Han pasado 5 años desde que Yamaguchi desapareció.
-hermano, tienes una junta a las dos. No estaré recordándote eso, no soy tu cecretaria.
-lo siento estaba distraído.
-¿piensas en él?
-todos los días.
-no imagino tu dolor. Te admiro hermano.
-yo me doy vergüenza ¿como es posible que aún no le encuentro?
-se encontrarán estoy segura - lo abrazo por la espalda colocando su mentón en la cabeza del rubio.
-puedes ir...
-claro que se si, iré a la reunión en tu nombre. Después de todo, esta empresa será mía cuando me vendas tu parte.
-jmm
-nos vemos en la tarde hermano. Por cierto ¿no olvidaste que hoy iremos con Hinata ¿verdad?
-demonios.
-lo olvidaste. Pasaré por ti a las 6.
Hinata Shoyo, estaría abriendo su quinto restaurante en la zona. Cada inauguración más esplendorosa que la anterior, más bien parecía la entrega de unos Grammy.
Aún así, la misión de tsukishima siempre era la misma. Encontrar a Tadashi, como lo había hecho en ovaciones anteriores. Contrato a los mejores detectives del país para buscarlo. Mientras él cruzaba la olfonbra roja del brazo de su hermana, ellos buscaban por todo el país.
-el bloc se seguía actualizando, pero aún así no daban con su paradero.
-inútiles.
-Tsuki... Hacemos todo en...
-mentiras - interrumpió. - ya lo habrías encontrado si fuera así.
-Tsukishima, por favor no te desqutes con Bokuto. Es solo que es difícil encontrar a alguien que no quiere se ayado. Meticulosamente borra sus hueyas.
-¿que hay de sus cuentas?
-nada.
-¿la empresa?
-no da razón. Takeda se quedó a cargo. Recibe órdenes de Yamaguchi, pero tampoco sabe su paradero.
-inútiles.
-Tsukii..
-silencio bokuto... Si no fueras uno de los mejores ya te habría despedido.
-soy el mej...
-demuéstralo...
-suficiente. Descansa,seguiremos trabajando.
....
A la mañana siguiente.
"¿Donde estas? ¿Estas comiendo bien? Te extraño" Tsukishima caminaba por las calles de la ciudad como había acostumbrado por los últimos 5 años, nania que había tomado esperando alguna vez encontrar entre esas personas a Tadashi. Fue sacado de sus pensamientos cuando su teléfono sonó.
-enano, no es un buen momento ¿que quieres?
-soy Kenma.
-ohh - "el otro enano" pensó - ¿si?
-sabes, saliendo del trabajo me encontré con un libro muy peculiar.
-¿y eso que?
-la portada del libro, es la impresión del votar que usaba Tadashi. Tal vez es coincidencia... Pero...
-sin coincidencias, haré que lo investiguen.
-ya mande la información a tus detectives. Estoy al pendiente de ellos.
-¿tu..?
¿Que? Su sistema de seguridad no es el mejor. Así estoy también al pendiente de él. En cuanto tengas noticias házmelo saber. Adiós.
-recordaré no tenerlo como enemigo. - se dijo al colgar.
-esperame un poco más. Te traeré de regreso.
.............
En un bar, en la barra se encontraba kuroo preparando bebidas.
-¿te quedaras aquí por siempre? - preguntó rsukishima a su cuarto trago.
-sólo gasta que me aburra. Kageyama esta ocupado en otros lugares así que yo estoy a cargo de este.
-no pensé que terminarían llevándose también.
-ya sabes, nuestros... Bueno ellos se llevan bien asi que nosotros también deberiamos... Ahh
-entiendo. Pero está vez estoy cerca.
-eso es amigo no pierdas la esperanza. Todas las noches mira kenma frente a la computadora, aun después de trabajar todo el día, siempre encuentra un momento para ayudar en la investigación de esos detectives... Es decir... Ahhh
-ya. Lo sé, descuida. Agradezco su ayuda.
-lo encontraremos.
-que no quepa duda.
-suficiente de alcohol. No quiero llevarte ebrio a tu apartamento
--vivir solo tiene sus ventajas. Me voy.
-conduce con cuidado.
Rsukishima salió del lugar y subió a su auto. Por alguna razón está yo en llanto. Jamás lloraba frente a los demás, pero le cobraba cargos cuando estaba solo. Su móvil sonó.
-Tsukiii... Lo encontramos.
-una luz de esperanza se dibujo en los ojos del rubio.
-tsukishima, dirígete al helipuerto más cercano de donde estés. Pasaremos por ti.
-te enviaré la dirección.
Condujo a toda velocidad. Cuando llego al techo, los detectives ya lo esperaba junto a un elecoptero.
-hora de irnos - le sonrió Akashi mientras le indicaba abordar.
-Tsuki, sube, no perdamos más el tiempo - empujó bokuto con una gran sonrisa.
-si - dijo tsukiyama "es hora" "al fin podre verte".
-