohyun, quien solamente le sonrió.- No te preocupes hyung, tengo una idea.

~. ~. ~. ~

Habitación de Hoya y Sungjong.

Entró cabreado a su cuarto, lanzando la mochila que llevaba en la espalda contra la pared. No estaba enfadado porque sus amigos hablaran de él, ya que después de todo sabía que no estaban diciendo nada malo, sin embargo, lo que realmente le cabreó fue el hecho de que, además de no desmentir lo que obviamente parecía, Dongwoo se encontrase bajo los brazos de Sunggyu y Woohyun. 

Suspiró cansadamente y se dejo caer en su cama, mirando hacia el techo durante unos momentos. De pronto recordó algo, y con los ojos completamente abiertos, corrió hacia su mochila y sacó un paquete de ella. Lo abrió lentamente, tomando entre sus dedos una taza de color verde con un dibujo de un dinosaurio. Suspiró aliviado al comprobar como ésta no se había roto. 

La había comprado esa misma tarde cuando volvía de camino a casa. Estaba en el escaparate de una tienda y al verla, la imagen del rapero principal se le había venido a la cabeza. Supuso que le iba a gustar, ya que después de todo, Dongwoo había roto la suya propia hacía unos días. La imagen de su hyung tropezando con un mueble, haciendo que el objeto saliera despedido de entre sus manos, le hizo reír por un momento, y se dio cuenta, algo disgustado, de que el mayor podía calmarle sin siquiera saberlo.

Suspiró nuevamente, y sentó ahora en la cama, con la taza en las manos. Notó entonces, incómodo, como algo se le clavaba en el bolsillo trasero del pantalón. Con el ceño fruncido, sacó el objeto que había dentro, fue entonces cuando recordó que esa misma tarde había metido ahí su teléfono una vez recibió el mensaje de Dongwoo. Bajó la mirada decaído, ya que, justo cuando iba a responderle, su teléfono se apagó por falta de batería.

Debido a ello, había pasado toda la tarde intranquilo, ya que sabía que si no respondía el mensaje o si el mayor lo llamaba y se encontraba con que su teléfono estaba apagado, iba a preocuparse, y lo que menos quería era hacer preocupar a Dongwoo. 

Así que, nada más terminar la grabación del noveno capítulo de su drama, salió despavorido hacia casa, para hacerle saber al rapero que se encontraba bien, y para disculparse por no haber podido mantener contacto con él. Suspiró nuevamente y, dejando el teléfono en la mesita de noche, se levantó de la cama y se dirigió hacia su armario, guardando entre su ropa el paquete con la taza dentro, sabiendo que de momento no sería capaz de dárselo, y menos después del espectáculo que había montado fuera. 

Volvió de nuevo hacia la cama y conectó el cargador de su teléfono. Lo enchufó y espero unos segundos para encenderlo. Nada más haberse iniciado le llegaron seis mensajes de texto, los abrió sorprendido para percatarse que, cinco de ellos pertenecían al mayor. Sonrió un segundo ya que, aunque era cierto que no quería preocuparle, el hecho de ver que había insistido en comunicarse con él hizo que un profundo calor le ascendiera desde el estómago hasta el pecho. 

Abrió el buzón de los mensajes, percatándose que dos de los de Dongwoo, recibidos a las 22:05 y 22:38, eran de dos llamadas perdidas suyas. Se paralizó un segundo, ya que, después de todo, el mayor se había preocupado tanto que incluso le había estado llamando. Sonrió con culpa y entró en el buzón para poder abrir los mensajes, no obstante prefirió, en primer lugar, releer el que había recibido antes de que su teléfono se apagara.

"De: Mi DinoWoo-hyunh (21:35)

Hoya, ¿Cuándo vuelves? Hemos cenado ya, te he guardado un poco de comida, porque… comes en casa, ¿no? 
¡Trabaja duro! ¡Así podrás regresar antes!
Dongwoo."

Se rió suavemente al recordar lo feliz que se había sentido al leer el mensaje, seguramente habría parecido un idiota por haber estado sonriendo como lo hizo, pero poco le importaba, el hecho de que Dongwoo le hubiera escrito un mensaje era más importante. Sonrió nuevamente y buscó el primero de los otros tres que no había podido leer.

"De: Mi DinoWoo-hyung (22:02)

Hoya, ¿Por qué no me respondes? ¿Estás ocupado? Por favor, contéstame cuando lo leas.
Dongwoo"

Suspiró nuevamente, era obvio lo preocupado que se encontraba, pasó a leer el tercero.

"De: Mi DinoWoo-hyung (22:07)

¡Yah! ¡Howon! ¿Por qué has apagado el teléfono? 
Dongwoo."

Comprobando la hora de los mensajes se percató que éste se lo había enviado justo después de la primera llamada que recibió, parecía enojado, ya que no demasiadas veces le llamaba Howon en lugar de Hoya. Aunque lo cierto era que entendía que lo estuviera, después de todo, no sólo no había respondido su mensaje, sino que además parecía que había apagado su teléfono. Quizás Dongwoo incluso pensó que no quería hablar con él. Sacudió la cabeza, no, Dongwoo jamás pensaría eso de él. ¿No es así? Angustiado pasó a leer el último mensaje.

"De: Mi DinoWoo-hyung (22:41)

Hoya si no quieres hablar conmigo está bien, pero al menos deberías dar señales de vida. Solamente con decirme “hyung estoy bien” o “no me molestes, estoy con Seo In Guk” es suficiente. Solamente quiero saber si estás bien…
Dongwoo."

Y su alma se cayó a pedazos… ¿De verdad Dongwoo había llegado a pensar eso? ¿Que no quería cogerle el teléfono o que lo había apagado a propósito? Se quedó quieto, sin mover ni un solo músculo, con la vista perdida en la pantalla del teléfono. ¿Y qué era eso de estar con Seo In Guk? ¿Acaso pensaba que apreciaba más al actor que a él? No podía creer que de verdad hubiera llegado a creer algo así. Cuando siempre le había dicho a Dongwoo lo importante que era para él. Se sentó en la cama y, apoyando sus codos en sus rodillas, escondió la cabeza entre sus brazos. 

De pronto su mano izquierda comenzó a vibrar, haciendo que mirara sorprendido el teléfono. Observó la pantalla, comprobando al hacerlo que Seo In Guk lo estaba llamando. Desorientado descolgó el teléfono y se lo llevó a su oreja.

- ¿Hyung?.- preguntó.

- Hoya, te he mando antes un mensaje, ¿estás en casa?.- le cuestionó de vuelta.

- Sí, ¿Qué sucede hyung?.

- Nada, no te preocupes, voy para allá. Te dejaste el guión del siguiente capítulo del drama en el estudio, y saliste con tanta prisa que cuando fui a entregártelo ya no estabas.- contestó riendo.

- Oh, ya veo, gracias hyung.

- Estoy subiendo, estaré frente a tu puerta en un minuto, ¿de acuerdo?.- dijo.

- Oh, no te molestes hyung, yo puedo baj…- comenzó a decir, siendo callado al percatarse de que el mayor había cortado la llamada.- Aish hyung, al menos deberías despedirte antes de colgar.- le dijo al auricular del teléfono sonriendo levemente.

Depositó entonces el móvil en la mesita de noche y se levantó nuevamente de la cama, caminó hacia la puerta, dudando sobre si salir o esperar a que Seo In Guk tocara a la puerta. No había decidido aún cuando el timbre sonó, haciendo que Hoya saliera rápidamente de la habitación. Después del mensaje que recibió del rapero lo que menos quería era que Dongwoo supiera que el actor se encontraba frente a la casa. No obstante, al parecer su suerte estaba de vacaciones, ya que, una vez estaba llegando hacia la entrada, se percató de que alguien ya había abierto, y que ese alguien era Jang Dongwoo.

- Oh, tú eres…- se escuchó la voz del rapero.

- Hola, mmmm… Eres Dongwoo-ah, ¿cierto?.- preguntó sonriente, el menor asintió.- Encantado, soy Seo In Guk. Esto… ¿está Hoya en casa?.

- Estoy aquí, hyung.- dijo acercándose a él. Seo In Guk le miró aún con la sonrisa bailando en sus labios.

- Hoya, no puedes ser tan descuidado, ¿entiendes?.- comentó riendo suavemente, Hoya por su parte solo sonrió de forma ladina, sosteniendo su mirada durante unos segundos.

- Ya lo sé, hyung. Pero realmente tenía prisa.- se acercó a él, bajo la atenta mirada de Dongwoo.- Dame el guión.

- Toma.- se lo entregó y posteriormente le acarició la cabeza de la misma forma que acariciaría a un cachorro.- Pero la próxima vez te haré venir a casa a por él.- Hoya simplemente dejó escapar una risa incómoda y miró a Dongwoo, quien desvió la mirada hacia el salón. 

- No te preocupes, hyung.- dijo, aún observando al rapero.- La próxima vez no lo voy a olvidar.

- Eso espero. Bueno, ahora tengo que irme.- comentó el mayor y Hoya giró su mirada para observarle.- No olvides descansar bien, mañana es una grabación muy importante y especial ya lo sabes.- rió entre dientes, mientras el bailarín se sonrojó ligeramente. Dongwoo por su parte volteó su cabeza hacia ellos al escucharlo y los miró a ambos con el ceño fruncido, sin entender a que se había referido Seo In Guk. Sin embargo, cuando observó la escena frente a sus ojos deseó no haber girado su cabeza porque, justo en ese instante, se encontró al orgulloso y masculino Hoya sonrojado por alguna cuestión desconocida para él. 

Continuará...