–¿Sabes que es más doloroso que te quiebren la espalda, que te hayan golpeado con una palanca hasta la muerte o que te dejen lisiado de por vida? –aquella silueta miraba el encuentro del parque que habían tenido ciertos muchachos de Gótica en una pantalla.
–No lo sé–una silueta, la del segundo hombre levantaba con un tenedor una fina pieza de carne, de esas que parecían solo para gente de alto poder o riqueza-Pero puedo acostumbrarme a esta comida– la otra figura sonrió, mostrando una blanca y perfecta dentadura, burlándose internamente de la simpleza del segundo hombre.
–Algo mucho más doloroso que la muerte propia, es ver caer a los que amas–El segundo hombre decidió irse, sabía que cuando su “jefe” se ponía en ese estado no había más que retirarse y dejarlo divagar en su mundo de imaginaciones y fantasías–Antes de que te retires chico…–el segundo hombre giraba para verle–¿podrás con el trabajo?–el segundo hombre no sonrió esta vez, a pesar de estar acostumbrado a hacerlo lo que le decía no le causaba gracia alguna.
–Puedo con lo que sea-aseguro, azotando la puerta de aquella obscura habitación.
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–Lo siento, no comprendo, ¿Qué me pides? –Dick ladeaba la cabeza tratando de procesar la situación. Un par de horas atrás ella lo había llamado, una especie de auxilio angustioso que no dudo en socorrer, sin embargo, cuando llego a la dirección que le habían mandado, solo la encontró devorando un trozo de pizza y una bebida gaseosa.
–Nada que no puedas cumplir–la chica llevaba unas enormes gafas, una peluca rosa y una bufanda que ocultaban la mayoría de su rostro, medidas para que nadie descubriera que la ayudante de Red Hood estaba a plena luz de día en las calles de Gotham–¿tenías que traer tu traje? ¿acaso no solo patrullas de noche? –ella lo miro de arriba abajo, el chico estaba confundido, no comprendía el actuar de la compañera de Red Hood.
–Yo…–ella lo jalo del brazo, dejándolo en un callejón solitario con un vago “regreso”, afortunadamente, cumplió su palabra, entregándole un par de prendas, una playera blanca y unos jeans azules–¿Qué significa todo esto Scarlett? –preguntó intrigado por su comportamiento, sí, era verdad que conocía sus antecedentes, alguno que otro detalle, pero… ¿Qué hacía?.
–No creas que te pido una cita o algo así–ella le hizo señas para que se vistiera, pero Nightwing no entendía–quiero platicar sobre algo importante ¿ok?–el muchacho aún no muy convencido decidió acceder, después de todo, era una chica y el siempre era amable con ellas, algo que siempre se prestaba a malinterpretaciones–buen…–ella se quedo pensando mirando la parte baja de su espalda, pero recordando a cierto compañero de casco rojo–…cuerpo–ella sonrió ampliamente, dejando ver las comisuras de su boca sobre la bufanda.
–¿Ya puedo saber que esta sucediendo? –Dick empezó a caminar junto a ella, dando un largo paseo por alrededor de media hora hasta llegar a una especie de parque infantil abandonado, incluso tuvo un par de llamadas perdidas, nada de importancia.
–¿No tienes idea de por qué te llame? –ella fue a pararse delante de uno de esos juegos en forma de animales caricaturescos donde los niños se montaban, Dick empezó a ponerse a la defensiva cuando la mujer puso las manos en los bolsillos de su chaqueta.
–¿Tiene algo que ver con Jason? –ella no volteo a verlo, permaneció perdida entre el viento arenoso que pasaba entre sus pies.
–Para mi, casi todo tiene que ver con él–ante esas palabras Dick bajo la guardia, ¿estaría confrontándolo por lo que paso entre ellos? –antes de que mi rostro fuera…así–dijo bajando un poco su bufanda y mostrando las cicatrices en su piel–tenía una vida normal–continuo con su historia–amigos, pleitos familiares, salidas de diversión, ya sabes, cosas típicas…–ella dio un largo suspiro, mirando hacia delante–pero mi padre hizo algunos tratos con criminales, alguien me secuestro y bueno…todo termino mal–Dick se imaginaba algo así, al parecer en aquellos tiempos Bruce permanecía en una de sus desapariciones habituales, un crimen donde él no intervino–Jason me encontró, cuido de mi, si es que se puede llamar cuidados a sus tratos–soltó una suave risa, casi amistosa–y me convirtió en lo que soy ahora–El muchacho no parecía cómodo con la conversación, sin embargo, se adelanto a ella, quedando tan solo a un paso de distancia.
–¿Por qué me cuentas esto a mi? –preguntó
–Yo creí que mi mentalidad estaría quebrada, que me convertiría en una maniática desquiciada…pero aún no lo había visto lo que era la obscuridad–Scarlett continuaba con su historia–En Gótica, existen dos tipos de criminales Dick –ella sabía de sobra su nombre–los que se mueven por poder y los que se mueven por locura, Jason esta tocando a los segundos–por fin sus miradas se cruzaban mientras ella le proporcionaba un hoja con nombres de aproximadamente treinta personas, hombres y mujeres por igual–robe esta lista, todos son antiguos criminales o al menos eso creo–Dick empezaba a reconocer algunos, recordando fotografías explicitas de expedientes viejos, víctimas brutalmente asesinadas, golpizas, ahorcamientos, incineraciones en vida…ninguna muerte piadosa entre todas esas personas.
–¿Qué intentas decirme Scarlett? –Dick empezaba a hartarse de tanto misterio, ella se acomodo sus lentes obscuros, tomando aire, como si lo que fuera a decir fuera un delito.
–Jason los asesino…–por un momento el silencio reino entre ellos, la noticia hizo a Dick retroceder, él estaba al tanto del camino desviado de Jason un par de años atrás pero eso era demasiado–investiga por ti mismo sino me crees–Dick ni siquiera se recobraba de lo que estaba viendo cuando la mujer ya estaba alejándose de él.
–¿Por qué Scarlett?–Dick levanto la voz presionando la lista en un puño.
–Eres una especie de hermano, un tipo de amante...–ella hablo a lo lejos–yo estoy ciega, al igual que Jason y los ciegos no pueden guiarse entre si, necesitan a alguien que los oriente, alguien que sea capaz de ver lo que nosotros no..–ella espero, pero no obtuvo respuesta–el pasado de Jason se esta acercando Nightwing y de verdad deseo que todos esos muertos hallan sido criminales–
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–Pajarito, pajarito, vuelas demasiado lejos del nido–el susurro lejano a la conversación de Richard se hacía presente–¿así que la ayudante de Red Hood te cuenta secretos sucios eh?–los binoculares de alta tecnología aceraban aún más la imagen, notando una lista en las manos del muchacho–tch–él parecía estar molesto como si estuviera a punto de romper cualquier cosa, pero se tranquilizo, llevo una sonrisa a su rostro mientras tomaba una bocanada de aire–supongo que debo informarle de esto…pero antes–de su mano se formaba una especie de bola de energía, lanzándola directo a la estructura débil donde se encontraba parado y dejando que los escombros empezaran a caer hacía el parque clausurado.
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–¡Scarlett!–Dick apenas alcanzo a evitar los escombros, tosiendo por la nube de polvo que se había formado–¡Scarlet!–el volvió a gritar, tratando de localizar a la muchacha con la mirada a través del polvo.
–¡Calla!–un disparo dirigido al lugar donde se origino la explosión–¡maldito bastardo!–ella golpeo el suelo con el pie, estaba a salvo.
–Deja de maldecir, debemos ir con Batman– Dick se veía molesto y preocupado, acercándose a ella mientras se sacudía.
–¿Qué? Yo no pienso acercarme a tu santuario de héroes–ella se quejo, pero fue arrastrada del brazo, al parecer, el muchacho que parecía pura amabilidad y carisma estaba mostrando otro rostro.
–Silencio–él le ordeno con suma seriedad mientras continuaba caminado–debemos irnos cuanto antes–
–Ya te dije que yo no…!–él la soltó con brusquedad, mirándola totalmente enfadado.
–No seas necia–ella estaba a punto de forcejear pero Dick hablo nuevamente–¡esos tipos saben quienes somos!–fue como si un balde de agua fría callera sobre ambos, los habían atacado a discreción y ninguno de los dos llevaba puesto el uniforme…
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Un regaño, varios gritos de discusión, en la baticueva una revuelta había sido levantada–¿¡A quién más revelaste nuestra identidad!?–un golpe seco contra la pared, Bruce estaba interrogando a Jason y Dick ni siquiera lo miraba, estaba demasiado molesto, enojado…engañado.
–¡Ya te dije que yo no revele su identidad!–Jason se defendía, sujetando las fuertes manos de su mentor sobre su cuello, el de negro lo volvió a arrojar, esta vez al suelo–¡maldita sea! ¿¡qué necesito hacer para demostrar que no fui yo!?–el seño de Dick se fruncía mientras más lo escuchaba, él mentía, quién más a parte de él pudo haberle revelado su identidad a Scarlett, quién más había ocultado esa maldita lista negra.
–Me largo–Dick empezó a caminar lejos de ellos, poco antes habían estado compartiendo risas en un parque y ahora…ahora eso.
–¡Dick espera!–Tim empezó a seguirlo dejando que Jason y Scarlett lidiaran con la ira de Bruce–¿Qué fue todo eso?–el menor caminaba a su lado a punto de salir de la mansión–¿a dónde…?–Tim miro un trozo de papel.
–¿Puedo confiar en ti Tim?–el menor se quedo mirando la hoja, pero antes de que pudiera tomarla Dick se la arrebato–¿Puedo confiar en ti?–repitio con un tono de autoridad y enfado equiparable al de Bruce, ese que dejaba ver solo en cuestiones criticas.
–Por supuesto, jamás te traicionaría, no a ti–Tim se puso firme cual soldado.
–Necesito que averigües los crímenes de todas las personas en esta lista–por fin había liberado el trozo de papel en las manos del menor–no quiero que nadie más, mucho menos Bruce sepa de esto… ¿de acuerdo?–Tim asintió mientras Dick empezaba a irse.
–¿Por qué yo?–Tim miraba su espalda, Dick, aún a pesar de su enfado le mostro una sonrisa.
–Eres el mejor detective que conozco–con esas simples palabras el menor había dejado de preguntar, dejándolo ir solo a patrullar.
Dick esperaba que eso le sirviera para despejarse un poco, sin embargo, el destino le daba la espalda nuevamente, ningún criminal, todos los asaltantes siendo apresados por la policía, nada sucedía que necesitara su presencia y la noche estaba a punto de terminar.
–Siempre vienes aquí cuando necesitas pensar–una voz en su espalda, demasiado familiar para preocuparse de un ataque.
–Lo hago–no contesto nada más, un pelirrojo miraba solamente la espalda del muchacho de ojos azules.
–…mmm…–por un segundo Nightwing lo miro de reojo, como corriéndolo con la mirada–yo jamás pude sentarme a la orilla de esto, mucho menos pararme en esa…gárgola–Dick siguió dándole la espalda, pero ese comentario le había sacado una sonrisa, él era el único que disfrutaba esas alturas, le daban…tranquilidad.
–Recuerda que me crie en circo Wally, con una familia de trapecistas–Dick seguía sentado en la gárgola, casi dos metros lejos de la orilla–estoy acostumbrado a esto–
–¿Paso algo malo?–Wally se aventuro a preguntar, aún tenía un moretón en el rostro, uno que Dick le había causado.
–Nada–otra vez, Wally parecía tocar un tema delicado, sin embargo se sentía una atmosfera parecida a sus inicios, cuando eran mejores amigos.
–Siento lo del parque–soltó el pelirrojo de la nada–en verdad, solo quería tu antifaz, quería…no sé, recordar buenas rachas–quiso explicar la ausencia y el interrogarlo de esa ocasión.
–Olvídalo–Dick volvía a tomar la palabra–han pasado cosas que dejan tus…acciones en perspectiva–a pesar de que lo decía, apenas recapacitaba en sus palabras, era verdad, lo que había echo Wally no era tan malo, claro, en comparación con asesinatos múltiples nada era tan malo–…qué haces?–preguntó Dick con una sonrisa divertida al ver que el pelirrojo intentaba subir a la gárgola.
–¿Qué parece que hago?–Poco a poco caminaba hacía él logrando llegar hasta un ala de aquella figura–no entiendo como disfrutas esto…–Dick arqueo una ceja.
–Si no te gusta no tienes porque hacerlo–Wally le sonrió.
–Es lo que yo te digo a ti, sino te gusta algo no tienes porque hacerlo–Dick se le quedo mirando, pensando en sus palabras.
–No es tan fácil…–la mano de Wally se poso en la mejilla del héroe, Nightwing miro a punto de pedirle que la retirara, pero miro la otra mano primero, fuertemente aferrada a la estatua de piedra–…ja…en serio, si te da miedo…–un beso fugaz, sorpresivo que poco a poco se fue volviendo lento–¡ey!–Dick rápidamente lo sujeto de los hombros, el pelirrojo había resbalado.
–¡Wow! Jajajaja–rio nerviosamente el de pecas–creo que no debería estar aquí–dijo alejándose con ayuda de Nightwing.
–Wally…esto no significo nada–Dick no supo exactamente como habían llegado a esa situación pero no debía alentarla más.
–Jeje…–Wally paso un dedo por sus labios–gracias Dick–le contesto, casi como si no hubiera escuchado al de negro–por salvarme y…–Dick no contesto, solo hizo un gesto con la cabeza–…por no haber rechazado el beso–
–Yo no…–Dick quizó negarlo, pero el velocista se desapareció tan rápido como había llegado–tch…no necesito más problemas–se quejo revolviéndose el cabello, aunque dio una sutil sonrisa, a pesar de todo, se había sentido mucho más relajado con ese corto encuentro.
–¿Dick? ¿Dick–-El comunicador sonaba, llamando su atención.
–¿Qué sucede Tim? –
–Investigue tu asunto–hablo el red robin acerca de la lista de nombres.
–¿Y bien? ¿Cuáles son sus crimenes?–preguntó Nightwing ante el recelo de Tim de compartir información.
–No…–Tim hizo una pausa, pero continuo–una de las mujeres usaba un alias y no era un criminal–el mayor torció sus labios, recargándose en la pared y colocando una mano en su frente, Jason había matado a un inocente–Dick…no es todo…–el de negro sintió como su garganta se secaba–el verdadero nombre de esa mujer es Linda Park…–