Dollhouse.
-Hola? -Contesto el peliplatedo mientras iba al volante.
-Hyung? Donde estas?- Cuestiono la voz del otro lado de la línea.
-Voy de camino a casa de mi tía- Para evitar una multa por ir hablando por teléfono, tomo sus audífonos rápidamente y los conecto a su móvil para continuar hablando.
-Que tia? acaso tienes una?
-Si, pero hace mucho que no la veo, su hija está cumpliendo quince y decidió invitar a toda la familia, me reuniré con mi madre y Sodam allá.- Relato a su amigo mientras buscaba la dirección de la casa de su pariente, que seguramente ya había extraviado.
-Oh! En verdad? y llevas regalo Hyung?- El conductor se sorprendió y sus ojos se abrieron, recordando que su madre le había hablado temprano para recordarle que ir a un cumpleaños implica llevar un obsequio.
-Joder! lo he olvidado- Dijo algo exasperado a su amigo.
-Lo imagine- No le sorprendió su respuesta, todos sabían que el era muy despistado, y seguramente si no ponía atención al camino tendría algún trágico accidente automovilístico.
-Taemin, hablamos luego si? casi no tengo tiempo y tengo que encontrar un regalo rápido.
-Esta bien, pero, dime, llegaras a tiempo para ver una película esta noche?- Era tan despistado que no se había dado cuenta que era viernes, y que ese día ve películas animadas con Taemin desde hace tres años, ya era una tradición.
-Tratare de hacerlo Taemin, supongo que si lo hare, tu busca una película para ver ok?-No planeaba quedarse mucho tiempo en casa de su tía realmente, solo llegaría, saludaría, y seguramente pasaría hablando con su hermana hasta que le dieran comida y se iría.
-Esta bien, adiós Jonghyun Hyung-La voz de su amigo se escucho alegre y dulce, claramente ya tenía una película en mente, la cual según Jonghyun seria con la que últimamente está obsesionado y ya han visto tres viernes seguidos.
-Adiós pequeño, no vemos esta noche- Colgó la llamada y desconecto los audífonos del aparato.
Jonghyun pudo divisar el papel donde estaba escrita la dirección sobre el tablero del auto, Como no lo vio antes?, Lo tomo y la repaso para asegurarse que iba por el camino correcto, aun tenía que encontrar el regalo para su prima, pero que le gusta a las quinceañeras? , dinero?, sería bueno, pero su madre la reprocharía toda la fiesta el que le dio eso porque era lo más fácil que se le ocurrió, y en parte seria la pura verdad, maquillaje? no, definitivamente no, el no sabía de eso, y no tenía todo el tiempo del mundo que digamos.
-Ahs!- Golpeo el volante con frustración.- Que rayos les gusta a las chica?- Pregunto al aire como si alguien fuera a responderle.-Por razones como estas no tengo novia.- La verdad era que ni el mismo supo el porqué dijo eso, si era porque las mujeres eran demasiado complicadas y por eso el decidía no tener, o si era porque todas las novias que tuvo le terminaban porque era muy poco detallista y cuando les daba algo, no les gustaba, asimismo que olvidaba todas las fechas según ellas ''importantes''; no estaba seguro, pero se sentía mejor sin una.
Llego hasta un semáforo, el cual indicaba el ''alto'' para él, mientras el auto estaba en reposo Jonghyun vio la luz al final del túnel, a su izquierda se encontraba un local, muy bonito, color rosa y con flores, el local tenía un letrero con su nombre, ''Dollhouse'', ''Que original'' Pensó Jonghyun. Vendían muñecas, le pareció que una muñeca era un poco absurdo, es decir, la chica tenia quince, pero eran muy hermosas, parece que eran de porcelana, y se podían ver por las vitrinas del lugar, Jonghyun no lo pensó mas y cruzo al pequeño parqueo que ese local tenia
Se estaciono y bajo de su Mini Cooper blanco, el cual todos sus amigos decían que era un coche para mujeres, pero a él le gustaba mucho y le había puesto como nombre Phillip, si, su auto tenía nombre. Entro a ese local de muñecas, y como se lo esperaba ya que había visto un poco de el cuando lo vio desde el auto, era completamente rosa, rosa por un lado y por el otro, claramente era un lugar para chicas.
Jonghyun había escuchado decir a su madre y a su hermana que las muñecas de porcelana era muy hermosas y les gustaría tener una, así que si a ellas les gustaba y tenían la edad que tenían, porque a su prima no?. Se adentro mas a ese lugar, observando a todas las muñecas que ahí se encontraban, rubias, castañas, pelirrojas, con vestidos, o ropa de bebe, algunos muñecos (niños), algo tenebroso de hecho, se veían tan reales.
-Bienvenido!-Jonghyun se sobresalto ante esa voz, tras la puerta del mostrador había salido un chico, un chico alto y de tez blanca, cabello lacio y negro, sus rasgos eran tan delicados y hermosos, hasta parecía una muñeca mas de esa tienda.
-Hola, mmm quería ...bueno no sé exactamente.- Contesto algo indeciso, sabía que en ese lugar lo único que podría comprar era uno de esos juguetes que ahora le parecían bastante terroríficos, pero, no sabía como la quería exactamente.
-Necesita ayuda?- El chico sonrió al ver el rostro de confusión de su nuevo cliente y decidió acercarse mas para poder ayudarlo.
-Si.-Dijo el de cabello plateado viendo para todos lados.
-Seguro, mi nombre es Kim JaeJoong y estoy para servirle.- El chico hizo una pequeña reverencia y Jonghyun correspondió de la misma forma. -Dígame, que busca?
-No se exactamente, no la quiero para mí, lo que sucede es que mi prima está cumpliendo años, y olvide comprar un regalo.- Jonghyun paso un brazo por su espalda, la verdad era que le daba cierta vergüenza estar ahí.
-Ya veo, bueno, elegir muñecas no es muy difícil, solamente elige la que te llame mas la atención, te aseguro que cualquiera le gustara.- Dijo el chico de piel blanca mientras regresaba de la puerta de donde salió.
''Pff, que gran ayuda'' , Pensó Jonghyun, bien, en cierta forma era verdad, solo tenía que tomar una cochina muñeca, pagar y largarse de ahí.
-Bien... elijamos.- Dijo en voz alta y comenzó a curiosear por el lugar, quitando el hecho de que sus miradas fueran tenebrosas, las muñecas eras muy hermosas; pero una intereso bastante a Jonghyun, bueno ciertamente no era una ''Muñeca'', era un muñeco, era un chico.
Se acerco hasta ese estante donde se encontraba y lo tomo en sus manos.
-Hermoso.- Dijo mientras lo apreciaba.
Tenia el cabello rubio claro y muy terso, ojos afilados color avellana, mejillas ligeramente carmesí, labios acorazonados y una pequeña chaqueta roja y pantalones floreado, todo un encanto. Jonghyun revolvió su cabeza ante sus pensamientos, bueno, en realidad no tenían nada de malo, esa figurita de porcelana era hermosa, pero en un segundo creyó quererla para él.
-Veo que encontraste algo.- De nuevo ese chico apareció de repente, acaso planeaba matarlo de un susto?.
-Si, creo que llevare este.- Dijo observando nuevamente al hermoso muñeco que se hallaba en sus manos.
-Me parece bien, fue el que más te gusto?
-Es precioso.- Dijo para sí mismo, pero entro en cuenta que ese chico estaba presente.- Digo, todas son muy bonitas, la verdad fue el primero que vi así que lo tome.- Fue lo único que se le ocurrió decir, no quería que malinterpretara nada, como que le gustaran las muñecas o algo así.
-Bien, puedes pasar a la caja para que te cobre.- Jejoong tomo camino tras la caja registradora; al lado es esta se encontraban dos tazas de té.- Gustas de una tacita de Té mientras te cobro?- Dijo el pelinegro extendiendo la bebida.
-Gracias.- Iba tarde ya, pero no quería ser mal educado, así que tomo lo que el otro le ofrecía.
Luego de que JaeJoong le cobrara y terminara de tomar el té, Jonghyun salió de la tienda con una caja rosada en sus manos y se adentro a su auto.
-Bien, ya tengo el regalo, ahora tengo que llegar lo más rápido que pueda.- Hablaba el solo mientras retrocedía para poder salir de ese parqueo, mientras lo hacía, escucho un estruendo, pero no le tomo mucha importancia.
Retomo nuevamente su camino, en ocasiones veía de reojo a esa muy bien adornada caja, quería sacar a ese muñeco y seguir viendo lo bonito que era, pero no lo haría, al tener esas intenciones, prefería poner atención al camino y no chocar.
De repente el auto dejo de camina.
-Y ahora qué?- Jonghyun rodo los ojos y se bajo de el auto, tenia suerte que estaba a orilla de la calle, de otra manera los autos le estuvieran protestando con sus claksons, y eso era una de las cosas que Jonghyun mas odiaba.
Lo primero que hizo fue abrir el capo del automóvil, pero todo le pareció normal, luego, empezó a ver las llantas, encontró el problema, la llanta de atrás del auto estaba destrozada, era inútil, probablemente el sonoro ruido que escucho un tiempo antes, tuvo que ver con su llanta ponchada.
-Ahh!- Grito de frustración y golpeo la puerta de su coche.- Y ahora que hago?- Jonghyun lamento no escuchar los consejos de su amigo Minho y llevar con un llanta de repuesto-
Era un hecho, no llegaría a esa fiesta, su madre estará furioso con él, pero Jonghyun solo pensaba en cómo salir de esta.
-Creo que tendré que llamar a una grúa.- Jonghyun se resigno a la idea, era la única solución, aunque pudo haberle llamado a Minho, pero este no le ayudaría en mucho, ya que las llantas de sus autos eran muy diferentes. Jonghyun tomo su móvil y marco el numero de una grúa, el cual ya tenía dado a que una situación parecida le había sucedido antes.
Jonghyun en verdad pensaba que tenía muy mala suerte, no solo por lo recién sucedido, pareciera que toda su vida a estado llena de sucesos desafortunados, no es como si haya sufrido mucho o algo asi, la verdad es que su vida había sido plena, muy tranquila, nunca vivió nada como un divorcio entre sus padres, o la muerte de un ser querido ni nada de eso, pero lo que le molestaba era eso exactamente, su vida había sido demasiado tranquila, y aparte de eso, su mala suerte, siempre cometiendo estupideces, aunque en su trabajo fuera muy exitoso y ganara bien, no había ningún día en que algo malo pasara, como resbalarse mientras está en una reunión con sus jefes dando una presentación de sus nuevos proyectos, o que su estilista le pintara el cabello de plateado y el ni enterado de lo que este hacia con su cabello, derramar cualquier bebida que tomara, o que la llanta de su auto se ponchara cuando tiene prisa, ya no le sorprendía, pero aun así le molestaba, cuando seria el día en que su mala suerte terminara?.
Unos minutos mas tarde llego la grúa, Jonghyun le dio la dirección de su casa al conductor y saco algunas cosas de su auto, su abrigo, su libro de Stephen King y la caja rosa que se encontraba sobre el asiento delantero. Finalmente la gua se llevo el pequeño Mini Cooper de Jonghyun, y este comenzó a caminar por las congestionadas calles de corea, eran casi las cuatro de la tarde, seguramente su madre y hermana lo matarían por no llegar a esa absurda fiesta, pero que mas daba, sería más absurdo aun llegar con una hora de retraso, y aunque le había dicho a Taemin que llegaría en la noche, decidió dirigirse a casa de este, no tenía nada mejor que hacer y estaba atestado de estar encerrado en su departamento sin nada que hacer, por lo menos con el pequeño pasaba un buen rato.
Jonghyun tomo un taxi, pidiendo al conductor que lo llevara a la dirección indicada, iba sentado en el asiento de atrás, viendo por la ventana todos esos edificios y autos contaminantes, desagradable escenario, estaba pensando seriamente pasar unos días en alguna casa de campo, alrededor de frescos arboles y escuchar a los pájaros cantar. El taxi freno sorpresivamente, un movimiento muy brusco hizo que Jonghyun saltara de su asiento y lo sacara de sus pensamientos.
-Disculpe, un auto se atravesó.- excuso el motorista volteando a ver a Jonghyun para luego seguir manejando.
-No hay problema.- Contesto Jonghyun un poco disgustado, por tales razones no le gustaba tomar taxis o autobuses.
Jonghyun miro al lado del asiento donde iba, y no vio la caja rosa, se preocupo de inmediato cuando la vio en la alfombra de el auto.
-No!- Jonghyun se sobresalto con la idea de que su hermoso muñeco del tal delicado materia como lo era la porcelana se hubiera quebrado.
Jonghyun levanto la caja inmediatamente y la abrió con destreza, desatando ese lazo brillante que le decoraba, saco al pequeño ser inanimado y lo reviso por todos lado, no se había quebrado ni nada, solo tenía un pequeño rasguño, un roce insignificante un poco más abajo de su ojo izquierdo, pero eso no le quitaba su natural belleza, Jonghyun se quedo ido nuevamente ante él.
-Serás mío ahora.- No supo muy bien porque dijo eso, pero estaba seguro que n quería compartir esa monada con nadie más, de todas formas ya no tendrá que dárselo como regalo a su prima.
Acaricio la helada mejilla de su rubio muñeco y lo observo una vez más antes de introducirlo nuevamente a la caja.
-Seños, llegamos.- Informo el conducto girando su cabeza hacia el asiento trasero.
-Cuanto es?- Jonghyun saco su billetera dispuesto a pagar.
-1600 wons.
-Aquí tiene.- Jonghyun entrego el dinero al taxista y bajo del coche con todas sus cosas en brazos.
Estaba empezando a llover, así que Jonghyun entro rápido al edificio y llego a la recepción.
-Hola Jonghyun, como has estado?- Saludo la recepcionista como siempre lo hacía, las visitas de Jonghyun a ese lugar eran tan frecuentes que habían muchos empleados que lo conocían y lo saludaban.
-Muy bien Hyorin, y tú?.- respondió amablemente.
-Bien, hoy llegas bastante temprano.- Usualmente los viernes llegaba a las siete, pero no conto con que Hyorin también estaba pendiente de eso.
-Si, no pensé que supieras a la hora que vengo.
-Llevas viniendo aquí tres años, no crees que es tiempo suficiente para darme cuenta de eso?.- La chica rio, la verdad era que al escucharlo de esa forma sanaba bastante razonable.
-Si, eso creo.- Jonghyun rio de igual manera.
-Le diré a Taemin que estas aquí, puedes subir.- Hyorin tomo el teléfono para informarle al dueño del apartamento 302 que tenía visitas.
-Ok, gracias Noona.- Jonghyun solo la llamaba así cuando lo recordaba, el prefería llamar a la gente por su nombre.
Jonghyun empezó a subir las escaleras hasta el apartamento de su amigo, al llegar frente a la puerta, golpeo la dura madera.
-Taemin!.- Grito desde afuera para que el mencionado le escuchara.
-Pasa!!- Jonghyun giro la perilla de la blanca madera y entro al lugar.
-Hyung!!- Taemin salió de la cocina y corriendo hasta Jonghyun, envolviéndolo en un gran abrazo.
-Taemin, cuantas veces te he dicho que le pongas llave a la puerta?- Dijo el otro sin dejar de abrazar al castaño.
-Hehe.- Se separo del musculoso cuerpo emitiendo una risa nerviosa.- Perdón Hyung, lo he olvidado otra vez.
Si algo tenían en común esos dos, era el hecho que olvidaban la mayoría de cosas, sin mencionar que perdían todo lo que tocaban.
-Bien, pero no lo olvides de nuevo bien?.- Jonghyun sabía que eso no pasaría, el pequeño lo olvidaría otra vez, pero nada costaba recordárselo.
-Lo prometo- Dijo el castaño con una gran sonrisa en el rostro y con su dedo meñique alzado.
Ambos chicos se fueron a sentar al sofá, Jonghyun le conto todo lo que había pasado esa tarde, asi que decidieron ver la película mas temprano para que Jonghyun no se fuera tan tarde y tuviera problemas con encontrar trasporte hacia su casa. La película termino, y Jonghyun estaba por irse.
-Hyung, que es esto?.- Pregunto Taemin arrebatando la caja rosa que Jonghyun había tomado en sus manos.
-Eh, cuidado.- Dijo suave, no quería que nadie lo tocara y mucho menos que algo le pasara.
-Es un regalo? que será?- Taemin acerco la caja a su oído y comenzó a zarandearla para tratar de adivinar su contenido.
-Taemin basta!- Jonghyun no supo porque, pero se lleno de rabia al ver al menor hacer eso, le arrebato la caja de las manos y empujo al castaño, haciendo que este callera en el sofá, con el rostro perplejo por la reacción del otro.
-Hyung ...yo.- Jonghyun pudo notar la expresión de confusión y arrepentimiento en el rostro de Taemin, se sintió muy mal, porque había actuado de esa forma?.
-Taemin... perdón, tengo que irme.- Jonghyun no supo que mas decir aparte de eso, tomo su chaqueta y se fue lo más rápido que pudo de ese lugar.
Jonghyun tomo un taxi que lo llevo hasta su casa, en todo el camino no dejaba de pensar en porque hiso eso, y que le diría a Teamin?, ''No quería que le hicieras nada a mi muñeca!'', claro que no, como le iba a decir tal cosa?. Finalmente llego a su apartamento y se recostó en su enorme cama.
-Jonghyun estas actuando mas idiota de lo normal?- Se pregunto a si mismo mientras masajeaba sus sienes.
Se sentó en la cama y su mirada se dirigió nuevamente a esa caja, estaría bien?, se levanto y se acerco a ella, la tomo y regreso a su cama.
Por suerte, al abrir la caja noto rápidamente que su preciado muñeco estaba en las condiciones hermosas de siempre, lo saco de la caja y lo recostó junto a el. Jonghyun se volteo de lado observando el perfil del juguete, pensó que lo único bueno del día fue haber comprado a ese ser tan hermoso.
-Como serias si fueras una persona?.- Pregunto al muñeco como si este fuera a responderle.
Jonghyun ya se sentía muy cansado, no se dio cuenta cuando sus parpados se cerraron para no abrirse en toda la noche.
Jonghyun se removió en su cama, se había dormido con la ropa incomoda con la que paso todo el día anterior, y esos pantalones ajustados lo estaban molestando. El de cabello plateado abrió los ojos lentamente, sintió que tenía algo sobre él, y frente su rostro había algo, un ángel?, se veía como uno.
-Uh.- Se tallo los ojos y su alarma comenzó a sonar insistentemente. Suficiente para despertarlo.
Al tener su vista clara, pudo divisar frente a el el rostro blanco y delicado de un chico rubio que lo miraba confuso con la cabeza de lado, ese se encontraba sobre el. Jonghyun quedo en shock por un momento, para segundos después recapacitar todo lo que estaba pasando.
Jonghyun se levanto rápidamente empujando a ese chico que tenia encima.
-Pero que rayos!!...- Parecía que los ojos de Jonghyun se saldrían de sus orbitas.
Ese chico, ese chico se parecía a su muñeco...