Taemin acomoda su quijada en el hueco entre el cuello y el hombro desnudo de Kibum. El mayor aun sigue medio dormido, un gemido de placer se escapa de sus labios al sentir la mano del castaño masajeando su cintura con movimientos lentos y el aliento cálido chocando contra su oído.
"Hyung." El rubio abraza su almohada más, su cabeza reposa directamente contra las sábanas, aunque Taemin no pueda ver su rostro esta más que seguro que su expresión debe ser adorable. "Hyung." Insiste.
"Todavía es... temprano..." Taemin hace un camino de besos por la tersa piel de la espalda descubierta, un gemido reprimido se escucha de parte de Kibum. "Sal de mi cama. Fuera de mi habitación." Se encorva sobre sí mismo, casi abrazando sus rodillas. Aprieta los párpados más y más negándose a salir del estupor del sueño, al menos del todo. Adora el calorcito agradable de las sábanas pero las manos curiosas del maknae son imposible de ignorar.
Taemin hala del cuerpo de mayor hasta dejarlo boca arriba. "Hyung~" Kibum suspira pesado. El menor deja un beso en su mejilla, se abraza a su cuerpo delgado, enreda sus piernas con las contrarias, suelta una risita cuando el otro frunce el ceño: de seguro puede sentir su erección contra su pierna.
"No, no. No ahora por favor." Dice con voz lastimera el mayor de ambos así como el castaño se levanta un poco y vuelve a inclinarse encima de él. Estaba demasiado cansado, el concierto del día anterior y la celebración luego de este le habían dejado acabado, no podía dejarse llevar por los impulsos adolescentes del pequeño del grupo...
"¡Yah! ¡Taemin-ah!" Kibum se retuerce (no sabe si por placer o cosquillas, talvez una combinación de ambas) por la boca suave y abultada dejando besos en su cuello y pecho, bajando hasta llegar a su estómago, lamiendo la zona de su ombligo para volver y darle atención a sus pezones rosados levemente erectos. "Yah~ Taemin-ah." Lo pequeños gemidos se hacen difíciles de contener cada vez más. El elástico de los pantalones de su piyama se deslizan por sus piernas. "¡No! Deja... Ah..." Sobre su ropa interior siente algo caliente y húmedo. "Mierda..."
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Taemin es rápido, exageradamente rápido. A Kibum ya no le importa que los rayos del sol filtrandose por las persianas le den en toda la cara, no puede importarle menos si el maknae le está haciendo el blowjob más increíble que ha recibido en su vida. Tampoco le importa si afuera los demás están despiertos y llegan a la habitación, si el manager escucha, si en el resto de las habitaciones del hotel hay alguien dispuesto a quejarse. Solo puede concentrarse en la maravillosa boca de Taemin envolviendo su sexo, en las manos huesudas tomándole fuerte de las caderas.
Justo cuando se siente a punto de terminar Taemin se detiene. La respiración de Kibum es irregular, sus caderas se mueven levemente haciendo su miembro chocar contra los labios inchados del otro. Se atreve a abrir los ojos al dejar de sentir las manos de Taemin pero un peso más grande contra sí, ya no está la luz atacando su rostro por el cuerpo el menor entre sus piernas, la pelvis del otro pegada a la suya. Enreda sus piernas alrededor de la cintura contraria, sus penes se restriegan uno contra el otro al mover suavemente su cuerpo. Toma al castaño del cuello de la camiseta del piyama, la única prenda que trae encima. Sus narices se rozan, Taemin parece estar concentrado en admirar su rostro sonrojado y Kibum se siente pequeño ante eso.
"Has que valga la pena sacrificar mi descanso." Taemin le sonríe inocente volviendo en sí, al mayor esa sonrisa le pone más, mueve más sus caderas contra el otro y se abraza a su cuello. Se besan lento, de la manera más perezosa posible, disfrutando del roce de sus lenguas y el intercambio de saliva. Kibum se siente más que perdido en ese contacto.
Taemin es quien rompe el beso inclinándose nuevamente sobre el sexo del mayor, le da unas rápidas lamidas a la punta y con su mano recorre toda su longitud alternando rápidos y lentos movimientos. El rubio se tensa nuevamente, acariciando y halando el cabello suave del contrario. Entonces lo siente, un dígito empujando en su entrada y con el un líquido viscoso. Taemin además de rápido, aunque finja inocencia y descuido, es muy calculador. Él ni siquiera se dio cuenta de que la botellita de lubricante había llegado a la cama con el menor así como unos cuantos condones.
"¡Ah!" Cuando el tercer dedo entró el mayor no tardó más de dos segundos en corrérse sobre los labios carnosos del pequeño. Entonces la sensación de los dedos llenándole desapareció así como los movimientos contra su pene, fue arrastrado por las caderas unos centímetros hacia abajo. Abrió los ojos, Taemin pasaba la lengua sobre sus labios, recogiendo cada gota de semen como el mas precioso manjar, el rubio no podia con esa imagen, era demasiado.
"Delicioso." murmuró y Kibum hubiera deseado no escuchar, sentia nuevamente su miembro erguirse. Cerró los ojos. Hubo el sonido de plástico rompiéndose.
El miembro de Taemin entró en él con demasiada facilidad, una cálida bienvenida. No es que fuera exageradamente grande pero tampoco era pequeño, a Kibum le gustaba porque se acomodaba a la perfección en su interior. Los encuentros con el maknae eran siempre diferentes, lamentablemente para Key todo giraba según el humor del pequeño. Pero había siempre esa constante: Taemin era muy callado. Eran pocas las veces que gemía con libertad y era Kibum quien llenaba el lugar de gritos.
Pero intentaría que esta vez cambiara. Tal vez era el hecho de estar en un lugar alejado de la zona segura que representaba el departamento que compartían con los otros chicos (claro, cuando estos no estaban) o por el morbo que le causaba que alguien pudiese estar tras la puerta...
Quería oír a Taemin. Fuerte y claro.
"Bebé...~" Tensó sus músculos haciendo que sus paredes apretarán contra Taemin, el menor soltó varios gemidos graves sin haberse movido ni un milímetro, las pupilas chocolate se perdieron en las opuestas, Kibum sonrió triunfante. "Quiero que vayas más adentro que nunca..." Las manos del menor le apretaron en las caderas, clavando levemente las uñas. "Quiero gritar tu nombre más fuerte que nunca...ah..." Taemin se movió un poco y un sonido gutural salió de los labios de Kibum, quien volvió a apretar los musculos de su trasero. Taemin se hizo hacia adelante, apoyándose en sus antebrazos inició un nuevo beso suave que poco a poco fue haciéndose intenso. El delicioso vaivén de sus cuerpos inició.
"¡Así! ¡Mas! ¡Mas!" De Kibum solo se oían gemidos altos entre el beso, se sujetaba tan fuerte de la espalda del otro que parecía que la tela de la camiseta en algún momento se rompería. "¡Ahí! Taem... Ahí~ oh dios... ¡Taemin!" El roce de la punta del pene del menor contra su próstata lo llevaba a otra dimensión, se sentía incapaz de controlar sus gritos. Le pareció oir la puerta siendo abierta pero no hizo caso. La respiración agitada de Taemin contra su oído y los te amo susurrados... Era mucho más de lo que podía aguantar. Un último grito y volvió a correrse entre los estómagos de ambos, Taemin le siguió poco después.
"Kibum... Kibum..." Pequeños besos llenaron el rostro bonito del mayor. El castaño no abandonaba su interior aún y no le importaría quedarse así de por vida sino tuviera urgencia de... "Te amo." Kibum enredó sus brazos en el cuello del otro, le besó profunda y lentamente.
"Yo también... Mi turno, bebé" dijo, pasando la punta de su lengua por los labios del otro. Taemin abrió tanto los ojos que para Kibum en cualquier momento saldrían disparados. Se rió intentando suavizar las cosas. "Vamos, te va a gustar."
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Era una sensación extraña pero si, le gustaba. Key se movía lento, casi nada pero no podía dejar de gemir por ello. "Kibum... Oh... Kibum..." Entendía porque a su novio le gustaba tanto estar en esa posición: boca abajo, con el trasero en alto. Sentía que estallaría si el pene del mayor volvía a rozar su próstata. El nombre del rubio no dejaba de salir de sus labios, como un mantra.
"Eres tan lindo Taem. ¿Qué quieres que hyung haga?" Preguntó el rubio perdido en la sensación de las paredes del otro envolviendole. Su pecho estaba sobre la espalda del menor, sus manos sobre las del otro, entrelazandose.
"Muévete." Dijo bajito.
"¿Disculpa?"
"Hyung... Muévete, llename de ti... mmm..."
Kibum se sentía demasiado bien consigo mismo, ver en esa situación de sumisión al maknae era todo un evento en cuanto a lo sexual.
"Hyung... Kibum-hyung...si... ah..." Mientras más se movía en su interior, Taemin intentaba contenerse sin resultado, el mayor juraba nunca haber visto su cara tan roja y arrugar las sábanas de esa manera entre sus manos. Él también lo estaba disfrutando a más no poder, pocas veces había podido dominar y además era la primera vez que lo hacia con Taemin. Habia abandonado la posición anterior y ahora sujetaba al otro de las caderas, entraba y salía con rapidez, la vista que tenía de Taemin era maravillosa.
"Bebé~ estas tan apretado, oh dios... Eres tan hermoso..." Salió de Taemin un momento y si delicadeza alguna lo giró, dejándole boca arriba. Antes de que el otro pudiese reclamar se apoderó sus labios con agresividad así como volvió a adentrarse en la cavidad húmeda y caliente. Tomó el miembro de Taemin en sus manos, lo acaricio con movimientos rápidos. Al romper el beso Taemin gritó un sinnúmero de groserías, el nombre de Kibum y otras cosas sin sentido. Vinieron a la vez, callaron sus gemidos con un beso final. Kibum salió despacio sin dejar de besarle.
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"Kibummie... Eres increíble." Taemin los cubrió con la sábana apenas Kibum volvió del baño y se acostó a su lado. El mayor se abrazó a su cuerpo y dejo un beso en su mejilla.
"Yo... Te odio." Dijo el mayor, tomó la sábana y volvió a cubrirlos pero hasta la coronilla.
"¿Porqué?" Preguntó juguetón Taemin, tomando la mano del otro, entrelazando sus dedos.
"Porque Jonghyun y Minho..."
El sonido de unos pasos acelerados cruzaron la habitacion. La puerta se cerró con fuerza.
"Debiste cerrar la puerta apenas entraste, idiota."