POV (Harry).
Mi mente estaba nublada, no entendía nada de lo que pasaba a mi alrededor, Draco abrazaba muy feliz a Scorpius, yo sentía a mis dos pequeños aferrados a mí, gritándome, pero no los podía escuchar, Markus golpeaba el muro del castillo, haciendo que pequeñas piedrecillas salieran volando, en sus ojos, se podía notar algo, rabia, y eso fue lo mismo que sentí.
- ¡Maldita sea! – grite al aire, sin querer haciendo que todos se quedaran callados, me avergoncé un poco, y lágrimas comenzaron a salir por mis ojos, creí que iba a llorar por mucho tiempo, mi hijo, esa perra se había llevado a mi hijo, pero.
- ¡Callate, Potter! – dijo mi ex prometido, después de darme un buen golpe en la cabeza, todos guardaron silencio - ¿qué no eres tú el estúpido niño que mato a Voldemort? ¿Qué no eres tú, el que casi me mata cuando estábamos en sexto grado? – la ira poco a poco fue bajando de su rostro - ¿Qué no eres tú el hombre valiente y decidido del que me enamore? – lo voltee a ver con los ojos brillosos, pero tenía razón, si alguien intentaba quitarme lo que yo amaba, me salía el complejo de héroe, que pensaba Draco odiaba.
- Tiene razón papá – dijo Albus, que ahora se encontraba pegado como lapa a Scorpius – necesitamos averiguar cómo rescatarlo en vez de estar aquí lamentándonos –
- Tienes razón – dije recobrando la compostura y mi mente comenzó a procesar todo – Rose, y niñas que no conozco – dije mientras las chicas me miraban – encárguense de Neville - voltee a ver a los demás – Albus, intenta controlar a Markus, antes de que destruya la pared – Scorpius, otro niño que no conozco – el chico que se parecía mucho a Albus aunque un poco más alto y fortachón me miro ceñudo, pero asintió – ayuden a Arit a buscar a sus hermanos, me imagino que están en la cabaña de Hagrid y coméntenle lo sucedido para que de aviso a la directora – sonreí al ver como todos se ponían a hacer lo que les decía – Draco, mi varita por favor –
- Claro – dijo mientras la conjuraba, se acercó muy cerca y pego sus labios a mi oído – no sabes cómo me pone, que te salte la vena de héroe estúpido – yo solo atine en sonrojarme y comencé a conjurar un hechizo mientras dibujaba con mi varita como si fuera una pluma - ¿Qué haces? –
- Ya lo verás – dije mientras sonreía sentía la magia de la aparición rodeándonos.
De la nada, se materializaron frente a nosotros, 5 personas, yo solo esperaba a 2 pero bueno, eso era mucho mejor. Sonreí como un niño tonto, mientras las personas se acaban de materializar. Un hombre de cabellera rojiza me sonrió cuando termino su aparición, después fue una chica de cabello castaño. Solté la mano de Draco y corrí a abrazarlos.
- ¿Con quién vienen? – dije mientras me apartaba para tomar un puñado de aire, pues me habían saco el aire, tenía mucho que no los veía.
- Mi nuevo equipo – dijo Ron, mientras frente a mí, aparecían 3 personas a las que conocía muy bien, entonces fue el momento de Draco de correr –
- Blaise, Theo – dijo mi amado rubio, mientras saltaba sobre ellos, olvidándose de toda su aristocracia Malfoy o Slytherin.
- Vaya dragón – dijo el moreno mientras soltaba a mi rubio – veo que el estar con Potty te ha servido de algo –
- Déjalo en paz, Blaise – dijo el castaño mientras sonreía, cosa poco común en él – es un placer verte –
- Por cierto, medimago Nott – dijo Draco mientras regresaba a su acostumbrada postura aristocrática – puede que las jovencitas de allá requieran de su ayuda con cierto, chico valiente, que te traía de un colmillo en la escuela – dijo mientras comenzaba a reírse, el moreno salió corriendo a donde se encontraba Neville.
Después de ver la confusa escena, Draco y yo recordamos a la quinta presencia, que había aparecido y vimos a una rubia, alta, con el cuerpo bien definido, yo la mire, confundido ¿qué hacia ella ahí?
- ¿Daphne? – pregunto confundido, mientras la chica sonreía de una forma sincera que me descoloco aún más, Daphne, era una chica Slytherin que había estado en nuestro curso, sin embargo, ella era Daphen Greengrass, por lo cual la furia comenzó a subir por mis venas hasta mi cabeza, entonces Hermione al darse cuenta me tomo por el brazo.
- Tranquilo – dijo mientras me sonreía.
- Señor Potter, Draco – dijo sin perder su sonrisa, con la que seguramente rompía corazones – lamento lo que mi hermana les está causando, por eso he venido yo –
- ¿Entonces, saben todo? – pregunte un tanto confundido –
- Harry, recuerda quienes son nuestros hijos – dijo Ron – no todos serán Gryffindor – comenzó a sonreír – pero aman la aventura tanto como nosotros a su edad –
Oh, ahora todo tenía, sentido, voltee a ver a los chicos que no conocía, eso medio explicaba por qué estaban aquí, y también, porque había regresado Scorpius, esos niños sí que habían heredado nuestras habilidades para meterse en problemas y salir de ellos. Entonces otra aparición se sintió y vi como un remolino humano era lanzado contra el suelo sin aparecerse por completo.
POV (Markus).
Estaba tan molesto, mi parte de vampiro gritaba por venganza, quería vengarme y ver sangre correr ¿Cómo se atrevían a meterse con mi amado Jamie? La furia continuaba subiendo, y volví a arremeter contra la pared, sentí el olor de la sangre que corría por mis nudillos, demonios, exclamé, ese ligero ardor, no se comparaba con lo que sentía mi pecho. Entonces una mano se puso sobre mi hombro.
Me volví, lleno de rabia, pero esta se apaciguo un poco al ver como mi pecho era rodeado por un chico que a pesar de no ser mi Jamie, logró controlarme un poco, suspiré con pesadez y empecé a llorar mientras era consolado por Al.
- Hey, tranquilo – dijo cuando ya me estaba calmado – recuperaremos al cabeza hueca de mi hermano – yo solo suspire, pesadamente – después de todo es un Potter y te ama, que estoy seguro, que los tontos que se lo llevaron, ya están pagando las consecuencias –
Entonces reí un poco, vi como unas personas se aparecían frente al profesor Malfoy y al profesor Harry, podía escuchar lo que decían, seguramente lo íbamos a encontrar, comencé a sonreír entonces una nueva persona se apareció y la ira volvió a caer sobre mí y con todo el instinto de vampiro, arremetí contra él antes de que Albus pudiera detenerme.
POV (Neville).
Demonios, como me dolía la cabeza, mi cuerpo ya no estaba hecho como antes, sentí la magia de tres personas cubrirme, y el dolor menguo un poco, pero aun así me estaba matando, entonces llego otra persona y su magia me reconforto por completo, sabía de quien era esa magia, pero debía de ser una alucinación después del golpe que lleve en la cabeza, él no podía estar aquí, entonces recibí un golpe de magia más potente y mis ojos dejaron de sentirse pesados, así que decidí que era tiempo de abrirlos y deshacer mis ilusiones de que él estuviera aquí, había pasado tanto tiempo…
Comencé a abrir los ojos torpemente, como todo lo que yo hacía, bueno excepto dar mis clases, según los hijos de mis amigos, entonces vi unos ojos almendrados, esos que siempre veían en mis sueños, y como esos labios, se curvaron en una sonrisa, mostrando sus blancos y perfectos dientes, en ese momento, comencé a pensar que los ángeles si existían.
- Nev – dijo en un suspiro de alivio - ¿Estas bien? - pregunto mientras su mano se ponía en mi mejilla, yo solo pude sonrojarme.
- Si Theo – conteste mientras sonreía - ¿Tú? ¿Cómo has estado? – dije mientras comenzaba a levantarme.
- Perdido, sin ti – las chicas que nos veían suspiraron enternecidas, entonces me intente levantar, no podía dejar que mis alumnas me vieran de esa forma, pero Theo, me volvió a jalar, quedando a unos centímetros de su rostro… y me beso…
- Chicas – comento mi ahijada Rose – será mejor que dejemos solos a los tortolos –
- Si – contesto una de las muchachas mientras se llevaba las manos al corazón, entonces un rugido se escuchó y todos volteamos – además debemos de parar un asesinato – y todo corrimos al lugar donde provenían los ruidos de batalla, mientras yo lo hacía tomado de la mano de Theo.
POV (Simon).
Después de encontrar la susodicha cabaña, y llevar a los chicos dentro del castillo junto con el semi-gigante que me dejo impresionado por su altura, regresamos al lugar donde estaban los demás, noté como otras personas se había aparecido en el lugar, por lo que pude notar, se trataban de conocidos, pues se abrazaban efusivamente, tal vez tenía mucho tiempo que no se veían. Estábamos a punto de llegar cuando vimos como un chico se comenzaba a parecer y rápidamente era golpeado por algo.
Entonces pude verlo todo, el chico llamado Mark, se había abalanzado sobre mi Baz, entonces le furia comenzó a embargarme de nuevo, pero no estaba dirigida a Markus, estaba dirigida a Baz, que arremetia con fuerza sobre el otro chico vampiro, era como ver un remolino de golpes, patadas e intentos de mordida, ambos rugían exhibiendo los colmillos.
Los mayores intentaban separarlos, pero sabía que no lo conseguirían, la mujer mayor, que se parecía mucho a Rose, había sacado su varita, pero los hechizo que lanzaba, fallan y por mucho. Entonces Baz, arremetió de lleno sobre Markus y lo acorralo contra una gran piedra, y lo sujetaba del cuello. Todos comenzaron a aproximarse.
- Baz – dije en un susurro, intentando controlar mi ira – BAZ – dije esta vez mas fuerte, pero vas no daba atisbos de estarme escuchando – BASSILIUS – grite con todas mis fuerzas, y note como el chico soltaba su afloje y me volteaba a ver, yo estaba fúrico y todos los demás anonadados – suéltalo – dije con voz firme, mientras veía como lo soltaba – ahora ven aquí y dame una puta explicación a todo este comportamiento – y así lo hizo, nunca me gusto gritarle, pero desde que se había convertido en vampiro, era una forma en la que podía controlar sus impulsos.
- Simon – dijo aun molesto, pero más calmado – dile que se aleje o no me controlare – vi como Scorp y Al, se acercaban al chico de cabello negro y lo retenían lo mejor que podían.
- Baz – dijo una mujer que estaba con los mayores y se acercó corriendo, la mujer era despampanante.
- Daph – dijo el chico mientras la miraba.
- ¿Cumpliste con lo prometido? – dijo está viendo como los que habíamos estado en el ataque, nos mirábamos confundidos.
- Todo de acuerdo al plan – y la mujer y los otros hombres aparecidos, sonrieron. ¿Qué demonios pasaba aquí?