Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

VOLVIENDO A CONFIAR por jennygt

[Reviews - 27]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Los personajes no me pertenecen, sólo los tomé prestados de su creador Rumiko Takahashi para crear este Fanfic.

Notas del capitulo:

Sessumaru creía que conocia a su mejor amigo, pero lo que está por hacerle no tiene nombre.

El inicio

 

Seshomaru, un chico de unos 22 años, de cabellos largos color blanco, con unos rasgos muy inusuales, tenía una media luna marcada en la frente y unas líneas en sus mejillas. Era realmente hermoso, de tez blanca y rasgos delicados, un cuerpo delgado pero bien formado. Recién graduado de sistemas de la universidad, llevaba dos meses trabajando en una compañía de diseño gráfico. Estaba concentrado analizando unos datos cuando lo llamaron del departamento de diseño porque uno de los computadores estaba fallando. Él aún no conocía a todo el personal de la compañía y como era la hora del almuerzo sus compañeros no se encontraban por lo que le tocó ir a él. Le fascinaba lo que hacía y se le iba el tiempo trabajando y muchas veces prefería quedarse y salir a comer algo ligero luego. Kogua, un joven diseñador gráfico de unos 25 años, de cabellos color negro largo, atado en una cola alta y unos hermosos ojos como grises, jefe del departamento de diseño de la compañía, estaba tratando de terminar un trabajo que tenía que entregar esa misma tarde cuando, de un momento a otro, su computador empezó a fallar. Ya se estaba desesperando. Era un cliente muy importante y si no entregaba a tiempo el trabajo, podrían perder el contrato y sería despedido, así que llamo al área de sistemas por ayuda.

Hola, habla Kogua. Mi computador está fallando y necesito entregar urgentemente un trabajo. Se escuchaba realmente desesperado. Espero no se haya borrado la información o me suicido hoy mismo. ¿Podrías venir alguien a ayudarme?

Hola, hablas con Seshumaru, si quieres yo te puedo ayudar. Ya voy para allá.

Sí gracias, por favor ven pronto.     

Seshumaru se dirigió rápidamente a donde se encontraba Kogua, pero como no conocía bien el lugar se perdió un poco. Estaba muy nervioso, era la primera vez que tenía que ir a otra área a solucionar algún problema, todavía estaba en periodo de entrenamiento y conociendo los procesos y programas de la compañía. Pero creyó que este era un problema fácil de solucionar así que se arriesgó. Cuando por fin llegó y encontró a un desesperado Kogua gritándole e insultando al pobre computador y caminando de un lado a otro. Por qué no llega. Me van a correr, me van a correr. ¿Ahora qué hago? Si se pierde esa información me cuelgan. Seshumaru no sabía si hablar o no, no quería que se desquitara con él. Pero no hubo necesidad porque después de un rato, Kogua volteó a ver y allí lo encontró.

Cuando Kogua volteo a ver a Seshumaru no podía creer lo que veía, nunca había visto tanta belleza. Quedó sin aliento al ver ese hermoso rostro que se encontraba frente a él. La rabia se desapareció. Simplemente no podía dejar de mirarlo.

Hola, soy Seshumaru, de sistemas. Perdona la demora es que no encontraba el lugar. Llevo poco tiempo aquí y apenas estoy conociendo todo.

No…no te preocupes. Logró articular Kogua después de unos segundos. ¿Cómo estás?, mi nombre es Kogua y bienvenido.

Es muy guapo. Decía Seshumaru para sí mismo.

Seshumaru empezó a ver de qué trataba el problema y cómo lo pensó antes, era algo muy sencillo. Ves, era sólo eso. No perdiste ninguna información, puedes seguir trabajando sin problemas.

Me salvaste la vida, muchas gracias. No sé cómo agradecerte. ¿Qué te parece si te invito a tomar algo después del trabajo?, conozco un café cerca de aquí, a mí me encanta ir allá. Debemos ir y así te voy contando un poco más sobre la empresa y de todos.

Seshumaru estaba algo sorprendido por la invitación, pero le pareció una buena idea, así que aceptó dirigiéndole una sonrisa de la que Kogua quedó embobado.

Bien, entonces nos vemos a la salida a las 5, ¿Te parece?

Sí, me parece bien.

A las 5 se encontraron a la salida y se dirigieron al café, hablaron por horas. Seshumaru le contó sobre su vida hasta el momento. Que sus padres habían fallecido en un accidente hace menos de un año y le dejaron la casa en la que vivía con ellos y una pequeña herencia que le sirvió mucho para poder terminar sus estudios, que tenía poca familia y que no vivían en la ciudad. Kogua le contó sobre su vida. Que su familia fue de escasos recursos por lo que para pagar sus estudios universitarios le tocó trabajar. Por lo que toda su carrera la estudió en la noche mientras trabajaba en el día, qué había empezado a trabajar en esa empresa como mensajero y que ahí fue donde le empezó a gustar el diseño así que se decidió a estudiar eso. Cuando estaba en mitad de la carrera lo contrataron como asistente de diseño y ya llevaba cuatro años en el área y que hace un poco más de un año fue ascendido a Jefe. Y después empezó a contarle sobre su fascinación por los lobos, y que hasta tenía uno de mascota pero que era indefenso, no le hacía daño a nadie, que era su fiel mascota y amigo. Así transcurrió la noche pero ya se estaba haciendo muy tarde y tenían trabajo al otro día así que decidieron salir nuevamente para seguir hablando y conociéndose.

---

Seshumaru estaba en el aeropuerto esperando que llegara su mejor amigo de un viaje de trabajo por casi un mes. Ya los pasajeros estaban saliendo y Seshumaru miraba hacia todos lados buscando a su amigo.

Naraku, Naraku. Gritaba Seshumaru desde muy atrás saltando y agitando su mano en lo alto para que su amigo lo viera ya que había mucha gente y él no era muy alto. Naraku cuando lo vio sonrió y movió su cabeza en señal de haberlo visto. Hola Naraku, ¿Cómo estuvo tu viaje? Le preguntó Seshumaru una vez estuvo frente a él y tomando una de sus maletas para ayudarlo. Estuvo bien, sólo fueron tres horas pero dormí muy tranquilamente todo el tiempo.

Me alegra mucho. Tengo muchas cosas que contarte de estas últimas semanas.

Te ves muy entusiasmado. Dejo las maletas en la casa, me cambio, vamos a comer algo y me cuentas. ¿Te parece?

Conozco un restaurante espectacular. Vas a ver, te va a gustar mucho. Dijo Seshumaru muy entusiasmado.

Naraku, un joven de la edad de Seshumaru, un poco más alto que él. Administrador de Empresas. De cabellos largos negros y ojos del mismo color. Ha sido el amigo de Seshumaru desde la infancia, fueron a la escuela, a la secundaria y a la misma universidad, aunque a carreras diferentes. Eran inseparables. Él siempre fue su apoyo cuando perdió a sus padres en ese terrible accidente. Llegaron al restaurante y después de haber comido empezaron a hablar.

Ahora sí, cuéntame qué te ha pasado últimamente. Preguntó Naraku.

No quería contártelo por teléfono o por correo, quería decírtelo todo en persona. ¡Estoy enamorado! Tenía dibujada una enorme sonrisa en su rostro.

¿Qué? ¿Enamorado? A Naraku no le gustó para nada el escuchar esto. Trato de disimular pero su cara de disgusto no pasó desapercibida por Seshumaru quién lo miró un poco consternado.

¿No te alegra la noticia?

No…no es eso…Es que me tomas por sorpresa. Trató de disimular el desagrado al escuchar esa noticia, aunque él también se sorprendió mucho por su reacción. Y ¿Quién es el afortunado?

Trabajo con él. Se llama Kogua. Lo conocí hace un poco más de tres semanas. A los tres días de que te fueras de viaje. Tuve que ir a ayudarlo con un problema que tenía con su computador y ahí lo conocí. Me invitó a salir y empezamos a hablar de nosotros. Nos veíamos todos los días después del trabajo. Me gustó mucho desde el primer momento en que lo vi, pero al conocerlo mejor me di cuenta que es una persona amable, inteligente, madura. Me trata muy bien y es muy dulce conmigo, me hace reír mucho, nos gusta el cine, la misma música. Me siento muy bien con él. Y sin darme cuenta poco a poco me fui enamorando de él. Y a las dos semanas de habernos conocido me pidió que fuéramos novios y acepté muy feliz.

Naraku escuchaba atentamente lo que decía Seshumaru y no podía dejar de sentir más y más rabia. Sabía que él había tenido relaciones románticas antes pero nada tan serio y de ninguno lo escuchó hablar de esa forma, pero se dio cuenta que las cosas iban muy en serio y no le gustó para nada.

Y ¿Estás seguro que él siente lo mismo?

Sí, él me lo ha dicho muchas veces. Todos los días me dice cuánto me ama.

Y ¿Crees que él va en serio? O… ¿sólo te dice eso para tenerte contento y llevarte a la cama? Quería desilusionarlo para que lo dejara.

¿Por qué dices eso? Yo sé muy bien que él habla en serio. Él no es ningún mentiroso. El fin de semana pasado me llevó a conocer a sus padres y me presentó oficialmente como su novio. Sus padres se pusieron muy contentos. Si no me quisiera realmente no se habría tomado tantas molestias. Seshumaru sabía que Naraku desde siempre lo había cuidado, pero lo que dijo de Kogua no le gustó en lo absoluto. Fue muy grosero con él sin siquiera conocerlo. Por eso quisiera que lo conocieras, quiero que se lleven bien. Tú eres mi mejor amigo y él es mi novio. Podríamos salir los tres y divertirnos.

Claro, si quieres nos podemos reunir este fin de semana. Lo dijo con algo de sarcasmo, pero Seshumaru no se dio cuenta.

Ah… este fin de semana no puedo, mejor el otro.

Y ¿Por qué este fin de semana no? 

Es que vamos a celebrar San Valentín, juntos. Él dijo que me iba a preparar una cena en su casa. Y pues estoy un poco nervioso porque sé que es una noche muy especial, también cumplimos un mes de conocernos y queremos tener…nuestra primera noche juntos. Al decir esto se le pusieron rojas las mejillas de la pena. No hablaban mucho de ese tema con Naraku. Esa sería mi primera vez y quiero que sea con él.

Naraku al escuchar esto lo embargó la rabia, no sabía por qué. Desde que eran pequeños, él siempre vio Seshumaru como su hermanito menor al que tenía que proteger. Él era de contextura delgada y no muy bueno en los deportes por lo que siempre tendían a molestarlo. Pero ese sentimiento de protección lo seguía teniendo por su mejor amigo. Inclusive cuando él salía con alguien lo seguía para vigilarlo de cerca en caso de que se quisieran propasar o burlarse de él. O eso era lo que él creía. Pero no era necesario, Seshumaru nunca se vio realmente interesado en nadie. Él siempre era él que terminaba las relaciones. No se había enamorado de nadie y por eso prefería no herirles los sentimientos estando con ellos sin amarlos.

Pues lo que veo es que él sólo quiere burlarse de ti y llevarte a la cama para luego reírse en tu cara y botarte. El sólo de pensar en ellos dos haciendo el amor lo desesperaba. No lo iba a permitir, no quería que eso sucediera. Aunque no sabía por qué.

Naraku, no entiendo qué te está pasando. Creí que te ibas a alegrar por mí. Es la primera vez que me enamoro de alguien.

Lo siento, es sólo que no quiero que salgas herido. Aunque no era por eso que lo decía.

Eso no va a pasar. Kogua no es así. Él me ama así como yo a él. Y discúlpame, pero me tengo que ir. Mañana tengo trabajo. Él estaba más bien indignado por la reacción de su amigo. No le había gustado que lo hubiera tratado así. Por lo que prefirió irse.

Lo siento si te molesté, pero es lo que pienso.

Nos vemos luego. Lo dijo algo molesto y se fue.

---

Pasaron dos días. Ya era viernes y Seshumaru no respondía las llamadas de Naraku, aún seguía muy molesto con él y su actitud. No quería arruinar su romántica noche de San Valentín con Kogua.

Hola, ¿Estás bien? Le preguntó Kogua a un preocupado Seshumaru.

Sí, sí, estoy bien. Es que hace dos días tuve una pelea con mi mejor amigo. Nada importante. No quería decirle la verdadera razón de la discusión, que no le había caído bien Kogua sin siquiera conocerlo.

¿Naraku? ¿Hace dos días cuando fuiste a recogerlo al aeropuerto? ¿Pero es algo que se pueda solucionar?

Sí, no te preocupes, eso tiene arreglo. Primero tiene que conocerte. Pensó.

Mañana es nuestra cena juntos. Le dijo con una sonrisa muy pícara Kogua a Seshumaru mientras se acercaba a él y lo abrazaba por la cintura dándole un beso muy apasionado. Cuanto diera porque ya fuera mañana.

Yo también quisiera que ya fuera mañana. Te amo. Y así duraron un buen rato, abrazados y dándose muchos besitos.

La cena era al día siguiente, así que Seshumaru se fue a hacer algunas compras para esa noche especial. Llegó a su casa y se acostó a dormir esperando con ansías a que llegara el otro día.

---

Naraku estaba muy molesto. Como era posible que Seshumaru no le contestara ninguna de las llamadas que le había estado haciendo desde hace dos días. Que no le quisiera hablar y todo por culpa de un completo desconocido. Pero ese tal Kogua me las va a pagar.

Era viernes en la noche. Naraku se había encontrado con unos amigos de la universidad y se fueron a tomar. Eran unos amigos que a Seshumaru nunca le gustaron porque siempre que salían todos juntos tomaban hasta quedar completamente borrachos y hacían muchas estupideces en ese estado. Una vez Naraku pasó una noche en la cárcel debido a una pelea con otros hombres en un bar en donde uno de ellos resultó herido. Naraku se embriagó esa noche. Era casi media noche y empezó a llamar a su Sechumaru, pero como raro, no le contestó. Estaba furioso, y con los efectos del alcohol se puso peor. Sin pensarlo se fue del bar donde estaba con sus amigos y se dirigió a la casa de Seshumaru. Era un poco más de media noche cuando Naraku llegó a su casa y empezó a tocar la puerta muy fuerte y sin parar.

Ya voy, ya voy…Gritaba Seshumaru mientras corría bajando las escaleras. Cuando abrió la puerta se sorprendió de ver a Naraku allí y en el estado en que estaba.

¿Estás bien Naraku? ¿Acaso estuviste tomando?

Estaba con mis amigos de la universidad. ¿Algún problema con eso?

Sí Naraku, siempre que te reúnes con ellos terminas así. Borracho. Yo creo que lo mejor es que te vayas para tu casa y duermas para que se te pase.

No me voy a ir sin antes hablar contigo.

Yo no quiero hablar contigo estando así, Naraku. Hablamos mañana cuando ya estés lúcido. Oh no, mañana no. Lo pensó acordándose de su cena. Mejor la próxima semana.

Claro, no me acordaba. Es cierto, mañana es tu “cena romántica” lo dijo haciendo la seña de las comillas con las manos levantadas.   

Sí, es mañana. Bueno, hoy. Ya es más de media noche.

Pues no quiero que te veas más con él. Él sólo te quiere llevar a la cama.

¿Sigues con eso? Tú no lo conoces como yo. No tienes por qué hablar así de él. Él sí te quiere conocer.

PUES YO NO QUIERO CONOCERLO. Lo dijo gritando a lo que Seshumaru dio un paso tras un poco asustado de la mirada llena de furia que nunca antes había visto en su amigo.

Pero claro, te gusta que te endulcen el oído para llevarte a la cama. ¿Por cuántas camas has pasado entonces? Según sé, todos con los que has salido te han dicho que te aman. ¿O sea que es mentira eso de que eres virgen? lo dijo sonriendo de lado.

Seshumaru no podía creer lo que le estaba diciendo Naraku. Tú me conoces muy bien, sabes que yo no soy así. Mejor vete para tu casa. Hablamos luego. Iba a cerrar la puerta pero Naraku lo impidió abriéndola de un solo golpe y entrando a la casa para luego cerrar la puerta tras él.

Te dije que no me voy sin antes hablar contigo. Esa mirada que Naraku le dio a Seshumaru hizo que él se estremeciera. Era la primera vez que Naraku le producía miedo.

Naraku, por favor, vete, mmmeeee…estás asustando. Te prometo que hablaremos mañana muy temprano. Pero ahora ve y descansa. A Seshumaru le temblaba la voz al hablar, pero tenía que hacerlo entrar en razón.

¡Muy temprano! Veo que no te quieres perderte la revolcada que ¡ESE! te va a dar en la noche. Lo hizo poniendo énfasis y un tono más que molesto.

ÉSE, cómo tú dices es MI NOVIO y quiero que él sea mi primera vez porque lo amo y él también me ama…No entiendo cuál es tu problema.   

PORQUE YO QUIERO SER EL PRIMERO. NADIE MÁS. Porque yo sí te amo te verdad, no como ése que sólo quiere que tú le calientes su cama y ya. Se iba acercando poco a poco a Seshumaru. Además, yo puedo hacer que sientas lo que es tener a un verdadero hombre entre tus piernas.  Se había acercado a Seshumaru para besarlo pero este lo empujó haciéndolo chocar con la pared lo que lo enfureció aún más.

¡VETE DE MI CASA! No creía lo que escuchaba. Ahora temía lo peor. Quería que se fuera ya. Así que prácticamente se lo gritó señalándole la puerta.

No me voy a ir sin antes conseguir lo que vine a buscar. Se abalanzó hacia Seshumaru quién lo recibió con un puño en la cara que lo hizo sangrar y cayó arrodillado al suelo. Naraku se levantó furioso, se fue contra Seschumaru y empezó a golpearlo. ¿Así que lo prefieres a él que a mí? Seschumaru cayó al suelo de un fuerte golpe que recibió en el rostro. Aaaahhhhh, Seshumaru gritó al sentir como un hueso de su brazo se partió al golpear con el borde del escalón de la escalera. Ya allí Naraku lo empezó a patear por todos lados, no estaba midiendo sus fuerzas ni las consecuencias. Se escuchó como más huesos eran partidos y a un Seschumaru llorando y rogándole para que se detuviera. Naraku, por favor, detente. Por favor, no me hagas esto. Yo te quiero, tú eres mi mejor amigo.

Al escuchar esto Naraku se detuvo y lo cogió del cabello haciendo que lo viera al rostro. Hoy te voy a hacer pasar la mejor noche de tu vida. Sólo disfrútalo. Lo arrastró por las escaleras hasta su habitación en donde lo arrojó a su cama e inmediatamente empezó a desnudarlo sin nada de cuidado por lo que rasguños fueron dejados por todo el cuerpo de Seshumaru. Naraku se incorporó un poco para él también desnudarse rápidamente. Posicionó a Seshumaru sobre su espalda mientras que en el proceso lo seguía golpeando ya que él no quería dejar de gritar y forcejear. Naraku, por favor, no me hagas esto. Yo sé que tú no quieres hacerlo. Sólo estás borracho. Detente, por favor. No le diré a nadie. Le suplicaba Seshumaru ya con sus últimas fuerzas y sin parar de llorar. Estaba sangrando por la nariz y por el labio. ¡NO!, yo quiero estar contigo. Te amo. Le dijo Naraku mientras le acariciaba el rostro.

Naraku, yo también te amo pero sólo como mi amigo. No lo hagas. Sólo vete. Yo siempre te dije que quería que mi primera vez fuera con alguien que yo amara y amo a Kogua y me estoy guardando para él. Lo amo y con él quiero estar. Por favor entiéndelo. Creyó que así podría llegarle al corazón pero no debió haberle hecho. Tú sólo vas a ser mío. ENTIÉNDELO TÚ. Le gritó seguido de un fuerte golpe en el rostro.

Seshumaru cayó inconsciente pero no por mucho tiempo ya que reaccionó a los pocos segundos debido a un fuerte dolor en su parte baja. Duro unos segundos en darse cuenta el porqué del dolor, cuando sintió a Naraku moverse dentro de él. No lo podía creer, su amigo de toda la vida lo estaba violando, lo estaba lastimando tanto con cada movimiento que hacía al entrar y salir de él una y otra y otra vez. Era muy doloroso, no estaba teniendo nada de cuidado, en esos momentos el deseo y la excitación lo gobernaban. Seshumaru no podía ni hablar debido a la cantidad de dolor que estaba recibiendo, solo emitía ruidos ahogados en su garganta, mientras lo embestía con fuerza y lo besaba y tocaba con una mano mientras que con la otra tenía sus manos sujetas por encima de su cabeza. Así duro varios minutos hasta que se derramó en su interior y salió de él sin nada de cuidado, cayendo sobre él para tratar de recobrar el aliento. Pero no le soltó las manos. Seshumaru sólo lloraba. Ahora lo volteó y empezó a besarle la espalda mientras le retiraba su largo cabello blanco de la espalda, poniéndolo a un lado.

Naraku…por favor detente…Ya no más…Déjame…por favor…vete…no me lastimes más…Lo decía con algo de dificultad y entre sollozos.       

No te estoy lastimando. Te estoy demostrando cuánto te amo. Seguía besando su espalda y recorriendo su cuerpo con sus manos. Y te lo voy a demostrar las veces que sean necesarias. Con esto levanto sus caderas un poco y volvió a penetrarlo. Ahora Seshumaru lloraba y lloraba en la almohada. Y así transcurrió el resto de la noche. Naraku le demostró varias veces cuanto lo amaba y lo golpeaba cada vez que trataba de resistirse. Seshumaru ya no aguantaba más dolor y sufrimiento así que antes de que Naraku terminara de ultrajarlo, perdió el conocimiento. Naraku termino derramándose nuevamente en su interior, lo besó, se levantó, se vistió y cuando volteó nuevamente a ver a su “amigo” se horrorizó con lo que vio. Al parecer entró en razón al ver a un Seshumaru cubierto de sangre en su rostro y cuerpo, además de las sábanas. Al darse cuenta de lo que hizo llevó las manos a su cabeza y empezó a llorar de la preocupación y el arrepentimiento. Seshumaru, Seshumaru. Le decía mientras lo tocaba como tratando de despertarlo. Pero no lo hizo. ¿Qué hice?, Pero ¿Qué hice? Estaba entrando en pánico creyendo que lo había matado. Cogió el teléfono queriendo llamar a una ambulancia o la policía, pero sabía que lo iban a hallar culpable por lo que se fue corriendo de la casa. Aún era de noche, faltaba un poco más de una hora para que amaneciera. Naraku iba en su carro aún borracho y desesperado pensando en lo que hizo y las consecuencias. Se pasó un semáforo en rojo e iba a más de 160km/h no se dio cuenta cuando venía otro carro y de repente… todo se oscureció.

Notas finales:

¿Y ahora que pasará con Naraku y Sesshumaru? ¿Habrá sobrevivido el accidente? ¿Sesshumaru habrá muerto?

No se pierdan el próximo capítulo. Los estare subiendo cada semana, el domingo. Espero les gute mucho.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).