—¿Crees que ella este bien?—Wally miraba con nostalgia el vidrio tras el que se encontraba Linda, parecía solo estar durmiendo en el la habitación blanca, la había encontrado en perfectas condiciones justo en el lugar donde le fue indicado. Era una fortuna que solo hubiera recibido una pequeña quemadura en su rostro.
—Lo estará…—Flash tomaba su hombro y Wally daba la vuelta para seguirlo a la azotea, tenía un par de parches en las mejillas y unas raspones en la piel—¿Seguro que quieres hacer esto?—West asintió. Una nave traslucida abría su compuerta para dejarle el paso.
—Se los debó, es lo mínimo que puedo hacer después de todos los problemas que cause—Dijo a su mentor, mirándolo para poder despedirse.
—No es necesario que te vayas Wally, todos cometieron errores—Trato de alentar
—Tal vez yo no hice explotar nada, pero cometí crímenes igual de malos y lastime muchas personas en el proceso…esto…esto es lo único que puedo hacer para enmendarme—Dijo dando un paso a la nave, en ella una vieja conocida ya lo esperaba.
—No va estar solo chico bueno, no te preocupes por él—Scarlett daba una mano al muchacho para ayudarlo a subir y Barry se despedía de ambos.
—No es necesario que me acompañes—Dijo Wally avanzando a la cabina de controles.
—Claro que sí…—Ella, al igual que Kid Flash tenía un par de cicatrices y heridas sanando pero nada que impidiera su camino—Sino hubiera entregado una estúpida lista falsa tal vez las cosas no hubieran salido como…bueno…como pasaron—
—¿Red Hood, no lo extrañaras?—Preguntó Wally recordándolo.
—¿A Jason? No…—Suspiro—el esta demasiado ocupado ahora—
Wally miró por última vez el hospital, recordando todo lo que había ocurrido, ahora parecía un mal sueño. Los eventos de casi un año lo habían arrastrado a comentar un error tras otro, pero quizá lo que más detestaba en ese momento, es no haberse despedido de él.
—Vámonos…—La nave partió dejando a Barry en la cima del hospital, con las manos en los bolsillos, preguntándose si había echo lo correcto al dejarlo marcharse otra vez.
—No se como es que tu puedes dejarlos partir tan fácil—Dijo Barry, detrás de él, Batman salía de la sombra de las escaleras.
—No puedo impedir que tomen sus propias decisiones—Barry se dio la vuelta para mirarlo, llevaba el traje puesto y la voz no había cambiado ni un poco, como si nada hubiera pasado—Gracias por lo que haces por ella—Agradeció él. La fundación Wayne había donando el presupuesto suficiente par a cubrir una investigación que ayudara a regresar los pacientes en coma y pago las mejores instalaciones para la novia de Wally.
—Si hubiera sabido lo que paso antes…—Bruce guardo silencio y Barri rio, acercándose a su lado.
—¿Te lo dije no? Es mejor que te informen antes—Batman no contestó nada al respecto empezando a caminar a la orilla del edificio.
—En mi casa…a las once…no puedo llegar antes…—Por un momento Barry se quedo con la boca abierta, pero rápidamente cambia su expresión por una sonrisa.
—¿Es una cita?—Bromeo pero el murciélago disparo alejándose de él.
A pesar de todos los malos eventos algo bueno había surgido, ahora Bruce se comunicaba con más frecuencia con la liga, al menos con sus más cercanos. Por su puesto, seguía siendo silencioso y hermético en sus mensajes, pero ahora podían tener una idea de lo que pasaba en su ciudad, estando al pendiente por si los llegaba a necesitar.
En BludHaven, dos personas discutían delante de la puerta de un departamento, Tim llevaba una camisa roja formal, casi como si fuera un evento elegante. A su lado Jason iba vestido con su ropa de civil, una chaqueta de cuero marrón y unos jeans casuales, también, cargando una caja llena de ropa y cosas varias.
—¿Estas seguro de esto?—Preguntó Tim—Si ocupamos su apartamento…bueno…—Jason suspiro y saco una llave.
—Deja de pensar tanto, vamos—Al entrar ambos notaron todas las cosas de Dick y sonrieron, todas estaban perfectamente acomodadas, sin polvo y con tanta vida que parecía otro lugar, empezando a acomodar la cosas y poniendo unas cosas más en cajas.
—Entonces…—Tim se dirigió a la habitación para desocupar un cajón y comenzar a poner ropa nueva dentro—¿Te quedaras como vigilante de BludHaven?—Preguntó sin dejar de lado su tarea.
—Supongo que sí, sin Nightwing aquí todos piensan que pueden hacer lo que quieran—Jason se acercaba a un escritorio y empezaba a moverlo para colocar un nuevo de madera, colocando una computadora encima y un par de videojuegos.
—Red Hood será una buena adquisición…eso creo—Tim salía del apartamento y tomaba otra caja para seguir acomodándola, pero al levantarla noto una persona subir por las escaleras—¡Jason me mentiste! ¡Dijiste que llegaría por la noche!—Dijo Tim cruzando todo el departamento y apresurándose a la ventana de emergencia.
—¡¿Qué significa esto?!—Escucharon ambos.
—Eres un cobarde—Se quejó Jason mirando como Drake salía por la ventana.
—No, solo no me gusta meterme en pleitos de pareja—Contestó—Salúdalo de mi parte—dijo desde fuera escuchándose como se marchaba.
—¿Qué demonios significa esto?—Dick pasaba entre cajas a su apartamento mirando con horror como se veía—¿Dónde están mis cosas?—Preguntó enfocándose en Jason y frunciendo el seño.
—No te alteres solo las estoy reacomodando—Dick no entendía.
—¿Por qué?—Preguntó tratando de entender.
—Necesitaba espació para mis cosas—Jason solo avanzo hacia otra zona, empezando a limpiar bajo la reprobación ajena.
—No…—Dick tomo una caja y la sacaba de su departamento—¡No Jason!—Le gritó desde afuera.
—¿Qué? ¿Por qué no?—Se quejó siguiéndolo para volver a meter sus cosas al departamento.
—¡No hay suficiente espacio y ni siquiera me lo preguntaste!—Dijo Dick peleando por la caja en sus manos.
—Hubieras dicho que no—
—Por supuesto que lo diría, no llevamos saliendo ni siquiera un mes—Hablo quejumbroso.
—Vamos, estas en reposo, no puedes vigilar tu solo, te vendría bien un compañero…—Dick se le quedo viendo, pensativo.
—De acuerdo…—Accedió de buena gana entrando en su propio departamento.
—¿De acuerdo?—Jason lo siguió con sus pertenecías en mano—No es que no me alegre, pero esperaba más resistencia—
—Puedes usar el cuarto de visitas—Dick se acercaba a la cocina, casi como si no le hubiera molestado la invasión imprevista.
—¿Qué te hizo cambiar de opinión?—Jason se acerco a su lado.
—Bab’s tenía razón, en ocasiones somos demasiado orgullosos y le prometí que cambiaria eso—Jason noto la nostalgia en su mirada, acercándose a él.
—Eres un mentiroso, es solo que no puedes resistirte a mis encantos—Dick le sonrió, se acerco lentamente a él y Jason, sin darse cuenta, retrocedía, aún no se acostumbraba a la iniciativa y “disposición romántica” de Grayson.
—¿Nervioso?—Dick se burlo cuando Jason choco su espalda contra la pared, ambos estaban demasiado cerca—Eres lindo cuando te pones así—Dijo riendo y tomando la caja en manos de Jason—Déjame ayudarte a desempacar—
—Lindo…—Repitió Jason ligeramente sonrojado y ofendido por el comentario—Lo siento pensé que llegarías más tarde—Habló cambiando el tema—¿Pudiste despedirte?—
—Wally y Sasha estarán bien, en cuanto tengan una pista de su paradero ellos prometieron ponerse en contacto—Informó.
—No te arrepentirás de no haberle dicho adiós—Preguntó algo inquieto por su propia pregunta. Ahora que Wally estaba mejor y tomando las decisiones correctas de su vida le preocupaba un poco que quisiera irse con él.
—Yo tome una decisión, la verdadera pregunta es ¿Por qué decidiste seguir conmigo?—Preguntó Dick—Después de todo lo que paso…—Jason sonrió acercándose a él y tomando su mentón.
—Regrese de la muerte para una estúpida venganza contra un demente…por qué no habría de insistir un poco más por algo que si me importa—Esta vez fue el turno de Dick de sentir calor en su rostro, girándose.
—Entiendo, eres demasiado terco para dejar las cosas—Dijo entre molesto y divertido, pero feliz por poder iniciar de nuevo con alguien que lo quería—¿Qué es esto?—Dick frunció el seño al ver su ropa guardada en una caja y sus cajones abiertos con la ropa de Jason totalmente instalada.
—Tu lo dijiste....—Jason lo abrazaba por la espalda—soy demasiado terco—apretó el abrazo y dio un beso en su cuello—En verdad creíste que podría sacarme de tu habitación…—
Pronto, en su departamento se escucharon las peleas juguetonas y las confrontaciones que terminaron en la pieza del dueño. Dick y Jason compartirían la custodia de BludHaven, mientras Wally y Scarlett buscaban a una desaparecida Barbara Gordon, nadie había logrado encontrarla después de la explosión. Pero ninguno estaba preocupado, sabían que ella no volvería a hacerles daño y si lo intentaba, esta vez estaban juntos para enfrentarlo.