Nuestro pequeño viaje estaba marchando mejor de lo esperado. Red se veía muy feliz, lo único que yo esperaba es poder proponerle matrimonio y que acceda a quedarse un poco más conmigo. Red y yo salimos a caminar un rato, antes de cenar. El atardecer era hermoso, sinceramente ese brillo escarlata me enamoraba más y más, parecía un hechizo del que no quería escapar, Red tiene los ojos más hermosos de todos.
G: Red, te quisiera preguntar algo
R: claro, sabes que no me gusta que haya secretos entre nosotros
G: … ¿por qué dices algo como eso? ¿Acaso me ocultas algo?
R: no, yo sólo lo dije porque es cierto
G: jajaja ay amor, eres tan lindo cuando te pones nervioso
R: o cállate Green me molesta que…
G: que comiste, tus labios están más dulces que de costumbre
R: … haces que me sonroje
G: así tu carita combina con tus ojos
R: eres muy lindo, y… ¿qué me querías preguntar?
G: ¿por qué te gusta entrenar tanto en el Monte Plateado?
R: bueno, yo… no sé. Creo que es porque siempre es difícil y el clima cambiante me ayuda a estar alerta a todo
G: … wow no lo había visto de esa manera, pero…
R: ¿pero? Green, hay algo que quieras decirme
G: pues, es que pasas tanto tiempo fuera de casa que a veces pienso que… tu… no… me… amas
R: Green, mírame a los ojos por favor. Cuando miro al cielo y veo las estrellas, me acuerdo de ti y recuerdo que en cada una de ellas hay un beso para mí
G: si piensas tanto en mí, ¿por qué tardas tanto en volver?
R: …… no lo sé, creo que no puedo contener mi pasión por las batallas
G: pero si tu pasión por nuestra relación
R: Green por favor, eso no es cierto, te amo y lo sabes. Por ti soy capaz de hacer muchas tonterías
G: entonces quédate conmigo
R: lo siento, pero no te puedo prometer eso
G: Red… por favor, discúlpame. No quise hacerte sentir mal, es sólo que tengo la esperanza que algún día podamos estar juntos de verdad
R: Green, nunca lo olvides, para ti siempre, siempre deseo lo mejor
G: Redy, volvamos al hotel
R: ¿Por qué? ¿Dije algo inadecuado?
G: por el contrario, dijiste lo que era indicado. Vamos beby, volvamos al hotel para cenar y poder hacerte el amor a la luz de esta hermosa luna
R: Green mira, una estrella fugaz
G: pues pide un deseo
R: que nuestra historia de amor tenga un final feliz, ahora pide tu un deseo
G: que permanecieras siempre a mi lado
R: te amo Green, volvamos al hotel
Una vez en el hotel nos dirigimos al restaurante, Red estaba realmente hambriento que me preocupaba que esta noche no pudiera hablar con él. Obviamente quería seguir con nuestra conversación, averiguar de una vez por todas lo que Red sentía. Esa obsesión por entrenar debería acabar, pero bajo sus términos y analizando sus razones quizás pueda cambiar su forma de pensar y hacer que se quede conmigo.