Yuiiji mando a llamar a Wataru a su oficina. Tenían trabajo pendiente.
-Buenos días Presidente- le saludo como muy pocas veces lo hacía.
-Buenos días Wataru, ya tienes todos los documentos listos para la compañía XX?- pregunto.
-si ya todo está arreglado, incluso conseguí una reunión, aquí esta toda la información- le entrego varios folders.
-Gracias… lo he decidido, el próximo martes me le declarare- dijo serio, Wataru lo ignoro.
-Perfecto, necesita algo más?- pregunto indiferente.
-no, eso es todo- dijo calculando a Wataru.
-bien, me retiro-
-Wataru!- le llamo y este se detuvo. –está todo bien?- pregunto preocupado, ya que su amigo llevaba bastante tiempo con extraña actitud.
-todo está bien, por favor no se preocupe y atienda lo que es más importante para usted primero- sabía que estaba siendo egoísta, pero es que era la única forma de estar cerca del sin problemas. Entraron antes que el pudiese salir.
-permiso!, Buenos días Wataru-kun!- le saludo algo emocionado Yue.
-no me llames por mi nombre, hasta luego- dijo frio y se largo.
-Yue-kun, no le hagas mucho caso, hoy no está de humor- explico.
-ya veo… luego iré a verle- dijo sintiéndose culpable sin real razón alguna.
-no tienes por qué tomarte la molestia- dijo mientras revisaba documentos que se le habían entregado antes.
-lo hago porque quiero!, no es una molestia- dijo con un tono fuerte pero no alto.
-haz lo que quieras- le llego un mensaje en el computador.
*Yuiiji, en el restauran de siempre a la misma hora, lleva a Wataru. Papa*. Suspiro. En el mismo sitio en otro lugar.
-Sr. Shimasu, la joven Sumine le espera en su oficina- le informo su secretario. Y el otro este agradeció.
-Wataru-kun, perdón por tomar de tu tiempo… otra vez- dijo apenada la pequeña.
-no hay problema, igual tenemos cosas importantes que discutir- la saludo y se sentó en su puesto.
-sí, sobre eso… estas seguro de querer tomar esa responsabilidad?- pregunto.
-Sí, está decidido- dijo sonriéndole.
Hace unos días Tomoka fue destrozada a desahogarse con Wataru, ya que aparte de todo lo ocurrido se entero de que estaba embarazada, como no quiere causar molestias decidió no querer contárselo a Yuiiji, para que no criara al niño solo y tuviera un hombre responsable, Wataru le propuso matrimonio.
-pero… y lo que sientes por el…?-pregunto.
-Así está bien, el ya tiene a una persona especial. Sabes que aunque estemos “casados” puedes sentirte libre de enamorarte y encontrar tu “alma gemela”-
-No sé como agradecerte todo esto…- se sentía mal, no quería amarrar a alguien por su bien, ya había pasado eso antes.
-no tienes nada que agradecer, solo quiero que las personas importantes para mí sean felices. Y a tu lado no creo que seré desdichado. Tengo algo para ti- rebusco entre su gaveta.
-Sr. Presidente, ahora mismo mi jefe tiene una reunión con la joven Sumine- le trato de detener.
-ah sí es ella no hay problema- entro sin tocar apenas haciendo ruido.
-Tomoka-chan, me harías el hombre y padre más feliz si aceptas casarte conmigo- el peli-chocone, se quedo estupefacto, viendo aquella escena, su mejor amigo arrodillado, con un anillo de compromiso, y pidiéndole a su ex novia matrimonio. La chica acepto y este le coloco el anillo.
-¿Qué quiere decir esto?- pregunto y los otros 2 se voltearon, quedándose sin palabras la mujer.
-Yuiiji- dijo sonriente- me alegro que estés presente en este momento, Tomoka-chan está esperando un hijo mío, por eso nos vamos a casar ¿verdad?- comento como si fuese la persona más feliz.
-lo siento Tatsuya-kun, la única que no fue seria contigo fui yo. Y por descuido nuestro terminamos así- mintió.
-todo este tiempo. Me han mentido?- pregunto.
-la verdad es que si, la verdadera razón porque cortaron fui yo- dijo Wataru.
-¿Cómo pudieron?…. Te dije que no te acercaras a ella- dijo conteniendo la molesto.
-fui yo quien lo sedujo- dijo en un tono altanero Tomoka.
-te equivocas… me dijiste que luchara por ella, no que no me le acercara. No tienes que molestarte, tu pasabas más tiempo con Yue, y sin saberlo ese tiempo lo aprovechábamos nosotros, todos estábamos bien así- dijo para quitar culpa. Pero no de buena manera.
-La verdad es que disfrutas viéndome mal ¿no es así?- dijo el oji-verde.
-tienes razón, te lo he dicho antes- sonrió burlonamente.
-Bastardo-
-apropósito ya que interrumpiste, que quieres?-
-esta noche nos juntaremos con nuestros padres-
-de acuerdo- tomo de la mano a su prometida. –nos dejarías solo?-
-no les perdonare esto- se hizo el duro y se fue.
-es un idiota…- la chica empezó a llorar y el mayor la abrazaba. –perdóname… por favor- Wataru suspiro.
-podrías dejar de pedir perdón por todo?, te dije que eso no es nada, muy pronto seremos marido y mujer, y te apoyare en todo… así que no dudes en sostenerte- le consoló.
-gracias- rato después se despidieron y llegaron al acuerdo de ir a cenar con su familia en los próximos días, y luego casarse.
“Yuiiji debe sentirse traicionado y no lo culpo… enterarse de algo asi tan de repente. Pero me pregunto si se creyó esa historia tan fácil, lo creía mas calculador… aunque si tiene que ver con lo que digo, es algo diferente” pensó Wataru. Rato después entro a su oficina quitando el oji-azul.
-WATARU-KUN!- grito frente el.
-primero, toca antes de entrar, segundo, no grites frente a otros, tercero, no me llames por mi nombre- dijo tranquilo.
-eso no importa ahora!!, que quieres decir con que te vas a casa con Tomoka-san?- pregunto.
-eso no es de tu incumbencia, te pido que no te metas en mis asuntos- dijo serio.
-no puedo permitir que te cases!- dijo con el seño fruncido, como nunca el Castaño lo había visto antes.
-tú y yo no tenemos nada que ver para imponerme nada!, desaparece- ya estaba bastante estresado como para aguantar otro niño mas. Ya eran bastantes.
-m-me gustas!, ME GUSTAS MUCHO WATARU!- grito todo rojo.