En el colegio Joey poco menos que bufaba y Yugi lo miraba con extrañeza pues el otro apenas hablaba y no se mostro cortez con nadie aparte de que lo hubieran readmitido en el colegio nadie sabía porque y miraba a todos los chicos como si le patearan el higado.
Yugi estaba feliz porque habia vuelto su amigo pero el no parecia feliz de haber vuelto.
Salieron al recreo y tres chicos buscando gresca se le acercaron.
-¿Y ustedes que quieren?¿Se les perdio algo o que? –les pregunto.
-Aquí el unico perdido eres tu.No te queremos aquí.Vete-dijo uno de los chicos.
-Con mucho gusto-les respondio el rubio cuando el castaño se interpuso en su camino y mirando a los otros les pregunto-¿A que se refieren?El esta aquí porque yo quiero-.
A todos se les fue el color del rostro y a Joey le enfurecio que el fuera tan temido.
-Oye idiota.Mis problemas los resuelvo yo solito.No te metas-dijo el rubio y el otro le sonrió mientras Yugi llegaba.
-Yo me meto donde se me da la gana perro-dijo el castaño.
-Pues preparate gato para sufrir-le dijo furioso el rubio y se fue seguido por su amigo pero se paro en seco cuando una muchacha corrio a su lado en pos de Kaiba.Era la supuesta novia.
-Hola Seto-le dijo mientras el de ojos azules miraba la espalda del otro que volteo y le enseño el dedo corazón en alto.
A todo esto todos los demas jóvenes estaban desconcertados por el comportamiento exhibido por ambos.
Entraron a clases y después de ellas salieron rumbo a sus hogares y alli los vio de nuevo junto a la puerta.
Seto miraba a la chica mientras ella le hablaba rapido con una mirada de ternera degollada.
Joey sonrio.Tenía una sorpresa preparada.
Fue al telefono que habia en el recibidor de ricos.
15 minutos después Seto estaba cansado de aguantar a esa aburrida para hacer rabiar al rubio y se preguntaba que lo hacia demorar cuando vio a Atemu llegar al porton y le dio mala espina.
Joey salio corriendo y subio en la moto antes de que el otro pudiera hacer nada.
Mientras escapaba del otro tras el motociclista le saludo con la mano haciendo enfurecer al castaño.
-Esto lo pagaras caro-dijo entredientes el castaño pero no sabia que el otro se mudaria ese mismo dia de la casa de sus padres.
Cuando le fue a buscar a casa de Yami este solo se encogio de hombros negando saber donde estaba.
-No tengo la mas remota idea de donde esta-dijo el tricolor.
-Dile que a menos que quiera que lo busque la policia se reporte conmigo-dijo el castaño.
-Tu cuentas su secreto y yo cuento el tuyo dragoncito-le advirtió el tricolor con una malefica sonrisa en los labios y Seto no demostro nada pero dentro sentía que caía en un vacío.
-No se de que hablas-dijo.-Eres un idiota si crees que tienes algo con que amenazarme y si te llegas a meter de nuevo conmigo veras-añadio.
-Palabras de un cobarde nada valen, me dijo mi mama y tu eres un cobarde y un mentiroso.Joey sabe perfectamente quien eres y que lo dañaras.El se sabra cuidar de ti.No tienes oportunidad Dragón Blanco porque el Dragón Negro te dara tu merecido-le dijo el de ojos violetas antes de soltar una macabra risa y azotar la puerta de su apartamento.
Todo daba vueltas para el castaño.
El otro lo sabia todo y probablemente se lo habia dicho al rubio.Ahora el era una presa.Odiaba sentirse descubierto o vulnerable y asi se sentía.
-Idiotas.Me la pagaran-dijo pero era un bluff.No quería admitir que estaba asustado.
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Miraba por la ventana cuando sintio preocupación y un escalofrío lo recorrió.
-¿Qué pasa Joey?¿Sientes frío.Enciendo la calefacción?-preguntó Yugi trayendo una bandeja con te y masitas.
-No.Estoy bien.Gracias por dejarme quedar aquí-dijo Joey.
-No te preocupes-dijo el muchacho con una enorme sonrisa en el rostro.-Ademas mamá creo que estaba mas contenta que yo-dijo el mas chico.
El rubio se sobo la nuca.-Jeje.Creo que le caigo bien-dijo mientras justo entraba la nombrada.Una despampanante rubia de 40 años que era madre divorciada de alta posición en el jet set japonés.Su nombre May Valantine.