Se levantaba de primero como de costumbre y luego de lavarse la boca e cara se dirigía silenciosamente al cuarto de enfrente, se sentó junto al dormido cuerpo de cabellera rubia que reposaba en la gigantesca cama, le paso la mano por el pelo suavemente, despertándolo milagrosamente en el transcurso, fue abriendo sus azulejos ojos quedándose un poco mas bobo de lo normal al levantarse y ver frente a él a su mejor amigo, se fue sentando mientras bostezaba y se estiraba.
-umm, buenos días Sasuke- saludo sonriéndole con una simple curvatura de labios.
-te quiero besar- soltó de repente acercándose al menor.
-b-bakaa!, q-que dices?!- ese comentario lo tomo desprevenido.
-realmente te quiero besar- repitió viéndole los rosaditos e hinchaditos labios por la reciente despertada.
Le tomo de la nuca, y con su mano libre tomo la del rubio que estaba gagueando pero aparte de eso no hacía nada para detener al mayor, Sasuke no espero juntar sus labios cuando su lengua había lamido los del otro y la adentro en la pequeña boca, el sabor a menta ligado al aliento mañanero del rubio no fue molestia alguna, el azabache no cerró sus ojos del todo, quería seguir viendo el rostro del que ahora profanaba la boca. Se alejaron a tomar aire y el de ojos negros se limito a morderle suave pero apasionadamente el labio inferior al otro antes de pararse y salir del lugar dejando como un estúpido al menor que todavía no se creía lo que acababa de pasar, hacer 2 semanas que se había dicho olvidar cualquier cosa que le haga perder la cordura con su compañero, pero a su mente volvió ese día en que se estaba dejando llevar.
Se sonrojo al máximo llevándose la mano al pecho, jurando que en sus ojos lo único que se podía ver eran un par de espirales por la confusión. No mucho después salió del cuarto, y se dirigió a la cocina a hacer el desayuno ya que el mayor no servía para más que servir un vaso de agua (XD... si Sasu no sabía nada de cocina), el timbre sonó y el azabache se paro del mueble donde leía un libro para abrir.
-buenos días Sasuke, se encuentra mi ototo?- quiso saber mientras observaba el pecho en descubierto del menor que se encontraba solo en bóxers.
-claro, pasa- dijo mientras le daba paso y se dirigió a la cocina asomándose por el marco. –Deidara está aquí- anuncio, sorprendiendo al menor quien apago la hornilla luego de sacar el último pancake, llegando a la sala corriendo.
-Aniki- dijo abrazándolo fuertemente.
-como estas Naru?, que tal todo?-
-bien, entre la universidad, buscar a las ardillas, los domingos “familiares”-rio- mas todos los papeleos que aun ando asiendo de las herencias, y una que otras cositas, me paso los días ocupados, pero así es mejor- dijo lo ultimo con un tono algo melancólico. – y tú?-
-yo… vine a despedirme- dijo algo triste.
-a dónde vas?- pregunto Sasuke.
-a Francia- contesto.
-y que harás ahí?- quiso saber el menor.
-voy a estudiar un post grado-
-y te vas dejando todo?, no tienes un amante?, que hay de la persona que te gustaba?- quiso saber.
-no voy a dejar nada aquí, sabes que no pertenezco a ninguna parte, le estoy muy agradecido a tío Minato, pero no quiero seguir dependiendo más de él, justo como tu… la diferencia es que tienes como mantenerte- rio. –suertudo, y pues, no tengo un novio, y la persona que me gustaba… ya no está- dijo algo adolorido.
-y donde te quedaras halla?- el rubio se preocupaba, después de todo a Dei sí que lo adoraba como hermano.
-aun no lo sé, me hospedare en cualquier lado en lo que busco un lugar- dijo sincero.
-espera un minuto- dijo dejándolos esperando y hiendo al estudio rebuscando entre cajones algunas cosas. Llego hasta el mayor y le paso un maletín y una llave.
-q-que es esto?- pregunto sin entender.
-es dinero, y esta es la llave de una de mis casas, está en Francia… la verdad no te puedo decir en qué estado esta, pero supongo que no puede ser tan malo- dijo pensando. – dentro esta también la dirección de la casa- le sonrió.
-no puedo aceptar esto- dijo apenado el mayor.
-lo dijiste antes, soy un “suertudo”, si te puedo ayudar en algo no hay nada que me haría más feliz-
-p-pero yo-
-acéptalo- le dijo firme Sasuke.
-cuando llegues llámame y… si necesitas de algo mas no dudes en pedirlo- le dio un beso en la mejilla. –Sabes que te quiero mucho Aniki- el rubio mayor le abrazo aguantando las ganas de llorar.
-está bien- hablaron un poco más y se retiro.
-deberías de ponerte algo de ropa- le comento el azabache mientras comía su desayuno junto al menor.
-pero si estamos iguales- se quejo como un chiquillo. El otro solo suspiro, verle el pecho descubierto al rubio solo le provocaba tomar la miel que estaba sobre la mesa para echárselo arriba y lamerlo completito. (xD a quien no?) Al azabache el sonó el celular.
*LLAMADA*
-deja de pensar cosas perversas- le dijeron y este se sonrojo un poco.
-no estoy pensando nada!- respondió.
-ummh, que extraño ya que debes tener cerca a Naru- dijo con una sonrisa malvada?.
-tienes una cámara escondida en alguna parte de mi casa?- quiso saber.
-mmm, quien sabe… no te preocupes, no me molesta ver lo que haces cada día- dijo burlón.
-quieres dejar de adivinar lo que pasa a mi alrededor?- el rubio le escuchaba atento disimuladamente.
-que pasa CARIÑO no me puedo preocupar por lo que es mío?- nótese el sarcasmo.
-claro que si mi AMOR, pero es que no soy tu propiedad- el oji-azul al escuchar a Sasuke llamar amor a alguien le revolcó el estomago enfureciéndolo.
-te veo hoy?- cambio totalmente su tono a como lo es normalmente, seco.
-si- contesto viendo divertido a Naruto. –a qué hora y donde?-
-como siempre-
-okey, nos vemos-
*FIN DE LLAMADA*
-quien era?- pregunto algo prepotente pero con un toque de desinterés.
-quien crees?- respondió con otra pregunta.
-no sé, tal vez tu amante-
-si sabes entonces porque preguntas?- el menor le miro algo mal y se levanto de su puesto tomando su plato, lo llevo a la cocina y apenas salió el azabache lo acorralo en la pared del pasillo camino a su habitación.
-s-suéltame- dijo ya que le tenía agarrado con una mano ambas muñecas sobre su cabeza.
-estas celoso?- quiso saber y el otro bajo la mirada.
Le busco la boca con la propia pero fue rechazado, así que con su mano libre le agarro algo brusco pero sin hacerle daño la cara y le planto un beso, que aunque se negaba a ceder poco a poco no pudo más que fundirse con aquella boca que le reclamaba con persistencia. El mayor metió una de sus piernas entre las del otro, poniéndolo en una situación algo complicada, ya que con su rodilla comenzó a masajear el miembro del menor.
-aah- gemía entre besos, abrió un poco lo ojos viendo al den frente y recordando a Itachi al instante, le paro como pudo. –p-para- pidió con un tono casi de suplica y el otro se detuvo pero sin moverse ni un poquito.
-porque?- pregunto. –lo quieres… si no lo quisieras tu cuerpo no me respondería-
-cualquiera que t-te ponga en esta situación reaccionaria- dijo como defensa.
-mentira, eso no es más que una excusa- dijo presionando la rodilla hacia delante.
-p-porque insistes tanto… d-déjame- trataba de liberar sus manos que fueron tomadas con amabas del oji-negro para evitar ser zafadas.
-te gusto?- pregunto haciendo al otro temblar mentalmente. –antes estabas celoso… no?-
-te dije que no!, deja ya de jugar conmigo Sasuke!, NO TE LA CREAS TANTO!!- se comenzó a mover mas bruscamente. – SI TE CORRESPONDE MI CUERPO NO ES MAS QUE PORQUE TE PARECES A ITACHI, MALDICION!!- soltó molesto provocando que el mayor bajase la cabeza, su pelo le tapaba los ojos.
-así que era eso?- murmuro. –sabes, ahora mismo quisiera violarte hasta romperte el trasero para que te desangraras por puto!- si antes le había roto el corazón ahora se lo había pisoteado, y como el menor no midió sus palabras el tampoco lo haría. Mientras que el rubio nunca en toda su vida había oído hablar así a Sasuke, se sorprendió tanto y se asusto al punto de temblar, con el tono que el otro lo dijo fue tan sádico y descabellan te.
-p-porque te lo tomas ta-tan a pecho… n-no soy más q-que un e-entretenimiento para t-ti- dijo como pudo.
-eso crees?- pregunto encarándolo con la mirada más cruel que tenia, apretando el agarre en las muñecas.
-s-Sasuke… por favor- pidió con ojos acuosos, el azabache llego hasta el cuello del rubio mordiéndolo al instante y dejándole una serie de chupones. –me duele… me duele-
-Naruto… perdóname si?- pidió apoyándose en el pecho desnudo del “abusado”. –es que me sacas de quicio… a veces eres de lo peor- libero el agarre recibiendo al instante un puñetazo.
-CONOCE TUS LIMITES!!!- le grito antes de ir corriendo a su habitación y trancarse en ella.
El Uchiha se pego contra la pared unas cuantas veces, porque había perdido el control así?, se supone que uno no debe dañar a lo que quiere proteger, porque se tenía que dejar llevar por tonterías, porque al final eso eran, ya que el mas que nadie debería saberlo, en situaciones comprometedoras el no es “Sasuke” es Itachi, y las cosas parecían no cambiar, porque cuando creía que podía tener una oportunidad todo salía al revés?, debería ya desistir de ese amor a la fuerza?, debería dejar que el rubio que tanto ha amado se quede atrapado en el pasado o que encuentre la felicidad junto a alguien más?, el era tan poca cosa, de verdad el no podía darle de beber ese amor que muere por salir, al final lo más sencillo parece que es dejar a ese “amor” ahogarse.
Como podía ser, su corazón estaba cediendo a las provocaciones de su mejor amigo, pero su conciencia no le dejaba quieto, estaría traicionando su amistad y a su amado, además de todo Sasuke amaba a alguien más, el no podía ser un amigo sexual como lo era otro, en caso de querría su corazón… su corazón?, pero que estaba pensando, el estaba claro que le mintió cuando dijo que reaccionaba por que se parecía a su hermano, aunque a simple vista fueran casi exactos, estaba claro que no, eran totalmente diferentes, y eso era a lo que más le temía, su mente le jugaba sucio, el no podía enamorarse del azabache, no podía, pero si quería?, en ese momento no quería amar a nadie, no debería amar a nadie, el ya ama a Itachi, entonces porque?, porque si sabía que lo amaba no podía evitar querer poseer al menor de los Uchiha.
-Naruto…- le llamo luego de tocar la puerta. –no te hare nada, puedes abrir?- pregunto tranquilamente.
-no te tengo miedo- murmuro al abrirla. –que quieres?-
-ya medite lo sucedido… y creo que es mejor que me mude de aquí- el menor proceso lo dicho.
-n-no tienes porque… si ya entendiste que estuviste mal, no te vayas- pidió.
-dobe- le acaricio la mejilla. – porque me quieres aquí?- aun estaba esperanzado. “increíble” pensó.
-porque eres mi mejor amigo!... está bien tener aquí tu presencia-
-lo dices por eso o porque no podrás ir a verme dormir?- pregunto con la mirada apagada. El rubio puso su mano sobre la del otro apachurrando su mejilla con aquella caliente palma.
-solo… quédate- no sabía si era estúpido o que, no podía negársele, no podía negarse a aquellos ojos que le miraban tan cálidamente, solo estaría cavando su propia tumba si se quedaba, pero ya eso no le importaba, al menos de alguna forma… era necesitado. –También estuve pensando- volvió a hablar. – se que amas a alguien, así que mejor olvidemos lo que ha pasado hasta ahora- dijo aguantando la respiración por los nervios.
-y si te dijera que si me dejas ser tu novio lo olvido?- quiso saber. Al rubio se le acelero el corazón al oír aquello, pero aun así bajo la vista.
-también le dices eso a tu “amigo sexual”?- pregunto sin creerlo. –es tan poco el graaaan amor que me dijiste le profanabas a aquella persona?!-
-solo bromeaba- dijo un poco divertido levantándole el rostro al menor. –pero estarás expuesto a cada momento, ya que no pienso contenerme si me dan ganas de besarte- le robo un rápido piquito (beso xD). –Como ahora- le pico un ojo y dio media vuelta.
-t-TEMEEEE!!- grito molesto.
-llegaras tarde a clases- le dejo saber antes de salir de la casa tomando la llave de su carro en el transcurso.
El azabache llego a la universidad en su carro BMW Z4 2010 azul bolita, como siempre llamando la atención, de las chicas mayormente. Tomo su cátedra y llego a su curso al tiempo que llegaban Gaara y Tenten, se sentaron cerca, después de todo eran amigos a su manera.
-pareces de buen humor- le dijo el pelirrojo.
-en serio?!- pregunto la chica viéndolo igual que siempre.
-no ha sido el mejor de los días, pero definitivamente no el peor- comento el azabache.
-será que te declaraste?- pregunto desinteresado.
-no es tan fácil- soltó un suspiro.
-de quien hablan?!, Gaara-kun, porque no comparten información- hizo un puchero. –quien te gusta?- quiso saber.
-vamos, que tan malo puede ser?, no es como si te guste un chico!- comento entre risa lo último, pero al ver al mayor con el semblante sin inmutar callo. –entonces si es un chico?- pregunto con una gota resbalándole la sien. –b-bueno… no puede ser tan malo… para que t-te guste, jeje- se rasco el buche con un dedo.
-no creo que sea tan difícil, creo que solo te debes esforzar un poco mas- le apoyo el chico.
-de verdad crees que superar a mi hermano es sencillo?... he tratado de muchas maneras, pero él ni cuenta, como si fuese inmune-
-o idiota- completo; provocando que un suspiro se escapase de los labios del azabache.
Se encontraban en la plazoleta de la uni comiendo como de costumbre Lee, Tenten, Kankuro, Neji, Naruto, Gaara, Sasuke y Sai, conversando de cómo les había ido y insultando uno que otro profesor insoportable.
-CHICOS!!- escucharon gritar a lo lejos una voz conocida. –Vinimos a visitarlos- concluyo Ino saludándolos junto a Hinata, Sasame, Shikamaru y Sakura.
-eres muy ruidosa- comento Gaara.
-se que te hacía falta- dijo sarcástica Ino.
-n-Neji, te molesta que hayamos venido?- pregunto llegando hasta el su novia.
-claro que no- la atrajo hasta si dándole un corto y dulce beso en los labios. –te extrañaba- le dijo confidente al oído.
-y yo a ti- dijo roja como un tomate.
-pensé que se habían visto ayer- intervino divertido Sasuke apoyando su codo en la mesa y su cabeza de la mano.
-nos vemos todos los días- dijo el oji-perla sentándola en sus piernas y abrazarla posesoramente ante la mirada de todos los chicos de la universidad que se encontraban cerca echándole un ojo.
-que amoroso- rio. –Debes estar muy enamorada Hinata- comento para picarla un chin ya que como el se esperaba la chica se avergonzó mucho y solo asintió.
-estas envidioso- le dijo el peli-marrón.
-porque debería de estarlo?- dijo como todo un Uchiha.
-s-Sasuke-kun debe tener una amante- dijo la chica.
-ohh, sii que tengo una, es muy sexy ni te imaginas Hinata, tiene el pelo largo y marrón, las cejas de proporción perfecta, claros ojos, pero lo que más me gusta es que es tan orgullosa- la semi describió, no pudiendo aguantar la risa al ver el rostro de Neji.
-s-Sasuke?- hablo para si Naruto al ver como este reía animadamente mientras hablaba con los Hyuuga, eso le molesto.
-parece que te hace muy feliz… para que rías así- dijo sarcástico en Hyuuga mayor.
-claro, no hay nada mejor que tener quien te complazca- comento.
-Uchiha Sasuke está dándole un cumplido a alguien?- pregunto “sorprendido” el mayor.
-si eso ayuda a la motivación… porque no?- se paró de su asiento llegando hasta donde Hinata donde se despidió de ella con un beso en la mejilla, pero con el mero propósito de que cuando su cuerpo tapara al mayor que estaba bajo ella halarle con los dedos el labio inferior, cosa que no paso por desapercibido para un muchacho de coleta alta y cara de pereza.
-que problemático- articulo mas para sí el chico de antes.
-paso algo amor?- pregunto su novia.
-Sasuke-kun, ya te vas?- pregunto una peli-rosa llegando hasta el azabache.
-ya casi empieza mi próxima clase, nos vemos- dijo antes de irse y despedirse con la mano de todos.
-nee- dijo el rubio llegando hasta donde Sai.
-Naru, ya decidiste hacer un trió con mi amorcito y yo?- pregunto recibiendo como respuesta un puñetazo de parte de su novio, que la mesa completa se riera y que Naruto se negara.
-necesito que me ayudes en algo- los ojos del pálido se iluminaron. –Y no es nada pervertido- le advirtió y el otro puso cara de aburrido.
-vas a jugar conmigo a los investigadores- le dijo en un susurro.
-quieres espiar a alguien?- pregunto alto y claro. Y varios le miraron.
-shhh, bakaa!, cuento contigo o no?-
-claro que si- le sonrió falsamente. – pero que me darás a cambio?-
-te puedo devolver tu regalo, tal vez te sirva más a ti que a mí-
-no me digas que no lo has usado?!- el rubio se sonrojo.
-no soy un masoquista como para necesitar que me amarren como a un cerdo con todas esas cosas que me mandaste, y en caso de necesitar un pene, quisiera el de un amante, no tu set de consoladores de todas formas y colores!- le hablo bajo para que solo él lo escuchase.
-jajajaja, tengo uno igual, así que no te preocupes, tal vez en algún momento lo necesites- le pico un ojo. -te ayudare, pero a cambio me dirás la verdad de lo que paso contigo y Gaara en el pasado- le miro desafiante el chico le miro interrogante pero accedió.
-te he dicho que no ha pasado nada- le dijo el pelirrojo, que les estaba escuchando disimuladamente.
-no me convence- dijo su novio.
La verdad es que en el pasado, cuando Naruto entro al colegio varias semanas después el se le declaro a Naruto, cosa que le sorprendió al menor, pero le resto importancia rechazándolo. Pero un día que estaban en casa del mayor a sus 15 y 14 años de edad, el pelirrojo lo emborracho con la escusa de que le iba a enseñar a beber, el rubio tomo a su amigo, quitándole la “virginidad”, cosa que al otro día no se acordaba, y el mayor decidió guardarlo en su corazón secretamente y olvidarse del rubio, al año de eso, conoció a Sai.
-entonces cuando terminemos de clases te vas conmigo!- le dijo el de ojos azules feliz.
-Naruto- llego hasta el Sasame.
-estas más guapa- dijo viendo más detenidamente a su ex compañera de clases, esta se sonrojo.
-gracias… t-te quería preguntar algo...- dijo misteriosa.
-si?- está bajo un poco la cabeza y lo halo de la mano apartándole de los demás.
-estas saliendo con alguien?- pregunto curiosa. Este negó sin entender muy bien. – t-te gustaría salir conmigo?- pregunto roja.
-n-no sabía que te gustara- dijo sorprendido y esta asintió. – Eres hermosa, pero la verdad es que ya amo a alguien- dijo algo triste.
-quien… quién es?- quiso saber.
-esa persona murió, pero aun así el amor sigue intacto… no puedo salir con nadie- explico.
-e-eso es muy cruel… - le respondió. –pero yo de verdad te quiero… yo te ayudare a olvidarlo- el chico le miro espantado.
-estas mal… yo, yo no quiero olvidarlo, eso nunca- dijo firme, como si le hubiesen ofendido con el comentario.
-entiendo- la chica le dio la espalda y se fue.
A eso de las 6 de la tarde un rubio y un azabache se montaron en un taxi y siguieron a uno que se monto el azabache, llegaron hasta un barrio de mala muerte, y le vieron apearse en un motel, al rato le siguieron entrando al sitio.
-nunca pensé que le quisieras seguir a él…- dijo aguantando la risa Sai. – no me digas que te gusta?-
-claro que no… calla-
-necesitan ayuda?- pregunto un hombre.
-quisiéramos saber el número de habitación del joven que recién entro- pidió el oji-azul.
-y eso como para qué?- curioseo.
-bueno- se apoyo en la meseta Sai. –Es que quedamos en juntarnos todos aquí- le dijo confidencial.
-mmm- el tipo duro unos 5 minutos analizándolos. –Es la 358- término por decir luego de que el rubio le pusiera una pequeña cantidad de dinero sobre el recibidor.
Tardaron unos 10 minutos en llegar al lugar ya que se perdieron en el andrajoso lugar, que para sus sorpresa al adentrarse más al lugar las cosas parecían más limpias y decentes, totalmente diferente. Se apoyaron en la puerta esperando escuchar algo que al rato después pudieron, unos fuertes gemidos y un “Sasuke” la voz le sonaba, pero no era tan claro, y más ligado con los gritos de placer. “exquisito” fue lo que pudo diferenciar de las pocas cosas que dijo su amigo.
-vamos- murmuro.
-tan rápido?, pero quiero ver!!, parece que la pasan bien- dijo con un puchero, pero con el morbo rebosado.
-haz lo que quieras, yo ya no lo soporto- se fue seguido del otro. Estaba molesto, quien era esa persona?, porque estaba con Sasuke… todas las mil y una pregunta le llego a la mente, cuando llego a su habitación se puso ropa de Itachi y se abrazo a si mismo pidiendo perdón a una foto donde salía con Itachi, ese día había sido muy ajetreado y de tanto pensar le dolía la cabeza.
-Naruto?- pregunto al llamar a la puerta y nadie contestarle, la abrió y lo vio dormir, entonces se retiro a pedir algo para ambos cenar. El rubio solo de escucharlo tembló y cerro sus ojos.