Prólogo: Amo el destino
-Un día cualquiera, hace bastante tiempo (…)-
-pequeño, te ayudare y cuando seas mayor me devolverás el favor….
-está bien, pero solo si nos llevas a los dos
El pequeño tomó la mano de su amigo que se encontraba escondido a espaldas de él mientras conducía una mirada expectante al anciano con el que conversaba
El pequeño pudo notar que esta persona con la que había conseguido ayuda no era para nada “buena”, como lo diría el a esa edad, pero era morir de hambre o eso, esta podría ser su última oportunidad de sobrevivir para él y su amigo
-Otro día, hace bastante tiempo en otro lugar-
-yaaah!!!!! Niño devuelve lo que te robaste!
Aun se escuchaba parte de los gritos del vendedor, el pequeño con comestibles en las mano corría desesperado a toda la velocidad que permitían sus piernas, lamentablemente se tropezó en el peor momento cuando ya venía la policía muy cerca, a pesar de esto sin rendirse aun, intentó pararse pero le fue imposible , por lo que cerró sus ojos con fuerza ya dándose por vencido y esperando por las consecuencias , en el último instante alguien lo tomó y se lo llevó en su espalda hasta un pequeño y estrecho callejón , en donde ambos se quedaron ocultos en silencio.
Cuando ya había pasado el peligro un niño un poco mayor que él lo dejó sentado en el suelo y comenzó a revisar como se encontraba su tobillo….
-Te duele mucho?
-No demasiado, dime porque me ayudaste?
-supongo que porque ambos estamos igual, tenemos que ayudarnos, no crees?
-entonces, me puedo quedar contigo?
-claro, como no estar contigo
De pronto un policía junto al hombre propietario de la tienda aparecieron por la entrada del oculto pasadizo
-pequeño, de verdad creíste que no te encontraríamos?
El mayor se puso por delante del más pequeño impidiendo el paso de los adultos que lo buscaban, sin embargo fue ignorado, empujado y botado al suelo por el oficial, que luego de esto se preparaba para agarrar al menor y llevárselo.
Fue detenido por una cansada pero a la vez estruendosa voz, algo siniestra
-SEÑOR! DETÉNGASEE!
De la nada apareció un señor ya más o menos de edad
-disculpe las molestia mi nietos son muy traviesos, si gusta le pago lo que llevan.
El anciano le entregó el dinero y el oficial se despide cordialmente de él ya partiendo en otra dirección….
-por que nos ayudó?
-ahora ambos me deben un favor, vengan conmigo los ayudare, y cuando sean mayores me devolverán el favor
El anciano le tendió una mano al mayor pero esta fue rechazada
-…..nos vamos? –dijo el mayor lleno de autoridad frente al anciano que no le había dado ni un poco de confianza y agarrando firme la mano del menor que aun estaba un poco asustado
--Actualidad—
POV DaeHyun
No puedo creer que haya pasado tanto tiempo, tal vez fue casualidad o los famosos juegos del destino los que nos trajeron hasta aquí, en ese caso yo amo el destino porque gracias a él lo conocí, a mi amor secreto, mi lindo y apreciado Jae, se que aun no puedo demostrarte lo que siento solo por miedo de que te alejes de mi
Cuando éramos niños y te encontré no dude ni un segundo en salvarte y agradezco mi mente de niño en esos tiempos
El señor que nos recogió hasta ahora se ha portado bien con nosotros y cuando llegamos a su casa había 2 niños más, uno grande y uno pequeño, nos hicimos muy amigos de ambos y hasta ahora hemos vivido bien, creo no arrepentirme y tu tampoco, sin embargo aún nos queda pagar la dichosa deuda que tenemos con este señor y aun no se que sera, de verdad si es algo peligroso te dejare a ti fuera y pagare solo yo.