RITSU POV
No podía creer que Takano hiciera aquella escena tan aterradora, ni tampoco que llegara a ser tan brusco conmigo, por suerte Haitani me salvó de la bestia, aunque aun no puedo creer que todo esto paso por el compromiso de mi padre, yo, justo ahora estoy demasiado confundido.
Llegando a casa Haitani me soltó del brazo, bajó a nuestro hijo y se fue a su cuarto, normalmente me da un beso o algo asi, pero esta vez ni siquiera me miró a la cara, y entiendo bien sus razones. Comencé a picar todas las verduras, puse todos los ingredientes en la olla junto con la pasta, haría rámen, pero cuando dejé hirviendo la sopa pude ver a mi esposo parado en la puerta con los brazos cruzados y los ojos rojizos, al parecer acaba de llorar. Lo bueno de todo esto es que Kiitsu está en su cuarto jugando con los videojuegos, me sentiré algo más libre.
-¿Qué pasa?- Dije con un tono algo nervioso.
-¿Qué fue lo que pasó haya?- Dijo frío, esta es una de las pocas veces en las que Haitani se pone serio.
-Yo lo traté de evitar te lo juro pero…-
-Ritsu, mi amor, sé que no tuviste la culpa, pero pensé que mínimo lo alejarías, y que no tejarías llevar por él… en el momento en el que te tomó de la muñeca… sentí que mi corazón dejaría de latir…- entonces se me acerca para abrazarme -… y por un momento tenía miedo…-
-Te juro que yo no lo hablé, traté de escapar, pero por desgracia me tomó del brazo y no tuve otra alternativa…-
-Entiendo, y no te pido que lo evites, sé bien que él es importante pero… mantén distancias con él…- de repente me apretó -… o me pondré celoso, y mucho…-
-Vale-
Después de cenar todos juntos, terminar de lavar mientras Haitani terminaba sus últimos apuntes, decidí meterme a la ducha, mientras me vestía llegó mi amado desprevenido, viendo casi mi cuerpo desnudo. Yo por impulso, me cubrí con las prendas rápidamente, mientras él se tapaba la vista.
-Pedona, no quise sorprenderte- Dijo con una sonrisa. Él siempre ha sido demasiado comprensible conmigo, cada vez que él tenía ganas de hacer el amor, me lo decía, y ya era depende de mi decisión hacerlo o no, pero él es muy pasivo en ese sentido, si yo no quiero en 3 meses, se espera 3 meses, o al menos hasta donde yo sé.
No pude evitar contenerme ante aquella sonrisa, así que me acerqué con sigilo a su cuerpo y lo tiré en la cama, y me senté sobre su regazo, él tan solo me miró con una sonrisa pervertida, y me tomó del rostro. Nos empezamos a besar en la cama, sentía como recorría todo mi cuerpo con su manos, y de repente sus labios empiezan a bajar hasta mi cuello, para depositar un par de besos allí, y sin pudor alguno puso sus dos manos en mi trasero, levantándolo y moviéndolo encima de su ya erecto miembro, por encima del pantalón, subía y bajaba, me pone rojo aceptarlo, pero era delicioso.
Estábamos a punto de llegar a más, cuando de repente se escuchó el timbre de la puerta.
-¿Quién es a esta hora? Y en tan preciado momento- Dijo mi amado con un disgusto en su rostro.
-Iré a abrir, puede que sea mi padre…- Me puse rápido la ropa de mi amado, ya que es mas cómoda y simple de poner, me acerqué a la puerta bostezando para recibir a una persona gritando de la emoción, junto a unos cuantos más, porque yo estuviera de regresó.
-Ricchan, ¿cuánto tiempo?- Dijo Kisa, saludándome y abrazándome al mismo tiempo, junto a él venían Yukina, Hiroki, Miyagi, Shinobu (con una enorme pansa, por cierto), Misaki, Usami, Chiaki, Hatori, Angélica, Yume, Meithan, y al que menos esperaba, a Masamune.
-¡¿Chicos, qué hacen aquí?!- Dije sorprendido.
-Vinimos a visitarte, te nos fuiste sin decir nada, y tuvimos que sacarle la información a Masamune a la fuerza-
-Jeje, perdón, pero no tuve otra elección, tenía que partir a Inglaterra…-
-Ritsu ¿quién era?- dijo mi esposo saliendo del cuarto.
-¿¡Ritsu quién es él!?- Dijo Misaki.
-Ah, bueno él…- Dije nervioso, mientras Takano me miraba raro,y a Haitani con cara de asesino.
-Él es el esposo de Ritsu…- Dijo Chiaki, puesto que él ya lo conocía.
-Soy Haitani Shin, es un placer conocerlos a todos- Dijo mi esposo evitando la mirada asesina de Takano.
-Hola, soy Yoshino Chiaki, un placer-
-Yo soy Kisa Shota-
-Y yo Hatori Yoshiyuki-
-Soy Yukina Kou-
-Soy Usami Akihiko-
-¿¡El novelista?!- Dijo mi marido impactado.
-Sí jeje-
-Hola, soy Misaki Takahashi-
-Yo soy Shinobu…-
-Ohhhh, eres una ternurita- Dijo mi esposo tocándole el cachete, mientras Miyagi le trataba de correr la mano y Shinobu se enojaba.
-Hola, soy Miyagi You-
-Yo soy Hiroki Kamijou-
-Y yo soy Takano Masamune, el primer amigo de Ritsu, su primer y único amor, su primera vez, su acompañante de por vida, y el poseedor del otro extremo de su hilo rojo- Dijo Takano, mientras todos lo miraban con ojos de victoria.
-Hola, Haitani Shin, la persona que ha estado al lado de Ritsu estos últimos 7 años de su vida, y él padre de su hijo- Al terminar esas palabras Takano se puso en posición de ataque, mientras que yo solo me sonrojaba.
Invité a todos a pasar a la casa, herví agua para café y todos comenzamos nuestra interesante conversación, mientras que Takano me miraba con deseo y a Haitani con odio.
-Bueno, y ¿acaso ya lo han hecho?- Dijo Kisa seducatoramente.
-¡¿Eh?!- Dije mientras Takano se enojaba, y arrojaba miradas asesinas a Kisa y Haitani.
-Obviamente, y debo admitirlo, es una experiencia extremadamente seductora y deliciosa, es como una explosión de sabrosura, desde el cuerpo hasta la boca, simplemente delicioso…- Dijo Haitani sin vergüenza alguna, mientras yo quedaba rojo como un tomate.
-Haitani, no digas eso…- Dije sonrojado.
-Oh, así que alguien más a parte de Takano ya saboreó esa parte de Ritsu…- dijo Kisa pervertidamente, este tipo realmente no está bien.
-¿¡Qué!? Eso no es verdad…- Dije completamente rojo, esta vez sí se pasaron.
-Bueno, obviamente MI castaño no dejaría que alguien le pusiera las manos encima aparte de mí, solo puede ser tocado por mí, y nadie más, ¿no, Ritsu?-
-¡Claro que no!- dije super enojado y avergonzado, no me lo esperaba.
-Jajajaja, supongo que el Tsundere de Ritsu nunca cambiará- Dijeron todos mientras reían.
-Cállense…- Dije mientras me sonrojaba y hacia un puchero, que supongo fue tierno puesto que Takano y Haitani me miraban embobados.
-Mami ¿quiénes son ellos?- Dijo mi pequeño Kiitsu, recién levantado. Este alboroto debió haberlo despertado.
-… Kyaaaaa~…- Chillaron todos los ukes mientras se le echaban encima am mí pequeño angelito.
-¡Mami!- Dijo tratando de liberarse del agarre de la bola de ukes.
-¡Es taaan tierno!- Dijo Chiaki agarrándole los cachetes.
-¡Y pequeño!- Chilló Kisa.
Y en lo que se calmaron Haitani me dio un beso en la boca, mientras Takano solo lo miraba con furia y odio.
-En fin… Ritsu ¿ya has conseguido trabajo?- Dijo Takano curioso.
-No, acabamos de llegar hoy, pero Haitani se irá en una semana, necesita ir a Inglaterra nuevamente y terminar sus últimos proyectos por haya…-
-… pero eso no significa que yo no sea su pareja, Takano…- Dijo Haitani.
-Bueno, pero tampoco significa que no pueda enamorarlo de mí y así separarlo de la bestia- Dijo con una sonrisa malosa, para después voltear a verme a mí –Si necesitas un empleo de editor, puedes entrar a Marukawa, es muy buena compañía, aparte de que pagan bien-
-Pero, ¿quién cuidaría a mi Kiitsu?-
-Descuida, puedo decirle a mis padres que lo cuiden, y no te cobrarían-
-No puedo hacer eso, debo de pagarles-
-Como quieras, en resumen; no tendrás problemas-
-Bien, en ese caso, mañana temprano llevaré mi papelería para presentarme en las entrevistas-
-Me parece bien…- Dijo con una sonrisa Takano, mientras Haitani me miraba curioso.
Terminamos la charla, y ya era hora de dormir, mi esposo ya se había ido a acostar así que acompañé a los invitados hasta la puerta, y cuando iba a cerrar la puerta Takano me tomó del brazo y me dio un beso en los labios, yo solo le correspondí, no quería que el momento acabara pero la falta de aire se hizo presente.
-Recuérdalo Ritsu, te lo dije antes y te lo diré las veces que sean necesarias; no importa que hagas, yo nunca te dejaré de amar.