“Naruto… te amo” la voz de Itachi resonó en su cabeza luego de que Sasuke hablara, pero ignoro eso por el momento, eso no era lo importante lo importante fue “Naruto, yo… te amo” la confesión que acababa de presenciar, nunca se lo hubiese imaginado. Todo ese tiempo fue él, el mismo era la persona que el azabache había amado, y espera hasta ahora para decírselo.
-por… porque ¿?- preguntaba. –porque lo dices hasta ahora?!- estaba furioso.
-Naru… yo- el otro volteo y por inercia retrocedió, tal vez si las circunstancias hubiesen sido diferentes habría saltado a sus brazos de la felicidad. – Lo siento…- se disculpaba. – se que no soy correspondido- soltó una risa melancólica. –pero simplemente trate de decírtelo de tantas formas… trate de no decir nada… pero solo trate… tenía que decírtelo de la forma más directa para poder sacar este peso- se puso la mano en el pecho. – a-al menos escúchame debidamente- pidió.
-no digas mas…- desvió la mirada. – esto no es posible-
-porque no ¿?!!- quiso saber algo desesperado.
-por muchas cosas… olvídalo- dijo al viento mientras le daba la espalda al azabache que le parecía que en cualquier momento lloraría.
-ENTIENDO QUE NO ME CORRESPONDES, PERO NO ME PIDAS QUE TE OLVIDE TAN FACILMENTE, COMO SI MIS SENTIMIENTOS FUERAN TAN MISERABLES!!- grito a todo pulmón.
El rubio se asusto y un par de lágrimas le salieron, se agarro el brazo con una mano.
-no es eso…- dijo.
-entonces qué?!-
-no puedo permitir que me ames… porque te amo- sintió como lo voltearon.
-c-cuando di- dices que me amas… e-es como yo a ti ¿?- pregunto viendo aquellos ojos.
-…si- lo abrazaron y sintió un dolor inmenso en el corazón, como si un alambre de púa lo envolviese. –pero no podemos estar juntos-
-si nos queremos porque no?, es por mi hermano ¿?-
-Sasuke… -sentía como le abrazaban más fuerte. – eres mi amigo, hermano de Itachi... sentiría que le traiciono… realmente hace tiempo que lo siento- comenzó a hablar. – Tienes una prometida, tu familia se volvería loca-
-eso no me importa… no me importa si estoy contigo-
-mañana me voy del país- anuncio.
-a donde ¿?-
-Sasame espera un hijo mío; nos iremos a Francia-
-estas bromeando… ¿no?- pregunto alejándose y agarrándolo por los hombros.
-no miento- juro que los ojos del otro pasaron a ser rojos.
-COMO DIABLOS PASO ESO?!, NO SABES LO QUE ES UN MALDITO CONDON!-
-ese día estábamos muy bebidos… ella se bebió una pastilla de 24 horas, pero todo tiene riesgo… no es culpa de nadie-
-tsk, ya sabía yo que esa mocosa no traería nada bueno-
-un hijo mío no es nada malo- dijo reprobatoriamente.
-ese no es el maldito punto- lo soltó. – maldición maldición…- se agacho tapándose con una mano los ojos, el rubio estaba boquiabierta escuchando los insultos que el otro sacaba.
-e-estas llorando?- pregunto, y un par de gotas que chocaron contra el piso le respondieron. Sus ojos mostraban un dolor angustiar, se arrodillo frente al que estaba de cuclillas, retirándole la mano. – Lo siento- susurro viendo a aquel frio chico llorar como un niño. – Lo siento tanto- ahora fue al de ojos azules al que se le aguaron los ojos, choco sus frentes.
-me siento tan estúpido- confeso.
-siempre supe que eras un teme- soltó una risita y con sus manos en la cara del mayor unió sus labios, donde ninguno dominaba, solo un beso inocente lleno de amor.
-abre hecho algo malo en otra vida (si, en “tu amor.” Mi otro fic XD) para merecer ser tan desafortunado ¿?- se cuestiono cuando se separaron a tomar aire.
-pues yo creo que tienes bastante dinero- dijo de payaso el rubio si no fuera porque el azabache sabia que el otro solo trataba de subirle los ánimos le hubiese golpeado por dobe ^^.
-esto es una despedida ¿?- el menor no tuvo que decir nada para saber que tenía razón, sintió como le limpiaron las mejillas y le besaron ambos ojos.
Se pararon y el rubio se limpio la cara con las dos manos, llegaron hasta el banco donde el azabache se sentó y el rubio subió sus piernas en él y se recostó del chico. Viendo en paisaje y hablando de tonterías.
-y ese que es ¿?- pregunto señalando a un pajarito.
-es un picaflor- le respondió.
-awww, es muy lindo, quisiera agarrarlo para darle un besito- dijo como un pequeño emocionado.
-eso es prácticamente imposible- rio. –Ríndete- el otro hizo un puchero al oír aquello. –Je, porque no mejor ahorras esos besos para mí- dijo como si nada.
-sino lo pides no se te da- dijo con una risita.
-si me pudieras dar todo lo que pido seria un problema para ti- dijo burlón.
-como el que dattebayo ¿?- pregunto.
-tu vida-
-entonces mátame y tómala- el mayor alzo una ceja.
-tu corazón-
-tendrías que destriparme y sácalo- dijo lógico.
-tu amor ¿?-
-me voy- mintió parándose.
-espera- le detuvo. – Entonces mejor te mato- dijo riendo.
-en serio, deberíamos de irnos… tengo cosas que hacer- comenzó a caminar, mientras el otro le veía con el paso más lento.
-quédate!- pidió. –no te vayas…- el menor volteo y le miro con ojos dolorosos pero decididos.
El de ojos negros corrió hasta él y le beso apasionadamente, con desesperación. Succiono la lengua del más bajo y sus labios, jugó sin hacerle daño, pero el de ojos azules le mordió hasta sangrar, dulce con metálico, así le sabían los besos de Sasuke. Se dejo besar hasta quedar ambos algo sofocados.
-si me condenas a perderte… yo te condeno al pasado- le susurro, ambos se abrazaban.
-por mi está bien…- cedió. Se dieron un corto y casto beso, ambos tenían los labios rojos.
Se fueron, no cruzaron palabra en el camino completo, el rubio dejo a Sasuke con Neji en un restaurante, algo que le molesto, pero que aguanto; al menos ya tenía las cosas claras. Se dirigió al cementerio, no había ido… se sentó frente a la lapida dejando las flores blancas en el piso.
-no había venido- comenzó a hablar al aire. –aunque sé que siempre estas rondando por ahí ¿no?... estas decepcionado de mi ¿?... yo aun ahora te amo con locura- rio. –pero no pude evitar enamorarme de Sasuke… pensaras que es un descarado al venir a decírtelo aquí… y no es que esto me quite un peso, es solo que tengo que ser lo suficiente responsable como para tener los cojones de decirlo directamente- soltó un suspiro. –Aunque tal vez te diste cuenta antes que yo de eso- acaricio la grama. –me haces una falta ufff, increíble, espero que estés disfrutando por halla lo que aquí casi no pudiste; te abras dado cuenta que tus hijos están cada día más inteligentes, y otro que esta por nacer de seguro que será un revoltoso, jeje; y pues tu Ototo-baka tiene una prometida, jaja, ya quisiera ver la cara de la harpía cuando intente calentar a Sasuke y no provoque nada- rio de imaginarlo. – le gusto mucho el jardín, y pues el… el dijo que me amaba; de la misma forma que tu, sorprendente ¿no?, no pueden negar la sangre- se puso un poco serio. – Sasame-chan ella… bueno tu sabes; y sé que soy muy joven, pero también sé que puedo con ello, no se ella, no hemos hablado mucho del tema… es algo complicado- miro el cielo. –me he dejado crecer el pelo justo como tú, pero está claro que no me veo tan guapo… me pregunto si te ponías algo en el ¿…? Es una broma, nee Itachi quiero llorar, pero las lagrimas por ti ya no salen… porque es tan doloroso el haberte perdido, el que los recuerdos estén tan intacto en mi mente y cuerpo, que las lagrimas son muy poco para dejarlo salir. – se paro. – Volveré a traerte flores- vio el nombre escrito con pena antes de retirarse.
Llego a la torre y saco una maleta; donde solo puso lo esencial, se dispuso a cocinar algo para la cena, e hizo una llamada.
>LLAMADA<
-mochi mochi- contesto la chica.
-empacaste ya ¿?- quiso saber.
-no me cabe nada:’O- le dijo melodramática.
-coge ropa para unos días, halla te comprare mas, total que subirás de talla y nada te servirá-
-aww, no lo digas así- dijo con algo de frustración.
-jejeje- rio. –mañana paso por ti… no le has dicho a nadie cierto ¿?- quiso saber.
-no, solo dije que me iba un tiempo con un tío a Alaska por petición de mi padre, y que por lo tanto no estaré en contacto-
-jee, que creativa, bueno… te dejo-
-nos vemos mañana amor- cerro.
>FIN LLAMADA<
Dejo la mesa lista y se fue a bañar, se tomo su tiempo, después de todo, no sabía si algún día volvería a su casa. Salió y se puso ropa de dormir, prendió su laptop y puso música de piano, prendió una vela aromática para relajarse, levanto todo los portarretratos y subió un poco la temperatura del aire acondicionado central, entrando el azabache en ese momento, a la casa.
-cenamos ¿?- pregunto, y el otro simplemente asintió.
-quieres que te lleve al aeropuerto mañana?- pregunto.
-no te molestes, iremos en taxi-
-pero sería mejor no crees?- insistía.
-no quiero… tener que despedirme- dijo pasándole el plato luego de servirle.
-entiendo- se paro y busco en la cocina una botella de vino que abrió.
- y eso ¿?- pregunto.
-pues para que brindamos- contesto sirviendo las copas y pasándole una. –Pues para que tengas éxito con tu nueva familia- dijo con sarcasmo levantando la copa.
-para que encuentres un nuevo amor- copio el acto. Y las chocaron con una sonrisa en sus labios y un par de corazones destrozados.
-terminaste de arreglar las maletas?- pregunto desinteresado luego de un silencio incomodo.
-solo tome lo que necesitaba- contesto rápidamente. – y a ti… qué tal te fue ¿?- curioseo.
-bien- dijo lamiéndose un dedo sucio de la salsa de la comida el rubio rio.
-esta tan bueno que se le olvidaron sus modales Sasuke-sama ¿?- pregunto divertido.
-debería de felicitar al chef- dijo imitando voz grave.
-estará muy complacido- dijo con seguridad mientras se paraba.
-Nar-
-me voy a descansar- le interrumpió. –Buenas noches- se giro. – lo de antes fue una despedida… no intentes pedirme más- dijo cortante.
El azabache le pego fuerte a la mesa, de que serbia saber que estaban mutuamente enamorados si no podían estar juntos ¿?!... apoyo ambos codos de la mesa y entrelazo sus dedos tapándose la mayor parte de la cara y trato de analizar la situación en vano… no podía hacer nada.
El rubio sintió como se le metían en la cama, por inercia se volteo.
-Sas…- abrió los ojos sin terminar de pronunciar el nombre ya que sintió el otro cuerpo muy pequeño. –SASAME ¿?!- dijo reincorporándose sorprendido y medio somnoliento.
-de que te sorprendes si entre sueños casi dices mi nombre ¿?- pregunto con una risita. “no era el tuyo -.-“” pensó el rubio aliviado de no haberlo soltado.
-jeje… que haces aquí ¿?- quiso saber.
-te quise dar una sorpresa y amanecer juntitos- dijo acercándose a los labios contrario que le rechazaron. – q-que?- pregunto.
-es que ya llevo rato durmiendo… no creo que tenga buen aliento- dijo como excusa. Esta suspiro y se acostó. –como entraste ¿?-
-bueno justo cuando iba a tocar el timbre la puerta se abrió y Sasuke se fue- explico.
-a donde ¿?-
-y yo que se…- bufo. –Deberías volverte a dormir- sugirió acomodándose.
El rubio se acostó y luego se paro rápidamente, agradeciendo que las luces estuviesen apagadas.
-s-Sasame… te importaría dormir en el cuarto de invitados ¿?-
-y eso porque ¿?- quiso saber.
-porque hoy quería privacidad…-
-me vas a echar por eso ¿?-
-no te estoy echando, te estoy siendo sincero. Además no creo que vuelva para acá, creo que es justo ¿no?- esta se paro y el menor la siguió escoltándola hasta el cuarto de huéspedes, que apenas llevaba 4 meses hecho ya que antes no era de uso. – Que descanses- esta se acerco y antes de que le besara el rubio le despeino la cabeza y se retiro. Fue a la cocina y tomo un 20onz. Coca-cola (lo siento es que soy adicto a la coke, por lo tanto ellos lo serán ^///^), y fue hasta el balcón donde abrió la puerta de cristal y salió.
El frio viento movía su pelo, el cielo sin luna tan oscuro como… nada >.> debía de dejar de pensar, comenzó a tararear una canción con los ojos cerrados, le abrazaron por detrás, pero esta vez no había duda de quién era.
-pudiste avisarme… sabias que podría ver mis fotos con Itachi y aun así…- dijo con voz cansona.
-um… lo sabía, no lo hizo ¿?... que tonta- dijo divertido.
-que pesado… solo me buscaras más problemas- dijo al tiempo que con su mano libre agarro los brazos que le apresaban.
-hare algo más que te va a molestar- le susurro. Y no le dio tiempo al otro a preguntar ya que un gemido saliendo se sus labios lo hizo temblar.
-q-que… has hecho ¿?- pregunto, ya que el otro le estimulo con su boca el cuello.
-te he dejado una huellecita- dijo picaron.
-UN CHUPON!?- pregunto algo histérico.
-una marca de amor- dijo pegándose más a él. El de ojos azules se rindió, a estas alturas no se iba aponer a discutir.
-debería ir a la cama- dijo sin moverse.
-ven conmigo- el rubio dudo. –Vamos… no hare nada- lo soltó y le tomo de la mano arrastrándolo hasta su habitación (la de Sasu). –Desnúdate- el otro se sorprendió un poco, pero vio en la mirada del azabache ninguna segunda intención así que hizo caso, copiando el que lo pidió el acto. Se acostaron y el menor se abrazo a él silenciosamente.
-Sasuke- le llamo débilmente. –No creo que sea buena idea-
-no te puedes aguantar ¿?- pregunto con una risita.
-quiero tomarte- dijo serio.
-hablas en serio ¿?- pregunto sorprendido.
Un arrebatador beso le respondió, el rubio se acomodo entre las piernas desnudas del más blanco, bajo hasta su cuello donde le saboreo todo lo que pudo, bajando hasta su pecho para concentrarse en un botoncito que parecía ansioso, su lengua acaricio aquello superficialmente para pasar a succionar deliciosamente. Por el silencio que había podía escuchar claramente el fuerte latir del corazón del otro que ya se le estaba complicando el respirar.
-prende la luz- pidió el más bajo. El azabache prendió la luz de la lamparita.
Complacido continuo con su trabajo hasta dejar ambas tetillas paradas, siguió bajando por los pectorales, besándolos y dejando una que otra marca; deteniéndose unos segundos a jugar con el ombligo, sintió como le sacaban de la muñeca su colita y le amarraban el pelo dejando notar la inexperiencia por lo mal (xD), llego hasta el erecto pene del azabache lamiéndolo de la base hasta el glande, mordiendo la punta en el proceso, estiro su mano hasta la boca del otro.
Apenas y comenzó a chupar los dedos que le ofrecían y el rubio engullo su pene por completo, aguantando los gemidos, el sube y baja que tenia entre las piernas no lo dejaba concentrarse en nada mas, sacaron de su boca los dedos, levantándole las caderas.
-tienes un lindo color- dijo pervertido el rubio haciendo sonrojar al otro.
Beso el ano y luego paso su lengua, adentrándola una, otra y otra vez, hasta que lo creyó suficiente entrando un dedo, dándole vueltas circular, luego otro más haciendo movimientos de tijera.
-ah tsk… nmgh- escuchaba los bajitos y graciosos gemidos del mayor, volviéndose a meter en la boca la virilidad del otro al tiempo que lo embestía con 3 dedos. –n-Naru… ya- dijo suplicante pasándole un lubricante.
El rubio dejo lo que hacía, reponiéndose se unto el lubricante en su palo, tomo su pene en mano poniéndolo en la entrada del otro, comenzando a penetrarlo lentamente mientras ahora le sostenía las piernas, veía detalladamente las expresiones del uke, su sonrojado rostro mostraba incomodidad, placer y dolor mesclado, antes de adentrarse por completo comenzó una lenta embestida para que se fuera acostumbrando mejor, se encontraba algo nervioso, no solo por ser su primera vez siendo de Seme con un hombre sino que era con Sasuke y no lo quería lastimar, pero el hecho de que antes haya sido uke ayudaba ya que el sabia como se sentía mejor… ahora que lo pensaba.
-s-Sasuke- le llamo y este con ojos cristalinos le miro. –ya has sido el pasivo antes ¿?- curioseo.
-s-sii - admitió.
El menor sonrió malicioso, en realidad saberlo lo puso celoso a morir, salió casi por completo, y le penetró de una fuertemente entrando por completo, el mayor tuvo que morderse el labio para no gritar y una lagrima se le escapo. Esta imagen le pareció hermosa al de ojos azules. De sus labios resbalo una gota de sangre que fue lamida por el menor quien paso a besarlo mientras abría y empujaba hacia delante las piernas del azabache para tener más acceso a su interior.
-aah- soltó un gemido ahogado al rubio darle en la próstata. –m-más fuerte… ahí- dijo como pudo.
Se masturbaba así mismo mientras su boca era devorada por el que lo penetraba rápida y apasionadamente. Se podría venir en cualquier momento, ya solo sentía placer, y ser tomado por su amado lo hacía más que feliz, el rubio le soltó las piernas y este las enredo en su cadera y paso a abrazarlo soltando suspiros en su oído mientras escuchaba los del otro de igual manera.
-y-ya no aguanto ung… Sasuke- dijo mientras friccionaba el pene del otro con su mano y le besaba el cuello.
Se apoyo con ambas manos de la cama embistiendo más rápido, viéndose ambos a los ojos, Sasuke se vino en su pecho, y al su interior apresar con fuerza la virilidad del otro se vino dentro de este.
-Sasuke- se acerco a los labios de este quien le recibió gustoso, sintiendo la cálida lengua del de ojos negros deslizarse con apego por su interior.
Salió del interior del Uchiha sin dejar de besarse. Se recostó a su lado separándose a tomar aire, el mayor apago la luz, el de pelo largo se abrazo al otro.
-porque lloras ¿?- le pregunto al sentir su cuello húmedo.
-n-no lloro sniff… es b-baba- dijo a su defensa.
-mentiroso- acuso divertido.
-perdóname Sasuke… ahora que lo pienso, te he hecho mucho daño- dijo triste. –p-pero no fue conscientemente… e-era un mecanismo de defensa, soy muy torpe- estaba apenado. –pero sabes que yo…-
-si si- le interrumpió y lo apachurro a él, le acaricio el pelo, la mejilla y sus labios. Hasta ambos quedar dormidos. Se levanto algo alarmado, se alejo de los brazos de Morfeo y se puso rápidamente su piyama, apenas salió al pasillo y a los dos segundos salió la peli naranja de su habitación.
-hace mucho frio- dijo embollada en la espesa colcha aun.
-ahora mismo subo la temperatura- fue hasta la sala donde hizo lo dicho. –Sasame!- la llamo y esta fue. –Voy a hacer el desayuno, tu ve alistándote ttebayo - esta asintió y se retiro.
Apenas termino de poner la mesa, se fue a alistar, salió de su cuarto dejando la maleta en la sala. Desayunaron ambos en silencio, algo muy extraño. El mayor de los dos se paro pidiendo una disculpa, y se adentro al cuarto de Sasuke, la chica le siguió, y se asomo por la puerta ya que estaba media abierta.
-Sasuke- le llamo sentándose a su lado. –Ya me voy- al oír aquello abrió los ojos. Por un momento se había olvidado de eso.
-no podrías despertarme con algo más agradable ¿?- el otro le miro interrogante. –Como con un beso- dijo con una sonrisa. El menor suspiro y se inclino hasta juntar sus labios en un beso que comenzó superficial y termino profundizado.
Se llevo la mano a la boca para no grita, no creía lo que veía, fue retrocediendo hasta dar con la puerta del cuarto del rubio, se adentró y vio detalladamente todos esos retratos de Naruto con otro hombre, abrazándose y besándose, y si no se equivocaba era el famoso difunto hermano de Sasuke, ¿difunto? “esa persona murió, pero aun así el amor sigue intacto…” recordó lo que el rubio le dijo el día que se le declaro. Entonces eso quiere decir que no solo que era homosexual, sino que se tiro a ambos hermanos Uchiha ¿?!, escucho un estruendo y salió del cuarto antes de que le vieran, llego hasta la sala donde vio a una persona.
-buen día señorita- saludo al tiempo que fue hasta el cuarto de servicio y salió con la ropa de ama de casa. –Soy Aoi- se presento.
-y-yo soy S-Sasame, Fuuma Sasame, l-la novia de n-Naruto- dijo algo aturdida.
En otro lugar dos chicos aun se encontraban besándose sin intención de separarse.
-disculpen- dijo tocando la puerta Aoi. No se molestaron en alejarse demasiado, después de todo la mujer no era tan tonta. –Naruto-sama… esa chica, le está esperando- dijo cordialmente.
-gracias Aoi-chan, ya salgo- esta hizo una reverencia y cerro bien la puerta. –nos vemos- dijo parándose sin mirarlo, le tomaron de la mano y tembló ligeramente.
-que tengas buen viaje- el rubio asintió y se retiro sin voltear. Llegando hasta la sala.
-Aoi, gracias por todo hasta ahora- dijo el chico con una sonrisa.
-no, Gracias a usted- hizo una reverencia. –Espero que vuelva pronto- dijo con ternura.
-cuide bien de Sasuke… sabes que puede parecer muy centrado, pero varias cosas se le pasan, en especial comer… no sabe más nada que hacer una tostada- tomo su maleta.
-claro… hasta pronto jovencita- dijo lo ultimo altanera haciendo reír en sus internos al de ojos azules y a Sasame poner una cara de wtf ¿?!
El rubio tomo la maleta de su novia también y salieron de la torre, llamo a un taxi hasta llegar al aeropuerto. Donde en 2 horas de esperar abordar si conversaron 3 veces fue mucho. A la hora de estar en el avión el chico rompió el hielo.
-que pasa ¿?- quiso saber.
-Naruto… tu antigua pareja, quien fue?-
-por qué quieres saber?-
-porque me importa-
-no sé como lo tomarías si te dijese- contesto sincero.
-pruébame- pidió, el chico alzo una ceja.
-era un hombre-
-entonces si eres maricon- dijo herida pero con tono de burla.
-respeta- dijo con una mirada peligrosa, la chica se paralizo. – y no seas estúpida, si fuese homosexual no me excitarías y ni siquiera abríamos salido- dijo cambiando la mirada. – solo me enamore de él, fue inevitable… nunca antes me había gustado un hombre hasta que le conocí-
-y ahora?!- curioseo. El rubio no respondió. –Me das asco- la chica se tapo la boca y corrió al baño a vomitar por el embarazo, y aunque dijese lo que dijo. Ella aun estaba enamorada de él, solo que le daba mucha rabia, lloraba al tiempo que sacaba el desayuno.
-Sasame- dijo con tristeza el rubio ayudándola.
-quieres algo?- pregunto al llegar a su asiento asignado.
-no-
-no quiero que estés ansiosa y estresada durante el embarazo-
-no pidas lo imposible… solo tengo 18 años y tengo que cargar con esto. Y aguantar daños emocionales-
-ahora que lo pienso nunca diste tu opinión… no querías tenerlo ¿?- quiso saber.
-no lo sé- dijo sincera.
-eso es un no- dijo seguro. –se que no es fácil, pero por favor, aguántalo ¿sí?-
-es más fácil decirlo que hacerlo- la chica suspiro. –que pretendes hacer una vez que nos establezcamos… podríamos –
-no me casare- intervino adivinando lo que la otra iba a proponer, esta se altero un poco.
-q-que quieres decir ¿?!-
-que está bien tener un hijo pronto… pero un matrimonio es más difícil que eso-
-me estás diciendo que somos muy jóvenes e inmaduros para una cosa sí y para otra no?-
-exacto- la chica comenzó a decir cosas que este ignoro.
-…no me amas… si quiera me quieres- fue lo último que escucho que esta dijo con dolor. Fingió no oírlo, después de todo ella tenía razón.
-es inmensa- dijo boqui abierta. –Aunque esta algo descuidada- al ver como la casa tenía el jardín con todo lo vegetal casi muerto y regado. El rubio toco el timbre. –tuviste que avisarle… y si no está ¿?- pregunto avergonzada.
-no te preocupes- saco una llave. Y a la chica le cayó una gota.
-porque no abriste y ya ¿?-
-porque es de mala educación- abrió el portón y caminaron hasta la gran puerta principal. Donde toco la puerta y abrieron, el rubio del otro lado se quedo boqui abierta.
-n-NARUTO ¿!?- pregunto sin creerlo.
-hai- respondió con una sonrisa. Y rápidamente sintió como le abrazaron.
Ya adentro el menor le explico a su primo toda la situación, y este encantado de tener cerca a su hermanito entendió y se puso más que feliz, Naruto en una semana ya había contratado varios empleados y puso la casa en condiciones habitables, muchos curiosos se acercaron y conocieron a la cabeza de la familia Uzumaki, sorprendiéndose de que en verdad hubieses un heredero, y entre los más ricos del país corrió la voz, llegándole muchas invitaciones para tomar un té y conocerlo. Salieron los 3 de compras y fueron al médico para ver la condición de la chica, que iba para cuatro meses y todo parecía estar en orden.
-Deidara-san… ahora que me fijo, porque siempre tienes las uñas pintadas de negro ¿?- pregunto la chica.
-umm… la persona que solía gustarme siempre las llevaba de ese color- dijo pensativo. –Me gustaban, tal vez por eso tome la manía- dijo con una sonrisa.
-ahh ya veo… debía de gustarte mucho-
“Ahora que lo pienso… Itachi también las llevaba de ese color. “no tengo un novio, y la persona que me gustaba… ya no está” recordó lo que una vez dijo Deidara antes de irse del país, en aquel momento lo paso por alto… pero no será…” pensaba en shock.
-pasa algo Naruto?- pregunto la chica al verlo aireado.
-d-Dei… q-quien… no puede ser- murmuraba. –Deidara- le llamo más alto y este le prestó atención. –quien era esa persona ¿?- cuestiono, el mayor abrió un poco los ojos, pero desvió la mirada.
-eso no importa- el rubio menor frunció el ceño.
-con estos cinco meses parezco una vaca- intervino la chica sin darse cuenta de la situación. –Es estresante- dijo parándose. –Me voy de compras… me acompañas Deidara-san ¿?-
-no querrás ir con Naruto?- pregunto.
-tiene clases hoy (de arte culinaria “cocina”)-
-está bien- se paró de su asiento.
-aun no me has respondido- dijo el rubio parándose tras él.
-pues sí que me enamore de la misma persona que mi ototo- respondió lo que el otro quería confirmar. –Pero no pediré perdón… paso cuando aun no sabía lo de ustedes- comenzó a caminar. –recuerdas ¿?, el fue del chico que te hable de la fiesta que fui-
-tsk- se mordió el labio.
-tan impresionante era ese chico ¿?- le pregunto Sasame cuando se montaron en el auto.
-creo que de 100% al menos un 93% de las personas que lo conocían caían a sus pies- comento irónico.
-ehh, no me lo puedo imaginar- dijo pensativa. –de seguro tendría un harem de amantes- el mayor negó con la cabeza.
-eso era lo impresionante… no era un mujeriego, solo vivía para su familia, y pues Naruto fue muy afortunado al este elegirlo a él sobre cualquier cosa- dijo con envidia (pero no de la mala). –no me extraña porque aun muerto babea por el-
-no estoy muy de acuerdo- dijo esta.
-porque lo dices ¿?- quiso saber.
-pues lo vi besándose con alguien más- dijo algo molesta.
-eso no tiene que ver… veras, podemos amar a alguien y aun así, desear a otros y querer a algunos… yo creo que cada amor es diferente- le explico.
-pero se miraban tan apasionadamente y cuando Sasuke se lo pidió no se negó-
-Sasuke ¿?!- pregunto algo sorprendido.
-no le digas nada… el no sabe que los vi- soltó un suspiro. –pero no se qué tipo de relación tenían o tienen-
-se que a Sasuke le gustaba, se le notaba a leguas… pero que sepa Naruto no- miro a la chica. –creo que mejor cambiamos el tema. Debe de ser frustrante para ti- esta asintió.
Con el tiempo Sasame se comenzó a volver más histérica, y aseguraba mas que no estaba lista para eso… ella y Naruto si acaso se besaban, esto la ponía en un estado peor, estaba comenzando a no desear al niño y eso estaba volviéndose un problema, con 7 meses iban a la clínica a cada rato ya que esta presentaba complicaciones por su estado emocional, ya que su cuerpo rechazaba lo que había dentro.
-joven Uzumaki, podríamos hablar en privado ¿?- pregunto la doctora, este la siguió dejando atrás a los otros 2.
-que pasa doctora?- pregunto ansioso.
-creo que lo mejor es que el niño nazca prematuramente- aseguro.
-y eso no es peligroso para el ¿?!-
-lo es… pero esa chica, creo que puede terminar matándolo inconscientemente, su cuerpo está comenzando a dejar de alimentar al bebe- explico. –esto puede incluso traerle inmensos problemas a ella, ya que podría quedar infértil o pasarle algo peor- (no c si eso puede pasar en vdd)
-entonces cuando recomienda que sea?-
-la prepararemos ya-
-YA?!- esta asintió. –Por favor se lo podría explicar usted…- pidió penoso y esta accedió.
La chica algo histérica dio su consentimiento, pero más porque estaba harta que por otra cosa. Todo salió sin problemas, el bebe tendría que quedarse un tiempo en incubadora, a Sasame le dieron de alta a los dos días, y dio un grito de alivio, no tomo reposo, simplemente fue al salón y luego de compras, mientras el rubio se la pasaba en el hospital para ver a sus bebito que por cierto era una copia suya, la chica no fue si quiera a verlo una vez desde que salió.
-deberías de regresar con tus padres- dijo el rubio serio al encontrar a Sasame en la sala leyendo una revista.
-que estás diciendo ¿?- pregunto.
-está más que claro que no te interesa el niño- le miro severamente. –vuelve y estudia lo que desees… le diré que su madre se fugo con otro hombre o que murió… como prefieras-
-Naruto que crees que dices ¿?!- pregunto Deidara que lo oyó.
-tú te callas y no te metas- dijo sin mirarle.
-me estas ofendiendo- dijo la chica.
-vamos, al menos se honesta, ya ni siquiera sientes algo por mí, y ves a mi hijo como una carga… hay algo que quieras? Te lo daré, pero no quiero que alguien así de desinteresada lo crie- dijo sincero.
-tienes razón- concordó esta. –Y quisiera que me des a Deidara-
-tómalo- respuesta instantánea.
-Oyeee!- se quejo este.
-era broma- rio Sasame. –no deseo nada… pero me quedare aquí más tiempo-
-yo volveré un tiempo con mi hijo-
-todos sabrán que es mío-
-no se parece a ti… cualquier cosa diré que es adoptado. Vendré para acá, así que es solo temporal-
-que vas a ir a hacer ¿?- curioseo la chica.
-eso no es de tu incumbencia- fue su corta respuesta antes de retirarse.
El rubio fue a comprarle unas cuantas cosas a su hijo… Kyohei, a las 2 semanas le pudieron dar de alta, y apenas salió del hospital y se lo llevo, no dejo que su madre lo viera, ni valía la pena. Apenas llego con el pequeño que parecía un bollito de lo chiquito y mono que era (^///^), por donde caminaba solo con su hijo cargado llamaba la atención. Tomo un taxi y se apeo frente aquella torre, se adentro y un joven por lo visto nuevo le detuvo.
-hacia que piso se dirige ¿?- pregunto amablemente.
-al mío propio- dijo irónico el chico le miro sin entender. –el 8vo. Estuve de viaje, pero puede revisar de quien pertenece, aunque vivía conmigo Uchiha Sasuke-
-a usted vivía con el Joven Uchiha. ¿?-
-no… no me entendió, yo soy el dueño Uzumaki Naruto, y él es el que vivía conmigo- el señor reviso el registro.
-lo siento mucho Sr. Uzumaki- el rubio tomo el ascensor hasta llegar al lugar indicado.
-a ver- suspiro. Y marco la clave 2894827079 y la puerta abrió.
-quien anda allí ¿?- escucho.
-Aoi- la llamo y esta al reconocer la voz llego en un instante.
-NARUTO-SAMA!!- dijo emocionada.
-ñaaa sniff ñaaa( grito de un bebe ¿? XD)- la chica se sorprendió.
-de seguro tienes hambre- dijo el rubio con una risita, sacando del bolso de bebe un biberón con leche materna que meneo.
-y eso ¿?- pregunto la joven sin entender.
-es mi hijo… que no se nota?- pregunto con una risa.
-es hermoso- dijo maravillada, viendo como el enano bebía de la leche que le daba el mayor.
-Aoi que dirías de irte a vivir a Francia ¿?- le pregunto.
-he?, bueno a cualquiera le gustaría señorito… pero no hay suficiente ingresos para eso; además aquí tengo a mi esposo y mis dos hijas- explico.
-y si le propongo venirse conmigo con la oportunidad de llevárselo con usted?-
-me encantaría. Pero hay que ver la realidad, ninguno de nosotros tenemos visa-
-de eso me encargo yo, hable con ellos a ver qué tal les parece la idea-
-sí, muchas gracias- le sonrió.
-y Sasuke ¿?- pregunto.
-b-bueno… el está en su c-cuarto- gagueaba.
-ah enserio ¿?- comenzó a caminar.
-espere…- le llamo. –no creo que sea conveniente-
-esta con alguien ¿?- esta asintió.
El rubio sintió una punzada en el corazón, es cierto que durante los 5 meses que duro fuera no se comunico, pero no hubo un día en que no pensara en el azabache, y el estaba con alguien más… no es que hayan hecho una promesa, todo lo contrario, tal vez si las cosas hubiesen marchado bien con Sasame hasta se hubiese casado con el tiempo.
Camino hasta su cuarto, se adentro, las cortinas estaban abiertas y el cuarto impecable, todo como lo había dejado, dejo el biberón a un lado cuando lo creyó suficiente y mientras veía las fotos comenzó a sacarle los gases al bebe, se fijo en que afuera comenzaba a caer nieve, era cuestión de 5 días para que entrara el mes de diciembre. Eran las 10 de la mañana, con su hijo en brazos saco de una gaveta una llave maestra del apartamento y salió de su cuarto, adentro la llave en la puerta siguiente a esa, abriendo el llavín.
Era cierto que había dos personas en aquella cama, pero al menos tenía la esperanza de que ese alguien fuera Neji, pero estaba claro que no, esta persona era de pelo grisáceo.
-bah ji- el bebe jugaba con sus manitos con el largo pelo de su padre, diciendo incoherencias.
El rubio toco la puerta varias veces hasta que el azabache se fue levantando con los ojos cerrados, antes de mirar a la puerta miro el reloj del buro, se estrego los ojos y bostezo, cuando volteo su cara a su lado izquierdo, sus ojos parecieron tomar orbita.
-Sasuke- le llamo y este abrió los ojos como plato. –Estoy en casa- volteo y cerró la puerta tras de sí.
Estaba requeté nervioso, tomo el bulto que antes dejo sobre la mesa y tomo la llave de su jeepeta, y salió casi corriendo del apartamento, diciéndole un simple “vengo al rato” a Aoi, se adentro al carro, y manejo con cuidado con su hijo en brazos ya que no tenia donde acomodarlo, había hecho mal en volver a su casa ¿?, no era SU casa… pero era lógico que el propósito principal era ver a Sasuke y decirle que podrían estar juntos. Pero y si le decía que ya no sentía lo mismo?, que quería a alguien más?, no le podría culpar. Llego hasta un gran edificio, se aparco y entro, muchos allí le conocían, subió hasta la oficina del presidente.
-Oto-san- el rubio levanto la mirada y vio a su hijo allí, con un bulto en manos y que pareciese que se derrumbaría en cualquier momento.
-que sorpresa Naruto, ven siéntate- pidió, y este hizo caso.
-bah bah- el menor comenzó a pedir atención.
-oto-san… este es tu nieto, Uzumaki Kyohei – le presento sacándole lo que lo cubría, y mostrándole al otro.
-e-es en s-serio ¿?- pregunto impactado.
-si- dijo con una gran sonrisa. El mayor se paro y llego hasta donde se encontraba el peli-largo, cogió en brazos a su nieto de ojos grandes y azules.
-es hermoso- dijo lleno de felicidad. Poniéndose a hablar como tonto y darle besitos, Naruto tomo aire y cerro sus ojos. –Pareces perturbado- dijo el hombre mirándole preocupado.
-solo estoy cansado… acabo de llegar y fue un largo viaje, gracias a dios que el mocoso no pesa nada- explico.
-y la madre de esta criaturita ¿?- curioseo.
-murió-
-QUE SASAME-CHAN QUEEE??- grito histérico sacándole una risa al menor.
-es mala idea ¿?, que tal si mejor decimos que desapareció ¿?- el menor le explico a su padre lo sucedido. Luego fueron a comer y separaron sus caminos, el rubio fue a una tienda a comprar un coche, encargar una cuna, comprarle unas cuantas ropas, lo necesario. Luego fue hacia la casa de Konan, para conocer al nuevo miembro de esa familia, que le habían puesto el nombre de su difunto padre, espero que las ardillas llegaran y paso un rato con ellos, mientras que la mayor cuidaba a ambos bebes.
-tío Naruto tiene el pelo más largo que papa- dijo Lizzy mientras jugaba con el.
-eso crees, pero creo que me lo cortare dentro de poco-
-moo, pero me gusta largo- se quejaba esta.
-me crece muy rápido, así que en caso de en dos años vuelve a estar casi igual- le aseguro.
-niños, ya llego su profesor- le aviso su madre.
-pero me quiero quedar con Naru- dijo Riku abrazándolo por el cuello posesivamente.
-el les visitara de nuevo, vuelen rápido- dijo esta con tono autoritario, ambos se despidieron con este.
-entonces me voy- dijo este parándose y llegando hasta donde la mayor donde acaricio la carita de Itachi y se despidió de la mayor, antes de Salir le puso un corrito y los guantes a su hijo.
Ya a las 6 pm llego a su casa apenas termino de entrar todo escucho a una puerta cerrarse. Un chico peli gris de morados, blanco y posiblemente de su misma estatura salió de uno de los cuartos como perro por su casa.
-y tu eres?- pregunto Naruto sorprendiéndolo y llegando hasta el.
-Suigetsu Hozuki… y tú?- pregunto altanero.
-Uzumaki Naruto-
-no oí que tocaras la puerta, sabe Sasuke que viniste a visitarlo ¿?- al rubio le apareció un (*) de molestia en la frente.
-soy el dueño de este apartamento, no tengo que avisarle a nadie-
-aah, ya veo, sip, ya Sasuke me había dicho eso de que él no era el dueño- dijo pensativo. El bebe comenzó a reclamar atención por lo tanto el rubio se limito a buscar un peluchito y dárselo.
-SUI- grito el mayor.
-lo que me faltaba, hasta con cariño lo llama- murmuro para sí el rubio.
-ya vengo- apenas entro al cuarto del azabache y este salió corriendo llegando hasta el rubio.
-no es lo que crees- se adelanto a decir, provocando que el de ojos azules levantara una ceja.
-¿lo que creo?... qué crees TU que es lo que YO creo??- pregunto con sarcasmo.
-no tengo nada que ver con ese chico-
-eso es muy cruel Sasuke-kun- dijo simulando melosidad el de ojos morados.
-bueno… él era uno de mis amigos cercanos en mi otra escuela- explico. –pero nunca hemos hecho nada, ni me interesa, debes creerme- el rubio tomo el coche y comenzó a caminar a su cuarto mientras el otro le seguía.
-tsk… y que hace aquí ¿?-
-vino a pasarse unos días-
-porque razón ¿?-
-porque está de visita!-
-y porque dormían en la misma cama y no el en la de visita ¿?- preguntaba sin mirarlo.
-porque anoche nos dormíamos mientras hablábamos-
-te creo- dijo desconfiado. Y sintió unos brazos apresarlo. –Sasuke… aun me amas?- quiso cerciorarse.
-cada di mas- le susurro dulcemente. El rubio soltó un suspiro. –estabas preocupado? Jeje-
-pues claro!!; no sé con quién estas, o si te olvidaste de mi…-
-no seas tonto, no tengo a nadie-
-y Karin ¿?-
-eso no iba a servir -.-“ –
-y Neji ¿?-
- el está bien-
-QUE SI AUN TE ACUESTAS CON EL- el mayor rio.
-no… hace tiempo que no- rio un poco más. – te amo desde que tengo 10 años, no creo que te vayas a librar de mi tan fácil- le aseguro.
-Sasuke- el rubio se volteo, se dio cuenta de que le espiaban. – te amo- dijo alto y claro antes de cerrar sus ojos y juntar sus labios.
Tan firmes y suaves, extrañaba aquel tacto, abrió sus labios al tiempo que se dejaba invadir por el musculo bucal del rubio y este probaba la perdición en la boca contraria. Lo pego lo mas que pudo así, mientras los brazos del mas bajo cruzaban tas su cuello, se alejaron un poco a tomar aire, este delineo los otros labios con su lengua.
-viniste para quedarte?- quiso saber.
-vine para llevarte- el mayor abrió los ojos sin entender muy bien. –quiero que vivamos allá, habrá menos presión social, y podremos criar a mi hijo sin problemas-
-pero…-
-no quieres ¿?- le besaron la nariz.
-claro que quiero… pero, tendremos que hablar con mi familia sobre eso- dijo problemático.
-no creo que eso sea buena idea-
-yo creo que es lo mejor- volvió a devorar sus labios antes de que pudiese contestar.
-podrías dejar de besarme y conocer a tu hijo ¿?- cuestiono.
-mi hijo ¿?-
-no me ayudaras a criarlo Oto-san TT.TT ¿?- pregunto con ojitos de perro.
-s-si… pero y Sas-
-esa chica… mmm… me pregunto, solía ser una compañera de la escuela- dijo dándole a deducir algunas cosas.
-c-creo que algo huele mal- dijo estrujando la nariz, al rubio solo le cayó una gota.
-me ayudas ¿?- pregunto.
-creo que me están llamando- dijo volteándose.
-sí, ve a atender a tu amigo- dijo sarcástico.
-escuche mal- dijo volteando y mostrando una sonrisa.
-baka- el rubio le dio un piquito (besito ^^).
Se dirigió al coche saco al bebe luego de poner sobre la cama una toalla. Le retiro toda la ropita, y abrió el pañal desechable, lo tomo como un pollito por ambas piernitas el sucio y puso uno nuevo, tomando varios paños húmedos para limpiar bien el área, le puso una cremita para evitar irritación y polvo, le bajo las piernitas mientras le hacía gracia y el mayor solo le miraba (con la cara verde por el mal olor xD), le abrocho el pañal y le puso nuevamente la ropa, las mediecitas, los guantes y el gorrito.
-eres muy bonito- le dijo besándole la frente. –Lo cuidas mientras me deshago de esto- le paso la bebe tomando las cosas sucias. Dejándolo al otro anonadado viéndole los azules ojitos.